Columna

Gestión Veterinaria ¿Cuál es la importancia en la industria?

Por: Alejandra Mejía Vallejo

La gestión veterinaria hoy está categorizada a nivel mundial como una especialidad fundamental y transversal a la medicina veterinaria. Esto debido a su relevancia en la mejora de la atención de los servicios y oferta de productos que abarca diferentes disciplinas que permiten la operación de un centro de servicios.

Hace algunas ediciones exponíamos que al googlear las palabras "gestión" y "veterinaria" pueden llegar a obtener hasta 29 millones 300 mil resultados. En el 2022 hay cerca de 31 millones 900 mil resultados y cómo no, después de esta pandemia que vivimos y que gracias a las diferentes herramientas y estrategias puestas en marcha se ha permitido entrar en el mercado y mantenernos.

Esto para todos fue una sacudida de la realidad que nos puso alertas e incluso algo pesimistas frente a lo que se avecinaba. Pocas personas se imaginaban que la industria se enfrentaría a un aumento de trabajo, de animales de compañía y de mercado lo que nos hizo cuestionarnos y entender que no solo el conocimiento nos salva. En ese sentido, resulta importante poder gestionar eso que realmente sabemos hacer y encontrar los canales adecuados para entregar nuestros servicios a disposición de los clientes y usuarios.

Por eso podemos decir que, así como avanzó una generación en tecnología gracias a todo este fenómeno, el gremio veterinario también avanzó unas dos o tres generaciones en la que se pusieron a prueba nuestras habilidades y capacidades de respuesta ante una crisis que no fue solo financiera. En este contexto, se puso a prueba las estrategias para encontrar un canal idóneo en el que se pueda llegar a cada cliente teniendo como prioridad garantizar su seguridad ante un posible contagio. Así, los establecimientos se tuvieron que adecuar con protocolos de sanidad, procesos y nuevos elementos de uso para la continuidad de las operaciones de cada CSV, agendar citas, llenar formularios y crear contenidos. Además, debimos incursionar al mundo de las redes social, para así socializar conocimientos, entablar conversaciones con el público e incluso usar herramientas como la videollamada para el seguimiento de pacientes, además de proporcionar trabajo remoto para el equipo de trabajo. Con todo esto llegaron nuevas formas para garantizar la supervivencia y crecimiento de muchos de los negocios veterinarios y el surgimiento de muchos más.

La gestión veterinaria entonces, contiene elementos que se necesita para que las demás especialidades lleguen a ser exitosas dentro del centro de servicios veterinarios. Es este tipo de conocimientos los que dan herramientas para hablarle al equipo de trabajo, a los clientes y a mejorar el trato con los pacientes. Así se dan pautas para mejorar las estrategias del negocio, para cumplir tus objetivos y al mismo tiempo planteártelos.

El saber qué es lo que hace realmente exitoso tu negocio, tomar decisiones asertivas a partir del análisis de los datos que se generan en cada etapa del servicio, desde el contacto en redes o llamadas, hasta la generación de una cita o de una compra en redes. Todo esto a ser analizado se convierte en conocimiento y hoy más que nunca en la historia, estamos generando datos, un rastro en la web el cual permite a las organizaciones aprender y con esto seguir generando nuevas estrategias para llegar a los clientes y usuarios de la mejor manera. Estos entre muchos otros elementos que van enfocados solamente a optimizar tus recursos y exponer lo mejor de ti y de tu equipo para ver revertido todo este esfuerzo en ganancias para todos.

Dra. Alejandra Mejía Vallejo

Medica veterinaria, Esp. Gerencia de marketing, magister en gestión de ciencia tecnología e innovación. Líder de estrategia y fundadora de marketing veterinario, miembro activo de Red Iberoamericana de gestión veterinaria

Equidad de género y economía ¿Por qué tener esta conversación?

Por: Lauren Franco Periodista Pet Industry

Durante nuestro panel “Equidad de género e impacto económico” conversamos sobre la situación de desigualdad, las causas, el impacto y el porqué es importante debemos vincular la equidad género con la economía. Aquí encontrarás un breve resumen de lo que fue este espacio.

Paula Torres, consultora de la firma Aequales, expresa que aumentar la participación y la autonomía económica de las mujeres trae beneficios para la economía. “En términos generales cuando las mujeres tenemos más ingresos, gastamos más y el gasto aumenta el PIB. El FMI estima que cerrar las brechas de genero podría incrementar el PIB en un 35% para la economía de un país” asegura Paula.

De igual forma, Paula afirma que aumentar en un 76% las brechas de

género en la participación laboral

representarían aproximadamente para los países un crecimiento de 7 billones de dólares. Si lo vemos en términos macroeconómicos los resultados son claros y las empresas también se beneficiarían. Según un análisis de Aqueales las empresas que tengan una estrategia definida de equidad de género y de representación equitativa tendrían un aumento del 25% en el retorno de

los activos del ROA.

