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El monte se cuida en comunidad
La Brigada Forestal Comunitaria
Chiviquín nació en 2020 tras los incendios que arrasaron más de 300 hectáreas en Los Quebrachitos. Ante este panorama, vecinos y vecinas decidieron organizarse y capacitarse para proteger al monte de nuevas amenazas.
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Unquillo
Los incendios forestales que asolaron el monte cordobés en septiembre de 2020 quedaron marcados a fuego en la memoria de la comunidad serrana. En Unquillo, los vecinos subían cansados al cerro en su afán por combatir las llamas, en jean, sin casco ni equipo de protección o soporte de ningún tipo.
Cuando la situación pudo controlarse, tras muchos días de intensa lucha, los vecinos y vecinas se reunieron en la plaza para acordar en conjunto qué acciones podían tomar ante una nueva situación de riesgo. Así nace la Brigada Forestal Comunitaria Chiviquín, un grupo de personas que comenzó a capacitarse y organizarse para combatir el fuego.
de organización: en invierno, cuando el material combustible se seca y hay menos humedad en el ambiente, se preparan y están listos para salir ante cualquier situación que se presente en el sistema de alerta propio de la brigada. Durante la época de lluvia y más humedad, los combatientes pueden aflojar la guardia y enfocarse en entrenamientos y capacitaciones.
“Uno de los grandes logros de la brigada es el efecto que ha tenido en la comunidad. Sentir cómo la gente nos apoya, cómo nos conocen y la interacción que se genera, es hermoso” cuando intervienen en lo forestal, pero se entiende que es algo específico. Nosotros no vamos a apagar un incendio en una casa o a hacer un rescate vehicular en caso de accidente.
En diálogo con El Milenio, dos integrantes de la Chiviquín, Inti Naparstek y Augusto Elmiger, hablaron sobre las particularidades del funcionamiento de la brigada, cuál es su alcance y las tareas a las que se enfrentan.
El Milenio: ¿Cuál es la diferencia entre un bombero y un brigadista?
Augusto Elmiger: Nuestra prioridad es siempre cuidar nuestro territorio, que los fuegos no se vengan a nuestra reserva.
EM: ¿Qué le recomendarían a la comunidad en caso de un incendio?
IN: Si ven una columna de humo en las sierras, en la dirección que sea, primero siempre se da aviso a bomberos. Es muy importante que cuenten dónde están ubicados y hacia dónde lo están viendo. Pueden mandar, si saben, los puntos cardinales, alguna referencia geográfica o visual, la ubicación desde el ce- lular, una descripción de la columna, el color del humo: si es negro, blanco, mucho o poco, etc. Todos son datos útiles. Entonces, dan el aviso a bomberos y dan el aviso también a cualquier integrante de la brigada para que estemos al tanto.
EM: ¿Cuál consideran que es el mayor logro de la Chiviquín en estos dos años?
AE: Uno de los logros más destacables me parece que es el grado de profesionalismo que llegó a tener la brigada. Nos ha tocado ir a capacitaciones del Plan Nacional de Manejo del Fuego y esa misma gente reconoció el nivel que tienen las brigadas de Sierras Chicas.
Para mí fue un objetivo cumplido, que un tipo que trabaja hace 20 años en esto, con todos los recursos del Estado, nos
La brigada por dentro
Aunque su sueño es nunca más apagar un incendio, el objetivo principal de la brigada consiste en proteger al bosque nativo de las llamas. Hoy, ese propósito reúne a unas 40 personas, quienes no solo trabajan en el combate de incendios sino también en el post fuego y en la prevención.
Así, las tareas de la brigada son amplias y por eso se manejan con un esquema anual
Inti Naparstek: Un bombero atiende muchísimas tareas, incluyendo incendios en viviendas, incendios estructurales y rescates. Su objetivo es cuidar y preservar las vidas humanas, los bienes materiales y, después de eso, la vida forestal y el bosque.
En cambio el brigadista forestal tiene por tarea única y específica la de combatir incendios forestales, o sea en el monte, para preservar el ecosistema. Esa es su misión principal y estamos capacitados estrictamente para eso. En algunos casos trabajamos y contribuimos mutuamente con bomberos
Chiviquín tiene un sistema de trabajo horizontal, con asambleas donde se escuchan las propuestas y observaciones que previamente se debatieron dentro de cada comisión de trabajo/área. Por lo general, estos encuentros se hacen en el Centro Vecinal de Cabana, en la Casita Verde de barrio Alto Alegre o en la vivienda de algún integrante.
Uno de los requisitos para formar parte de la brigada, es participar activa y regularmente en estos espacios. Esto permite fortalecer la confianza entre brigadistas, ya que, al momento de ir a combatir un incendio, una situación de alto riesgo y estrés, es necesario que todos se conozcan muy bien. Además, es fundamental que cada miembro realice las distintas capacitaciones.
Algunas de las áreas dentro de la brigada de ese reconocimiento, me hizo dar cuenta que veníamos por buen camino con lo que estábamos haciendo. son Prensa y Comunicación, Combatientes, Administración, Logística, Finanzas, Equipamiento, Relevamiento, Planificación, Operaciones, Género y Vincularidad, Alerta, entre otras.
IN: En lo personal, creo que el mayor logro ha sido todo el hábitat natural que tenemos, en el que viven un montón de especies, y que hemos evitado que se siga prendiendo fuego. En Córdoba queda menos de un 3% de monte nativo y nosotros hemos trabajado en muchos focos, evitando que se siga quemando lo poco que queda y que se degrade aún más esa zona que nos da agua y oxígeno. También el grupo humano que generó la brigada y el efecto que hizo en la comunidad es un gran logro. Sentir cómo nos apoya la gente, cómo nos conocen y la interacción que se genera es hermoso.
Aunque mantienen contacto estrecho con distintas instituciones de la comunidad, desde la brigada destacaron la invisibilización por parte del gobierno provincial, ya que el Plan Provincial de Manejo del Fuego no contempla a las brigadas. En la actualidad, el grupo se sostiene económicamente a través de donaciones monetarias anónimas, para preservar la autonomía de la brigada, con donaciones materiales que hacen las personas cada vez que ocurre un incendio y con actividades como venta de locro y empanadas, rifas y festivales.