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Cuidados y recomendaciones durante el parto normal

LLEGA EL MOMENTO DEL PARTO

Cuidados y recomendaciones durante el parto normal

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Acompañamiento familiar:

• Durante el parto puede estar acompañada por la persona que usted elija. Es conveniente que esa persona sepa cómo desea vivir su parto y sea capaz de cuidarla, apoyarla y animarla en todo momento, sin dejarse llevar por los nervios o la implicación emocional, que sepa transmitirle tranquilidad y confianza. • En las primeras horas tras el parto, el apoyo de la persona acompañante puede ayudar a observar y cuidar a la criatura, facilitandole a usted el descanso, o permitiéndole realizar alguna actividad, sin dejar por ello de prestarle atención; el personal sanitario le enseñará como hacerlo.

Acompañamiento profesional:

• Es conveniente que el personal sanitario que la va a atender conozcan sus deseos y expectativas, para que puedan ofrecerle la ayuda y el apoyo necesarios. La presentación de su Plan de parto al llegar al hospital será de gran ayuda. • La Matrona se encarga de vigilar la situación de la madre (estado de ánimo, frecuencia de las contracciones, sensación de sed, tensión arterial, pulso, temperatura, etc.), la situación del feto (auscultación del latido cardiaco), y la progresión del parto. Sus sugerencias sobre cambios posturales, movilización, ingesta de líquidos, cómo afrontar las contracciones, y el uso de métodos de alivio del dolor no farmacológicos, pueden ayudar al buen desarrollo del proceso. • Después del parto, la Matrona continúa atendiendo a la madre y a la criatura, valorando su estado general y sus constantes (tensión, pulso y temperatura), vigilando su proceso de adaptación y el mantenimiento de una adecuada contracción uterina.

Durante la dilatación se recomienda:

• No permanecer necesariamente acostada, sino moverse y adoptar cualquier posición en la que se encuentre cómoda. • Si tiene sed, beber líquidos claros (agua, zumos sin pulpa, té o café, bebidas isotónicas). Las bebidas isotónicas son las más recomendables porque además de hidratar, proporcionan pequeñas cantidades de glucosa y previenen la cetosis. • El personal sanitario que la atiende realizará el control del latido cardiaco fetal y del progreso de la dilatación.

Durante el expulsivo se recomienda:

• Adoptar la posición que cada mujer encuentre más cómoda, evitando permanecer tumbada sobre la espalda. Las posiciones verticales (sentada, de pié, acuclillada) o laterales (tumbada de lado) se asocian a expulsivos de menor duración. Las mujeres que adoptan la posición de apoyo con manos y rodillas, encuentran que es la más cómoda para dar a luz, y se ha observado que tienen menos dolor lumbar y menos dolor perineal post-parto. • Empujar de forma espontánea, cuando sienta necesidad. Las mujeres que reciben analgesia epidural, y que no perciban la sensación de pujo ni las contracciones, recibirán ayuda del personal sanitario que atiende el parto, que les indicará cuándo deben empujar.

LLEGA EL MOMENTO DEL PARTO

Después del nacimiento se recomienda:

• Colocar a la criatura desnuda sobre el pecho y abdomen materno también desnudos, inmediatamente después del nacimiento, salvo que existan contraindicaciones por parte de alguno de ellos: es lo que se llama «contacto piel con piel». La observación y vigilancia adecuada de la niña o el niño se puede hacer en esta postura, así como la ligadura del cordón umbilical. Conviene mantener este contacto al menos durante la primera hora, o hasta que haya finalizado la primera toma. • El pinzamiento tardío del cordón umbilical (a los 2 minutos o cuando deje de latir). De esta manera mejoran los depósitos de hierro, además de permitir una transición al medio aéreo más suave. • En algunos hospitales, los progenitores tienen la opción de donar de forma altruista sangre de cordón umbilical tras el parto. El pinzamiento tardío no permite recoger el volumen necesario para la donación, por lo que se deberá elegir una u otra opción. • Si ha decidido amamantar, es conveniente que inicie la lactancia lo antes posible después del nacimiento, preferiblemente dentro de la primera hora de vida. • Si por el contrario no puede, o ha decidido no amamantar, se le suministrará medicación para inhibir la lactancia. • Salvo que exista alguna contraindicación formal, la madre y su bebé permanecerán en la misma habitación mientras dure su estancia en el hospital.

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