La Eternidad Por: Carlos A. Daste
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uando niños los adultos nos enseñaron de diferentes formas qué era la eternidad. Y realmente no importaba mucho la religión o la relación que tuvieran con Dios. Lo que importaba era que esa eternidad existía. Con frecuencia confundíamos la eternidad con el paraíso. Esa idea maravillosa que nos indica un sitio de excelente clima, flores, montaña y playa al mismo tiempo, colores vivos, calles de oro, aromas fantásticos y música celestial. Y pocas veces hemos tenido la oportunidad de comprender lo que la eternidad realmente es. En el principio existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. El estaba en el principio con Dios Juan 1: 1-2 Si buscamos en el diccionario la eternidad es algo que no tiene fin ni principio. En ese sentido podemos reflexionar que si nosotros no tuvimos principio….eso revela un gran misterio… siempre hemos existido, hemos estado en el paraíso, siempre hemos estado con Dios, solo que se nos ha dado este tiempo en la tierra. Y en el viaje de este “pedazo” de vida en la tierra olvidamos que realmente tenemos el regalo de la eternidad en Dios, y por el sacrificio de amor hecho realidad por su hijo Jesús. Y lleven una vida de amor, así como Cristo nos amó y se entregó por nosotros como ofrenda y sacrificio fragante para Dios. Efesios 5:2 Es por eso que nos gusta buscar inmortalizar nuestro nombre a través de diferentes obras. Ejemplo: pintura, música, fotos, videos y conceptos en redes sociales, en fin, el arte seria la forma más fácil de ser inmortal y eterno. Pero siendo real, la eternidad en Dios está definida por ÉL,
la eternidad es tan real como la vida misma pues “quien cree en mí, aunque esté muerto vivirá”. Jesús le dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá Juan 11:25 Eso quiere decir que solo basta una cosa para ser y estar en la eternidad; creer en Dios y aceptar a Jesús como nuestro señor y salvador. Como todo con Dios, es súper sencillo, cree, confiesale y serás salvo y eterno. Cree y estarás con Dios, sólo cree. La fe es lo único que necesitamos para estar con Dios, El se encarga del resto. Es exactamente el principio de la fé el que define todo en la vida y en la eternidad. La fe siendo “la certeza de lo que se espera y la convicción de lo que no se ve” es básicamente una ley fundamental que Dios instauró en la tierra. Es más eficaz que la ley de la gravedad. ¡Si lo crees será! Eterno eres, sólo debes tener fe en que así será.
Familia Daste - Paez
Romanos 10:9-13 9 que, si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. 10 porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. 11 pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado. 12 porque no hay diferencia entre judío y griego, pues el mismo que es Señor de todos, es rico para con todos los que le invocan; 13 porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.
