1240 El Observador de la actualidad

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14 de abril de 2019

AÑO 24

EDITORIAL

ACTUALIDAD

EL PRIMER OBISPO QUE SIGUE LOS PASOS DE SAN JUNÍPERO SERRA

SOBRE PUENTES Y MUROS EL OBSERVADOR DE LA ACTUALIDAD

P. 3

No. 1240

PERIODISMO CATÓLICO; FE QUE SE HACE CULTURA

POR CHUCHO PICÓN

P. 7

$13.00

ENTREVISTA

RADIOGRAFÍA DE UN SACERDOTE QUE DA RAZONES DE LA FE

POR RUBICELA MUÑIZ

P. 11

DE CAMINO

El poder y la gloria

IMAGEN DE JOSÉ MANUEL DE LAÁ EN PIXABAY

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TIEMPO DE SILENCIO TEMA DE LA SEMANA

Págs. 2-6

Jaime Septién

s difícil, muy difícil, que el cristianismo «esté de moda». De hecho, nunca ha estado «de moda». Una fe que contradice las ilusiones del yo-mí-me-conmigo, nunca será popular. El poder de Jesucristo es la cruz, y su gloria el servicio a los demás. Eso no es lo que venden los poderosos, como sinónimo de felicidad. La sonrisa boba de los que anuncian coches en la tele lo dice todo: ahí no hay más que cáscara. O cascarón. Nuestro país necesita con urgencia recuperar la fe en Cristo. Nos estamos hundiendo en el fango de la división. Nos metimos en un laberinto de egoísmos políticos, sociales, familiares, laborales, y dejamos a un lado el único camino que lleva a la felicidad: el amor a Dios y el amor al prójimo. No es un sermón: es la realidad. Acabamos de pasar el primer trimestre más cruento de la historia de México. Los asesinatos, los asaltos, los secuestros, las violaciones, los robos con violencia se multiplican en todos los rincones de la Patria. Lejos, muy lejos están los valores, el bien común, el respeto, el civismo, la dignidad del otro. Hoy que ocho de cada diez mexicanos tienen miedo de salir a la calle, la fuerza de la Pasión de Jesús debe renovarnos. Su poder es la entrega absoluta. Su gloria es el perdón.


TEMA DE LA SEMANA

TIEMPO DE SILENCIO 14 de abril de 2019 / AÑO 24, No. 1240

EL OBSERVADOR DE LA ACTUALIDAD/PÁGINA 2

DESPRECIADO Y RECHAZADO POR LOS HOMBRES, ABRUMADO DE DOLORES

(IS 52, 3)

«Pero Él soportaba nuestros sufrimientos y cargaba con nuestras dolencias... Él fue traspasadopor nuestras rebeldías y triturado por nuestras iniquidades» (Is 53 , 4)

Miré, y no había quien Me socorriera; Me sorprendí de que nadie Me sostuviera

De acuerdo con los muchos estudios forenses, especialmente los basados en la Sábana Santa o Síndone, éstas son sólo algunas de las muchas cosas que padeció Nuestro Señor Jesucristo:

(Is 63, 5).

Le faltan partes de la barba porque aún en vida le fueron arrancados trozos de manera intencional. Su rostro recibió múltiples contusiones. En especial hay una muy significativa en la mejilla derecha, y su tabique nasal fue desviado a causa de un golpe. Todo su cuerpo,, tanto en la parte frontal como dorsal, tiene múltiples heridas a causa de la flagelación recibida mediante látigos de tres correas rematados con terminaciones de plomo que rasgaban la carne. El número de azotes fue de quizá unos 120 (en la Sábana Santa no se han podido contar los de gran parte de los brazos), y como cada azote causaba una triple herida, los azotes le causaron más de 300 heridas. Las laceraciones en su cabeza no eran de una corona de espinas con forma de aro, sino más bien de una corona con forma de casco. Presenta más de 50 heridas punzantes a causa de las espinas. Sus rodillas sufrieron profundas excoriaciones hasta la rótula, debido a que cayó en varias ocasiones en el camino al monte Calvario. Su hombro derecho quedó desollado a causa de haber tenido que cargar con su cruz.

PARA NO OLVIDAR Nada del sacrificio de Jesús, ni siquiera el más pequeño detalle, fue algo imprevisto.

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2 Cristo aceptó ser maltratado para que tú no lo seas eternamente por los demonios y el fuego en el Infierno. 3 San Alberto Magno supo por revelación que el simple recuerdo o la meditación de la Pasión de Jesucristo es más meritorio para el cristiano que ayunar durante todo un año a pan y agua todos los viernes. 4 Jesús pidió a través de santa Faustina que cada uno de nosotros se sumerja a diario [no solo en Cuaresma o Semana Santa] en la contemplación de su Pasión a las 3 de la tarde, aunque sólo sea por un momento. 5

Y a santa Gertrudis le reveló: «Aunque un alma carezca de fervor, sin embargo la miraré con mucho amor si a veces medita en mi Pasión».

Los tres clavos que perforaron su manos y sus pies para unirlo a la cruz tenían unos 16 centímetros de largo y eran muy gruesos.

6 A Luisa Picarreta le dijo el Señor: «Quien está siempre rumiando mi Pasión, y siente dolor y Me compadece, Me agrada tanto que Me siento como retribuido por todo lo que sufrí en el curso de mi Pasión».

Jesús estuvo sometido a una fuerte deshidratación y fiebre alta durante su Pasión. Puesto que, al clavarle la lanza, de su Corazón traspasado salió sangre y agua, significa que finalmente todas las torturas que padeció le causaron cardiaca haciéndole edema pulmonar y una insuficiencia cardiaca, morir de asfixia.

7 En estos días de Semana Santa, mientras Cristo está en los tormentos de la Cruz para merecerte la salvación, tú, pecador, no te vayas de vacaciones a divertirte. Ve al templo a ver y a escuchar lo que en tu lugar está padeciendo Cristo. ¡Sé agradecido con tu Salvador! ¡Actúa como verdadero cristiano!


TEMA DE LA SEMANA

EDITORIAL

TIEMPO DE SILENCIO 14 de abril de 2019 / AÑO 24, No. 1240

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Jesús en agonía hasta el fin del mundo

Sobre puentes y muros

«Nosotros, por nuestra naturaleza, no teníamos posibilidad de vivir; ni Él, por la suya, posibilidad de morir. Él hizo, pues, con nosotros este admirable intercambio: tomó de nuestra naturaleza la condición mortal y nos dio de la suya la posibilidad de vivir».

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l pasado domingo 7 de abril, un migrante cubano –Denis Hernández—se «crucificó» por tres horas frente a la estación migratoria Siglo XXI de Tapachula (Chiapas). Protestaba, entre otras cosas, por las deportaciones que está haciendo el Instituto Nacional de Migración a cubanos, haitianos, africanos, que han saturado la frontera sur de México. Como sucede con muchos centroamericanos en la frontera con Estados Unidos, las deportaciones por ser «ilegales» (en todo caso indocumentados) lo único que hacen es darles un pasaporte hacia la realidad terrible de la que venían huyendo. En gran cantidad de casos, es un pasaporte hacia la muerte. Entendemos que la migración es un fenómeno de muchas aristas. Un tema complejo para ser despachado con fórmulas simplistas. Pero el mandato de la Iglesia (la Sagrada Familia fue migrante), y la prédica del Papa Francisco, es que los cristianos construyamos puentes, nunca muros. En una entrevista reciente, el Pontífice aseguraba que el que construye muros en lugar de puentes termina quedándose solo, «como un hongo». La primera condición que debemos ver con los migrantes, sobre todo si vienen en familia, es su condición humana. Son hermanos nuestros que no han tenido –ni remotamente— las oportunidades que hemos tenido nosotros. Son víctimas de la injusticia. Nuestro desprecio los convierte en doblemente víctimas. La solución, en nuestra región y en todo el mundo, pasa por una nueva redistribución de la riqueza. Estados Unidos y México, por ejemplo, podrían apoyar planes de reconstrucción del tejido social y de la economía devastada en Centroamérica. En lugar de multiplicar policías o construir «hermosos y grandes muros», el cambio podría empezar por construir «hermosos y grandes puentes» de hermandad. Nunca las palabras de Jesús son tan imperativas: «denles ustedes de comer», que pueden traducirse en «denles ustedes el refugio». El Observador de la Actualidad

SAN AGUSTÍN

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Blas Pascal, el famoso físico matemático francés, también le apasionaba la teología, y andando en ello llegó a esta acertada conclusión: «Jesús estará en agonía hasta el fin del mundo: no hay que dormir durante este tiempo». Las Sagradas Escrituras enseñan que «nosotros formamos un solo Cuerpo en Cristo» (Rm 12. 5); que en ese Cuerpo «Cristo es la Cabeza» (Ef 5, 23), y que cuando en un cuerpo «un miembro sufre, todos los demás sufren con él» (I Co 12, 26). Y como los sufrimientos de los miembros de la Iglesia han de continuar hasta el final de los tiempos, Cristo padece y seguirá padeciendo al ver padecer a los suyos. Aún más, dice la Palabra de Dios que «Jesucristo es el mismo ayer y hoy, y lo será para siempre» (Hb 13, 8). Por eso mismo el sacerdocio de Cristo y su sacrificio en la cruz no caduca, sino que cubre a todas las generaciones encerradas en el tiempo y en el espacio. En palabras de José Antonio Munilla, obispo de San Sebastián (España), «el sacerdocio de Cristo en el Cielo consiste en ‘eternizar’, en prolongar por toda la eternidad aquel sacrificio que hizo en la cruz como ofrecimiento al Padre». De este modo, como escribió santa Faustina Kowalska, «la dolorosa Pasión del Hijo de Dios es un continuo aplacamiento de la ira de Dios». Por ello es un error considerar que como, dentro de la línea del tiempo, la Pa-

sión de Jesús ocurrió hace unos dos mil años, ya es cosa del pasado, que la Semana Santa es apenas un recuerdo anual de aquellos acontecimientos, que la obra redentora está terminada y que entonces todos nos vamos a salvar. Hay que aclarar que cada uno de los bautizados debe completar en su carne «lo que falta a los sufrimientos de Cristo» (Col 1, 24), no porque su Pasión fuera insuficiente, sino porque, como miembros del Cuerpo de Cristo que son, todos han de compartir el sufrimiento de los demás miembros. Además, que la redención no puede tener pleno efecto si no es aceptada y comprendida por el hombre. En la Iglesia primitiva así lo explicó san Juan Crisóstomo:

«Para todo hombre, el comienzo de la Vida es aquel en que Cristo se inmola por él. Pero Cristo se inmola por él en el momento en que él reconoce esa gracia y toma conciencia de la Vida que le otorga esa inmolación». Y si en el mundo de hoy no hay verdadero interés en esa Vida que Cristo ofrece es porque tampoco hay interés en su Pasión, en meditarla y en acompañar a Jesús que se inmola por cada uno. La Iglesia de Cristo, al haber ins-

tituido la Semana Santa, ofrece la oportunidad de que los bautizados, por lo menos una vez al año —si bien sería bueno que ocurriera los 365 días— mediten en la Pasión, reconozcan que son personalmente los culpables de ella, y acompañen a Cristo en su sufrimiento. Dijo Jesucristo a santa Faustina, y en ella a todos los hombres: «Una hora de meditación de mi dolorosa Pasión tiene mayor mérito que un año entero de flagelaciones a sangre; la meditación de mis dolorosas Llagas es de gran provecho para ti, y a Mí Me da una gran alegría». Hoy la gente cree no tener pecado —por eso ya casi nadie acude al sacramento de la Confesión— . Precisamente advertía Pío XII desde 1946 que «el pecado del siglo es la pérdida del sentido del pecado»; y si la situación de entonces ya era dramática, la de este momento es muchísimo peor. Cristo sufre por tanta frialdad e indiferencia hacia Él; y es constantemente traspasado por las lanzas, las espinas y los clavos de nuestros pecados. Y también la Santísima Virgen sufre con todo esto; pero el dolor más grande de ambos es ver cómo la humanidad, al despreciar la preciosa Sangre de Cristo, al mismo tiempo desprecia la salvación eterna. La Semana Santa no es tiempo de vacaciones, tampoco una semana como cualquier otra. Ojalá esta vez sea vivida santamente. D. R. G. B.


tema de la semana

... JESUCRISTO TUVO UNA GRAN LLAGA EN EL HOMBRO POR CARGAR LA CRUZ?

