La concesión se otorgó en un pleno municipal celebrado el 28 de diciembre de 1924. El título de Hijo/a predilecto/a sólo puede recaer en quienes, habiendo nacido en el lugar del otorgante del título, hayan destacado de forma extraordinaria por sus cualidades o méritos personales o servicios prestados en beneficio y honor de la villa y hayan alcanzado consideración indiscutible en el ámbito de lo público. Y en donde se dejó por escrito que con su generoso desprendimiento hizo posible muchos proyectos para mejorar la vida de los vecinos. Y decidieron, por unanimidad, cambiar el nombre de la calle donde vivía, que se llamaba del Olivo, por la de Antonia Herranz, que es la calle donde se encuentra el Centro de Salud actual.
Antonia Herranz, hija predilecta de Paracuellos
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El único vecino que ostenta el título de hijo/a predilecto/a de Paracuellos es Doña Antonia Herranz Ahijón. Natural y vecina de Paracuellos (1857 - 12 de Febrero de 1929) que donó a lo largo de su vida buena parte de sus ingresos, llevada por su caridad y por el deseo de mejorar la vida de los vecinos. Dª Antonia vivió en la casa grande (actual centro de salud) y fue hermana de la mujer de D. Federico Mª Meco, alcalde en la primera década del s. XX
Resulta gratificante comprobar que, en una época en la que España se encontraba prácticamente en la bancarrota, intentado recuperarse del desastre económico y moral de la pérdida de las últimas colonias de ultramar y en donde la guerra en el norte de África estaba desangrando de hombres y dinero las arcas nacionales, una mujer tuviera la caridad enorme para donar multitud de fondos para la mejora del municipio. Que sepamos nosotros, aunque nos costa que hizo más cosas, donó 2.000 pesetas para la construcción de la fuente de la Salud en 1907, el arreglo y mejora de la vía pública por un importe de 6.000 pesetas en 1924 y la donación de 1.000 pesetas para la escuela de las niñas y 500 pesetas para la de los niños en 1928, con lo que se pudieron comprar pupitres, pizarras, libros, material escolar, etc. Las niñas en agradecimiento a tan generosa donación de material escolar, hicieron un teatrillo y la niña presentadora del acto, Dª. Isabel Lorenzo Muñoz dijo: La escuela organiza este teatrito hoy en honor a La Filántropa Srta. Antonia Herranz, hija predilecta de este nuestro pueblo, que agradecidas más y más le damos a tan virtuosa y caritativa señorita. Millones de Gracias. Qué podamos calibrar, a lo largo de esos años se gastó como mínimo, más de 10.000 pesetas (cantidad nada despreciable para la época teniendo en cuenta que la construcción del Ayuntamiento costó 47.000 pesetas) Con semejante historia, quisimos saber un poco más de la figura de esta filantrópica mujer e intentar ponerle un rostro. Lo primero que hicimos fue buscar alguna información entre los vecinos más viejos, pero no resultó. Hacía demasiado tiempo de su fallecimiento como para que alguno la recordara. Así que nos fuimos al cementerio municipal en busca de su sepultura. Sepultura que encontramos rápidamente debido a las pequeñas dimensiones del campo santo. Y lo que más no llamó la atención, a parte de la majestuosidad de la lápida, fue encontrarla muy deteriorada y sin ningún ramos de flores, en una época en la que se encuentra inundada de ellas justo unos días después de la fiesta de Todos los Santos. En la inscripción de la lápida sólo aparece ella, de esta forma llegamos a la conclusión de que no había en Paracuellos descendientes directos de ella y por tanto, nadie que la recordara.