EL MUNDIAL Y LAS CONSECUENCIAS PARA LOS ACB (I y II)

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para los ACB ¿Cuánto tiempo dura el máximo rendimiento de un jugador ACB si ha disputado el Mundial? ¿Cómo se puede mitigar la fatiga en los 31 mundialistas que juegan en nuestra liga? Primera entrega de las respuestas.

[Carlos Velasco Fotos: GIGANTES y ACB Photo]

unque en verano hay competiciones internacionales como pueden ser el PreEuropeo o los campeonatos continentales de formación, en GIGANTES hemos escogido el Mundial de Turquía, que fue el más tardío en finalizar (el 12 de septiembre), para estudiar un tema de preparación física que afecta a los jugadores. Como en

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Tema 1: ¿La tendencia es dejar días de descanso al jugador tras volver del Mundial? ¿Cuántos?

Tema 2: ¿Cómo se mantiene al jugador en ese estado óptimo de forma?

Tema 3: ¿El punto de caída del rendimiento de qué depende y cuándo llega?

Turquía la ACB estuvo representada por 31 jugadores, hemos querido preguntar a los responsables de la preparación física de los clubes cómo afecta al rendimiento de los jugadores el hecho de que deban conseguir un pico de forma antes de la temporada ACB y deban mantenerlo hasta mayo/junio. Agradecemos la colaboración de los participantes en este reportaje de dos entregas y tres bloques enumerados a la derecha de esta página: Real Madrid Mundialistas: Ante Tomic (Croacia); Pablo Prigioni (Argentina); Novica Velickovic (Serbia); y Felipe Reyes, Sergio Llull y Jorge Garbajosa (España).

Preparador físico: Juan Jesús Trapero.

T1: En el mes de junio de este año dimos un descanso de 10 días para comenzar progresivamente un entrenamiento de fuerza, carrera y técnica individual en la postemporada. Además, reunimos al cuerpo médico para una posible rehabilitación y dimos a los jugadores un programa de entrenamiento hasta llegar a sus selecciones.

Contactamos con sus preparadores en las federaciones y les controlamos visitándolos y sabiendo sus minutos en los partidos.

Tras jugar con sus selecciones establecimos un período de descanso de 5 días porque en 7 días el equipo ya tenía que jugar.

Para nosotros es más importante, que puesto que llegan de un período puramente competitivo y falto de entrenamiento en las últimas semanas, se indivi-

dualice cada plan de trabajo físico y técnico. Recibimos jugadores que han realizado una preparación diferente e incluso con un resultado bueno o malo.

Vayamos a la pretemporada. Este año estimamos oportuno que durante las 2 primeras semanas de trabajo se hicieran 2 grupos de preparación física por las mañanas: uno con jugadores que llevan entrenando 4 semanas en Madrid y otro con los internacionales. De esta manera, tratamos de integrar a todos sin mermar el trabajo previo del primer grupo. Por las tardes decidimos junto con los entrenadores, incorporar a jugadores jóvenes e invitados, para elevar hasta 15 los participantes en la cancha. La manera de prevenir lesiones musculares en las primeras semanas, y a su vez prolongar el estado de forma, viene dado por el buen reparto de la carga física.

T2: Para un equipo de Euroliga y de ACB, y para garantizar el buen estado físico en los tramos importantes, decidimos realizar ciclos más intensos con los internacionales, en determinadas semanas de la temporada regular, dado que algunos han comenzado muy pronto su preparación con la selección y, probablemente, si no recargamos el depósito de gasolina (fuerza y carrera) a menudo, bajarán su rendimiento.

No creo que sea posible (en mi opinión) valorar ‘como grupo’ el estado de forma físico, sino que se hace un seguimiento estricto de los distintos valores en cada jugador. Además, creo que es mas útil para el óptimo rendimiento durante la tempora85 G

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da, que la espalda esté compensada y fuerte, que las rodillas tengan un buen sostén basado en la fuerza de cuádriceps e isquios, que se tenga un buen tono abdominallumbar, que se tenga un buen nivel de flexibilidad y movilidad articular o que se esté en un peso óptimo... antes que obsesionarnos con levantar 150 kg. de pectoral, o realizar 100 canchas completas.

