Saluda del Presidente de la Excma. Diputación de Burgos

Saluda del Presidente de la Excma. Diputación

El Jueves de Pasión abre la puerta de una de las celebraciones más entrañables de la primavera de Burgos y su provincia, la Semana Santa. Es una cita en la que se imbrican los sentimientos que emanan de la religiosidad popular y la cada vez más importante presencia de turistas en las calles de Burgos y en las celebraciones de la provincia.

La Junta de Semana Santa, sus 16 cofradías y hermandades, sus fieles y la ciudadanía de Burgos han elevado esta celebración a la categoría de Fiesta de Interés Turístico Nacional, lo que supone un aliciente más en seguir progresando para ofrecer la máxima calidad en los pasos procesionales y en cada una de las actividades que se desarrollan en la ciudad. Cada año son más los visitantes que disfrutan con nuestra Semana Santa y añaden a las procesiones las visitas a nuestro riquísimo patrimonio.

Desde la Diputación Provincial de Burgos, desde sus corporativos y desde su presidente, queremos destacar el extraordinario trabajo que realizan tantas mujeres y hombres, jóvenes y mayores, para engrandecer aún más nuestra Semana Santa. Ellos, en cooperación con parroquias y la Junta de Semana Santa hacen posible que, cada vez, sea más conocida, apreciada y valorada.

La plasticidad y belleza de nuestra procesión de El Encuentro o del Santo Entierro, por citar las más emblemáticas y antiguas, es una postal que llega, por el auge de las redes sociales, a todo el planeta; la tecnología nos convierte en universales. Y ese mérito es de quienes se esfuerzan en mejorar cada año.

En la provincia de Burgos se vive este fervor tanto o más que en la ciudad. Por eso, como presidente de la Diputación Provincial de Burgos, también invito a nuestros vecinos a participar de alguna de las magníficas representaciones que acogen nuestros pueblos. Citarlas todas es imposible porque cada pequeño pueblo de los más de mil que salpican nuestra geografía tiene su importancia en sí. Pero sí son muy destacables la Bajada del Ángel en Aranda de Duero, el Judas de Villadiego o el de Trespaderne; las procesiones de Briviesca, Arauzo o Medina de Pomar, o las representaciones de Covarrubias, Lerma, Villalbilla o La Molina de Ubierna . Y siempre es buen momento para saborear los ricos caldos de la Ribera del Duero, los de Arlanza o el Chacolí burgalés, aderezados con las viandas de cada pequeña comarca.

Felicidades a todos aquellos que hacen posible que nuestra Semana Santa gane en presencia, calidad, participación y fervor popular.

César Rico Ruiz

Presidente de la Excma. Diputación provincial de Burgos