TIEMPO DE SILENCIO 14 de abril de 2019 / AÑO 24, No. 1240

¿Es verdad que...

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a Biblia no menciona nada de eso, pero lo que sí dice es que no todo lo que hizo o vivió Jesús quedó recogido por escrito (cfr. Jn 21, 25). Lo que sí dicen los evangelios es que Jesús cargó con su cruz, es decir, que arrastro su cruz completa hasta el Gólgota, y no sólo el palo transversal llamado «patibulum», que era lo que usualmente solían cargar los condenados a la crucifixión.

San Bernardo de Claraval le preguntó a Cristo cuál fue su dolor en la Pasión más desconocido por los hombres. Jesús le respondió: «Yo tenía una herida en mi hombro, mientras soportaba mi Cruz en el Camino de los Dolores. Una herida grave que era más dolorosa que las demás y que no es registrada por los hombres. Honra a esta herida con tu devoción y te concederé las gracias que pidas a través de su virtud y mérito. Y en lo que respecta a todos los que veneren esta herida, voy a remitir todos sus pecados veniales y ya no Me acordaré de sus pecados mortales». La beata Ana Catalina Emmerich tuvo esta visión del cuerpo de Nuestro Señor Jesucristo cuando fue limpiado para su sepultura: «Había una herida terrible en el hombro que había llevado el peso de la Cruz». Igualmente Karol Wojtyla, futuro san Juan Pablo II, le preguntó al padre Pío cuál de sus heridas de los estigmas le hacía sufrir más, y el fraile capuchino contestó: «Es mi herida en el hombro, que nadie conoce y nunca se ha curado o tratado». El hermano Modestino Fucci, portero del monasterio de San Givanni Rotondo, quien había convivido con el padre Pío, fue comisionado el 4 de febrero de 1971 para hacer un inventario de todos los elementos en la celda del ya fallecido fraile de los estigmas, y encontró que una de sus camisetas tenía una mancha de sangre en forma de círculo en la zona del hombro derecho.

... UNA MUJER LLAMADA VERÓNICA limpió EL ROSTRO DE JESÚS?

... simón de cirene, que ayudó con la cruz, ERA JUDÍO?

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o hay consenso al respecto. Dice el Evangelio que «como pasaba por allí Simón de Cirene, padre de Alejandro y de Rufo, que regresaba del campo, lo obligaron a llevar la Cruz de Jesús» (Mc 15, 21). Y algunos creen que, aunque nacido en Cirene, ciudad del norte de África, era judío porque ahí vivía una numerosa comunidad de la diáspora judía. En la película «La Pasión», dirigida por Mel Gibson, Simón de Cirene aparece llevando en la cabeza un kippá o gorro judío que cubre la coronilla. Pero lo que le fue mostrado a la beata Ana Catalina Emmerick no concuerda con la versión del cireneo judío: «Jesús, al pasar sobre una piedra gruesa, tropezó y cayó; (...) los fariseos dijeron a los soldados: ‘No podremos llevarlo vivo, si no buscáis un hombre que le ayude a llevar la cruz’.

Vieron a poca distancia un pagano, llamado Simón Cirineo, acompañado de sus tres hijos, que llevaba debajo del brazo un haz de ramas menudas, pues era jardinero y venía de trabajar en los jardines situados cerca de la muralla oriental de la ciudad. Estaba en medio de la multitud, de donde no podía salir, y los soldados, habiendo reconocido por su traje que era un pagano y un obrero de clase inferior, le tomaron y le mandaron que ayudara al Galileo a llevar su cruz. (...) Simón era un hombre robusto, de cuarenta años; sus hijos (...) dos eran ya crecidos, se llamaban Rucio y Alejando; se reunieron después a los discípulos de Jesús. Al tercero (...) lo he visto con san Esteban».

e nuevo la Biblia no menciona ese episodio ya que no todo quedó por escrito. Sin embargo, la Iglesia, a causa de la Tradición (con mayúscula, es decir, la Revelación divina que no quedó por escrito) siempre ha sabido que una mujer le presentó al Señor un lienzo para que limpiara su rostro, y también que los rasgos de Jesús quedaron impresos en éste. Verónica no era su nombre, sino más bien fue el apodo que se le dio, ya que deriva del latín vera icon, que significa «verdadero icono» refiriéndose a que lo que quedó estampado en el lienzo que ella le ofreció a Jesucristo es verdadera imagen o retrato del Señor. De acuerdo con las visiones que le fueron concedidas a la beata estigmatizada Ana Catalina Emmerick, el nombre verdadero de esta mujer era Serafia, y era esposa de Sirac, un miembro del Consejo del Templo: «Serafia había preparado en su casa un excelente vino aromatizado, con la piadosa intención de dárselo a beber al Señor para refrescarlo en su doloroso camino al Calvario (...). Iba envuelta en un largo velo y llevaba de la mano a una niña de nueve años que había adoptado; del otro brazo, llevaba colgando un lienzo, bajo el que la niña escondió una jarrita de vino (...). La mujer se abrió paso a través de la multitud de soldados y esbirros, y llegó hasta Jesús, se arrodilló a su lado y le ofreció el lienzo, diciéndole: ‘Permite que limpie la cara de mi Señor’. Jesús cogió el paño con su mano izquierda, enjugó con él su cara ensangrentada y se lo devolvió, dándole las gracias. (...) La niña tendió tímidamente la jarrita de vino hacia Jesús, pero los soldados no permitieron que bebiera (...). Los fariseos y los alguaciles, irritados por esta parada y, sobre todo, por este testimonio público de veneración que se había rendido a Jesús, pegaron y maltrataron a Nuestro Señor, mientras Verónica entraba corriendo en su casa. «En cuanto estuvo dentro, extendió el lienzo sobre la mesa que tenía delante y cayó de rodillas casi sin conocimiento (...): la cara ensangrentada de Jesús estaba estampada en el lienzo en todos sus detalles».


tema de la semana

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... JESÚS MURIÓ justo A LAS tres DE LA TARDE?

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odas las civilizaciones desde las más antiguas, en todos los continentes, han medido el tiempo. La primera base de la medición fue la separación entre el día y la noche. Jesús dijo: «¿Acaso no son doce la horas del día?» (Jn 11, 9). Había, pues, doce horas para medir el día y doce horas para la noche, siguiendo la propuesta babilónica-sumeria, cosa que empleaban griegos, romanos y judíos, entre otros muchos pueblos. Y consideraban que el día comenzaba en lo que hoy son las 6 de la mañana, y esa era su hora primera; por tanto, lo que hoy se llama las 12 del mediodía era la hora sexta, y las actuales 3 de la tarde correspondían a su hora nona, es decir, hora novena. Dice el Evangelio: «Llegada la hora sexta, hubo oscuridad sobre toda la Tierra hasta la hora nona. A la hora nona gritó Jesús con fuerte voz: ‘Eloí, Eloí, lamá sabactani’, que significa: ‘Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?’ (...). Entonces Jesús, dando un fuerte grito, expiró» (Marcos 15, 33-37; cfr. Mt 27, 45-50).

Se conoce entonces en qué hora Jesucristo murió, pero no en qué minuto o segundo de dicha hora. Los minutos y segundos no pudieron ser considerados por la gente en general sino hasta que surgieron los primeros relojes mecánicos al final del siglo XVI después de Cristo, aunque sí había aproximaciones de los cuartos de hora y las medias horas. En resumen, no es posible asegurar que Cristo murió a las 3:00 de la tarde en punto, pero sí que murió en un momento dentro de la hora nona. Según la beata Ana Catalina Emmerick, «era un poco más de las tres cuando Jesús dio el ultimo suspiro».

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... se registró un sismo al momento de la muerte de jesucristo?

o atestigua la Biblia: «Entonces Jesús, clamando otra vez con voz potente, entregó su espíritu. Inmediatamente, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo, la tierra tembló, las rocas se partieron» (Mt 27, 50-51). Estudios recientes de los sedimentos del Mar Muerto —a 13 millas de Jerusalén, lugar de la Pasión de Cristo—, encabezados por los geólogos Jeffeson Williams, del Supersonic Geophysical, y Markus Schwab y Achim Brauer, del Centro de Investigación de Geociencias de Alemania, concluyen que hubo un terremoto en esa zona hace casi dos milenios. Consideran que es probablemente que esa gran sacudida haya tenido lugar el viernes 3 de abril del año 33 después de Cristo. Aunque no pueden asegurar la fecha exacta, lo que

sí saben con certeza es que el sismo ocurrió en un momento coincidente con el tiempo del sacrificio de Jesucristo en la Cruz, que históricamente se sabe que fue entre el año 26 y el 36 después de Cristo, puesto que es el período en que Poncio Pilatos fue procurador de Judea. La beata Ana Catalina Emmerick relata que «cuando el Señor murió, la tierra tembló, el peñasco se abrió entre la cruz de Jesús y la del mal ladrón»; «las dos grandes columnas situadas a la entrada del santuario en el templo... se separaron la una de la otra; el techo que sostenían se hundió... y el santuario se quedó abierto a todos los ojos»; «cerca del palacio de Pilatos, la piedra se partió en el sitio donde Jesús fue presentado al pueblo... En muchas partes las murallas de la ciudad se derribaron».