T3: Sabiendo esto, nuestras pretemporadas clásicas ‘han muerto’. De la manera actual, los rendimientos físicos en temporada dependen tanto de la fatiga física como psíquica. Algunos jugadores bajan el nivel de intensidad en su juego, no siendo previsible. En los últimos tiempos he observado que nuestros jugadores compiten durante 8 ó 10 años de forma consecutiva con un número muy alto de partidos con sus equipos y con su selección, y tienen pocas semanas de trabajo físico y de descanso. En mi opinión, podríamos tener un mayor control sobre la mejora en el rendimiento físico si los periodos de competición, entrenamiento y descanso estuvieran repartidos más racionalmente.

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Power Electronics Valencia Mundialistas: Javtokas (Lituania), Claver (España), Pietrus (Francia) Savanovic (Serbia) y De Colo (Francia).

Preparador físico: Pedro Cotolí T1: Dejamos 5 días completos de descanso a partir del último partido jugado.

T2: El estado de forma en el que vinieron los jugadores ha sido muy variado: Javtokas vino lesionado de sus tobillos; Claver, al no disputar casi minutos de juego, vino con déficit de componente competitivo; De Colo sí que vino en buen momento para competir; y Savanovic, por el contrario, vino demasiado saturado y fatigado. En líneas generales determinamos que había que pautar un trabajo global como equipo, pero todos estos jugadores tendrían un trabajo específico (fisioterápico, de regeneración o suplementario). Incluso en el trabajo en pista, el trabajo de cada uno debía controlarse.

T3: Los jugadores que vienen de competir en verano suelen tener dos fases críticas: ● Al principio, mes de octubre, casi siempre hay problemas de tipo muscu-

En esta página más arriba, Savanovic e Ingles. Sobre estas líneas, Kone.

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En esta página, de izquierda a derecha: Marko Banic (Bizkaia Bilbao) y Pancho Jasen (Asefa Estudiantes)

lar o tendinoso debido al desgaste que supone tanta competición, ya que nos queda poco tiempo para empezar la Liga, y por mucho que se quiera dosificar al jugador nos vemos obligados a entrenar con velocidad. ● A mediados de temporada (diciembre/enero) se puede producir también un bajón de rendimiento, pero esta vez es más general. Les cuesta asimilar las cargas y recuperarse rápido de los esfuerzos. Lo ideal es un ciclo para ‘llenar los depósitos’.

C.B. Granada Mundialista: Joe Ingles (Australia) Preparador físico: Sergio Sánchez T1: No hay una norma fija para todos los jugadores. Depende en función de los minutos o partidos disputados, pero nosotros sí que estimamos oportuno un pequeño descanso a nivel mental. En nuestro caso optamos por dar a Joe Ingles 2 días de desconexión de basket (el jugador venía ya con ganas de entrenar) e introducirlo durante los 3 días siguientes.

T2: Si ya se personaliza el trabajo, con Ingles aun se hizo más. De todas formas, haber jugado el Mundial no significa que esté en un estado de forma óptimo.

Influye mucho el rol que haya tenido en el torneo e incluso si ha sido un jugador de banquillo puede llegar en baja forma.

En nuestro caso Joe llegó en un perfecto estado y las cargas físicas se asemejaron a las de un mes de competición avanzado.

Más que dosificarlo previnimos lesiones y personalizamos el trabajo.

T3: Influyen muchos factores. Estamos atentos a la fatiga mental y uno de los riesgos es la mayor incidencia de lesiones. Estadísticamente la caída suele ser en diciembre o enero. Pero cada jugador es un mundo.

Bizkaia Bilbao Basket Mundialistas: Àlex Mumbrú (España) y Marko Banic (Croacia).

Preparador f.: Álvaro Gómez-Rubiera.

T1: Inmediatamente después pueden tener 3-4 días libres (para viajes, asuntos personales y familiares...) pero una vez el jugador ‘aterrice’ tiene un descanso ‘activo’. Suelen tener unos trabajos específicos individuales. Eso no quiere decir que no compartan en algún momento ejercicios con el grupo (por ejemplo una sesión táctica 5 por 0, una sesión de tiro...). Los días exactos de descanso dependen de cuánto haya jugado el jugador en el Mundial, cuánto haya avanzado su equipo en las fases clasificatorias. La adaptación progresiva puede durar una semana.

