Leon Pereyra - Las cosas

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Las cosas Le贸n Pereyra Tapa por Aldana Antoni Editorial Subpoes铆a Buenos Aires, Noviembre 2013 www.subpoesia.com.ar


¿Y conseguiste lo que querías en esta vida? Lo conseguí. ¿Y qué querías? Considerarme amado, sentirme amado sobre la tierra. Raymond Carver


(

Tengo 28 aĂąos. Muy pocas veces toquĂŠ la tierra con los pies. Vivo en edificios desde siempre. Generalmente mientras escribo el sonido ambiente es la tele al fondo en cualquier canal y una amoladora eterna,

implacable

que se cola por la ventana y arrastra tambiĂŠn un dejo de ambulancias y frenadas.

Natural.

Naturaleza.

Naturaleza muerta. 4


Soy en esta ciudad y en este momento; ahora, no antes ni siempre sino ahora y estoy vivo ahora.

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Soy León, tengo 28 años y traigo mis palabras amoníacas :

mi vida hoy es mear palabras, ¿Se entiende?. Mear sílabas como trozos de vidrio caleidoscópico a cuentagotas no de sangre ni de sudor ni lágrimas; mear palabras en un gran chorro

obsceno y dorado,

como una necesidad ultrajante de sacudirme la pija poética.

Mear palabras, ¿Se entiende?.

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)

Tengo 28 aĂąos

y muy pocas veces toquĂŠ la tierra con los pies.

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Me exprimo (La voz clarificante exige) “Si un concepto si un concepto me supera lego mi voz para la experiencia futura.” (Voz del coro) “Fecundidad injusta sobre la tierra de los bárbaros; ecos surgiendo de entre los edificios.” Si una mañana si una mañana ya no despierto si una mañana yanodespiertomás no me voy a preocupar ni a dar cuenta. 8


y sale: (La voz clarificante exhorta) Un pie un pie por vez como avanzada de hormiga. Estrategia numero 71: caminar y achicarse achicarse achicarse

hasta caber en el todo.

Imagen real del asunto: desnudo tipeando desnudo eligiendo palabras desnudo. 9


Acto de repetición, hipótesis y pregunta. Supongamos que hoy es un efemismo. Supongamos al tiempo como una aguja que gira en círculos sin principio ni fin. Supongamos que lo que digo no es en verdad lo que digo y lo que hago, lo que hago es parte de un sueño que ni siquiera alcanzo a soñar. Supongamos al sexo como una barrera. Supongamos al sexo como la barrera. 10


Supongamos que la saltamos. Supongamos, entonces, que soy una mujer. O un hombre. O mejor, supongamos que soy quien digo ser. ¿De quién serían estas manos que intentan imitar a otras manos en el acto cruel de escribir sabiendo lo que se escribe? Supongamos que al final no dije nada de lo que quería decir. O sí. Supongamos. 11


RAYOS DE AMOR

Vos, Aldana, después de las fiestas y detrás de las voces; es tu luz la que quema vos vos y el futuro disfrazado de presente chicloso y de juventud y de incertidumbre. Vos con tu nombre lleno de aes para cantarlo, para gritárselo a todos en la cara y tu luz ¡Luz, Aldana, luz! tu luz que quema, tu sonrisa que se ata a tus ojos rayo de grafitti, rayos de amor que queman todo- todo lo queman. 12


Lapsus Tan simple como ver el sol fustigando las casas desde mi balc贸n. Barba rala calzoncillos y el ruido que permanece en la ciudad. Es mediod铆a soy el hombre que mira al suburbio.

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Cosas importantes Hoy me caí en la ducha; me doblé el cuello en un ángulo muy extraño. Quedé tirado inmóvil sobre el esmalte blanco de la bañera pensando en los dedos huesudos de la parca arañando el aire. Renací. Despues llegué tarde al trabajo y discutí con mi jefe por 100 pesos. Cosas importantes.

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-多Vemos Twin Peaks?

QUIERO QUE UN GIGANTE ME CANTE LA POSTA 15


Tener. Tener satisface. Tener satisface almas pobres. Tener en la alacena o en el baĂşl o en el ropero. Tener. Tener satisface. En cambio no tener te limita o te convierte en una mĂĄquina generadora. SegĂşn.

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Este pliego se terminó de armar e imprimir en Taller Subpoesía en noviembre del año 2013


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