«En Galilea... muchos edificios, sobre todo las casas de los fariseos que habían perseguido al Salvador..., se hundieron sobre sus mujeres y sus hijos. Hubo muchos desastres en las inmediaciones del lago de Genesaret. Muchos edificios se desplomaron en Cafarnaum... El lago inundó el valle, y llegó hasta Cafarnaum, que está a media legua. La casa de Pedro y la habitación de la Virgen, situadas al salir del pueblo, quedaron intactas. El lago estuvo muy agitado; ... su configuración se mudó totalmente, con semejanza a la que hoy tiene». También hubo daños en Gergesa, en Gerasa y en todo el distrito de Corazaín. En la Decápolis, ciudades enteras se hundieron. En Asia muchos sitios sufrieron bastante, sobre todo al Este y al Noroeste de Paneas.

Deudores ante Dios Consideramos hoy la petición del Padre nuestro, que dice: “Perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden”. En toda oración del cristiano se contiene una petición de perdón a Dios, ya que por muy santa que sea nuestra vida siempre somos deudores ante Dios. Por eso la soberbia es la actitud más negativa en la vida cristiana. Se arraiga en el corazón sin que muchas veces nos demos cuenta, e incluso afecta a las personas que llevan una intensa vida religiosa. Nos hace creer que somos mejores que los demás, casi semejantes a Dios, amenazando así con romper la fraternidad. En definitiva, somos deudores porque todo lo hemos recibido: la existencia, los padres, la amistad, la belleza de la creación… En nuestra vida personal se refleja también como un mysterium

lunae, es decir: un misterio de la luna. Al igual que la luna no brilla con luz propia sino que refleja la luz del sol, también nosotros reflejamos una luz que no es nuestra, sino que la hemos recibido. De esta manera, si amamos es porque hemos sido amados; si perdonamos es porque antes hemos sido perdonados. Y en esta cadena de amor que nos precede reconocemos la presencia providente de Dios que nos ama. Ninguno ama a Dios tanto como Él nos ha amado a nosotros. Basta que miremos a Cristo en la cruz para descubrir la desproporción entre su amor y el nuestro.

Palabras del Papa Francisco en la Audiencia general del miércoles 10 de abril de 2019


tema de la semana

SENTENCIADO A MUERTE Jesús sentenciado a muerte. No bastan sudor, desvelo, cáliz, corona, flagelo, todo un pueblo a escarnecerte. Condenan tu cuerpo inerte, manso Jesús de mi olvido, a que, abierto y exprimido, derrame toda su esencia. Y a tan cobarde sentencia prestas en silencio oído. Y soy yo mismo quien dicto esa sentencia villana. De mis propios labios mana ese negro veredicto. Yo me declaro convicto. Yo te negué con Simón. Te vendí y te hice traición, con Pilatos y con Judas. Y aún mis culpas desanudas y me brindas el perdón.

Gerardo Diego

YO SERÉ TU CIRINEO Yo seré tu cirineo; Tú, Jesús, serás el mío. Eres de mi mismo barro, Dios sudoroso y herido. Te faltan muchas caídas para llegar al patíbulo. Tu vida puede quebrarse a la mitad del camino, y si mueres a deshora nos dejas sin crucifijo, sin testamento, sin Madre, sin el Refugio Divino de tu Corazón, abierto por la lanza de Longinos... Tienes que llegar al ara muerto de dolor.., y vivo. Si Te abruma mucho el peso de tu amor y mis delitos, yo seré tu cirineo... ¡Vayamos al Sacrificio!

Fray Asinello (fragmento)

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Poemas para vivir con Jesús y María la Pasión

la CRUZ PESA LO MISMO QUE EL PECADO La Cruz pesa lo mismo que el pecado y Dios cae de amor bajo su peso; la Cruz era mi historia, yo declaro, y Dios cae vencido por mi cuerpo. Jesús cae a la tierra —¡te adoramos! —, su santo rostro toca nuestro suelo; los labios que besaron nuestros pies al polvo que pisamos dan un beso. Mas tanto de humildad y tierra sabe quien tuvo en un portal su nacimiento, que ahora Dios caído, Dios por tierra, está donde eligió tener su puesto. ¡Oh Cristo, Creador de cielo y tierra!, no olvides los prodigios de tus dedos; si es polvo el corazón y el hombre barro, de barro son también tus ojos bellos.

DE LUTO SE CUBRE EL CIELO ¿Quién es aquel Caballero herido por tantas partes, que está de expirar tan cerca, y no le socorre nadie? «Jesús Nazareno» dice aquel rétulo notable. ¡Ay Dios, que tan dulce nombre no promete muerte infame! Después del nombre y la patria, Rey dice más adelante; pues si es rey, ¿cuándo de espinas han usado coronarse? Dos cetros tiene en las manos, mas nunca he visto que claven a los reyes en los cetros

ERES CORREDENTORA Tú compartes, María, el sufrimiento, el pesar de sentirse abandonado, el vacío de inmensa soledad, la aridez del sendero del calvario. El mismo clavo rasga vuestros pulsos con el mazo ofensivo del pecado; es réplica al abrazo de piedad abierto para ser crucificados. Tú compartes, María, el sufrimiento. Tu albedrío inmolado, tu indulgente y virginal entrega, tu abnegada valentía, son tu pasión y muerte.

Emma-Margarita R. A.-Valdés (fragmento)

los vasallos desleales. Unos dicen que si es Rey, de la cruz descienda y baje; y otros, que salvando a muchos, a sí no puede salvarse. De luto se cubre el cielo, y el sol de sangriento esmalte, o padece Dios, o el mundo se disuelve y se deshace. Al pie de la cruz, María está en dolor constante, mirando al Sol que se pone entre arreboles de sangre...

¡Oh Cristo, oh hermosura que no acaba!, que donde tocas creas lo perfecto: tocaste nuestra tierra y nuestro polvo: convierta en paz y gloria nuestros yerros. ¡Bendito Tú, Jesús, mi Dios caído, el Dios de mi verdad y mis consuelos, bendito Tú, belleza que nos sacia, bendito Tú, perenne, vivo, eterno!

Pbro. Rufino María Grández, ofm

Lope de Vega

yo te lo devuelvo muerto Niña que llevas al pecho siete puñales clavados, Madre que vas a sembrar a Dios bajo los granados: ya vienen los sembradores, con la semilla, llorando; ya traen el cuerpo de Cristo blanco sobre el lino blanco. ¡Señora, yo no quisiera ni mirarte, ni mirarlo! Tú me lo entregaste niño como manojo de nardos; yo te lo devuelvo muerto como racimo pisado.

Fray Asinello (fragmento)


en

El Observador

PÁGINA 7 EL OBSERVADOR DE LA ACTUALIDAD

24 14 de de febrero abril de 2019 / AÑO 24, No. 1233 1240

El Papa Francisco aprueba

consagración a la Virgen del Silencio El fraile Antenucci narra detalles de su audiencia privada con el Pontífice sobre un gran proyecto sobre el icono mariano

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l Papa Francisco aprobó la consagración a la Virgen del Silencio, una de las devociones del Sucesor de Pedro, confirmó a Aleteia fray Emiliano Antenucci tras una audiencia privada de 40 minutos que tuvo lugar en el palacio apostólico el 22 de marzo de 2019. «Es bellísima», sostuvo el Papa, según el religioso. El fraile de «campo» como se considera el mismo, no esperaba ser recibido en el lugar donde el Papa acoge a presidentes, embajadores de los estados que tienen relaciones con la Santa Sede y líderes mundiales. Pensaba que el Papa lo recibiría en Santa Marta. En cambio, se trató de una audiencia privada dedicada al religioso capuchino que puede considerarse «embajador» de una de las devociones marianas más queridas por Francisco, incluida la desata los Nudos (Nuestra Señora Knotenlöserin), devoción llevada de Augsburg a Buenos Aires. «Hay un grande proyecto alrededor de la Virgen del Silencio en el futuro…pero por ahora mantenemos silencio», dijo con simpatía el fraile sin dar mayores detalles y quien sostuvo haber recibido una bendición por parte del Pontífice imponiendo sus manos sobre su cabeza estando de rodillas para que el Espíritu Santo lo acompañara y prosiguiera su misión contrapuesta a la dictadura del ruido. «Yo le conté mi historia y mi devoción a la Virgen del Silencio y él me dijo: aquí está precisamente la mano de Dios y me repitió varias veces: ¡sigue adelante!», contó en referencia a la manera providencial en que llegó una copia del icono hasta las manos del Pontífice a través de un colaborador muy cercano. El original del icono de la Virgen del Silencio fue encargado por Fray Antenucci en 2010,

POR ARY WALDIR RAMOS DÍAZ y realizado, tras aproximadamente 9 meses de trabajo, por las monjas benedictinas de San Giulio d’Orta, en la provincia italiana de Novara. Asimismo, aclaró que él no le regaló la copia de la imagen al Papa y deduce que fue la Providencia la que abrió los caminos, al contrario de lo que había escrito un periódico italiano: «fraile del silencio regaló cuadro al Papa Francisco».

gen del Silencio y ha puesto su autógrafo, pues está conmovido por su significado que invita al «silencio interior», que queda latente en el aviso que él ha dispuesto poner detrás del icono original: «No hablar mal de los otros», algo que «destruye las comunidades cristianas y la sociedad», comentó Antenucci. «El silencio prepara a la explosión de la alegría de la Pascua, el silencio, el vientre de la

Puntualizó que «el silencio es considerado presencia, porque muchos van en su búsqueda, sobre todo en el caso de otras religiones que hacen cursos extraños, pero para nosotros los cristianos el silencio no es un vacío», sino que se trata de «una plenitud» que se llena con la «presencia» de Dios. El silencio es un encuentro con Jesús como el que refiere San Juan de la Cruz que llena las

entrañas y la existencia, que toca el cielo, diverso al silencio que se hace con técnicas como el mindfulness que se quedan en un silencio humano e intrascendente. Efectivamente, la oración a la Virgen del Silencio contrae 12 virtudes: el silencio mismo, la escucha, la humildad, la alegría, la atención hacia los demás, la espera, el equilibrio, la docilidad, la estabilidad, la pureza, la confianza y la misericordia.

CONSAGRACIÓN A LA VIRGEN DEL SILENCIO

¿Sabe cuántos crucifijos e iconos recibe al día el Santo Padre?, preguntó para destacar la sorpresa que Francisco haya fijado sus ojos en esta especial representación de la madre de Dios. En efecto, es tal la devoción, que el Papa ha hecho colocar cerca del ascensor del Palacio Apostólico del Vaticano una copia del cuadro de la Virgen retratada al estilo bizantino y que se lleva el dedo indice de la mano derecha sobre los labios para avisar al visitante de evitar las habladuríasy los chismes antes de llegar a destino para una cita o llevar un recado. El 15 de junio de 2016, el Papa ha bendecido el icono de la Vir-

Palabra de Dios, prepara también a tener palabras que sean un regalo para los demás». «En la sociedad del ruido, el silencio representa una profecía, es la profecía del mundo futuro», apuntó. Han pasado 10 años desde que fray Antenucci escribió su primer libro sobre el tema: Il Libro della Vita (2008), primera pequeña colección de reflexiones que luego daría paso al curso sobre el silencio titulado: «Silencio, habla el silencio». El fraile recomienda iniciar el día manteniendo media hora de silencio para prepararse a las actividades cotidianas y a la escucha de la Palabra y de las personas.