T2: Se baja la intensidad del entrenamiento y se aumenta de manera progresiva. Al principio se hace un ligero trabajo de resistencia o de recuperación (piscina, ejercicios específicos en cancha, cardio, tonificación general…). Por lo tanto, se les dosifica más.

T3: La caída depende de multitud de factores pero fundamentalmente el hecho de jugar todo el año satura física y mentalmente al jugador. Saber cuándo sucederá es impredecible.

Lagun Aro GBC Mundialista: Mohamed Kone (Costa de Marfil) Preparador físico: Eugenio Rodríguez.

T1: Kone llegó 4 ó 5 días después del Mundial. Para mí eso no se considera un descanso, porque lo único que no hacen es entrenar y competir. En nuestro caso no pudimos darle un tiempo extra porque Lorbek, Panko y Salgado estaban tocados.

T2: Decir que tras el Mundial tienen un estado de forma óptimo es relativo.

Sí compiten, pero los viajes y los partidos no les hacen estar más en forma.

Nosotros optamos por atender primero a las necesidades de nuestro equipo y en segundo lugar prestamos atención al caso individual. Creo que ahora mismo Kone está más en forma que cuando llegó.

T3: La caída en un deporte colectivo y con muchas variables no es igual que en uno que sea individual. La predicción es arriesgada. A veces la caída se produce 2 ó 3 meses después del Mundial.

Asefa Estudiantes Mundialista: Pancho Jasen (Argentina) Preparador físico: Jorge Sánchez T1: Jasen llegó una semana después del Mundial. Venía fino para competir aunque no en un estado óptimo. Creo que no había tenido un desgaste excesivo.

T2: Se dosifica como se puede. La teoría no es igual que la práctica. Si entra en un estado de bajón, hay que regenerarle. No hay que hacer quizás un trabajo muy exhaustivo, pero sí hablar con el jugador para que haya una transición lógica entre lo que hizo en su concentración y lo que está haciendo con nosotros.

T3: Quizás ya se debería estar viendo la caída de rendimiento. Un jugador explosivo llega antes a esa bajada de rendimiento que uno que es más lento.

(La próxima semana, la 2ª parte).

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para los ACB En el anterior número seis equipos se quedaron sin responder a las 3 preguntas de la siguiente página. Segunda y última entrega de este informe sobre la compensación de los esfuerzos en los mundialistas de la ACB.

[Carlos Velasco Fotos: GIGANTES y ACB Photo]

n este informe conoceremos la respuesta de los 6 preparadores físicos restantes que amablemente nos han atendido para enseñarnos cómo consiguen mantener el rendimiento de sus mundialistas. El único club que no nos entregó los comentarios fue el Baskonia, por lo que disponemos de 12 de los 13 análisis que podíamos reunir.

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Tema 1: ¿La tendencia es dejar días de descanso al jugador tras volver del Mundial? ¿Cuántos?

Tema 2: ¿Cómo se mantiene al jugador en el estado óptimo de forma?

Tema 3: ¿El punto de caída del rendimiento de qué depende y cuándo llega?

Regal FC Barcelona Mundialistas: Ricky Rubio, Fran Vázquez y Juan Carlos Navarro (España); K. Perovic (Serbia); y J. Lakovic (Eslovenia).

Preparador físico: Toni Caparrós.

T1: Los períodos de descanso más que por tendencia vienen marcados por el calendario deportivo. Si éste lo permitiera, podríamos programar un período de recuperación más amplio y adecuado para los jugadores, pero no es el caso, por lo que el objetivo pasa a ser el de una necesaria ‘transición’ psicológica a la vez que evitar una pérdida de un estado de forma del jugador que luego sería difícil recuperar. Ya que el jugador debería entrar en competición en 2 semanas, 3 como máximo, un período habitual de descanso suele ser el de media semana.

T2: El estado de forma óptimo para competir es, precisamente el que se adquiere con la competición, que es de donde ellos llegan, pero no es cuestión sólo de dosificar, sino de recuperar adecuadamente, de asentar una buena base para el resto de una temporada de 8 ó 9 meses y de prevenir todas aquellas descompensaciones y riesgos que conllevan un período de preparación (o pretemporada) inadecuado.