Sin embargo, a pesar de los claros beneficios ¿por qué aún tenemos una deuda pendiente con la equidad? En general el sistema económico no ha favorecido a ciertas poblaciones, como a las mujeres, e incluir un debate sobre como re-pensarnos ese sistema debería ser fundamental para la equidad.

Aspectos fundamentales para cerrar las brechas es entender

Ana María Granda, economista, asegura que para poder cerrar las brechas hay que entender cuáles son las causas de las mismas. Una de ellas es la denominada división sexual del trabajo,

Paula Torres

Consultora de la firma Aequales

Ana María Granda

Economista

la cual en pocas palabras ha definido que actividades deben realizar los hombres y las mujeres. Esta división ha naturalizado ciertos roles que impiden que las mujeres accedan de manera equitativa a las mismas oportunidades educativas y laborales que los hombres.

Ejemplo de ello es el cuidado doméstico que ha sido asignado a las mujeres y que ahora se debate como trabajo no remunerado. “En Bogotá, las mujeres invierten en promedio 10 horas para realizar estos trabajos y no reciben ninguna remuneración” expresa la economista. Con esto vemos que la inequidad no es únicamente a nivel monetaria, el tiempo no se distribuye de igual forma para hombres y mujeres.

“El DANE mostró que a los hombres le quedan cerca de 10 horas libres y a las mujeres les queda tan solo 6 horas libres” expresa Ana María.

Así, a menor tiempo libre menor tiempo hay para invertir en actividades de formación que permitan entrar en el mercado laboral. Es por eso que la discusión de equidad no puede desligarse del trabajo de cuidado no remunerado y las empresas tienen un papel fundamental en este espacio.

El problema radica en que no solamente es inequitativo el tiempo, el salario y el acceso a oportunidades laborales. El problema está en que el género femenino está penalizado en los procesos de contratación. Principalmente, porque castigan la maternidad como lo expresa Paula Torres.

Las empresas son conscientes que el trabajo del cuidado del hogar está implícito en las mujeres. “Esto hace parte de los sesgos inconscientes y para acabar con ellos hay que sensibilizar a las áreas de recursos humanos” afirma la consultora. El reconocer la carga social que existe en las mujeres en torno al cuidado del hogar es el primer paso, de ahí se deben encaminar políticas dentro de las empresas para mitigar este impacto. “Zonas de lactancia, espacios de guardería infantil e incluso encaminarse a las licencias de paternidad y maternidad son algunas formas” expresa Ana María.

Laberinto de cristal ¿Qué es y cómo disminuirlo?

El laberinto de cristal es una metáfora para entender que no sólo existen barreras a la hora de ascender en los diferentes puestos, sino que las mujeres presentan barreras a lo largo de sus carreras. Es incluso una forma de mostrar que cada mujer pasa por un proceso diferente y que resulta casi que imposible unir en una misma bolsa todas las inequidades y desigualdades que presentan.

“Aquellas mujeres con características identitarias particulares son muestra de ello. Por ejemplo, una mujer afro no se va a chocar con el techo de cristal porque puede que quizás no haya accedido al mercado laboral” expresa Paula. Comprendiendo que es el laberinto de cristal podremos entender que no hay un balance en la vida de las mujeres a nivel laboral y personal.

“En Bogotá del 30% de las mujeres

son cuidadoras principales y el 70% de ellas no tiene niveles mayores al

bachillerato. Esto nos indica que estas barreras se derivan de la división sexual del trabajo y que no solo radican en romper un techo de cristal estas barreras afectan a garantizar los derechos plenos de las mujeres. El derecho a trabajar, a educarse, a tener un espacio de autocuidado y bienestar” afirma la economista Ana María Granda.

Luz Carime Zamudio:

Vencer el miedo, superar barreras: La historia de una de las primeras mujeres veterinarias de Cali

Por: Lauren Franco Periodista Pet Industry

Luz Carime Zamudio es una médica veterinaria que respira pasión en cada uno de sus poros. Desde pequeña esta caleña se dio cuenta que quería ser cuando grande y en el camino entendió que la combinación para superar cada barrera sería el amor y la empatía.

Luz Carime no sólo es una apasionada de los animales, con orgullo carga la bandera de ser de las primeras mujeres veterinarias de Cali.

La vida le tenía el destino, ella marcó el camino

En ocasiones las pasiones nos encuentran y a esta mujer caleña la pasión la encontró desde muy pequeña. Siendo incluso tan solo una bebé sus padres entendieron que su hija sería veterinaria. “Cuando tenía 9 meses me daban el tetero y me acostaba en la barriga de mi perrita y le daba de mi tetero a ella. Mi madre se escandalizó, pero mi padre -quién también era veterinario- solo se reía”, expresa la doctora Luz Carime. Todo estaba escrito de alguna forma, al salir del colegio sabía que iba a estudiar medicina veterinaria. Pero no todo es un juego de niños y la vida, como una montaña rusa, sube y baja a gran velocidad.

