Mitología Japonesa. Inugami

Por: Evelin Pérez López

Inugami es una leyenda japonesa que habla de la posesión espiritual del alma de un perro, el cual puede o no conservar la forma natural de su cuerpo y en casos extraordinarios también puede adoptar la figura de un cuerpo humano. Existen muchas discrepancias sobre esta leyenda, pero popularmente se habla de que esta posesión es inducida a través de un ritual similar al kodõ.

Este ritual era un acto de brujería donde se mezclaba un grupo muy grande de perros en espacios sumamente pequeños, sin ningún tipo de bebida o alimento durante varios días; así, al pasar el tiempo, estos comenzaban a comerse unos a otros y cuando quedaba un sobreviviente solo, se le degollaba y su cuello se convertía en un amuleto que quien lo poseía, tenía entonces la capacidad de utilizar el inugami -o alma del perro- para cumplir cualquier fin maligno.

Existe otra versión parecida de esta leyenda, la cual cuenta que para obtener el alma de un perro enfurecido se debía enterrar a éste en arena hasta el nivel del cuello y luego se le debía colocar un plato de alimento muy alejado para que el animal tratara de comer y se cansara más rápido y así –finalmente- muriera por falta de alimento y cansancio y al igual que en la versión anterior, se degollaba al perro y su cuello era utilizado como símbolo de obediencia del perro hacia su nuevo amo.

En la presente versión también podemos encontrar que se podía incinerar al perro y verter sus cenizas sobre la persona a la que se le deseaba hacer mal, e inmediatamente el perro poseía el alma de esa persona y, a la par, ésta sufría en carne propia el dolor del perro al ser enterrado.

Otra vertiente de esta leyenda habla de una anciana, que cegada por una traición y el deseo de vengarse tomó a su ser más querido: su perro, y luego lo sepultó bajo la grava dejando sólo su cabeza de fuera y de manera repetida le recitó: “Si tienes un alma, haz mi voluntad y te adoraré como un dios”, hasta que el perro finalmente murió y ella, ayudada con una sierra de bambú, le cortó la cabeza para poder liberar y poseer su inugami; sin embargo, luego de que el perro cumplió con la venganza de aquella mujer éste tomó su cuerpo para recobrar la vida que ella le había arrebatado. A partir de esta versión surgen los Inugamimochi que son un grupo de personas que en su interior poseen un inugami.

DATOS CURIOSOS

El Kodõ también era llamado técnica del gusano, pues inicialmente consistía en juntar un puñado de gusanos dentro de un mismo frasco y esperar a que sólo quedará un sobreviviente y luego sus fluidos eran utilizados como veneno. Posteriormente esta técnica se comenzó a utilizar en otro tipo de animales con el fin de poseer sus espíritus y utilizarlos a la voluntad de cualquier persona.

El Kodõ o cualquier brujería similar fueron prohibidos durante el periodo de Heian (<<último periodo de la época clásica de la historia japonesa>>) por considerarse un acto cruel e inhumano.

Actualmente se cree que los inugami pueden poseer a cualquier persona emocionalmente inestable, esta persona comenzará a comportarse como un perro y finalmente adoptará la forma de uno (la que originalmente poseía el inugami).

En el sudoeste japonés, antes de celebrar una boda, la familia de los comprometidos debe revisar el árbol genealógico de ambos para verificar que ninguno de sus familiares o ellos han estado involucrados con ningún inugami.

En otros relatos un poco distantes, se cree que los inugami son seres de dicha y abundancia, incluso se habla de que existen perros que por voluntad propia se dejan morir para poder “apoderarse” en cierta forma de los cuerpos de sus amos enfermos o que ya fallecieron por alguna enfermedad y así poderles transmitir su vitalidad.