Polémica verde

Por Jessica Rodríguez En 2017, Steven Gundry publicó un libro que cambió por completo la definición de alimentos saludables al poner en duda todo lo difundido respecto a la comida benéfica y la solución a dolencias como artritis, diabetes y demencia.

Interesados en potenciar la salud y longevidad del hombre, los expertos nutricionales han abordado distintos enfoques como la promoción de súper alimentos, reducción de grasas, lactosa, y en última instancia, regular el consumo de lectinas.

Las lectinas son un tipo de proteínas encontradas en microorganismos, animales y vegetales, mas sólo las provenientes de éstos últimos han desatado controversia. La discusión respecto a ellas se abrió gracias al libro La paradoja vegetal de Steven Gundry, cardiólogo estadounidense, en el cual se plantea el impacto negativo de su consumo. Gundry afirma que dichos compuestos, generados por las legumbres y cereales, son un mecanismo de defensa contra los depredadores, por lo tanto, desencadenan reacciones adversas en el interior de quien los coma.

El texto expone que la ingesta de germen de trigo, frijoles, papas, tomates, pimientos y berenjenas —por mencionar algunas verduras de la familia de las solanáceas— se relaciona con complicaciones cardiacas, intestinales y aumento de peso. Su afirmación se debe a que sus proteínas son indigeribles y pueden cambiar el equilibrio bacteriano del intestino, interferir en la absorción de nutrientes, producir inflamación y dolor articular.

Además, si se padece de obesidad, disfunción tiroidea, síndrome del intestino irritable, artritis, enfermedades cardiacas, trastornos autoinmunes o diabetes, con mayor razón debe evitarse el consumo de los víveres mencionados para evitar agravar las molestias.

EL AGUACATE CONTIENE LECTINAS, PERO SE HA DEMOSTRADO QUE NO RESULTA PERJUDICIAL PARA LA SALUD

ALIMENTOS RICOS EN LECTINAS

Frijoles rojos (mal cocidos) Soya (cruda) Germen de trigo Cacahuates *Tomates *Papas Arroz Habas Chícharos Ejotes Lentejas Verduras de hoja verde Coliflor Brócoli

*Han registrado de pocos a ningún efecto secundario.

ALIMENTOS BAJOS EN LECTINAS

TRANSFORMACIÓN EN CADA BOCADO

En general, Gundry propone reducir la proporción dietaria de los alimentos menos problemáticos, cocer los que sea posible o pelarlos y quitarles las semillas. En cuanto a los de origen animal, están permitidos, salvo dos excepciones, leche con beta caseína A1 y carnes de ganado alimentado con maíz.

La beta caseína A1 se encuentra en casi todos los lácteos y es la razón por la cual muchas personas se denominan intolerantes a la lactosa cuando, en realidad, están respondiendo negativamente a la caseína, detonante de ataques autoinmunes.

Respecto al ganado alimentado con maíz, la respuesta es muy simple, los animales cebados con este cereal mantendrán cualidades similares a la del nutriente bruto. Para asegurar la calidad de la carne empleada en la cocina se debe comprobar que ésta haya sido certificada por la American Grassfed Association.

NO TODO LO QUE BRILLA ES ORO

Aunque muchas personas han optado por seguir las indicaciones antes mencionadas, en el plano científico y de salud las posturas no han terminado de definirse. Estudios sobre las lectinas tipo C conducidos por la Universidad de Aberdeen y el Colegio Imperial de Londres, comprueban que desconocemos las funciones de las lectinas y su relación con las enfermedades. Así mismo, hay quienes afirman que no es necesario alarmarse, a lo sumo, es importante vigilar las reacciones de cada uno en relación con nuestra alimentación para detectar si somos o no propensos a los efectos nocivos de las lectinas. LOS COMESTIBLES FERMENTADOS SON UNA EXCELENTE OPCIÓN PARA ELIMINAR LAS PROTEÍNAS DAÑINAS DE LOS VEGETALES