Oh María, Virgen y Madre del Silencio, consagro a ti toda mi vida. Dígnate de imprimir en mi corazón el corazón de tu Hijo Jesús, muerto y resucitado por mí. Al anuncio jubiloso del ángel dijiste «Fiat», en las bodas en Caná me enseñaste a hacer todo lo que dice el Señor; bajo la cruz me diste ejemplo de unión a Jesús obediente al Padre. Virgen del Silencio, canal de gracia, dóname cada día la fuerza de una sincera conversión y de una vocación estable. María, rocío de la Belleza divina, muéstrate una obra maestra de santidad, realizada al alto precio de la sangre de Cristo. Oh, María, catedral de Silencio, haz resonar en mí esta oración: «No tengas miedo, porque tu eres mi hijo y eres amado por el Padre celestial». Santa María, salvavidas, puente entre cielo y tierra, guíame junto a los ángeles y a los santos para construir el Reino de Dios en la tierra, para que pueda vivir en la constante presencia de la Santísima Trinidad y desear para los demás y para mí la paz y la alegría sin fin de la Jerusalén celeste. Amén Fra’ Emiliano Antenucci


ACTUALIDAD

14 de abril de 2019 / AÑO 24, No. 1240

EL OBSERVADOR DE LA ACTUALIDAD

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El primer obispo que sigue los pasos de san Junípero Serra

Monseñor Faustino Armendáriz, obispo de la diócesis de Querétaro, es conocido por ser un pastor cercano al pueblo; es conocido también por ser un pastor peregrino que evangeliza con el ejemplo de caminar siempre adelante sin retroceder. El Observador pudo caminar y peregrinar a su lado, percibiendo el cansancio y la gloria de conquistar la cima; recorriendo una de las rutas del camino de san Junípero Serra acompañando y siguiendo los pasos de monseñor Faustino.

A

Por Chucho Picón

¿QUIERES VIVIR LA EXPERIENCIA?

Fotos: Chucho Picón

penas se siente el calor del día y los pobladores de la comunidad La Plazuela, municipio de Peñamiller, nos dan la bienvenida; nos dan el almuerzo sin merecerlo, nos motivan a subir por las montañas hacia la misión de Bucareli. Ahí será nuestro destino final. Por ahora empiezan los pasos entre piedras y espinas; en la vanguardia va firme y rápido el obispo de Querétaro; veloz y seguro empieza el ascenso al cerro; sus ojos y rostro se iluminan, una emoción indescriptible se refleja en monseñor Faustino.

La columna de peregrinos avanza con tropezones y dudas. Así vamos subiendo hasta el cerro de la Media Luna, que es la parte más alta de nuestro trayecto que tendremos que conquistar y brincar para poder llegar hasta la misión de Bucareli, que se encuentra del otro lado de dicho cerro. Desde ahí se puede ver parte del mundo, y parte de lo que vieron los ojos de san Junípero Serra; este gran santo hizo la brecha, hizo el camino de la fe y ahora, en pleno 2019, es la primera vez que un obispo recorre a pie los mismo pasos que san Junípero Serra. Es duro y agreste el camino, es compli-

► Ingresa a:

caminosanjuniperoserra.com y sé parte de este camino espiritual.

cado caminar y ascender. Aquí es casi un territorio virgen; aquí los pobladores nos cuentan que ni los políticos y ni los narcos suben por flojera; por pereza no llegan y por lo difícil y complicado del camino. Cuentan que en alguna ocasión algún politicó intentó subir con sus escoltas armados hasta los dientes, pero era tanto el cansancio que tuvieron que dejar las armas y los tuvieron que bajar en burros, no aguantaron. Aquí no se necesita sólo fuerza bruta y física o ser muy machotes o muy malotes; aquí se necesita fuerza espiritual para aguantar el calor intenso que te quema lentamente; se necesita fuerza espiritual para vencer las dudas que te piden regresar o quedarte tirado; se necesita esa fuerza espiritual que los

grandes santos han forjado, venciéndose a sí mismos y sus pasiones. Las tentaciones hacen lento el caminar; las tentaciones aquí son el cansancio, la desesperación de la sed; la tentación de gritar ante el dolor de los pies cuando sientes que se clava una espina o una piedra filosa en las plantas de los pies; la tentación de maldecir por haber venido, cuando te faltan pulmones y cuando no le ves fin al camino y tu destino sigue lejos, muy lejos. ¿A qué ha venido un obispo hasta aquí? ¿Por qué peregrinar? Tajante, monseñor Faustino responde que peregrina por el fin del aborto y para que Dios conceda la paz a Querétaro, a México y al mundo. Ahí está la razón de

la potencia y energía que muestra ante lo difícil del camino, él trae en su corazón sus propias intenciones. Monseñor Faustino tiene otra razón por la que ha venido hasta aquí: el ir a las periferias. Se ha tomado muy en serio el llamado y el envío del Papa Francisco. Es impresionante cómo es recibido el obispo en Carricillo y Media Luna: entre lágrimas de los pobladores, lo abrazan, le aplauden, lloran al verlo, le dan las gracias, pues éstas son comunidades olvidadas, con una casita aquí y otra casita por allá, casi unas chozas con laminas, sin agua, sin drenaje y sin luz. Casi imposible de creerlo, que su pastor esté aquí, escuchándolos, mirándolos, consolándolos, comiendo con ellos sentados en un tronco. Éste es el camino de san Junípero Serra, que motiva y enseña a evangelizar; la ruta es tan impactante por su belleza natural, y es tan impresionante la labor de un santo que hizo historia, que es impensable entender como logró hacer tanto, tantas misiones, en lo salvaje y duro del camino, sólo caminando por aquí. Así son los santos de Dios… y esta ruta nos enseña que en la vida debemos «ir siempre adelante, sin retroceder» porque hoy es la misión de Bucareli la que nos espera.


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«Zona de confort», ¿un salto desconocido? Seguramente habrás escuchado hablar de la zona de confort. Se ha puesto de moda en la literatura de autoayuda; algunas terapias escolares están trabajando en el tema. El desarrollo personal ha tocado fibras con respecto a la denominada zona de confort, ese estado mental, físico, psicológico e incluso emocional que parece no exigirle nada al ser humano Por Mary Velázquez Dorantes Twitter: @mary_dts

L

a zona de confort también es conocida como la zona de peligro donde cualquiera puede habitar; es una dinámica que no prepara al hombre moderno para su encuentro con el cambio. Algunos suelen resistirse, otros omiten hablar del asunto, muchos consideran que es un tema vano; sin embargo, la zona de confort esta afectando severamente a las nuevas generaciones, creando dependencias rutinarias que no los invitan a la flexibilidad y a la adaptabilidad de la vida misma. La metáfora de la zona de confort es el estado de «comodidad» en el que muchos suelen habitar, sin correr riegos, sin descubrir los beneficios que existen fuera de él; pero, sobre todo, los límites auto impuestos para no saborear la vida en su totalidad.

LA BURBUJA DEL AUTOENGAÑO

La zona de confort puede representar varios escenarios de la vida: relaciones personales, relaciones laborales, sueños y metas personales, estilos de vida, acceso a los alimentos. Se trata de un lugar donde la persona vive aparentemente cómoda, protegida y segura, porque al parecer todo lo que desea está cercano a ella; sin embargo, ¿qué sucede cuando aparece un desafío, un anhelo o una misión diferente a la que se está viviendo? La zona de confort muchas veces impide el desarrollo potencial de

las personas, quizás por miedo, falta de motivación o simplemente por desconocer lo que puede venir tras una decisión, la ejecución de un plan diferente o un cambio completo a lo que se hace. A este escenario lo han llamado la burbuja del autoengaño. Pareciera que le restamos importancia a los cambios, pero es evidente que todas las áreas de la vida exigen correr riesgos. Cada una de las experiencias y vivencias implica cambios significativos, y, si en algún momento la fórmula no funciona, hay que salir de dicha zona. La zona de confort engaña a los seres humanos porque los límites que se colocan hacen parecer que fueron impuestos por otros, sin reconocer que la burbuja es la que realmente pone la barrera para ejecutar acciones diferentes a la rutina de «seguridad».

UN SALTO DE PLENITUD

Quizás estés sufriendo angustia, falta de tranquilidad, monotonía, incomodidad para contigo mismo o con quienes te rodean, o tal vez sientas

que el nerviosismo y la ansiedad te cercan como monstruo perenne. Si alguna de estas afirmaciones te parece conocida, es probable que tu zona de confort te esté lastimando, o te esté robando la paz de tus días. Cuando el ser humano salta a realizar tareas diferentes, descubre que ha estado experimentando una falsa felicidad; cuando el miedo paraliza los planes o cuando la amenaza los interrumpe, la zona de confort se vuelve una pesadilla, dado que es una zona peligrosa para el desarrollo de la plenitud humana. Nos volveremos más vulnerables si continuamos rechazando salir de ella; las circunstancias se convertirán en gigantes mentales que aparecerán constantemente. Cuando el individuo desea salir de la zona de peligro da un paso gigante hacia la felicidad, porque es entonces cuando se enfrenta con sus propios medios, reconoce sus virtudes humanas, recupera la auto confianza, desata habilidades y nuevas estrategias para aquello que es completamente distinto a lo de antes.

¿CÓMO SALIR? 1

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Empieza por ti: De nada sirve querer cambiar el mundo si no comenzamos por nosotros mismos. «Comienza haciendo lo necesario, luego haz lo posible y terminarás haciendo lo imposible»: ten en cuenta este consejo de San Francisco de Asís para no desesperar ante aquellas situaciones que parecen sobrepasar tus capacidades. Lápiz y papel en mano: teniendo en cuenta lo dicho en el punto 2, programa tu semana. Esto te ayudará a ir creando un hábito. ¿Hacia qué lado se inclina tu balanza?: enfócate en todo aquello que dejarías de hacer al quedarte en tu sofá. «Utiliza en la vida los talentos que poseas: el bosque estaría muy silencioso si sólo cantasen los pájaros que mejor cantan». Henry Van Dyke. Reza. «La oración es la mejor arma que tenemos: es la llave que abre el corazón de Dios».


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a Biblia es una producción de History Channel que narra los principales episodios de las Sagradas Escrituras, desde el Génesis hasta el Apocalipsis.

