Cómo es el uso de Holdings

La planificación fiscal tiene por objeto la utilización de diferentes estrategias para lograr la reducción del gravamen o el diferimiento del pago correspondiente a una determinada operación o inversión, siempre dentro del marco de la legalidad.

Generalmente las estrategias a utilizar, aunque son innumerables, suelen ser el uso de sociedades con distinta forma. Un claro ejemplo es el uso de Holdings. Se trata de una sociedad comercial constituida principalmente con el objetivo de invertir o adquirir participación en el capital de otras sociedades locales o extranjeras.

Particularmente, Uruguay posee una serie de ventajas impositivas, competitivas con respecto a muchas jurisdicciones: no estaría gravada por IRAE la ganancia por venta de acciones, ganancia por interés y diferencia de cambio por préstamos al exterior, dividendos y resultados por tenencia. Y en el caso del Impuesto al Patrimonio, no estarían gravados los activos del exterior.

Sin embargo, a partir del primero de enero del corriente año, Uruguay tuvo que alinearse a las leyes internacionales y agregar que para hacerse de estos beneficios impositivos la Holding deberá tener una adecuada sustancia económica durante el ejercicio fiscal. Esta se puede dar por alguna de las siguientes circunstancias, según las primeras aclaraciones de la DGI:

• Mayoría de recursos humanos son residentes en territorio nacional y se encuentran debidamente calificados. Dentro de este punto se admiten tercerizaciones en territorio nacional, con adecuada supervisión por parte de la entidad.

• Al menos un director calificado es residente fiscal independientemente de su vínculo ante el organismo de Seguridad Social.

• Tener instalaciones dentro del territorio.

Todavía la Dirección General Impositiva (DGI) debe terminar de reglamentar los requisitos formales de las modificaciones y ajustar cuestiones tales como las declaraciones juradas que tendrán que presentar los contribuyentes.

De no poder comprobar la sustancia, deberán abonar el impuesto a las ganancias por las rentas de capital que sociedades uruguayas tengan en el exterior. La alícuota del impuesto es un 25% y un 7% adicional para los retiros de dividendos.

Más allá de todas estas ventajas, cabe mencionar que hay que tener en cuenta a la hora de analizar la operación que los costos de constitución son elevados, en comparación a los costos de otras jurisdicciones con características similares.

En definitiva, la planificación fiscal es una de las claves del éxito de una empresa. Y justo por eso, hacerlo de la mano de profesionales se convierte en una inversión inteligente a largo plazo.