Saluda del Alcalde

Saluda Alcalde

Hace pocos días mantenía una conversación telefónica con una consaburense que actualmente reside en Estados Unidos y que además lleva varios años fuera de España por circunstancias profesionales. En un momento determinado, me pregunta: -“¿Bueno, ya huele a rosa en Consuegra?”. En ese momento me di cuenta del grado de interiorización colectiva que este cultivo ha llegado a tener entre toda la vecindad consaburense a lo largo de los años. Y es que el cultivo del azafrán, venido de tierras lejanas de manos de otras civilizaciones por cierto, amén de haber sido en el pasado el complemento perfecto desde el punto de vista económico para las familias más desfavorecidas, que les han permitido atender gastos relacionados con la educación de los hijos, la vivienda, la boda e incluso el coche; se ha revelado como uno de los elementos fundamentales en torno al cual hemos construido la marca Consuegra. Resulta curioso, y a menudo habitual en la historia por otro lado, como un cultivo ha signifi cado y lo sigue haciendo año tras año, el nexo de unión que integra todo un crisol interminable de elementos que conforman lo que fuimos, en lo que nos hemos convertido y probablemente, lo que seremos en el futuro. Nunca un cultivo ha representado tanto la esencia de la Mancha y en particular, el alma de Consuegra; ninguna idea tiene más fuerza representativa, ni defi ne más intensamente nuestra identidad colectiva que nuestra Rosa del Azafrán y Don Quijote de la Mancha. Su fuerte raíz en forma de bulbo escondido en la tierra con la seguridad inquebrantable de que en la pulsión de la vida, nos recordará en forma de una fascinante y delicada fl or de un día, que debemos prestar más atención a nuestras tradiciones, a nuestra historia, a nuestro folclore, a nuestra gastronomía, a nuestro patrimonio, a nuestros mayores…. porque, si bien nuestra historia y nuestras tradiciones son intensamente fuertes y milenarias algunas de ellas, no es menos cierto que tenemos la obligación de recoger cada día esa

fl or fascinante y delicada para enseñársela al mundo, porque de no hacerlo morirá indefectiblemente al cabo de horas y será una oportunidad perdida para reconocernos colectivamente y sobre todo, para aprovechar económicamente en forma de explotación turística, todo nuestro potencial que, rico en patrimonio cultural y arquitectónico, poseemos. Parafraseando a ese gran escritor, saldrán más rosas, de acuerdo, pero las que se marchitaron, esas ya no volverán.

Conscientes de que no había tiempo que perder, porque la explotación turística se revela como la fl or del azafrán; fascinante, fugaz y contingente, nos hemos volcado durante estos años con este sector porque entendíamos que era una palanca económica de primer nivel en Consuegra, capaz de generar empleo y riqueza. A través de una multiplicidad de iniciativas promocionales a lo largo del año, de inversiones en recuperación del patrimonio, de apoyo constante a la divulgación de nuestra historia, hoy se conoce a Consuegra mucho más lejos, visitándonos muchos miles de personas que reportan un gran benefi cio a nuestro pueblo. Con el esfuerzo de todos, Consuegra se ha convertido en un destino turístico consolidado que no para de crecer y que hay que seguir apoyando desde el Ayuntamiento por todas las Corporaciones venideras porque aún nos quedan muchas iniciativas por implementar y mucho trabajo por hacer. Aunque les parezca mentira, Consuegra en este ámbito es un ejemplo por el que otros destinos turísticos se interesan a la hora de diseñar sus estrategias comerciales o sus eventos promocionales, lo cual nos llena de orgullo y nos hace llegar al convencimiento de que vamos en la dirección correcta. Quizá en este ámbito, como en otros, nuestro mayor enemigo seamos nosotros mismos; la destrucción de la capacidad de razonar, con un pensamiento estandarizado y un aborregamiento insoportable; el desprecio a la verdad; la descalifi cación de la tradición y por tanto la incapacidad de transmitir aquello que hemos recibido; la destrucción del vínculo con las personas, con la tradición, con la comunidad, con las leyes, con la obligación moral, y con las virtudes y la quiebra de la autoridad, son debilidades que debemos superar si queremos que Consuegra sea un espacio con oportunidades para todos, necesitamos recuperar las fuentes de nuestra tradición cultural y moral, necesitamos recuperar la vida y la verdad como valores fundadores de todos los demás valores y necesitamos empujar TODOS en la misma dirección.

Termino con dos agradecimientos muy especiales:

El primero para Juan Bautista Sánchez Bermejo, “el molinero”; gracias a su profesionalidad y a su compromiso y amor por Consuegra, en un tiempo record consiguió recuperar nuestros molinos devastados por la tormenta Emma el fatídico 1 de Marzo pasado. Muchos políticos pasaron por aquí prometiendo muchas cosas que a día de hoy NO HAN LLEGADO, pero Juan SI HA CUMPLIDO, con la humildad y la discreción que le caracteriza. GRACIAS DE CORAZON EN NOMBRE DE CONSUEGRA.

El segundo, para la familia Del Águila, y en especial a Gonzalo del Aguila, porque gracias a su generosidad vamos a poder disfrutar de los Torsos Romanos que actualmente están en la Casa de la Tercia, en el Museo Municipal de Consuegra; completando así una remodelación de ese espacio que está siendo visitado por miles de enamorados de Consuegra, generando actividad y vida en la zona centro y en especial en la Plaza que había pasado por unos malos momentos en el pasado.

El segundo, para la familia Del Águila, y en especial a Gonzalo del Aguila, porque gracias a su generosidad vamos a poder disfrutar de los Torsos Romanos que actualmente están en la Casa de la Tercia, en el Museo Municipal de Consuegra; completando así una remodelación de ese espacio que está siendo visitado por miles de enamorados de Consuegra, generando actividad y vida en la zona centro y en especial en la Plaza que había pasado por unos

Un saludo y feliz Rosa 2018. José Manuel Quijorna García