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SERIES

La Biblia

La Biblia narra los episodios más significativos de las Sagradas Escrituras, incluyendo el viaje de Noé en el arca, el Éxodo, la historia de Abraham, así como el nacimiento, la muerte y la resurrección de Jesucristo. Estas historias se desarrollan a través de narraciones muy vivas e imágenes vanguardistas creadas por ordenador, de forma que ofrecen una nueva visión de las escenas bíblicas más conocidas. La producción comienza con Noé, dentro de su arca, soportando la ira de Dios tras la debilidad mostrada por Adán. Dios ha mandado a la tierra un gran diluvio para limpiar a la humanidad y ofrecer un nuevo comienzo. Años más tarde, un descendiente de Noé, Abraham, reci- be un mensaje de Dios. Le ofrece una tierra para él, pero le advierte que el camino hasta llegar a ella será arduo. Su

FICHA TÉCNICA

único descendiente, su sobrino Lot, emprende su propio camino y abandona a su tío para empezar una nueva vida en Sodoma, de donde escapará de la muerte cuando la pecadora ciudad sea destruida por Dios. Mientras, Abraham llega a la Tierra Prometida pero su pacto con Dios todavía no se ha cumplido, ya que le prometió tener una descendencia tan grande como el número de

estrellas y su esposa, Sara, es estéril. Pasado un tiempo, tres ángeles llegan con una sorprendente noticia: Sara está embarazada. En efecto, da a luz a Isaac. Ahora, Abraham tiene que decidir entre sus dos vástagos y decide echar de su casa a Ismael y Agar y abandonarlos a su suerte. Pero Dios le pide una última prueba. Terrible. Tiene que sacrificar al único hijo que le queda: Isaac.

TÍTULO ORIGINAL: The Bible PAÍS: Estados Unidos DIRECTOR: Crispin Reece, Tony Mitchell, Christopher Spencer GÉNERO: Serie de tv/Drama/ Evangelios DURACIÓN: 440 min. REPARTO: Diogo Morgado, Darwin Shaw, Paul Brightwell, Roma Downey, Greg Hicks, Sebastian Knapp, Amber Rose.

Aunque la producción data de 2013, y sólo tiene una temporada, en la actualidad puede verse a través de la plataforma Netflix.

GRANDES FRASES

“El santo es capaz de vivir con alegría... y sentido del humor” PAPA FRANCISCO


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EL PAPA A LOS JÓVENES, PASO A PASO / 1

Todo lo que toca Jesús se hace joven, se llena de vida Juventud, divino tesoro. La juventud es vista como la etapa de la vida en la que se puede hacer y disfrutar de todo. Al perderla, se añora, y al vivirla, muchas veces se banaliza. Hoy la juventud reclama atención, amor y seguridad, pero pocos recurren al refugio más seguro: las enseñanzas de Jesús, hoy marcadas en la nueva exhortación apostólica Cristo Vive y que desmenuzaremos durante nueve números.

E

UN CORAZÓN SIEMPRE JOVEN

l capítulo uno nos da la pauta para abrir el corazón, para aceptar los miedos y dejarse llevar por las palabras de Jesús; Él nos habla a través del Antiguo y Nuevo Testamento. Los jóvenes necesitan ser guiados y saber que reyes y profetas pasaron por turbulencias semejantes a las suyas, pero que, de la mano de Dios, salieron adelante. No es fácil abrir el corazón ni deshacerse de los miedos, pero, si encontramos a Jesús, Él nos dará la fuerza y esperanza necesarias.

El Papa Francisco comienza recordándoles a los jóvenes que todo lo que toca Jesús «se vuelve joven, se hace nuevo, se llena de vida». Y les dirige las primeras palabras: «¡Él vive y te quiere vivo!». «Cuando te sientas avejentado por la tristeza, los rencores, los miedos, las dudas o los fracasos, Él estará allí para devolverte la fuerza y la esperanza», continúa Francisco.

¿QUÉ DICE LA PALABRA DE DIOS SOBRE LOS JÓVENES?

El Señor sale al encuentro de los jóvenes a través de las Escrituras. En el Antiguo Testamento, por ejemplo, en una época en que los jóvenes contaban poco, vemos que José era el más pequeño de la familia (cf. GN 37, 2-3) y a pesar de su juventud Dios le comunica cosas grandes en sus sueños y superó a todos sus hermanos en importantes tareas cuando tenía diecisiete años (cf. GN 37-47). También está el ejemplo de Samuel, que era un jovencito inseguro y el Señor se comunica con él. Gracias al consejo de un adulto, abrió su corazón para escuchar el llamado de Dios: «Habla, Señor, que tu siervo escucha». El rey Saúl también era un joven cuando el Señor lo llamó a cumplir su misión. El rey David fue elegido siendo un muchacho. El profeta Saúl tuvo otras

En la Palabra de Dios Jesús nos pide: ► «Eliminen la levadura vieja para ser masa joven» ► Dejar el hombre viejo para revestirnos del hombre joven ► Renovarnos, para tener entrañas de misericordia, de bondad, humildad, mansedumbre, paciencia, soportándose unos a otros y perdonándose mutuamente si alguno tiene queja contra otro. opciones, pero eligió a David porque era un joven que cuidaba de las ovejas, «porque el hombre mira las apariencias, pero Dios mira el corazón». La juventud, dice Francisco, está en el corazón más que en la fuerza física o en la impresión que uno provoca en los demás. Salomón, en tanto, cuando tuvo que suceder a su padre se sintió perdido y dijo a Dios: «Soy un joven muchacho y no sé por dónde empezar y terminar». Pero la audacia de su juventud lo movió a pedir a Dios la sabiduría y se entregó a su misión. A ellos, y a muchos otros, Dios les pidió que no tuvieran miedo, que Él estaría con ellos y ellos fueron obedientes y bondadosos y mostraron audacia para salir adelante.

MISERICORDIA, DESAFÍOS Y SUEÑOS

El Nuevo Testamento nos recuerda la parábola en donde el hijo más joven se va de la casa, pero en su búsqueda de la autonomía se pierde en el libertinaje y el desenfreno y prueba lo duro de la soledad y de la pobreza. Después, supo recapacitar para empezar de nuevo y decidió levantarse. Es propio del corazón joven disponerse al cambio, ser capaz de volver a levantarse y dejarse enseñar por la vida. El Papa nos recuerda que Jesús

elogia al joven pecador que retoma el buen camino más que al que se cree fiel pero no vive el espíritu del amor y de la misericordia.

Un joven no puede estar desanimado, dice el Papa Francisco: lo suyo es soñar cosas grandes, buscar horizontes amplios, atreverse a más, querer comerse al mundo, ser capaz de aceptar propuestas desafiantes y desear aportar lo mejor de sí para construir algo mejor. El Papa insiste a los jóvenes para que no se dejen robar la esperanza, que nadie menosprecie su juventud. En su búsqueda, el joven no debe olvidarse de los demás y menos de los ancianos, porque ellos albergan un tesoro de experiencia, han probado los éxitos y los fracasos, las alegrías y las grandes angustias de la vida, las ilu.siones y los desencantos, y en el silencio de su corazón guardan tantas historias que

nos pueden ayudar a no equivocarnos, no engañarnos por falsos espejitos. La palabra de un anciano sabio invita a respetar ciertos límites y a saber dominarse a tiempo: los jóvenes deben saber controlarse en todo. Jesús decía que la persona sabia es capaz de sacar del arcón tanto lo nuevo como lo viejo. Un joven sabio se abre al futuro, pero siempre es capaz de rescatar algo de la experiencia de los otros. Los jóvenes deben ser como aquellas jóvenes prudentes que estaban preparadas y atentas, mientras otras vivían distraías y adormecidas (cf. Mt 25, 1-13). Porque uno puede pasar su juventud distraído, volando por la superficie de la vida, adormecido, incapaz de cultivar re- laciones profundas y de entrar en lo más hondo de la vida. De ese modo prepara un futuro pobre, sin substancia. O puede gastar su juventud para cultivar cosas be- llas y grandes, y así prepara un futuro lleno de vida y de riqueza interior. Si has perdido el vigor interior, los sueños, el entusiasmo, la esperanza y la generosidad, ante ti se presenta Jesús, que te dice: «Joven, a ti te digo, ¡levántate!». Redacción / Con información de Exhortación Apostólica Christus Vivit


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¿Qué significa honrarás a tu padre y a tu madre? El mandamiento no distingue si los padres fueron buenos, regulares o desobligados

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Por Sergio Ibarra

l cuarto mandamiento comprende una de las mayores responsabilidades que todo católico debería asumir a lo largo de su vida desde la niñez. Aquí sí que aplica «hasta que la muerte nos separe». Los papás representan, sin duda alguna, la referencia de mayor influencia en la vida. De ahí se desprenden elementos básicos que nos acompañan a lo largo del camino. El mandamiento no distingue si fueron requete buenos, regulares o desobligados, lo que significa que no hemos de ser nosotros quienes hagamos un juicio de su desempeño en lo moral, en lo emocional y en lo económico, como tampoco de si tienen o no recursos suficientes y necesarios para terminar su vida. Es una orden.

Una orden que se inicia cuando nos enseñan los primeros modales de sabernos comportar en el comer, en el hablar y en el buen convivir con los hermanos, los primos y en la escuela,

el cumplir con nuestras primeras responsabilidades de levantar nuestros tiraderos en nuestro cuarto. Es en esas etapas donde aprendemos un montonal de aspectos relacionados

con el lenguaje, las costumbres, tradiciones familiares, los valores y, por supuesto, con la religión. Una orden que se prolonga en la adolescencia, en donde aparecen los cuestionamientos hacia las limitaciones y la indispensable guía para librar las dolencias de esta etapa en la que nos toca crecer en todos los sentidos. Unos antes y otros después salimos del hogar, como lo plasmó el gran poeta Alberto Cortez, a quien honramos ante su reciente partida: «también me fui de la casa cuando tenía tu edad; en cuanto llama la vida los hijos siempre se van, está esperando el camino y no le gusta esperar; camina siempre adelante, no ofendas a nadie para que nadie te ofenda». El mismo poeta en estas sabias palabras pone y resalta el mandato. En un país en donde hacerse viejo es estar condenado a vivir una desgracia, son las familias las que se hacen cargo de los mayores. A falta de una estadística para precisarlo, podríamos afirmar que, en la mayoría de los casos, alguno de los descendientes cuida de los abuelos, siendo quizás el gesto más profundo de este cuarto mandamiento. Precisamos que estos aprendizajes que quizás vimos en casa de nuestros propios padres, los vivamos en la nuestra. Un significado que requiere de infinitivos y de gerundios: honrar honrando.


ENTREVISTA

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LUIS-FERNANDO VALDÉS LÓPEZ

Radiografía de un sacerdote

que da razones de su fe Catedrático, capellán, maratonista, columnista y colaborador de diferentes periódicos y revistas especializadas, el padre Luis-Fernando Valdés López, incardinado en la Prelatura del Opus Dei, comparte un poco de lo que ha sido su caminar en los medios de comunicación a los que ha dedicado 14 años ininterrumpidos partiendo de la fe y la razón.

SUS PUBLICACIONES

Por Rubicela Muñiz

EL NOMBRE DE UNA COLUMNA MARCA TAMBIÉN EL ESTILO DE UN ARTICULISTA, ¿QUÉ ES PARA USTED LA FE Y LA RAZÓN?, ¿POR QUÉ DECIDIÓ TITULARLA ASÍ?

