A K I N D O F M AG I C
MARK BLAKE
Contenido Introducción 8
El chico de oro 12 Un apetito insaciable 26 El poderoso titán y sus trovadores 40 Solo soy un pobre chico 60 Os daremos un plato fuerte 80 Ametralladoras listas 102 ¡Dios sabe! 124 Hello World! 144 No puedes retrasar el reloj 164 The Show Must Go On 184
Discografía 206 Fuentes, créditos de fotografías y agradecimientos 222
SOLO SOY UN POBRE CHICO
Bajo la dirección del vocalista, Queen empezó a rellenar los huecos de la pista con armonías, armonías y más armonías. Trabajaron siete días, durante doce horas cada uno, añadiendo «Mama Mías», «Galileos» y «Fígaros» hasta que la cinta estuvo a punto de romperse y se vieron obligados a preparar una copia de urgencia. Fueron necesarias tres semanas y 180 voces agregadas en diferentes estudios de Londres para que el grupo pudiera finalizar «Bohemian Rhapsody». El ingeniero Gary Langan había trabajado con Queen en Sheer Heart Attack y sus estándares de rigurosidad le resultaban familiares. Pero «Bohemian Rhapsody» era otro nivel. «La canción se trabajó por tercios en el estudio», me dijo, «el principio, el centro y el final, de esa manera. No fue sino hasta que se terminó, el último día, que se mezcló todo y nos sentamos a escucharlo. Fue entonces cuando nos dimos cuenta de lo que habíamos hecho. Nos sentamos en la sala de control y pensamos “Dios”. Fue un momento trascendental». Con el tema terminado, Queen tuvo que batallar con John Reid y con EMI para que les permitieran lanzarlo como single. No había problema con la duración de la canción; en la época del farragoso rock progresivo, un tema que durase cinco minutos no resultaba extraño, pero quedaba confinado al álbum. Los miembros de Queen insistieron en que se debía lanzar, sin editar, como single. Solo John Deacon pensó que debían ceder. EMI se sintió parcialmente forzado a causa de Kenny Everett, en aquella época un DJ de la emisora londinense Capital Radio. Freddie y Kenny se conocieron en 1974 cuando el cantante participó como invitado en el programa de Everett. Desde entonces, se habían convertido en buenos amigos. Everett visitó a Queen en el estudio y se hizo con una copia de la canción, prometiendo no emitirla en su programa matinal. Tan pronto como estuvo en el aire, Everett rompió su promesa. «De repente me despierto con el sonido de “Bohemian Rhapsody” resonando a través del techo del apartamento de mi vecino de la planta superior», recuerda Brian May. «Pensé que me había vuelto loco». Cuando EMI supo que los oyentes habían llamado a la emisora para pedir que volvieran a poner el tema, cedieron. El single de «Bohemian Rhapsody» se lanzó en octubre, mientras que A Night at the Opera siguió un mes más tarde.
" Todo el grupo busca el primer puesto. No estaremos contentos con nada menos. Esto es por lo que luchamos. Debe ocurrir. Sé, con total seguridad, que nuestra música tiene algo especial, somos lo suficientemente originales... y lo estamos demostrando ahora". FREDDIE MERCURY, 1974
Al piano. Hammersmith, Londres, diciembre de 1975.
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OS DAREMOS UN PLATO FUERTE
“Soy un hombre de extremos. Tengo un lado blando y otro duro, con muy poco entre medio. Con la persona adecuada puedo ser muy vulnerable, un auténtico bebé, y es invariablemente entonces cuando me pisotean. Pero a veces soy duro, y cuando me siento fuerte nadie puede alcanzarme". FREDDIE MERCURY, 1974
Un perfeccionista en su trabajo: Freddie, Mountain Studios, Montreux, Suiza, 1979.
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" Los trajes y todo, mucha gente se lo tomaba en serio. A mí no me importaba nada. Pensaba: «Dios mío, han leído demasiado sobre ello»" . FREDDIE MERCURY, 1987