Llena de sueños y expectativas se muda a Manizales para estudiar en la Universidad de Caldas. Era joven, tímida y demasiado familiar así que la aventura tenía toda la tinta retadora que podía pensar, pero estaba convencida de que sería feliz en el proceso.

Una carrera llena de obstáculos

Eran los años 70 y la situación en Colombia se complicaba cada día. El narcotráfico se expandía por las ciudades, la violencia llegaba a todos los territorios y el miedo inundaba a la población. En general, el colombiano promedio no la tenía fácil. Pero el contexto social y cultural hacía que la situación para las mujeres fuera mucho más compleja.

El imaginario colectivo de la figura femenina se encontraba en el espacio privado: la familia, la maternidad y el cuidado del hogar. Históricamente ese era el escenario propicio para ser mujer y a pesar de los recientes derechos adquiridos, como el derecho al voto en el 57, la mujer no tenía una completa autonomía y libertad para ser. El gran reto era abrirse espacio en el escenario público, aquel que no nos pertenecía y la doctora Luz Carime es muestra de ello. Con una maleta llena de sueños llega a su entrevista en la Universidad de Caldas y lo primero que recibe es un reproche por decidir estudiar. “Me dicen que, porque venía a robarle el puesto a un hombre, que yo venía a buscar marido. Yo lo que le respondí fue que porque pensaba así y le dije -enfática- que las mujeres también teníamos derecho a estudiar y que yo se los iba a demostrar” expresó la doctora Zamudio.

Y sí, cumplió su promesa e hizo historia: al ingresar a la carrera de 55 estudiantes solo 4 eran mujeres y al graduarse sólo 2 mujeres lo hicieron. Y en el camino de su formación profesional les demostró a los profesores que la mujer podía estudiar, ser la mejor e incluso conseguir éxito de la misma forma que un hombre podría. Sin sorpresa alguna, porque su talento era innegable, dejó un hito marcado en su alma máter y en los pasillos de su facultad aún se habla de esa primera mujer que superó las barreras y se convirtió en la mejor.

A los 21 años recibió su diploma y volvió a su ciudad natal a trabajar junto a su gran maestro de vida: su padre. En la clínica de él empieza a aplicar todo lo aprendido con la devoción de que haría las cosas lo mejor posible.

Zamudio Clínica Veterinaria es un referente de la medicina veterinaria en Cali. El doctor Zamudio, padre de Luz Carime, marcó un antes y después en la medicina y ahora era el turno de su hija continuar con ese legado. Pero era el siglo XX y la sociedad aún era algo machista y no esperaban ver a una joven como doctora.

“Me decían que esta niñita que va a saber de veterinaria, llámenme al doctor. Y yo les decía es que yo soy la doctora. En mi interior asumía las cosas con calma y los entendía y sólo pensaba que algún día van a querer que yo los atienda” expresa la doctora Luz Carime.

Ser madre, jefa y médica veterinaria

Luz Carime formó con orgullo su familia, la otra parte de su ser. Tuvo dos hijos, de los cuales habla con todo el orgullo posible por el camino que ellos han recorrido. Pero admite con la humildad necesaria que no fue fácil.

Tenía tres papeles por hacer: ser madre, ser la jefa de su clínica veterinaria y además ser la doctora Zamudio y ninguno de los tres roles se detendrían así que debía encontrar el equilibrio. Asegura que las mujeres somos increíbles, que en medio de todo el caos logramos dirigir “esa orquesta” llamada vida y hacer que cada músico toque su parte como debe ser.

Coloquialmente se habla de la magia que hacen las madres, me atrevería a decir que más que magia es la capacidad de re-existir y re inventarse en cada fase de sus vidas: trabajadoras, profesionales, esposas y madres. Y ejercer todos los papeles que tengan por hacer lo mejor posible.

Luego de 41 años trabajando la doctora Luz Carime Zamudio está pensando en retirarse de la carrera que le apasiona. La verdad solo se hará a un lado porque la pasión nunca se abandona. Se dedicará a su nuevo amor, sus nietos, y a viajar como hobbie que ha encontrado. Será un proceso difícil porque ha dedicado parte de su vida a construir esta historia, pero dejando un legado invaluable para todas las mujeres sin importar la carrera.

Somos conscientes que como mujeres tenemos muchas barreras y que cada mujer tiene una diferente por superar. La diversidad de las mujeres, el contexto en el que viven y los procesos que atraviesan hace que sea difícil de hablar de una única fórmula para superar las barreras. Pero en esta ocasión queremos mostrarles como Luz Carime lo logró: empatía, amor y pasión.