► Columna Fe y razón (Abril 2005) versión impresa

www.columnafeyrazón.blogspot.com. (2007) El blog aloja todos los artículos. ► Con el tiempo la publicación se extendió a portales de noticias y varios periódicos eclesiales de México, también Fe y razón aparece en Argentina, Chile, Costa Rica, Ecuador, España y Estados Unidos.

▶ R Este nombre, fe y razón, ante todo para mí significan mi propia vocación. Siento profundamente en mi corazón que el Señor Jesús me dio la capacidad para buscar la verdad humana en la que se apoyan las verdades divinas.

SUS LIBROS

Este deseo de entender la manera en que son compatibles las enseñanzas de la Iglesia con las diversas situaciones de la vida social y cultural ha estado presente en mí desde que tenía 15 o 16 años. Y, a la vez, siempre he tenido el deseo de comunicar esta armonía entre la fe y la vida; estoy seguro que Dios me concedió el don de expresarme con facilidad: de hablar en público y de escribir con orden y claridad.

ALREDEDOR DE LA IGLESIA HAY MUCHOS TEMAS Y PERSONAJES DE LOS CUALES ESCRIBIR, ¿POR QUÉ SE INCLINÓ POR LA VIDA DEL PAPA?

▶ R El tema del Papa ha sido un hilo conductor de la columna Fe y razón. Dios me concedió la gracia de nacer en un hogar católico y de recibir formación religiosa desde pequeño; por eso el cariño y la adhesión al Papa son esenciales para mí, no podría vivir sin esta fe y amor al Sucesor de Pedro. Esta unión al Papa me llevó a leer los grandes documentos de san Juan Pablo II (algunos de ellos los estudié a fondo) y conocí bien su biografía. En mis homilías y meditaciones siempre hacía referencia a este amado Papa.

► Francisco, el Papa latinoamericano.

Su vida y mensaje ► Bioética y opinión pública. ► Una fascinante vida desconocida. Benedicto XVI. Una mirada periodística. ► Conoce al Papa. Y así, cuando Juan Pablo se fue la casa del Padre celestial, salió con mucha naturalidad acudir a un programa de radio para explicar su figura. Así es como empecé, sin pretenderlo, a hablar de los Papas. A los pocos días, fue elegido Pontífice el cardenal Joseph Ratzigner, de quien yo había leído su autobiografía y bastantes de sus libros. Por eso, de nuevo en la radio, pude hablar mucho sobre el nuevo Papa. Como casi nadie conocía con profundidad a Benedicto XVI, el periódico a.m. de Querétaro me invitó a publicar un artículo sobre quién era este nuevo Papa. Luego me pidieron otro escrito y otro más, y al mes ese espacio se convirtió en la columna semanal Fe y razón. Desde entonces he dedicado muchos artículos para hablar de los Pontífices, antes de Benedicto y ahora del Papa Francisco. Escribir sobre el Papa es quizá el núcleo de mi llamada interior a ser un apologista de la fe, porque la fe en Cristo

sólo se puede alcanzar plenamente cuando estamos en comunión con la ‘comunidad creyente’. En otras palabras, yo explico quién es el Papa, difundo su doctrina y, cuando hace falta, defiendo su figura y su pensamiento, porque el Obispo de Roma es el puente seguro, la vía clara, para tener una comunión verdadera y plena con Jesús, nuestro Dios y Señor.

NO ES HACER DIFERENCIAS NI ENTRAR EN UN CONFLICTO, PERO ¿A QUIÉN LE COSTÓ MÁS TRABAJO ENTENDER Y EXPLICAR, A BENEDICTO O A FRANCISCO?

▶ R A lo largo de estos años he entendido que estos dos Papas son igualmente profundos e importantes para el momento histórico que les tocó y, a la vez, he comprendido que compararlos es muy difícil, porque el Papa emérito era muy académico en su mensajes, mientras que Francisco se expresa mediante acciones y signos.

Quizá por eso el Pontíficado de Benedicto XVI, desde el punto de vista doctrinal, fue muy sencillo. Por la formación académica que recibí en mi preparación como sacerdote del Opus Dei en Roma y Pamplona (España), le entendí muy bien a los planteamientos teológicos y pastorales del querido Papa alemán. Y desde la perspectiva periodística, Benedicto hizo pocos viajes, muy fáciles de seguir, especialmente su visita a nuestro País (2012). De igual manera, las polémicas estuvieron muy bien localizadas: las declaraciones en Ratisbona (2006), que se interpretaron como una descalificación del Islam; el tema de los anticonceptivos en su viaje a Camerún (2009); escándalos de pedofilia en la Iglesia (especialmente en Irlanda en 2010) y la filtración de documentos conocida como «Vatileaks» (2012).

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entrevista

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En cambio, el Pontificado de Francisco me ha representado un gran esfuerzo. Primero, porque el Papa argentino tiene una gran libertad interior y no deja que los protocolos le impidan estar muy cerca de las personas, ni lo condicionen en su modo de vivir personalmente el Evangelio. Por esto, desde su elección en 2013, todo lo que hacía sonaba a nuevo y parecía como si rompiera con la tradición pontificia. El reto para mí fue estar muy bien informado, ir al día de las noticias y darles cada semana una interpretación clara en mi columna. ¡Agotador!

Además, Francisco es una gran novedad en todos los aspectos, especialmente desde el punto de vista teológico. Ahora, después de leer mucho sobre él y su pensamiento, y también de que ya disponemos de más documentos suyos y le hemos escuchado más homilías, he podido entender sus grandes líneas doctrinales y pastorales. Pero, al principio, algunos temas me sonaban diferente y no los entendía, como eso de ir a las «periferias», o sobre la autorreferencialidad, el clericalismo o el pelagianismo, por mencionar algunos.

Esta columna fue tan significativa que ya pudo convertirla en libro, ¿cierto?

▶ R Han sido ya 14 años de escribir cada semana sin tomarme ni una pausa. Durante este tiempo, en la columna he desarrollado muchos temas, que luego me permitieron publicar varios libros. Por ejemplo, con motivo del viaje apostólico de Benedicto XVI a México, que inicio el 23 de marzo de 2012, publiqué un artículo diario desde el día primero de ese mes. Con ese material, la Diócesis de Querétaro publicó un folleto titulado Conoce al Papa. Hice lo mismo de publicar un artículo diario, para explicar el cónclave de 2013. Luego, cuando el recién elegido Papa Francisco viajó a la JMJ en Río de Janerio, escribí un artículo cada día como preparación, en el que hacía una pequeña biografía de su persona y de su labor pastoral como arzobispo de Buenos Aires. De este material salió el libro Francisco, el Papa latinoamericano, que fue una de las primeras biografías del nuevo Pontífice, del que casi no teníamos conocimiento en nuestro

El Observador de la actualidad

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tura actuales, como los jóvenes, la mujer, la cuestión del género, y también sobre problemas sociales como la migración, la pobreza, etc.

Padre, mucha gente no sabe que usted, además de ejercer su ministerio, es catedrático y maratonista. háblenos de estas experiencias: La convivencia con los jóvenes y la importancia del deporte.

▶ R De nuevo retomo el tema de esa llamada interior, que siento que Dios ha puesto en mí «desde antes de la creación del mundo», como dice San Pablo a los Éfesios (1,3-5). Esa inquietud de comunicar la fe me llevó primero a estudiar periodismo un par de años, y luego a estudiar la carrera civil de Filosofía y, a continuación, los estudios teológicos tanto en el seminario como en dos universidades eclesiáticas (Santa Cruz en Roma y la de Navarra en España).

país. Fue una ardua labor de investigación, que me hizo tomarle mucho cariño al Santo Padre. Y el material de la columna dio pie a otro libro, al que le tengo especial afecto. Se trata de Bioética y opinión pública (Imdosoc, 2013). El origen es un poco chistoso. Como el Pontificado de Benedicto XVI no era muy noticioso, tuve que buscar nuevos temas que tratar cada semana. Así decidí «comentar noticias de actualidad desde la razón creyente», como indica la descripción de mi blog. Dios mediante, en los próximos meses pienso publicar más libros, elaborados con recopilaciones de la columna, pues en los casi 800 artículos semanales

publicados hay mucho material sobre religiones, ecumenismo, doctrina social, migración, derechos humanos, libertad religiosa, etc.

Pero ahora quiere hacer una pausa para repensar este trabajo y regresar con una propuesta renovada, ¿cambiará el enfoque?

▶ R Dios mediante, después de esta pausa de varias semanas, iniciaré la segunda época de la columna Fe y razón, pero con un nuevo enfoque y con una periodicidad más espaciada. Los editores que publican mis artículos en Chile y Ecuador, así como otros amigos periodistas mexicanos, me han sugerido que escriba análisis sobre temas referentes a la sociedad y a la cul-

Por eso, dar clases de religión y de teología han sido algo muy natural en mí. Ha sido una experiencia emocionante, divertida y de mucho aprendizaje. Y, sobre el deporte, te diré que siempre lo he practicado, especialmente el futbol. Y un día un amigo, maratonista, me invitó a correr sólo un par de kilómetros con él, que luego fueron cinco y luego diez; y aunque le dije «ni pienses que voy a pasar de diez kilómetros», en semanas ya corriamos 15 y luego 21, 30 y así hasta cinco maratones. Gracias a los maratones he podido hablar de Dios con bastantes jóvenes, que me acompañan a entrenar y a las carreras de 10, 15 y 21 K. Además, correr largas distancias implica mucha disciplina y virtudes, que me ayudan a buscar más a Dios en mi vida cotidiana.


punto de vista

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POR mons. MARIO DE GASPERÍN GASPERÍN OBISPO EMÉRITO DE QUERÉTARO

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¿Qué hacer el Sábado Santo?

DIRECTORIO

odavía está viva en el recuerdo de las personas mayores la apertura de la Gloria con el repique de las campanas a media mañana del sábado, el ruido de las matracas, de los silbatillos gorjeadores y el estruendo del «judas» destripado al concluir la Misa mayor. Toda esta algarabía se ha reducido a un silencio preocupante y a una inactividad litúrgica que no se acaba de entender. Se confunde con un «vacío» donde, se dice, no hay nada que hacer. ¿Cómo justificar este cambio tan drástico en la liturgia católica? Explicamos: Todo viene del día anterior, del Viernes Santo, en que conmemoramos la pasión y muerte del Señor Jesucristo en la Cruz. Esta celebración termina con la siguiente indicación: «Todos se retiran en silencio y se desnuda el altar»; y a continuación nos explica que, durante el Sábado Santo, la Iglesia permanece junto al sepulcro del Señor, meditando su pasión y su muerte, su descenso a los infiernos, y esperando, en la oración y el ayuno, su resurrección. Así, el Sábado aparece como una prolongación del Viernes Santo, ahora en el sepulcro de Jesús, pero sin ninguna celebración y ningún sacramento, porque su Señor está ausente. Dice la instrucción: «Hoy la Iglesia se abstiene absolutamente del sacrificio de la Misa, y el Sagrario permanece abierto y vacío. Jesús se ha ausentado

¿Qué hacer ese día? La Iglesia ofrece la recitación de la Liturgia de las Horas, alguna celebración de la Palabra y el ayuno, el silencio meditativo y la lectura de la sagrada Escritura. La llamada «Hora de la Madre» concentra en la figura de María toda la sensibilidad y experiencia creyente de la Iglesia. Ella, Madre nuestra también, pasa este día junto al sepulcro de su Hijo. Allí adquiere, con pleno derecho, el título de «Nuestra Señora de la Esperanza». Ella espera, en nombre de toda la Iglesia, la resurrección de Cristo y prepara la nuestra.

de nosotros, descendió a los ‘infiernos’, a la región de los muertos para anunciarles su redención».

