NO ES FICCIÓN

Alan Mc Kay filmó “No miren arriba”. Lindo título ¿No? Pero no se asusten, no voy a contarles la tan discutida película.

Simplemente creo que podríamos aplicar ese título para caminar por San Telmo.

Toda mi historia está aquí, en nuestro barrio. Pero ahora, lamentablemente y desde hace algunos años, no me queda más remedio que mirar hacia abajo. Miro las veredas y las calles.

¿Por qué? ¿Hay grietas donde pueden trabarse los tacos provocando caídas? Sí, hay. ¿Hay baches? Sí, claro ¿Hay adoquinados nuevos desparejos y difíciles de transitar especialmente para quienes tienen problemas físicos? Sí, también ¿Hay bolardos con los que podemos tropezar? Si, hay bolardos ¿Hay “charquitos” de líquidos y otros desperdicios dejados por algunos animalitos cuadrúpedos y lo que es peor por algunos animales grandes bípedos? Si, hay muchos.

Demasiadas respuestas positivas que indican un resultado negativo. Por eso, mis queridos vecinos les digo, al igual que Mc Kay, por favor no miren arriba. El peligro está abajo.

Texto y fotos: Stella Maris Cambre