El IENM se interioriza en gestión de emociones

Diversas jornadas en torno a la educación emocional tuvieron lugar en el Instituto Educativo Nuevo Milenio. Las mismas estuvieron destinadas tanto a estudiantes, como a docentes y familias, con el objetivo de brindar herramientas para propiciar la salud mental y el aprendizaje.

UNQUILLO

Alo largo del mes de abril, el Instituto Educativo Nuevo Milenio (IENM) trabajó el tópico “gestión de las emociones” de la mano de diversos profesionales. Así, en primer lugar, integrantes del Programa de Prevención del Suicidio del Ministerio de Salud de la Provincia de Córdoba visitaron la institución y brindaron una charla por curso.

Al respecto, Jorge Daniel Díaz, licenciado en Psicología e integrante del programa, contó que la iniciativa de visitar colegios surgió “para abordar una de las etapas más críticas a nivel de factor de vulnerabilidad sociodemográfico, que es la adolescencia”. “Una persona que tiene herramientas para lidiar con sus problemas y también para regular sus emociones, no elige conductas disruptivas o autolesivas como medio para solucionar cosas”, reflexionó el profesional e hizo hincapié en la importancia de “acercar estas herramientas a los jóvenes”.

En tanto, sobre la dinámica de la jornada, detalló: “En principio se busca que puedan identificar emociones, es decir, reconocerlas y habitarlas, para luego elegir métodos efectivos a la hora de bajar la intensidad de las mismas”. Así, los 15 miembros del programa presentaron de forma teórica un modelo emocional y, al mismo tiempo, técnicas de abordaje.

Días más tarde, Marilina Rotger, educadora en Neuropsicoeducación y Educación Emocional, brindó una capacitación al cuerpo docente. La disertación versó en torno a la relevancia de las emociones en el proceso de aprendizaje, entendiendo que estas inciden en el rendimiento, atención, creatividad, memoria y pensamiento.

“Sin emoción no hay aprendizaje, porque es la base del aprender y es crucial darle espacio a esta temática”, aseguró la también autora y oradora. “Pudimos nutrirnos a partir de los saberes de cada uno, disfrutamos y se creó un hermoso debate”, concluyó Rotger sobre la jornada.

¿Y por casa cómo andamos?

Finalmente, la última propuesta que se llevó a cabo tuvo lugar el 9 de mayo y fue presentada por el licenciado en Psicología Misael Moreno Frías, coordinador del Programa Provincial de Prevención del Suicidio. Asistió a la institución junto a Jorge Daniel Díaz, quien anteriormente había participado en las charlas para estudiantes. En esta ocasión, se destinó el conversatorio a las familias.

“Los padres son con quienes más tiempo pasan los chicos y también son quienes más influyen en sus decisiones. Entonces consideramos que es muy importante trabajar habilidades para acompañar la crianza y, a la vez, facilitar un espacio de interacción que es fundamental”, señaló Frías sobre tal actividad.

Asimismo, indicó que el propósito de la misma fue prevenir. “La problemática en cuanto a regulación de emociones es más común de lo que imaginamos y se trata de abordar antes de que cualquier obstáculo se vuelva algo grave”, sostuvo. Y siguió: “Apuntamos a la calidad de vida”.