Con esta actitud la santa Iglesia quiere centrar nuestro espíritu en lo que significa la ausencia del Señor Jesús, y ejercitar nuestra esperanza. La Iglesia, esposa de Cristo, permanece en silencio meditativo junto al sepulcro de su Señor. No con angustia, sino reflexionando en su muerte de la cual participaremos todos nosotros. El cristiano permanece junto al santo entierro del Señor lleno de

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DIRECCIÓN GENERAL: Jaime Septién Crespo DIRECCIÓN GENERAL ADJUNTA: Maité Urquiza Guzzy PROYECTOS ESPECIALES: Francisco Septién Urquiza

esperanza en la resurrección: si morimos con Cristo, resucitaremos con Él. Permaneciendo en actitud de meditación y vigilancia junto al sepulcro del Salvador, preparamos nuestra muerte y nuestra resurrección. Si esta esperanza no llena nuestra vida, también es vana nuestra fe. El Sábado Santo nos demostramos a nosotros mismos si es verdadera la fe que profesamos en el Credo cuando decimos: Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro, la resurrección. El Sábado Santo aquilata la virtud de la Esperanza: «Hemos sido redimidos en esperanza» (S. Pablo). Si no esperamos la resurrección de Cristo, ¿cómo podremos esperar nuestra resurrección?

CONSEJO EDITORIAL: Mariano Azuela Güitrón, Francisco Prieto Echaso, Jorge E. Traslosheros Hernández, Padre Tomás de Hijar Ornelas, Felipe de Jesús Monroy González, Juan Carlos Moreno Romo CONSEJO EDITORIAL INTERNACIONAL: Alberto Ivern, Daniel Cabaña, Inma Álvarez, Jesús Colina, John Elson, José Antonio Varela, Miguel Aranguren, Orlando Márquez

En el momento en que su Hijo «desciende a los infiernos», al sepulcro de toda la humanidad a tender la mano victoriosa a Adán y a Eva, Ella, nuestra Madre Dolorosa, intercede por nuestros difuntos y por todos los que murieron poniendo en Dios su confianza. En el templo pueden exponerse las imágenes de Cristo crucificado, el Santo Entierro de Jesús, la imagen de la Santísima Virgen de los Dolores. Ya en casa podrá escucharse música religiosa y canto gregoriano cuya riqueza y sublime arte conserva la Iglesia para enriquecer nuestro espíritu.

GERENTE DE EDICIÓN: Rogelio Hernández Murillo, CORRECCIÓN Y ESTILO: J. Jesús García y García, EDITORES: Diana R. García Bayardo, Rubicela Muñiz Patiño, DISEÑO: Octavio Espinosa Murillo, Rosa María López Martínez, REDES SOCIALES Y REPORTERO: Jesús Valladares Picón

El Observador de la actualidad. Publicación semanal de Clip Art de Querétaro, S.A. de C.V. Reforma No. 48, Centro histórico, C.P. 76000, Santiago de Querétaro, Qro., Tels. (442) 214-1842, 224-1454 y 214-5475.Correo electrónico: mensaje@elobservadorenlinea.com - Número de Certificado de Licitud de Título 9598.- Número de Certificado de Licitud de Contenido 6695.- Número de Reserva al Título en Derechos de Autor 1080200/2001.- Permiso de publicación periódica, autorizado por Sepomex Núm. PP22-0001.- Los artículos firmados son responsabilidad del autor.


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desde madrid Miguel Aranguren

E

l Observador es una excepción a la regla. A la regla de que la prensa miente, quiero decir. A la regla de que los periódicos, los noticieros en radio y televisión, los informativos digitales dictan sus contenidos según intereses que el lector desconoce (los del grupo editorial que los sustenta, en un escoramiento hacia uno u otro lado del arco tan manido de conservadores-progresistas, entre los que apenas hay diferencias).

www.miguelaranguren.com

Mentira

La mentira, la media verdad, el embuste, la difamación y la calumnia son el pan de cada día en las herramientas que utilizamos para conocer lo que sucede más allá de las paredes de nuestra casa, de tal modo que el parecido entre los hechos narrados y la realidad a veces se parece como un oso a un ciempiés. Por no hablar de las obsesiones vengativas de algunos editores y directores que usan el periódico, canal de radio o televisión, informativo digital… como arma con la que cobrar sus frustraciones. Con la mentira crean una ficción con la intención de engañar, ocultar, distorsionar o provocar un daño a quien no tiene recursos para defenderse. La mentira disfrazada de espectáculo parece ser menos mentira. La mentira dicha desde un estudio de grabación, desde una conexión en directo, desde la columna de un diario recibe una pátina de veracidad que no le corresponde. «Es que lo ha dicho la tele», era una frase habitual de la España de la década de los setenta y los ochenta del siglo pasado, cuando solo existían dos canales, ambos controlados por el gobierno, como si el televisor fuese el Oráculo de Delfos conectado a cada hogar para decirle qué pensar y cómo

actuar, igualando a los ciudadanos en el nivel de estupidez. Deshacer el entuerto de la mentira es como desovillar un carrete de pesca después de que se haya roto su mecanismo; como desanudar el hilo de una cometa que ha caído desde lo alto del cielo en un zigzag de trabazones. Por eso procuro asomarme a los titulares de la prensa con cierta prevención, dando por supuesto que lo que dicen no es del todo cierto. A los periodistas les corresponde -pobrecitos; trabajan sometidos a la voluntad de sus jefes- convencerme con el desarrollo de la pieza informativa, que también contemplo desde la ribera de los escépticos. Mentir es lanzar la piedra y esconder la mano. Es fabricar una realidad a la medida de nuestra miseria. Es decir que el árbol es azul. Que el toro es rosa. Que el agua del mar quita la sed… pero sin intención poética. Mentir es aprovechar la confianza

otorgada (a un presidente de la nación, a un ministro, a un gacetillero, a un director de cine…) para colocar en los ojos de los demás unas gafas deformantes con las que lo objetivo, lo que es, lo que no admite interpretación pierde su contorno hasta adquirir un halo monstruoso.

Se miente al reescribir la historia según los criterios del mundo de hoy. Y se miente mucho más cuando esa reescritura está empapada de un interés ideológico. Se miente -con especial gravedad si el público está compuesto por niños y adolescentes- cuando se entronizan teorías falsas que, además, son dañinas para el individuo y para la sociedad.

Se miente cuando desde la tribuna, con tal de ganar un voto, se promete lo que es imposible de cumplir. Se miente cuando se hace uso de la corrupción y se tergiversan las responsabilidades que conlleva el ejercicio de cualquier cargo. Se miente cuando se trata a los demás como a menores de edad, con el propósito de aprovechar esa idiocia. Se miente cuando el Estado asume unas responsabilidades que no le competen y cuando ese Estado decide legislar según la voluntad de un lobby de oscuros intereses. Se miente cuando de expanden teorías de cambios imposibles en la naturaleza de las cosas, también en la naturaleza del ser humano. Se miente cada vez que se presenta un crimen como un avance social. La mentira nos envilece y nos hace contemplar a nuestros semejantes como instrumentos de nuestra ambición. La mentira nos descompone como si fuésemos ya cuerpos muertos.


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TRIPAS DE FRAILE Tomás de Híjar Ornelas, Pbro.

Dos perfiles proféticos «El amor humano: una promesa que es difícil de cumplir, un intento que pronto se seca y se evapora, un poco como cuando por la mañana sale el sol y se lleva el rocío de la noche»

A

Papa Francisco

un mes de iniciado el año 2019, el nuncio apostólico de Nicaragua, Waldemar St. Sommertag, visitó al poeta nicaragüense Ernesto Cardenal, de 94 años de edad apenas cumplidos.

En el marco de ese diálogo, el presbítero y religioso trapense suspendido a Divinis por la Santa Sede desde 1984 por su militancia política en el régimen sandinista, pidió al representante del Papa se considerara su reintegración al estado clerical. Una gestión muy rápida, atendiendo la quebrantada salud de Cardenal, hizo posible que el 17 de febrero, mediante un decreto del Papa Francisco, se le levantara la sanción, noticia que le llevó don Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua, que cerró el acto pidiéndole a don Ernesto, recluido en un nosocomio por problemas renales, de rodillas, la bendición, gesto más que simbólico considerando que el 4 de marzo de 1983, durante la visita del Papa Juan Pablo II al país centroamericano, increpó con el índice en alto al religioso activista político, que se postró ante él con simplísimo atuendo de civil y expresión bondadosa. A 35 años de distancia del episodio y ante el gesto del actual Obispo de Roma, uno ve lo que en ese

tiempo estaba en debate, el profetismo, que hicieron suyo algunos eclesiásticos del continente con más católicos en la faz de la tierra, al tiempo de afrontar, en el marco de la Guerra Fría, los embates furibundos del capitalismo. Ernesto Cardenal dejó la militancia política activa en 1994, decepcionado por el giro que tomó el sandinismo con el caudillo Daniel Ortega, quien retomó las riendas de esa pequeña y afligida nación y la tiene al borde del co-

lapso. Pero también llevó una vida de congruencia a su condición de consagrado y ahora, cuando su vida pende de un hilo, se le readmite al estado clerical. Este episodio se engarza con otro. Hace pocos días, el senado de Paraguay rindió un homenaje muy elocuente al religioso jesuita Francisco de Paula Oliva –que gusta ser llamado Pa’i Oliva, padrecito en guaraní–, nacido en España hace 90 años, pero con nacionalidad paraguaya desde su arribo a este

país, en 1964, donde se entregó en cuerpo y alma a la formación de la juventud y a la implementación del pensamiento crítico, granjeándose la expulsión del país por el gobierno militar que le imputó estarle «abriendo los ojos» a los jóvenes. Vivió después en Buenos Aires, Ecuador y Nicaragua, donde también respaldó el sandinismo. Exiliado en España se dedicó, desde 1986, a escribir para los medios de comunicación y servirse de la radio para compartir sus postulados. Regresó al Paraguay en 1996, pero distanciándose del mundo académico e intelectual, optó por el servicio pastoral en un barrio muy pobre, el de San Cayetano, dedicándose desde entonces al rescate de la autoestima y a la autogestión de los jóvenes a través de un proyecto de intercambio cultural que consistió en hospedar a jóvenes de la clase media y alta con las familias pobres del barrio, naciendo así el Foro Ciudadano y el Parlamento Joven, dedicados a darle sentido político de la vida, participación y la toma de conciencia ciudadana.

