MARKETING El hombre de la marca

EL NOMBRE DEL HOMBRE DE LA MARCA

Jeff Bezos iguala la popularidad de una empresa dedicada al comercio electrónico mundial, que se fortaleció, aún más, durante la pandemia

El nombre de Jeff Bezos se ha convertido en una marca, más allá de su relación con Amazon, es el CEO, y de las leyendas a su alrededor, el hombre se ha convertido en uno de esos seres humanos que son hito, como Bill Gates y Steve Jobs. Y pareciera que su importancia en la historia de la humanidad aún está por acabar de escribirse.

Microsoft y Apple dominaron los titulares en cuanto a avances tecnológicos en materia de computadoras se refiere, pero el mundo continuó girando, el tiempo siguió su curso y los cambios han sido la constante.

La pandemia revolucionó las formas de interacción social al estar en riesgo mortal la vida de los seres humanos, y en la era del capitalismo se requieren mentes ágiles que comprendan las necesidades del mercado y comprendan, más allá de la idea noventera, la palabra globalización, que en pleno 2020 alcanzó su más amplio significado. Un virus se expandió más allá de las fronteras y del Lejano Oriente llegó hasta los sitios más recónditos de Occidente, donde generó pánico, tristeza, desesperanza, dolor, aislamiento y muerte.

En sociedades donde el contacto social y la alegría forma parte de la cultura, la soledad asentó sus reales y causó estragos. Una de las formas más populares de evasión, según el psicólogo del Centro Activa Psicología (Madrid), José Antonio Tamayo, en la nota “Adicción a las compras, ¿mito o realidad?”, publicada en efesalud. com, entre las razones que favorecen el consumismo están: estar a la última, oportunidades, socialización y desconexión.

Esta última la define como “una vía de escape ante los problemas. Es un medio para levantar el ánimo o motivarse para hacer algo, como darse un capricho como premio”. ¡Y vaya que desde marzo de 2020 todo mundo tenemos problemas! A + B = AMAZON

La economía colapsó, negocios de todos tamaños despidieron empleados, redujeron su producción y muchos cerraron, pero a río revuelto, ganancia de pescadores, y uno de ellos se distinguió, casi como “Santiago”, el personaje de ficción protagonista de la historia de Ernest Hemingway “El viejo y el mar”, pero con mejor suerte que el icónico personaje.

Factor A: la gente no podía salir de casa, en muchos países el confinamiento fue demencial y prolongado, las cuarentenas se extendieron demasiado y la gente tuvo que crearse

una vida en el interior de su hogar, buscar cómo proveerse de los artículos necesarios para el día a día sin abandonar la seguridad de sus casas.

Factor B: Estrés, aburrimiento, miedo y todas las emociones y sentimientos que surgen del aislamiento. Los seres humanos comenzaron a buscar formas de ser felices, desde cocinar, hasta adoptar mascotas, sin olvidar a los nuevos amantes de las plantas… todo lo que produjera serotonina, que recordara la vida “normal”, entre ese todo, las compras.

¿Cómo comprar sin salir de casa?, Jeff Bezos fue el responsable de que la experiencia Amazon llegara hasta sitios insospechados. Así, mientras empresas caían, la compañía más grande de comercio electrónico en el mundo incrementó sus ganancias. Este titán está valorado en 1.7 billones de dólares, con 1.2 millones de empleados.

El éxito de este hombre está en lo que se conoce como su “obsesión por el cliente”, en el que busca el planteamiento de cualquier problema que pudiera tener un cliente de Amazon para darle solución en un proceso de “trabajo hacia atrás”, en busca de mejorar la experiencia de los usuarios de la plataforma.

El CEO de Amazon se ha ganado fama en muchos sentidos, para bien del cliente, pero con cuestionamientos sobre las condiciones laborales que imperan en la empresa, aunque, al parecer, la reputación de Bezos y la empresa se mantienen a salvo… hasta ahora.

En los próximos meses seguiremos escuchando el nombre de Jeff, pues su meta más próxima es convertirse en el primer turista espacial, algo que será digno de ver y, aún más, de analizar.