Mi perrito quiere bailar ballet
Ilustraciones de Sara Ogilvie
Anna KempSi le lanzo un palo, me mira como si estuviese loca y al final siempre lo recojo yo.
No, a mi perro le gusta la música, la luz de la luna y caminar sobre las puntas de las pezuñas.
Es que mi perro cree que no es un perro...
Mientras la señorita Polly nos enseña unos pasos nuevos, creo notar que alguien nos observa a través de la ventana. Alguien con la nariz húmeda. Y con cola. —Muy bien, chicas —dice la señorita Polly—. Quién de vosotras nos muestra la primera posición? ?
Llega el día de mi cumpleaños y me regalan entradas para el Ballet Real.
—Papá, puede venir Biff conmigo? Le encanta el ballet. Mi perro levanta las orejas y agita la cola.
? !
—No —responde papá—. Ya te lo he dicho. Te lo he dicho mil veces: los perros no bailan!
Mientras esperamos que llegue el autobús, pienso en mi pobre perro, solo, aullando a la luna.
Y entonces tengo una extraña sensación.