Se trata de dos perfiles proféticos decantados en el mismo crisol pero con giros distintos y un epílogo vital semejante: hacer vida el Evangelio más allá del estamento clerical, sin mengua del postulado de Cristo, que este Domingo de Ramos nos recuerda «Mi reino no es de este mundo».


actualidad

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Una Iglesia con voz y esperanza

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“Los hombres son mejores de lo que pensamos... ¡Dios también!”. P. Werenfried van Straaten

EDITORIAL

Venezuela: “estamos acompañando a morir a la gente”

E

l pueblo venezolano sigue contando historias desgarradoras, reflejo de los graves problemas que padece este país. La crisis humanitaria se refleja en la escasez y altos precios de comida y medicamentos. Sumado a las fallas del sistema de electricidad nacional que afecta a los hospitales e impide el tratamiento conveniente de los pacientes. La siguiente historia es el testimonio de una doctora venezolana, que en una entrevista que recibió la Fundación ACN, una joven doctora con la voz quebrada por el llanto, expresa su impotencia por no poder salvar vidas por falta de medicamentos. La doctora cuenta que durante su guardia en el Hospital Central, atendió una niña con peritonitis grave porque ya había llegado con el apéndice perforado. Se le realizaron los lavados necesarios para extraerle el líquido purulento, pero no tenían los antibióticos para el tratamiento posterior. “El papá con lágrimas en los ojos me dijo que él no podía seguir

comprando el medicamento, porque cada una costaba 50.000 Bolívares, y son tres dosis al día”, dice la doctora... Después que salí del quirófano, del lavado, cuando busco al papá no lo encontraba, porque estaba arrodillado llorando en una esquina contra la pared. Siento que estamos acompañando a morir a la gente”, dice angustiosamente la doctora. Quien también reclama a los dirigentes políticos por su ineficiente trabajo: “no entiendo, a los políticos. Esto nos está afectando demasiado. Los médicos podemos resistir estar sin agua ni luz, buscaremos maneras de trabajar, pero no soportamos ver a los más pobres sufrir y enterrar a sus hijos”. Actualmente el sueldo mínimo mensual en Venezuela es de 20.000 Bolívares, el padre de esa niña tendría que trabajar y reunir casi 8 meses de salario para poder comprar una dosis diaria del antibiótico. Los Conferencia Episcopal Venezolana, publicó el 2 de abril, un mensaje en el que reafirman “la dignidad de la persona humana y sus derechos inalienables”, a su vez denuncian la falta de respeto a los

Presentan mapa digital de la labor de la Iglesia en México

La Conferencia del Episcopado Mexicano presentó el mapa digital realizado por su Observatorio Nacional, que visibiliza geográficamente, las diócesis que conforman su estructura territorial, y la obra social de la Iglesia católica en México. Las diócesis muestran la información particular, y sus datos cuantitativos de católicos, sacerdotes, templos, seminaristas, servicios sacramentales, entre

otros. La obra social muestra los diferentes tipos de centros de atención social como son: casas de migrantes, casas para ancianos, hospitales, orfanatos, internados, casas de hogar, albergues, dispensarios médicos, centros de recuperación de adicciones, atención al cuidado de la casa común, albergues para enfermos de VIH, casas de atención a indigentes, atención a reclusos,

derechos humanos y los “delitos de lesa humanidad” a los que son sometidos los venezolanos, entre ellos: “la imposición intencional de condiciones de vida como la privación del acceso a alimentos y medicamentos”. “Lamentablemente esto se ha venido haciendo en nuestra patria bajo la mirada complaciente de las autoridades que deben velar por el recto cumplimiento y defensa de los derechos humanos”, expresan los Obispos en el mensaje. Venezuela te necesita. Unámonos en oración por este pueblo sufriente, para alcanzar “la necesaria conversión”, pidiendo a la Virgen María que “acompaña el Víacrucis que vive nuestro pueblo en la esperanza de la liberación pascual realizada por su hijo Jesucristo”.

La crisis humanitaria se refleja en la escasez y altos precios de comida y medicamentos. ACN-México

comedores públicos, centros de atención a mujeres, centros psicológicos, albergues para enfermos terminales, centros de escucha a víctimas, casas de atención a niños de la calle, centros de enseñanza de la Doctrina Social, centros de derechos humanos, centros de atención al abuso infantil, pastoral del mundo del trabajo, atención a familiares desaparecidos, pastoral funerarias y leproserías.

Consúltalo en: www.cem.org.mx

ACN ayuda a las familias cristianas de Siria con 308 proyectos de emergencia 10%. De hecho, en estos 8 años de guerra, 1.707 cristianos han sido asesinados, 677 secuestrados, 1.309 propiedad de las Iglesias destruidas y 7.802 propiedades y casas de cristianos dañadas o destruidas Desde que comenzó la contienda, en marzo de 2011, hasta ahora, ACN, ha apoyado con más de 800 proyectos que coordinan 9 distintas iglesias cristianas.

Ayuda convertida en

Conoce algunas historias de las Mujeres extraordinarias www.acn-mexico.org/mujeres-extraordinarias

´

AMOR

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© Grzegorz Galazka

En el mes de marzo se cumplió el octavo aniversario del inicio de la guerra de Siria. 127.185 familias cristianas registradas que se encuentran en estado de emergencia. Esta guerra ha sido la mayor catástrofe humanitaria desde la Segunda Guerra Mundial, con 12 millones de refugiados y desplazados internos. Los cristianos de Siria ahora sólo representan 3% de la población, cuando antes de la guerra eran el

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FAMILIA

EL OBSERVADOR DE LA ACTUALIDAD

14 de abril de 2019 / AÑO 24, No. 1240

PÁGINA 19

La conciencia como un centinela interior

E

Por el P. Fernando Pascual

n la famosa novela de Johanna Spyri, Heidi, la abuela de Clara interviene en varios momentos con observaciones y enseñanzas que conservan su validez también en nuestros días. Una se refiere a ese gran don que Dios nos ha dado: la conciencia. Hacia el final de la novela, los hechos se arremolinan. De modo especial, destaca esa misteriosa rabia que surge en Pedro, el cabrero amigo de Heidi y celoso hacia quienes impiden a su amiga, según él, estar a su lado.

Llevado por esa rabia, Pedro aprovecha un momento en el que nadie le ve para tirar la silla de ruedas que sirve a Clara, la niña de ciudad que es incapaz de permanecer en pie por sí misma. Después de este acto, Pedro experimenta terror ante la idea de que pueda ser descubierto. Al poco tiempo, y de modo sorprendente, Clara refuerza sus piernas y un día empieza a caminar cada vez mejor. Varios días después, llegan el padre y la abuela de Clara a la casa del Viejo de los Alpes, y descubren llenos de alegría la mejoría de la niña antes inválida. La abuela percibe la angustia en el rostro de Pedro, intuye lo que ha pasado, y le ofrece unas palabras llenas de cariño y sabiduría. He aquí el texto: «¡Vamos, muchacho! (...) ¿Fuiste tú el que precipitaste el sillón desde lo alto de la montaña? Esto es una mala acción, bien lo sabes, así como tampoco ignoras que mereces ser castigado. Has tenido que hacer lo imposible, a fin de que nadie se enterara de tu acción. «Pero suponer que una mala acción puede permanecer oculta es un

error. Dios lo ve y lo sabe todo. Cuando se da cuenta de que alguien quiere ocultar su mala acción, hace que en su corazón despierte el centinela que Él ha colocado allí, y que permanece dormido hasta que se hace el mal. El pequeño centinela tiene en la mano una aguja y pincha sin cesar en el corazón del que no ha obrado bien, no dándole un instante de reposo. Su voz lo tortura también diciéndole constantemente: Van a descubrirte y te castigarán. Y el malo, debatiéndose entre el temor y la angustia, no puede vivir en paz. ¿No es esto lo que te ha sucedido a ti, Pedro?». Así funciona la conciencia, ese centinela interior que nos avisa para que no cometamos el mal; y que denuncia, con esa experiencia del remordimiento, cuando lo hemos cometido. La conciencia, una vez escuchada de modo adecuado, se convierte en un hermoso aliado que nos permite orientar la vida hacia el bien, al apartarnos del mal y al impulsarnos al arrepentimiento que cura los pecados cometidos.

Tras otras explicaciones de la abuela de Clara a Pedro, al final añade esta última exhortación: «Cada vez que sientas la tentación de hacer algo, piensa en el pequeño centinela que llevas dentro del corazón con su aguja afilada y su voz terrible. ¿Te acordarás siempre?». Dios nos ha dejado un centinela interior, la conciencia. Con su voz, ese centinela nos ayuda a apartarnos del mal, a reconocer ese mal cuando lo hemos cometido, a arrepentirnos y buscar repararlo.

Sobre todo, con esa voz nos impulsa a orientar nuestra vida hacia el bien, para dedicar lo mejor de nuestro tiempo y energías a lo más hermoso que podamos imaginar: el amor a Dios y al prójimo.


14 de abril de 2019 / AÑO 24, No. 1240

EL OBSERVADOR DE LA ACTUALIDAD

CARTA DE JESÚS PARA TI

COMPLETA EL DIBUJO

«Oye: es Mi Semana Santa»

Q

uisiera hablarte hoy de MI SEMANA SANTA. Sí, esta semana podemos considerarla como más mía que otras, ya que voy a celebrar con mis amigos acontecimientos muy importantes de mi vida. Exactamente igual que ocurrió en aquella semana de mi Pasión y Muerte. Me gustaría que esta Semana Santa sirviera para que muchos comprendan la importancia del pecado, el daño que éste hace. Fue precisamente el pecado lo que ocasionó todo lo que estos días vamos a recordar. Pero yo te diría más: me gustaría que esta Semana Santa sirviera para que comprendieras tú, y todos, lo mucho que quiero al hombre. Sí, grábatelo bien en tu corazón: todo lo que Yo hice, eso que se va a recordar estos días, fue por ti, y por todos. Por los que Me conocen y Me traicionan, y por los que no tienen las más remota idea de quién soy Yo. Yo te escribo a ti para suplicarte una cosa: si quieres de verdad darme una alegría, ayúdame a llevar la cruz pesadísima de los muchísimos pecados y aberraciones que hoy se cometen. Me gustaría que esta semana fuera de verdad santa. Ven a mi lado y vamos a recorrer juntos el camino del Calvario. Después nos veremos en la Resurrección para gozar juntos. No Me abandones. Tu amigo, JESÚS. Resumido de «Cartas de Jesús a ti», del P. Juan García Inza.

Escribe en el cuadro el número del personaje que mejor corresponde con el dibujo de cada piedra.

Une los puntos y dibújalo

1

Judas Iscariote

2

Jesucristo

3

Los soldados

4

San Pedro


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