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Artículo
Kenia Dotel Contadora
k.dotel@hotmail.com @dotelkenia
Ilustración y foto: Freepik
Tener buenas finanzas y ser emprendedor: hábitos que deben salir desde casa
El término emprendimiento data de principios de la década de 1920. La carrera de la vida inicia desde casa, esto es así que, tanto los valores que nos inculcan, así como el manejo de las buenas finanzas, el emprendimiento y el ahorro, se desprenden del seno del hogar.
Enseñar a nuestros hijos a ahorrar es parte del rol fundamental como padres y educadores empíricos. La educación ha dado un giro inmenso y se ha acentuado en este tiempo en que la pandemia del covid-19 ha atacado al mundo, lo que con ello ha permitido una aceleración del estilo de educación especialmente la de los jóvenes.
En este sentido, es notorio cómo ellos muchas veces en el contexto tecnológico nos llevan las millas, no siendo así en el área financiera, pues es nuestra responsabilidad contribuir, además de la educación tradicional, a la educación basada en finanzas, en emprendimiento y en ahorro.
Como padres o tutores debemos enseñarles la importancia de romper el paradigma que tenemos de estudiar y luego ser empleado. Más bien debemos asegurarnos de proveer los medios para que desde jóvenes desarrollen su potencial y se enamoren de un proyecto que puedan llevar a cabo sin la necesidad de emplearse en el futuro. Ese es el compromiso que tenemos en la educación moderna.
En la actualidad tenemos un sin número de carreras técnicas traducidas en diferentes tipos de programas como salud, arte, construcción, informática, idiomas, entre otros, que permiten a nuestros hijos tener una mejor visión de cómo emprender desde jóvenes en poco tiempo. Es un éxito ver como las carreras que estudiamos por 4 y 5 años hace tan solo 15 o 20 años han ido declinando y hemos entrado en esta metodología de carreras que no solo no existían, sino que ha movido a la juventud a un nuevo escenario más visionario y retador.
En este ejemplo de este estilo de educación pionera vemos al Instituto Tecnológico de Las Américas (ITLA) e Instituto Técnico Superior Comunitario (ITCS), instituciones que fueron visionarias de este modelo educativo, tanto así que otras universidades dominicanas de estudios tradicionales y de gran renombre han acogido este tipo de iniciativa, además de su carga académica tradicional.
En dos años los jóvenes cursan carreras técnicas, que les permite ser profesionales incluso mejor pagados que cuando se proyectan en una carrera tradicional, están inspirados por el espíritu emprendedor y comienzan la verdadera carrera de proyectos personales siendo difícil que se empleen. Un emprendedor está dispuesto y es capaz de convertir una nueva idea en una innovación exitosa, ese nuevo pensamiento es su norte.
Esto quiere decir que, nosotros como padres nos ha tocado aprender de nuestros hijos, pero también llevarlos de la manos, priorizando que emprender es un campo difícil, largo, abrumador y muchas veces solitario pero que a la vez trae sus recompensas, solo nos toca siempre servirles de apoyo a cada joven que hoy decide ser un pequeño empresario motivándolo a siempre ahorrar, a mantenerse en desarrollo constante y hacerlo consciente de que es más difícil ser su propio jefe que tenerlo y que no por eso deben desfallecer.
Igualmente, a medida que crece cualquier idea de negocio o emprendimiento, deben sentir que nosotros los apoyamos en un 200%, sentarnos con ellos y evaluar los riesgos, según nuestra experiencia. Además, tener presente que debe ir de la mano con el ahorro y, por ende, la reinversión de las ganancias en beneficio a una mejor proyección y ampliación del camino del emprender.