Después de realizar los tests que nos permitan saber cuál es el estado real del jugador, una programación específica tendrá como objetivo el ‘acompañar’ a ese estado de forma (si es óptimo). La dosificación debe centrarse inicialmente en el trabajo cuantitativo, que debe ser más bien

preventivo, compensatorio y orientado a una adaptación paulatina al trabajo de fuerza y, más adelante, retomaremos el trabajo específico de resistencia y fuerza.

T3: El rendimiento depende de muchos factores y si éste se ‘colapsa’, lo que puede pasar al cabo de 4 a 6 semanas, o en forma de lesión en cualquier momento, es porque se dan varios aspectos a la vez. De lo que sí depende es de la fatiga, un concepto que puede ser genérico pero que engloba muchos otros más concretos, como el de regeneración, capacidad de recuperación, adaptación al entrenamiento, fuerza, resistencia de base, resistencia específica en el baloncesto, salud… La planificación y los tests nos deben permitir mejorar y reajustarnos de manera ordenada para evitar esa caída global del rendimiento, anticipándose mediante la recuperación de los diferentes factores que lo condicionan. El cuerpo técnico al completo trabaja para que aunque haya jugadores que requieren diferentes marchas, el equipo mantenga una misma velocidad.

Unicaja Mundialista: Georgios Printezis (Grecia).

Preparador físico: Enrique Salinas.

T1: Se deja descanso de entre una y dos semanas, dependiendo de cuándo termine la selección y el margen que hay hasta el inicio de la competición con el club.

Nuestro jugador Giorgos Printezis tuvo una semana de margen entre el Mundial y la incorporación a nuestra pretemporada.

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El Mundial y las consecuencias para los ACB (y II)

T2: Es lo más difícil de ajustar porque vienen de un período de entrenamiento y de competición y suelen llegar con lesiones. Lo primero que hay que hacer es analizar cómo llega el jugador. Se empieza con niveles bajos de entrenamiento y se va adaptando a la dinámica del equipo.

T3: La caída ocurre por la acumulación de pequeñas lesiones y molestias, de las que no se ha podido recuperar durante el verano y se hacen crónicas. Aparecen cada vez más acentuadas, por ello el rendimiento baja e incluso a algunos hay que pararlos porque físicamente no dan el nivel.

CAI Zaragoza Mundialistas: David Barlow (Australia) y Paolo Quinteros (CAI Zaragoza).

Preparador físico: Isaac López.

T1: Que Barlow apenas haya contado para el seleccionador de Australia supone que no debe ser tratado como un jugador que ha jugado 30 minutos de media. El caso de Quinteros es similar, aunque haya tenido un rol diferente con Argentina, porque su volumen de minutos no ha sido elevado. A su llegada, a ambos se les G 90

realizaron análisis. En nuestro caso se les concedió dos días de descanso nada más.

T2: El nivel físico era superior al de sus otros compañeros al llegar a Zaragoza. Tenían más rapidez, mejores recuperaciones, más sensaciones con el balón... Esto se puede pagar durante el año si no se tiene control. Para alargar su alto nivel de rendimiento realizamos un control diario. A partir de los datos, aplicamos en determinados momentos de la temporada un mayor número de cargas de recuperación que favorecerán el mantenimiento de ese óptimo nivel de rendimiento. Hasta que no pasemos media temporada aproximadamente ese nivel óptimo no se verá modificado. Si somos capaces de dosificar la carga en la segunda parte de la temporada y a ello le sumamos una dieta adecuada y un correcto plan ergogénico {suplementos vitamínicos}, no tiene que haber grandes oscilaciones en el estado óptimo de rendimiento de los jugadores.

T3: Es imposible predecir el extremo de la caída. El baloncesto no es un deporte puramente fisiológico donde los parámetros físicos manden al 100% en el rendi-

En la parte superior, Quinteros (CAI) y Printezis (Unicaja). Sobre estas líneas, Andriuskevicius (Meridiano Alicante).

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En esta página a la izquierda, Uros Slokar mantiene el balón (Assignia Manresa) y a su derecha, el escolta del Baloncesto Fuenlabrada, Davor Kus, lanza a canasta.

miento del deportista. Hay otros muchos factores que pueden alterar el rendimiento, como los de índole psicológica, emocional, relacional, de rol dentro del equipo, etc. Solemos decir que ‘si tu cabeza va bien, tu cuerpo va mejor’. Por eso es imposible predecirlo.

Assignia Manresa Mundialista: Uros Slokar (Eslovenia).

