Asociación del Santo Sepulcro y la Soledad CAPÍTULO I
El esplendor de una refundación Crescencio Álvarez Vinagre EL 6 de Enero de 1941, tal y como refleja el acta fundacional de la asociación, bajo la presidencia del sr. cura párroco de Santa María la Mayor, Don Miguel Benavides y Miguel y con la asistencia de todos los asociados, se celebra una reunión en la iglesia del Santo Sepulcro, con el fin de hacer una asociación que velase por el engrandecimiento de las procesiones y cultos de Semana Santa. En dicha reunión se procede al nombramiento de su primera junta directiva presidida por Don Anacleto Carbajosa. Se acuerda por aclamación el reglamento que regiría la asociación. Se nombra al sr alcalde de la ciudad presidente de honor de la asociación y se da un voto de confianza a la directiva para que fijase cuotas y que se hiciese todo lo necesario para que sus cultos y procesiones resulten con el mayor esplendor y solemnidad. Con fecha 31 de mayo de 1941 los fundadores de esta asociación se dirigen por carta al obispado de Zamora. Exponen su deseo, contando con la adhesión de un buen número de convecinos, de restaurar las piadosas tradiciones de la ciudad, sobre la base de la extinta Cofradía de María Santísima en su Soledad y el Santo Entierro, en lo sucesivo Asociación del Santo Sepulcro y la Soledad. Habiendo formalizado las constituciones que detallan, suplican su aprobación con el objeto de poder restablecer canónicamente la extinguida hermandad. Estas serían aprobadas por el Gobernador Eclesiástico Bartolomé Chillón (sede vacante) con fecha 27 de Enero 1942
la vida social. La unión Estado-Iglesia fue total, manifestándose en multitud de actos públicos, como consagraciones, entronizaciones, coronaciones canónicas, fundaciones y renovaciones de cofradías. De esta mutua colaboración Iglesia-Estado dan cuenta las ordenanzas de la asociación, que obligaba a presidir al alcalde con la insignia de la cofradía todos sus actos, asambleas y procesiones. Hoy en día, como reminiscencia de ese pasado y de forma testimonial, como marcan sus actuales estatutos, se sigue realizando un sencillo acto, previo a la procesión del Viernes Santo, en el salón de plenos del ayuntamiento, en el que el abad mayor intercambia con el sr. alcalde la insignia de la cofradía y el bastón de mando de la ciudad.
Nacida en los inicios de la posguerra, al amparo del nacional-catolicismo, exaltación oficial del catolicismo, que impregnó toda 8
Toro Cofrade Semana Santa 2018
Desde sus inicios la asociación desarrollo un amplio programa de cultos y procesiones hasta cinco llegó a organizar, destacando el Vía Crucis organizado para trasladar la venerada imagen de Jesús Yacente el Miércoles Santo y la procesión del Santo Entierro, la más solemne de cuantas se celebraban en la ciudad. En cuanto a los cultos destacaba la “vela” a la Virgen de la Soledad que concluía con un Vía Crucis y sermón. Para