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Año Nuevo, Retos Viejos. Jesús Manuel Glez. Palacín | Coordinador General de UCCL

Año Nuevo, Retos Viejos

Jesús Manuel Glez. Palacín | Coordinador General de UCCL

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Comienza un año nuevo con ilusiones renovadas y con la esperanza de que este año conseguiremos avanzar en los objetivos que no pudimos alcanzar el pasado año. Terminamos un año 2016 decepcionante, pese a la gran cosecha, pero con unos precios en casi todos los sectores agrarios y ganaderos francamente ruinosos. Los agricultores queremos vivir dignamente del precio de nuestros productos. Mientras tanto desde la Comisión Europea, el Ministerio y la propia consejería se afanan en poner remedio a esta dura realidad, que todos reconocen, pero nadie parece que encuentre la solución. Las normas de libre mercado y de competencia siempre son escollos insalvables para poner medidas eficaces que equilibren la balanza. Nos trasladan en muchos casos la responsabilidad a los productores animándonos a crear OPs, a concentrar la oferta, como si eso sería fácil y cuando lo conseguimos resulta que tampoco conseguimos negociar los precios. En el mejor de los casos repartimos el producto por las diferentes industrias pero son éstas las que imponen los precios. Posiblemente sea un ingenuo, pero no deberíamos adaptar la normativa y las leyes a las necesidades de la gente para que no se puedan producir estos abusos tan escandalosos. No será que estamos protegiendo los intereses de las grandes cadenas de distribución en detrimento del sector primario y de los consumidores. Tanto el poder legislativo como el ejecutivo tienen un papel fundamental para reequilibrar la cadena de valor, es una cuestión de voluntad política. Debemos avanzar en la ley de la cadena alimentaria definiendo cuál sería la posición dominante. Deberíamos ser capaces de crear mesas de negociación con la distribución, la industria y el sector productor con la administración como árbitro y avanzar en la generalización de los contratos a medio plazo. Contratos que deberían garantizar las rentabilidad de todos los eslabones de la cadena. Éstas y otras muchas propuestas son las que la UNIÓN DE CAMPESINOS llevamos haciendo tanto a las administraciones como a los partidos políticos varios años. Es imprescindible cambiar las reglas de juego si realmente queremos evitar tantas y tantas situaciones de abuso hacia el eslabón más débil de la cadena. Empezamos a estar muy hartos de discursos bonitos y grandes declaraciones de intenciones pero la realidad es que del gran negocio de la alimentación, los productores somos los que menos participamos de los beneficios. Cada día los costes de producción son más caros y la burocracia que te exigen es para volverse loco por eso desde LA UNIÓN DE CAMPESINOS para el 2017 deseamos a todos los agricultores y ganaderos menos papeles, más precio y las ayudas para compensar lo que el mercado no sea capaz de pagar un precio justo. FELIZ 2017.

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