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será vivir la Inteligencia Artificial
nuestra forma de vivir?
Somos personas que nos adaptamos al entorno y en algún momento, veremos esto como parte de lo cotidiano. Pero todavía existe esa incertidumbre o desconfianza de que una maquina sea capaz de manejar nuestro auto, que en el trabajo una maquina pueda tomar las decisiones, de que la educación no será la misma. Lógica de sistemas y programación, será algo que debemos saber desde el colegio. Esto sin duda, va a ser parte de nuestra vida. Llegará incluso un momento cuando el cerebro humano se fusione con las maquinas. Esto lo afirma Elon Musk, personaje visionario con el tema de las futuras tecnologías. Todo parece ser una película o una simple imaginación, que el hombre está convirtiendo en realidad. Pero estos cambios acelerados que estamos teniendo ¿van de la mano con nosotros?
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Para el futuro de profesionales como abogados, cirujanos, negociadores, economistas y otros, La IA será un aporte y una ayuda invaluable.
Si se llega a un punto en que la maquina pueda a reemplazar al humano y hacer mejor su trabajo, ¿Qué pasara con la gente? ¿Cuáles serán las nuevas profesiones? ¿En qué emplearemos nuestra inteligencia? Este artículo se escribe con el fin concientizar un poco, sobre el futuro cercano que se avecina. Llegará el momento cuando convivir con una maquina en la casa todos los días, que nos hable, que maneje todo por nosotros, va a ser una rutina normal.
¿Existe algún plan de contingencia? Posiblemente se presentará un reglamento que pueda controlar el desarrollo de esta realidad, varios lideres de las más grandes empresas del mundo están mencionando que debería empezar la manera de regularse o parar hasta que se pueda ver la forma de tener control. Italia fue uno de los primeros países en prohibir esta tecnología hasta encontrar estos panoramas seguros. Pero en algún momento no se tendrá el control absoluto, simplemente tendremos aprender a convivir con máquinas y adaptarse a la nueva era.
En los Estados Unidos, una sexta parte de los americanos mayores de 65 años tiene deficiencias visuales que no pueden corregirse con anteojos ni lentes de contacto. Esto suele ser el resultado de afecciones y enfermedades oculares comunes. Entre los americanos mayores, la deficiencia visual es uno de los factores más significativos de la pérdida de independencia; se asocia también con una mayor prevalencia de