Preparador físico: Xavi Schelling.

T1: Desde nuestro punto de vista, es de capital importancia respetar la recuperación del jugador. En el caso concreto de nuestro equipo, a los jugadores internacionales les dejamos no menos de 7 días.

Durante este período de tiempo pactamos con el jugador si debía estar con la familia todo el tiempo, o bien venir al club a realizar una intervención regenerativa (trabajo suave en piscina, estiramientos, masaje e intervención ergo-nutricional) o hacer una combinación. Es interesante hacer un análisis de sangre. Si tenemos datos del jugador de la temporada anterior será ideal ver en qué estado nos llega y si es un nuevo fichaje intentar obtener datos suyos de temporadas anteriores.

T2: Estos jugadores necesitan una compensación de cargas dentro de la semana de entrenamientos. Debe respetarse, sobretodo, al principio de la semana, el favorecer un poco más su recuperación con

intervenciones regenerativas o bien reduciéndole el volumen de entrenamiento.

En definitiva, darles algunos descansos más durante la temporada (1 ó 2 días), sobretodo durante la primera vuelta, porque la segunda es más llevadera. Permitir esto en equipos que disputan doble competición es más complejo pero no tanto para los que ‘solo’ disputamos la ACB. T3: Hay fatiga fisiológica y psicológica (o ‘burn out’), y un incremento de lesiones e infecciones. A efectos prácticos la caída suele producirse entre diciembre y febrero. La ‘cuesta de enero’ es un tópico real también en una temporada deportiva, pero no es una ciencia exacta.

Meridiano Alicante Mundialista: Martynas Andriuskevicius (Lituania).

Preparador físico: Francisco Collado.

T1: En nuestro caso, Martynas tuvo 5 días de descanso. El jugador debió volar de Turquía a Lituania y posteriormente de Lituania a España.

T2: Martynas tuvo muy poca acumulación de minutos en el Mundial. Se podría decir que para él el Mundial fue un descanso activo. Nuestra idea al ser un jugador que había disputado pocos minutos, fue incorporarlo al ritmo del equipo lo antes posible. No dosificamos a Martynas durante esta recta final de la preparación.

T3: La caída depende del número de mi-

nutos en sus equipos, del número de competiciones, de la preparación previa a cada campeonato y del grado de estrés. La caída del rendimiento de los jugadores que hayan disputado más de 25 minutos por partido en el campeonato podría darse durante los meses de noviembre y diciembre.

Este descenso puede ser debido a pequeñas molestias que pueden empezar a aparecer por el número de partidos acumulados, sobre todo en jugadores que jueguen dos competiciones, y en los casos que se haya tendido a prolongar el estado de forma óptimo. En nuestro caso, Martynas es un jugador joven y en la posición de pívot, él está en franca progresión física, técnica y táctica. Nuestro equipo solamente disputa un partido a la semana, lo que le beneficia para ir mejorando su rendimiento. Creemos que el hecho de no haber jugado minutos no le beneficia en la adquisición de su estado de forma óptimo, por tanto, él estará cerca de su mejor nivel a partir de noviembre, si bien estamos intentando acortar los plazos.

Baloncesto Fuenlabrada Mundialista: Davor Kus (Croacia) Preparador físico: Javier Rubio.

T1: A Kus lo fichamos al principio de octubre y vino en la última fase de recuperación de una microrotura en el isquiotibial de su pierna derecha producida en el último partido que jugó en el Mundial. La primera actuación fue recuperarle y fortalecerle, y en total estuvo 21 días sin hacer nada. En un caso ideal, tras un Mundial se necesita un tiempo de descanso para el físico y para la mente.

Siempre es bueno que haya 4 ó 5 días de descanso para desconectar, porque físicamente los mundialistas suelen estar bien.

T2: Desde de que volviese Kus a entrenar nunca hizo lo mismo que el resto y el trabajo físico siempre lo individualizamos.

Para mí es más fácil hacerlo así y le dosificamos en la cancha. Sus compañeros tenían una base de trabajo físico, pero él no.

T3: La caída depende de muchas cosas.

Croacia cayó eliminada una semana antes que el resto y por eso creo que en Kus no debería aparecer un bajón, pero en el caso contrario, se retrasaría mucho más. Davor es muy duro y aguanta mejor que otros.

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