1 minute read

Una desgracia llamada poda

Next Article
Rock and run

Rock and run

La gente cree que es necesario podar los árboles y que hacerlo es cortar lo más posible. No hay veredas, cables ni edificios que puedan ser molestados por las ramas, pero siempre hay alguien que se toma el trabajo de cortar estos pobres árboles, impidiendo su desarrollo de forma natural. ¿Para qué?

¿Por qué tanta gente corta árboles sin necesidad? ¿Será por un adoctrinamiento de que “hay que trabajar”, hacer esfuerzo como un fin en sí mismo? ¿O por esa creencia equivocada de que la poda le hace bien al árbol? Hay una insensibilidad hacia los árboles. Muchos creen que después de podarlos ”brotan con más fuerza”. Cuando a un árbol se le cortan muchas ramas queda en un estado peligroso para él mismo, le falta parte de su cuerpo, necesita ramas y hojas para poder vivir. Entonces el árbol responde haciendo crecer muy rápido sus ramas y hojas nuevas para reponer las que le cortaron. Pero cuando hace eso pierde fuerza. Crece más rápido, pero queda más débil que si no lo hubieran cortado puesto que usa su energía de reserva. Reflexionemos, entonces: ¿Por qué no dejarlos crecer y florecer con toda su belleza? Muchos lo agradeceríamos.

Nota del libro: PLANTAS AUTÓCTONAS AUTOR: RICARDO BARBETTI

This article is from: