ÁVILA, declarada Patrimonio de la Humanidad en 1985 y desde el 2005 integrada en la Red de Juderías Españolas, ofrece al viajero distintas visitas, su patrimonio cultura es el reflejo de su historia, de sus arquitecturas, de sus gentes y su paisaje. Un patrimonio que justifica la visita pausada, a distintas horas del día y si es posible con la ayuda de un buen guía que nos ayude a comprender la ciudad medieval, la renacentista, incluso la de la recuperación decimonónica. En Ávila, como en muchas de las ciudades medievales españolas, convivieron judíos, mudéjares y cristianos, todos ellos dejaron su huella y forman parte de nuestro legado cultural. Para facilitarle su visita hemos diseñado una serie de itinerarios, la duración de los mismos dependerá de la clase de viajero que seamos y del tiempo que dispongamos; lo que sí sabemos es que cualquiera de estos paseos le hará volver.
2
Vista del lienzo norte de las murallas
Nuestra visita puede comenzar en el Museo de Ávila, situado desde 1969 en LA CASA DE LOS DEANES, conocida así porque sus fundadores Cristóbal y Juan Vázquez de Medina, eran deanes de la catedral. Las colecciones del museo se estructuran en tres secciones: Arqueología, Arte Popular y Bellas Artes, el recorrido por sus salas nos permitirá conocer un palacio del siglo XVI y tener una visión de conjunto de la historia de Ávila, de su pasado vettón, de la romanización, de la presencia de musulmanes y judíos, pero también nos permitirá conocer los usos y costumbres de Ávila y su provincia. La visita quedaría incompleta sin acercarnos a la iglesia románica de SANTO TOMÉ EL VIEJO, hoy convertida en un interesante y único almacén visitable del museo en el que se exponen diversas piezas arqueológicas de distintas etapas históricas.
3
Las murallas Antes de detenernos en la visita de las casas, palacios, templos y plazas debemos hacer un recorrido por LAS MURALLAS, construidas a lo largo del siglo XII son el monumento que mejor identifica a la ciudad y un referente obligado para entender el núcleo urbano. Nuestra visita puede realizarse recorriendo sus dos kilómetros y medio de perímetro, sus nueve puertas (del Alcázar, Peso de la Harina, San Vicente, el Mariscal, del Carmen, San Segundo, de la Malaventura, de la Santa o Montenegro, del Rastro) y sus tres poternas. En nuestro paseo aprenderemos que sus muros se adaptan a la topografía del terreno, que sus lienzos y torres se elevan en las zonas más llanas, y se hacen más pequeños cuando el terreno es más accidentado. Los frisos de esquinillas, las cenefas de ladrillo nos enseñan que en su construcción intervinieron alarifes mudéjares y moriscos. Muros, almenas y cubos nos hablan de las reparaciones y restauraciones que a lo largo de su historia han sido necesarias para su conservación. En su mantenimiento participaron todos los abulenses, al margen de su religión o condición social, así los nobles y caballeros hacían la ronda, los ciudadanos y “hombres buenos” velaban, los campesinos de la tierra traían los materiales necesarios y limpiaban el foso, los musulmanes ponían las manos y los judíos el hierro.
4
v
Lienzo norte de las murallas en invierno v v
Vista del Mercado Grande con la iglesia de San Pedro desde la Puerta del Alcázar
Nuestra visita debe completarse subiendo al adarve, que podemos hacerlo desde la Casa de las Carnicerías, la Puerta del Alcázar, o desde el Arco del Carmen, desde donde podemos contemplar el paisaje urbano formado por torres y espadañas y el que nos ofrecen la sierra de Ávila y el Valle Amblés, de esta forma comprenderemos este monumento que identifica a la ciudad, que fue y sigue siendo elemento imprescindible en la configuración urbanística, social y económica de la misma.
<
Detalle del almenado y de los remates de frisos de ladrillo en el lienzo norte de la muralla <
Adarve de la muralla en la zona del alcázar, al fondo la catedral
5
Plaza del Alcázar · Mercado Grande · San Pedro La Antigua · Ermita de las Vacas · Santo Tomás Iniciamos el recorrido en la plaza del Alcázar, construcción militar de la que sólo se ha conservado parte de un muro de sillería y la puerta que se abre en la muralla, una de las más fuertes de la ciudad que fue reedificada en 1597 por orden de Felipe II. A continuación, está la plaza de Santa Teresa, conocida como Mercado Grande, uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad, las fuentes documentales y los restos arqueológicos confirman el uso de la misma desde épocas tempranas, como lugar de encuentro, de celebración de fiestas y mercados. En el Mercado Grande está la iglesia de San Pedro, situada en el “coso do mueven los caballos”, uno de los principales templos románicos de la ciudad. Tiene planta de cruz latina con tres naves de desigual anchura y un brazo de crucero, su cabecera está formada por tres ábsides, adosándose al septentrional la torre de campanas. En la organización de su fachada sobresale un rosetón de estética cisterciense. De gran interés es el conjunto escultórico que se distribuye en las arquivoltas de sus portadas, impostas y capiteles que constituye un interesante y variado repertorio iconográfico del románico en Ávila. Detrás de este templo, en la Plaza del Ejército, se conserva la iglesia del desaparecido convento benedictino de La Antigua, (residencia Miravalle). De este templo sobresalen su ábside semicircular de mampostería encintada con ladrillo y la portada norte con modillones.
6
Fachada occidental de San Pedro presidida por un rosetón cisterciense
Detalle del sepulcro del príncipe D. Juan, hijo de los Reyes Católicos en la capilla mayor de Santo Tomás, es obra de Domenico Fancelli
Claustro del Silencio de Santo Tomás, en los antepechos los emblemas de los Reyes Católicos y los de la Orden de los Dominicos.
Continuamos nuestro paseo por la Cuesta Antigua que nos conduce hacia uno de los barrios más populares de la ciudad organizado en torno a la ermita de Nuestra Señora de las Vacas, en la que pueden diferenciarse dos momentos constructivos distintos, uno inicial que corresponde a la reedificación del cuerpo de la iglesia en 1469, y la capilla mayor levantada hacia 1583 de acuerdo con las mandas testamentarias de Alonso Díaz. El retablo mayor dedicado a la Virgen fue realizado por Lucas Giraldo y Juan Rodríguez entre 1530 y 1531. Nuestro recorrido termina en el Monasterio de Santo Tomás, iniciado en 1483 por Martín de Solórzano, fue fundado por Hernán Núñez de Arnalte, Tesorero de los RR.CC, a su muerte su viuda cedió el patronato a los reyes Isabel y Fernando que elegirán el templo como lugar de enterramiento de su primogénito el Príncipe Don Juan. El monasterio sigue los modelos del último gótico, la iglesia responde a la tipología característica de la arquitectura monacal: planta de cruz latina de una sola nave y dos de capillas, lo más singular es el hecho de que el altar y el coro están sobreelevados. En su interior destacan el retablo mayor obra de Pedro de Berruguete y el sepulcro del príncipe D. Juan realizado por Domenico Fancelli entre 1510 y 1511. El conjunto monástico se completa con los claustros del Noviciado y del Silencio. Integrado en el monasterio, pero manteniendo su independencia está el palacio que los Reyes Católicos mandaron levantar organizado en torno al patio de los Reyes, tercer claustro del monasterio. En parte de las dependencias palatinas se ha instalado un Museo de Arte Oriental. En 1504 se fundó en Santo Tomás un Estudio General. En la universidad de Santo Tomás estudió, entre otros, Gaspar Melchor de Jovellanos.
7
Mercado Grande · Iglesia de La Magdalena · Monasterio de Nuestra Señora de Gracia · Iglesia de Santiago · Iglesia de San Nicolás En el lado meridional del Mercado Grande está la Iglesia de la Magdalena, un templo de origen románico que fue transformado en el siglo XVI y que forma parte del convento de madres Concepcionistas, en su interior se conserva un corral de comedias. El monasterio de Nuestra Señora de Gracia, de la Orden de San Agustín, fue fundado en los primeros años del siglo XVI, sobre la ermita de San Justo y Pastor. Tanto el templo como su capilla mayor son de una gran sencillez constructiva. La iglesia de Santiago, de origen románico fue ampliada y reformada en los siglos XIV y XVI, según la tradición era donde se armaban los caballeros de la Orden de Santiago, su torre octogonal es un modelo único en la ciudad. La iglesia fue reedificada por iniciativa de Fray Francisco Ruiz, consta de una sola nave de gran amplitud y capillas entre sus contrafuertes, su capilla mayor es ochavada y de amplias proporciones. El acceso al interior se hace mediante un pequeño pórtico de estética renaciente pero que mantiene la tradición gótica en su abovedamiento de crucería. Algo más alejada está San Nicolás, situada en la zona sur, cerca de lo que fue el hosario de los moros, es una de las iglesias del último románico en Ávila. Tiene tres naves y un único ábside muy profundo, su torre se adosa a la cabecera. Las arquivoltas de su portada norte presentan una rica ornamentación. Fue transformada en el XVIII.
8
>
Retablo del monasterio de Nuestra Señora de Gracia
v
Construida en granito la torre octogonal de la iglesia se Santiago Apóstol es un modelo único de la arquitectura abulense. La torre es de los primeros años del siglo XVI y fue realizada por Juan Campero, el último cuerpo fue rehecho a principios del XIX
9
Puerta del Alcázar · Paseo del Rastro · Palacio de los Dávila ·Palacio Episcopal · Plaza de la catedral En este recorrido podremos conocer buena parte de la arquitectura civil de la ciudad, casas y palacios construidos en lo esencial durante los siglos XV y el XVI, pero también algunos de los ejemplos más destacados de la arquitectura de finales del XIX y principios del siglo XX. Partiendo desde la puerta del Alcázar nos dirigimos hacia el Paseo del Rastro, un paseo del siglo XIX de gran tradición en la ciudad. En nuestro camino comprendemos como la muralla es soporte de otras arquitecturas, galerías, ventanas, balcones y torres del palacio episcopal se abren en los lienzos de la cerca. La Puerta del Rastro, aparece flanqueada por dos torres de planta cuadrada que sostienen un balcón conocido como de Dª Guiomar, construido en el siglo XVI. La Plazuela del Rastro nos sitúa en un espacio medieval presidido por las Casas del Marqués de las Navas, formada por varias edificaciones que se extienden hasta la plaza de Pedro Dávila. La escasez y disposición de los vanos, las almenas aspilleradas nos muestran el carácter defensivo y militar de estas construcciones, que también se fortificarán intramuros, debido a las luchas entre los bandos nobiliarios de la ciudad. La pervivencia de lo hispanomusulmán se manifiesta en el interior, especialmente en su patio de ladrillo, y en la disposición de puertas y ventanas encuadradas con alfices.
10
Los lienzos y cubos de la zona del Paseo del Rastro son de menor altura y fueron los últimos en construirse. El palacio Episcopal se apoya en el lienzo meridional de la muralla
v
Fachada principal del palacio de los Dávila
De gran interés es la construcción neomudéjar edificada por Ángel Barbero para convento de Reparadoras y que hoy ha sido transformado en viviendas y colegio oficial de Abogados. En la Plaza de Pedro Dávila se sitúa la casa de Diego Salcedo, de la que se conserva un singular patio y un zaguán con el apoyo que servía para montar y desmontar del caballo. En la plaza de Teniente Arévalo en el lugar en el que estuvieron las casas de Navamorcuende, están el Palacio Episcopal y la iglesia de San Ignacio de Loyola, sus muros evidencian su relación cronológica y estilística con el palacio del Marqués de las Navas. Al salir de la plaza y antes de continuar por la calle Alemania merece la pena detenerse en las casas modernistas, levantadas por la burguesía abulense. Siguiendo por la calle Alemania llegamos hasta la plaza de la Catedral, donde podemos contemplar: La casa del Licenciado Pacheco (rehabilitada y conocida hoy como Casa de las Aguas) que presenta las características de la arquitectura de fines del XVI, con un patio irregular, cuenta con una sala de exposiciones abovedada. El palacio de Velada, transformado en hotel y en el que destacan tanto su potente torre, su patio y la portada que se abre en la calle del Tostado. La Casa de Gómez Dávila o Palacio de Valderrábanos, de esta vivienda sólo se conservan su portada gótica del XV con decoración figurada y el cuerpo de su torre que fue rehecha en 1877.
>
entana enrejada del palacio de los Velada en la plaza de la Catedral
11
DE LA CATEDRAL A SAN VICENTE Catedral · Episcopio · Casa de la Carnicerías · Hospital de San Martín · Puerta de San Vicente · San Vicente La Catedral abulense es el ejemplo más claro de catedral fortaleza de Europa, si la catedral configura el perfil de la ciudad medieval, en Ávila templo y ciudad mantienen una estrecha vinculación que excede los límites estrictamente religiosos y se manifiesta sobre todo en su carácter defensivo, ya que su cabecera se entesta en la fortificación, convirtiéndose en el cubo más fuerte de la muralla. La catedral abulense es una lección viva de arquitectura medieval y posiblemente, como indicó Manuel Gómez Moreno, lo primero que se vio de gótico en Castilla. Está dedicada al Salvador y se levanta sobre un templo anterior románico, la parte más antigua debe fecharse entre 1160 y 1180. El primer maestro con el que sin duda hay que relacionar su fábrica es Fruchel, conocedor de la arquitectura francesa, que daría la traza general del edificio, cambiaría el proyecto inicial y será autor de la original cabecera, ya gótica, construida con una piedra sangrante de tono rojizo que confiere a este espacio una gran plasticidad.
/.../ Francia misma puede vindicarla como uno de los incunables más preciosos de su arquitectura parisién a mediados del XII /... / M. Gómez Moreno
12
Las obras se realizarán de manera desigual a lo largo de los siglos, produciéndose cambios frecuentes sobre el primer proyecto arquitectónico y en ellas participarán un elevado número de artistas. Maestros de obra, arquitectos, pintores, escultores, orfebres, herreros irán concluyendo, amueblando, adornando la iglesia con retablos, coro, altares, rejas, púlpitos, órgano, capillas, sepulcros, etc. Nuestra visita ha de ser pausada, sólo de esta forma podremos recorrer sus naves, sus capillas, su claustro y su museo. Merece la pena detenerse en el Altar de los Reyes, obra de Juan Rodríguez y Lucas Giraldo; en el coro realizado por varios autores y que es pieza esencial de nuestras catedrales.
Retablo de la capilla mayor de la catedral abulense, obra de Pedro de Berruguete, Santa Cruz y Juan de Borgoña
En la capilla mayor podemos ver las primeras bóvedas sexpartitas que se voltearon en Castilla y el retablo de Pedro de Berruguete, Santa Cruz y Juan de Borgoña. El sepulcro de Alonso de Madrigal, situado en la girola, es obra esencial del renacimiento en España. Pero la visita debe continuar recorriendo el claustro y las salas del museo catedralicio donde se conserva la custodia realizada por Juan de Arfe que aún hoy, el día del Corpus, recorre las calles de Ávila. Frente a la portada de los Apóstoles estuvo situado el Viejo Palacio Episcopal (hoy ocupado por el edificio historicista de Correos y la biblioteca Pública), del que sólo conservamos la portada y una interesante ventana esquinada frente a la casa de los Velada. En este solar está El Episcopio, que debió ser una antigua sala de Sínodos y que ha sido identificado por algunos autores como Palacio del Rey Niño. Actualmente tiene la función de sala de exposiciones y conferencias.
13
Saliendo del recinto amurallado por la Puerta de la Catedral o Peso de la Harina, la última de las que se abrieron en la ciudad, vino a sustituir al portillo de los Obispos. Se abre a fines del XVI siguiendo las trazas de Francisco de Mora, arquitecto de Felipe II y forma parte de la Casa de las Carnicerías, levantada por Francisco Martín en 1595. Junto a ésta y adosada también a la muralla encontramos la portada del antiguo Hospital de San Martín, dotado por el racionero Manso a mediados del XVI. Un alto relieve cobijado por un arco nos muestra a San Martín partiendo su capa y recuerda la antigua advocación. Frente a ellas la casa del Licenciado Maldonado, se ajusta a los caracteres de la arquitectura doméstica abulense, hoy sede de la Fundación Tellamar. La Basílica de San Vicente, es el gran modelo del románico en Ávila, receptor de las influencias foráneas y de la fábrica de la catedral, es al mismo tiempo difusor del estilo en la ciudad. Su planta es de cruz latina con tres naves y un brazo de crucero, presenta la singularidad de contar con una tribuna sobre las naves laterales. Su cabecera triabsidial se levanta sobre una cripta que determina la esbeltez de sus ábsides hacia el exterior. El cerramiento de la nave mayor con bóvedas de aristones anuncia el gótico. Los capiteles historiados de la capilla mayor, el cenotafio de los santos en el que se relata la detención, condena y martirio de los santos Vicente, Cristeta y Sabina, la portada occidental y la cornisa meridional constituyen lo mejor de la escultura del templo, que hemos de relacionar con talleres de Borgoña. Desde mediados del siglo XIX se inician varias campañas restauradoras interviniendo en las mismas distintos arquitectos: Hernández Callejo, Vicente Miranda y sobre todo Repullés y Vargas. Cerca de la basílica está el Humilladero, un edificio del XVI en cuyo interior se venera la imagen del Cristo de los Ajusticiados.
14
La orografía del terreno y el carácter martirial del templo condicionaron el alzado, la planta y la estructura de la basílica de San Vicente
San Andrés · La Encarnación · San Francisco · San Antonio La iglesia de San Andrés, se levanta en el barrio que según la tradición era de canteros. El templo es de tres naves, su capilla mayor es la más amplia de todo el románico abulense. Lo más destacado de esta iglesia, hoy cerrada al culto, es el repertorio iconográfico de sus capiteles. En esta plaza, otras dos construcciones notables, una casa de los Guillamas con una interesante portada gótica de arco mixtilíneo y pomas. Y el antiguo convento de la Concepción, que fue Inclusa de la ciudad. En la plaza de San Francisco se levanta la iglesia, rehabilitada como Auditorio, del desaparecido Monasterio de San Francisco, que según la tradición fue fundado por San Francisco. Se construyó en el siglo XIII y en el XV los Dávila levantaron una nueva capilla mayor y a finales de esa misma centuria el obispo de Plasencia, Rodrigo Dávila Valderrábano edificó una capilla octogonal adosada a la cabecera, dedicada a San Antonio, su bóveda estrellada es de las más ricas de la ciudad, obra posiblemente de Juan Guas. Las obras en el monasterio se prolongarán durante todo el XVI. El Monasterio de la Encarnación, fue fundado como Beaterio en 1478 en las casas que junto a la Puerta de San Vicente tenía su fundadora Elvira González de Medina. En 1510, siendo priora Dª Beatriz de Guiera, la comunidad se traslada al lugar Ábsides de la iglesia de San Andrés
15
actual, antes ocupado por un cementerio judío y se convierten en religiosas con votos. En el XVIII se transformó el interior de la iglesia dentro de una estética barroca. Altares, retablos pertenecen también al gusto barroco. El Convento alberga museo teresiano. Una de las obras más sobresalientes es un dibujo realizado por Juan de la Cruz que representa a Cristo en la Cruz. Esta ruta puede continuarse hasta el Convento de San Antonio, fundado por Rodrigo del Águila en 1577 y levantado frente a un jardín que tiene su origen el siglo XVI, en el que aún se conserva la original fuente de la Sierpe realizada en 1587. Entre 1728 y 1731 Pedro Ribera construirá en el templo la Capilla de la Portería.
>
Museo dedicado a la figura y obra de Santa Teresa. Está instalado en el Monasterio de la Encarnación v
El Monasterio de la Encarnación es uno de los lugares teresianos más destacados de la ciudad. Santa Teresa de Jesús permaneció en él más de treinta años
16
DE LA PLAZA DE ITALIA A LA DE SANTA ANA Palacio de Los Serrano · Santa Catalina · Casa del Conde Orgaz · Casa de Guillamas · Ruinas de San Gil · Casa de Guiomar de Ulloa · Casa del Regidor Antonio Navarro · Monasterio de Santa Ana · Monasterio de San José En la plaza de Italia, se levanta el palacio de Los Serrano, hoy centro cultural de Fundación Caja de Ávila, fue construido sobre otras casas a mediados del siglo XVI, por Pedro Álvarez Serrano y su esposa Leonor Zapata. Su planta se adapta al plano de la ciudad formando esquina con la calle Estrada y su fachada se organiza en tres cuerpos, algo inusual en la arquitectura abulense. Frente a esta casa se conserva la portada renaciente del desaparecido convento de dominicas de Santa Catalina, que había sido fundado de acuerdo con las mandas testamentarias de Dª Catalina Guiera a finales del siglo XV. Continuando por la calle de Lesquinas llegamos a la casa del Conde Orgaz (antes Lesquinas) su portada formada por un arco de medio punto con amplio dovelaje y encuadrada con un alfiz corresponde a modelos del primer cuarto del siglo XVI.
Palacio de Los Serrano
17
En la plaza de los Jerónimos está una vivienda perteneciente a la familia de los Guillamas, que nos muestra un modelo arquitectónico característico en la ciudad, cuyos muros se resuelven con cajas de mampostería y tapial. Hoy es convento de Adoratrices. La espadaña del viejo monasterio de Jerónimos constituye una imagen familiar en el paisaje urbano, a pesar de que hoy está convertido en ruinas este lugar fue centro de la espiritualidad abulense, primero con la presencia de los jesuitas y a fines del XVI con la de los Jerónimos. Muy cerca se levanta la casa de Dª Guiomar de Ulloa, amiga y colaboradora de Teresa de Ávila. En la calle de Eduardo Marquina está la casa del Regidor Antonio Navarro, hoy sede de la cámara de Comercio, lo más interesante es su patio adintelado de cuidadas proporciones. Nuestra ruta continúa hasta la plaza de Sta. Ana, presidida por el Monasterio de Santa Ana, rehabilitado para sede de la Delegación de la Junta de Castilla y León. Lo más sobresaliente del conjunto es el claustro formado por tres pisos de arquerías y el templo de una sola nave. En la misma plaza está situada la ermita del Cristo de la Luz, fundada en 1467 por Juan Núñez Dávila.
18
El monasterio de Santa Ana de la Orden del Cister fue uno de los más destacados de la ciudad
Nuestro paseo puede prolongarse hasta el Monasterio de San José, primera fundación de Santa Teresa. Inicialmente el monasterio se componía de una serie de casas, que se fueron agrupando y uniendo formando un espacio arquitectónico que aún hoy se conserva y que nada tenía que ver con la arquitectura de otros monasterios de la ciudad. El templo actual fue levantado en los primeros años del XVII con trazas de Francisco de Mora, que planteó el prototipo de iglesia carmelitana.
Monasterio de San José o Las Madres, es la primera fundación de Santa Teresa
19
DE SAN VICENTE A LA PUERTA DEL CARMEN Puerta de San Vicente · Casa del Suero del Águila · Casa de Miguel del Águila · Mosén Rubí · Los Paules · Palacio de Diego de Bracamonte · Palacio de Bernardino de Henao · Puerta del Carmen Este itinerario nos permitirá conocer una buena parte de la arquitectura civil de la ciudad, En la calle de López Núñez tuvieron sus casas la familia de los Águila, la primera de ellas es la de Diego del Águila que está adosada a la muralla. A lo largo de su historia ha tenido varias reformas, pero aún se conservan elementos de la edificación del XVI, reutilizados en reformas posteriores. La Casa de Suero del Águila o de los Verdugo fue construida en lo esencial en el primer tercio del siglo XVI, la severidad que impone el muro de sillería de granito gris de su fachada se suaviza con la ornamentación de su portada y el vano que se dispone sobre ella con minuciosa talla de grutescos. Sus dos torres avanzan en planta y a una de ellas se adosa un verraco. Su patio formado por dos crujías porticadas puede fecharse en el primer cuarto del siglo XVI. En la actualidad pertenece al Ayuntamiento de Ávila. La casa de Miguel de Águila su portada puede fecharse en torno a 1540, es de gran sencillez y se ha perdido ya el gusto por lo medieval. Este edificio cedido al Museo del Prado, será rehabilitado para su uso como sala dependiente del mismo.
20
Torre mudéjar de la ermita de San Martín
En la Plaza de Mosén Rubi se levanta uno de los conjuntos más originales de la arquitectura abulense formado por el Hospital de la Anunciación (hoy Convento de Dominicas) y la Capilla de Mosén Rubí. Su arquitectura refleja la convivencia del último gótico y el renacimiento. Su fundación se debe a Dª María Herrera a principios del XVI, aunque la obra fue realizada tras su muerte por Diego Álvarez de Bracamonte, que había sido nombrado patrono de la fundación. Bajando hacia la puerta del Mariscal otras dos casas, la primera perteneció a los Águila y Bracamonte, su portada nos permite fecharla a mediados del XVI. El Palacio de Bracamonte, debió levantarse a lo largo del siglo XVI, lo más interesante es el patio porticado de amplias proporciones.
Nuestra Señora de la Cabeza tiene una cabecera románica y un cuerpo de tradición mudéjar
Desde aquí nos dirigimos al Palacio de Bernardino de Henao, hoy Parador de Turismo. En la Plaza de Concepción Arenal en el solar del antiguo convento del Carmen está el Archivo Histórico Provincial, del que destaca su espadaña sobre la puerta del Carmen, reedificada a principios del XVI. Desde aquí nos acercamos visitar dos interesantes templos: San Martín y Nuestra Señora de la Cabeza. Si en San Martín nos sorprenderá su torre de ladrillo mudéjar, en Santa María serán la perfecta combinación de su cabecera románica y sus naves mudéjares.
21
DEL MERCADO CHICO A SAN SEGUNDO Plaza del Mercado Chico · Palacio de Polentinos · Iglesia de San Esteban · Ermita de San Segundo El Mercado Chico ha sido y continúa siendo el centro neurálgico de la ciudad, lugar de mercado, de reunión del Concejo, de celebraciones. En su construcción intervinieron varios arquitectos, se inició a fines del XVIII con trazas de Antonio Cuerbo, pero la plaza no será concluida hasta el XIX. El ayuntamiento es obra de Vázquez de Zúñiga de 1865. Bajando por la calle de Vallespín, antes rúa de Zapateros, llegamos hasta el Palacio de Polentinos, hoy Archivo Militar del Ejército, que constituye sin duda uno de los ejemplos más sobresalientes del arte abulense, nos habla de la obra de los maestros del XVI, pero también de los arquitectos del XIX que llevaron a cabo su restauración. Su portada y su patio de lenguaje plateresco representan el modelo más ornamental y original de
Plaza del Mercado Chico
22
nuestra arquitectura. Continuando por la calle de Vallespin está la Iglesia de San Esteban, el único templo románico intramuros que se conserva y uno de los más sencillos de la ciudad. De su fábrica original se conserva su potente ábside que repite el modelo de San Andrés, el muro septentrional y algunos elementos reutilizados en la reedificación que se hizo en el templo en el siglo XVI. Saliendo por la puerta de San Segundo o del Puente llegamos a la Ermita de San Segundo, uno de los mejores templos del románico abulense, inicialmente estuvo dedicada a Santa Lucía y a San Sebastián, pero el descubrimiento, a principios del XVI, de los supuestos restos de San Segundo, considerado primer obispo abulense motivó el cambio de advocación. En su interior hay que destacar el sepulcro del santo realizado por Juan de Juni y su artesonado.
Ermita de San Segundo
23
DE SAN SEGUNDO A LA CAPILLA DE LAS NIEVES San Segundo · Puerta de la Malaventura · Portade de Santa Escolástica · Convento de la Santa · Centro de la Mística · Palacio de Núñez Vela · Palacio de Vázquez Rengifo · Palacio de Ochoa Aguirre · Palacio de los Guzmanes · San Juan · Capilla de las Nieves Los arrabales de San Segundo y del Puente fueron desde la Edad Media los barrios dedicados a la industria, frente a lo que pueda parecer y como señala Serafín de Tapia, en Ávila un elevado porcentaje de vecinos se dedicaban al sector industrial, en el que trabajaban judíos, mudéjares y cristianos, de forma complementaria; así los judíos se dedicaban especialmente a las labores relacionadas con el trabajo del cuero y a la confección textil; los mudéjares a la construcción y los cristianos estaban repartidos de forma homogénea por todos los sectores de la industria. Testimonio de la industria del cuero son las Tenerías de San Segundo, donde se realizaban los trabajos de transformación del cuero, y que posiblemente por la documentación conservada pertenecieron a los judíos que se dedicaban a estas labores. Estas instalaciones constituyen un ejemplo singular y único de las actividades industriales que se han conservado en Ávila. Nuestro itinerario continuará siguiendo el trazado
24
El arrabal del Puente o de San Segundo fue un barrio industrial, en esta zona se han conservado las Tenerias
de los lienzos meridionales de la muralla y entraremos por la Puerta de la Malaventura, tras la que estuvo situada la judería abulense, conocida en las fuentes como judería vieja, lo primero que encontramos es el jardín de Mose León, autor del Zöhar, o Libro del Esplendor, una de las obras fundamentales de la cábala o pensamiento judío. Esta zona de la judería ha sido menos transformada que otras de la ciudad y en ella se ha conservado la portada de lo que fue una sinagoga en la calle del Pocillo, formada por dos arcos de ladrillo ligeramente apuntados que apean en jambas de granito y aún puede verse el alfiz que encuadró dicha puerta. Muy cerca está la portada gótica del desaparecido Hospital de Santa Escolástica, que fue realizada por Pedro de Viniegra. Tras este hospital está la plaza de la Santa, formada por el convento, el palacio de los Vela y la muralla. Saliendo por la puerta de la Santa está el Centro de la Mística, un edificio de reciente construcción destinado la interpretación de la mística de las distintas religiones y culturas. La casa de Blasco Núñez Vela, primer virrey del Perú (actualmente Audiencia Provincial), levantada a mediados del XVI. El convento y la iglesia de la Santa, levantados sobre el solar que ocupó la casa natal de Santa Teresa, en el siglo XVII ya con una estética barroca. En los primeros años del siglo XX Repullés y Vargas construyó un edificio destinado a museo teresiano. Hoy está instalado en la cripta del templo, un espacio de gran interés arquitectónico. Casa natal de Santa Teresa
25
Subiendo por la calle Madre Soledad tres construcciones nos ofrecen una visión generalizada de la arquitectura nobiliar, la casa de Vázquez Rengifo (Siervas de María), iniciada en los primeros años del siglo XVI su construcción se prolongará hasta bien entrada la centuria, junto a ella se levanta la vivienda de Ochoa Aguirre, edificada hacia 1580. Su fachada presenta vanos ordenados simétricamente moldurados con una ornamentación muy plana. Ya en la plaza del Corral de Campanas, la casa de Garcibáñez de Muxica, conocida también como de los Guzmanes, sede de la Diputación de Ávila. El monumental torreón esquinado es sin duda el elemento que más llama la atención y nos revela el carácter militar de estas construcciones. Merece la pena visitar su patio porticado. Continuamos nuestro recorrido por la calle de Sancho Dávila que nos lleva hacia San Juan, iglesia de origen románico, transformada en los siglos XV y XVI. En su atrio y a campana repicada se reunía el Concejo abulense. En este templo recibieron el bautismo Teresa de Cepeda y Tomás Luis de Victoria. Continuamos por la calle de Reyes Católicos, antes calle Andrin en la que están documentadas varias viviendas de los judíos de la ciudad, siendo entonces y aún hoy la zona comercial de Ávila. En esta calle está la Capilla de las Nieves, construida a fines del siglo XV por Dª María Dávila, sobre el solar que ocupó la principal sinagoga de Ávila. Adosada a su cabecera en un estrecho callejón se encuentre un interesante edificio que según la tradición era la casa del rabino.
26
Torreón de los Guzmanes, Palacio Superunda y monumento a San Juan de la Cruz en la plaza del Corral de Campanas
MARZO Concierto de Campanas En torno al 28 de marzo, los campanarios de Ávila conmemoran el nacimiento de Teresa de Ávila. Teresa Ilumina Ávila En torno al 28 de marzo se celebra este festival de luz y sonido, en los lugares más vinculados a Teresa de Ávila en la vio nacer. MARZO/ABRIL Semana Santa Declarada de interés turístico internacional, se caracteriza por la sobriedad y solemnidad de sus procesiones, y por recorrer la conocida como “Jerusalén Castellana”. MAYO Fiestas de San Segundo El 2 de mayo se celebra el patrón de la ciudad. Muestra gastronómica IGP Carne de Ávila. Degustación, showcooking, talleres infantiles,... JUNIO Certamen de pintura rápida El primer o segundo fin de semana de junio, tiene lugar el certamen de pintura rápida, donde se dan cita artistas de toda España. Día Europeo de la Música El sábado siguiente al 21 de junio, se celebra el día europeo de la música en plazas y calles de la ciudad. Concurso Ávila en Tapas El fin de semana del último Viernes de Junio tiene lugar este concurso gastronómico en el que se homenajea esta cocina en miniatura. JULIO Artescena El fin de semana del primer viernes de Julio se celebra el Festival de nuevos lenguajes escénicos de Ávila.
27
Fiestas de verano A mediados de Julio, la ciudad celebra las fiestas del veraneante. Festival Veranos en la Muralla AGOSTO Muestra Estatuas Vivientes El 15 de agosto, el casco histórico de la ciudad se llena de estatuas vivientes. Abvlensis La segunda quincena del mes, el festival musical que se constituye en una cita ineludible para los amantes de la música en la ciudad que vio nacer a Tomás Luis de Victoria. El Patrimonio ilumina Avila El tercer fin de semana de agosto, se celebra este festival de luces y sonido, en alguno de los monumentos más bellos de la ciudad. Concurso nacional de saltos Tendrá lugar el último fin de semana de agosto. CIR&CO El último fin de semana de agosto, las calles de Ávila se llenan de trapecistas, equilibristas, malabaristas.
28
SEPTIEMBRE Jornadas Medievales El fin de semana del primer Viernes de Septiembre la ciudad se engalana para recuperar su imagen medieval con torneos, pasacalles, exposiciones, teatro, concursos, … Ávila Mágica Las noches del fin de semana del tercer Viernes de Septiembre te encontrarás con los principales monumentos abiertos, los mejores números de magia y en sus calles, plazas y patios. OCTUBRE Fiestas de Santa Teresa El 15 de octubre se celebran las fiestas en honor de la patrona de Ávila. NOVIEMBRE Muestra gastronómica IGP Judías de El Barco de Ávila Degustación, showcooking, talleres infantiles,... Muestra nacional de Teatro Durante el mes de noviembre en el Lienzo Norte se celebra esta muestra con gran variedad de oferta y máxima calidad.
29
La gastronomía abulense se basa sobre todo en los productos agrícolas y ganaderos que le aporta una provincia caracterizada por la diversidad geográfica y climática, la cocina abulense es de gran sencillez y debe mucho al legado heredado de la convivencia de las tres culturas, islámica, hebrea y cristiana. Para degustar la variedad y la calidad de los productos que la tierra abulense le ofrece, asados, guisos, postres, tapas, no puede ni debe venir con prisas, porque mucho es lo que hay para elegir y muchas razones para volver.
Judías blancas cocinadas con productos del cerdo
Dos modos de conocer el buen comer y el buen hacer de nuestros restauradores, ha de llevarle o a la tradición de los abulenses de “ir de tapas” o a la de sentarse en un buen restaurante y ante una buena mesa con un menú más copioso, o tal vez atreverse con las dos. Para empezar un buen plato de entremeses con productos de la matanza como el lomo y el chorizo de olla, una sopa de ajo o castellana. Es conocida la calidad de las legumbres abulenses, ya sean las carillas, las judías de Barco de Ávila con denominación de origen, blancas o rojas o los garbanzos de la Moraña.
Chuletón de Ternera Avileña
Si buscamos un primer plato más ligero son muchas las posibilidades que nos ofrecen las verduras y hortalizas. Típicas son las patatas revolconas, cocidas y machacadas que se aderezan con pimentón y torreznillos. Carnes asadas, fritas, a la plancha o a la brasa constitu-
30
Patatas revolconas
yen buena parte de la cocina abulense. La ternera de Ávila de raza Avileña, con denominación de origen, que presenta múltiples formas de preparación; posiblemente la más tradicional es el chuletón a la parrilla. Pero en el menú también tienen cabida el cochinillo o tostón asado, el cabrito y el cochinillo cochifritos, el cordero asado y la caza. Pero si preferimos incluir el pescado, el Alberche y el Tormes nos aportan la riqueza de sus peces, buena elección son sobre todo las truchas fritas, al horno o escabechadas. Cochinillo asado
Un buen vino puede acompañar a cualquier menú que elijamos, si queremos que sea de la tierra Cebreros y el Tiemblo nos ofrecen sus caldos. La repostería es también rica y variada, de todos los postres el más conocido son las yemas, pero no debemos olvidarnos de las torrijas, amarguillos, huesillos, natillas, jesuitas, empiñonados o de las tartas.
Yemas, el famoso postre de la gastronomía abulense
Concejalía de Turismo Área de Empleo, Industria, Comercio y Turismo Palacio de Los Verdugo Calle Lope Núñez 4_05001 Ávila T. 920 350 000 (ext. 373 a 377) turismo@ayuntavila.com @Avila_Turismo www.avilaturismo.com
31