La vida después de Facebook Por Paola Pinedo García “…Y un día, inventaron el Facebook… Y mi vida cambió. Pude volver a contactarme con los viejos amigos perdidos del colegio, y enterarme por la red antes que por televisión de la muerte de Michael Jackson. Pude compartir con mis amigos de la red el dolor por esta gran pérdida y enterarme de que los Killers darían un concierto en Lima. Ah, y leer los mensajes tan motivadores que dice sobre mí mi galleta de la fortuna. En verdad, no sé qué sería de mi vida sin Facebook…”. Estas “reflexiones” de un usuario de Facebook podrían resumir el significado de esta red social en la vida de muchas personas. Sin embargo, los cambios sociales y el impacto de Facebook y otras redes cibernéticas en la vida cotidiana han puesto sobre el tapete la polémica sobre el uso de este tipo de herramientas tecnológicas y los posibles riesgos para la seguridad e, incluso, la salud de las personas. Enlace Virtual echó un vistazo a algunas de las posturas críticas y otras a favor, y comprobó que más allá de la controversia y los inevitables juicios de valor, no podemos dejar de apreciar la enorme utilidad de las comunidades virtuales. Facebook podría considerarse el servicio estrella de la segunda generación de desarrollo tecnológico en Internet o “Web 2.0”. La razón: concentra los principales atractivos y ventajas para el usuario que pueden ofrecer las redes sociales hoy en día. Sus 250 millones de usuarios en el mundo respaldan dicha afirmación. El eterno debate Hablar con los amigos, encontrar a gente que tiene alguna relación con nuestro pasado (ex compañeros de escuela o trabajo), conectarse con personas con los mismos gustos y aficiones (fans del rock de los 80, de Star Treck, de García Márquez, etc.), expresar nuestro estado de ánimo en tiempo real, o utilizar la plataforma para publicitar o concretar algún negocio, publicar fotos y videos, son sólo algunas de las múltiples aplicaciones que ofrece Facebook. Como contraparte, las críticas apuntan a la invasión a la privacidad que podría generar la exposición involuntaria de terceros mediante fotografías y videos publicados en esta red. Asimismo, la ciberadicción que podría producir en los usuarios es otro punto en el que se centran los comentarios negativos. A estas críticas se suman las restricciones ya que ya empezaron a imponer ciertos organismos como el Pentágono en Estados Unidos, que prohibió a los integrantes de la Infantería de Marina estadounidense utilizar Facebook, MySpace y otras redes sociales cibernéticas ante los posibles riesgos de seguridad nacional que puedan plantear. Los celos entre parejas por la exhibición de fotos comprometedoras y hasta comentarios insultantes en los muros utilizados como causales de divorcio
son otras “perlas” que Facebook ha sacado a relucir dentro de los cambios originados en la vida cotidiana de sus usuarios. Una red millonaria La impresionante aureola de éxito que rodea a Facebook habla de su importancia no sólo en la vida cotidiana sino también en la escena económica mundial. En principio, destaca la brillante manera en que fue creada al nacer como un proyecto universitario de Harvard, y su meteórico ascenso al entorno mundial de la Internet. Sin duda, el joven Mark Zuckerberg tuvo en Facebook al mejor “hijo” que todo padre orgulloso de serlo puede imaginar. El muchacho de Harvard, fundador de Facebook y considerado el magnate más joven del planeta por la revista especializada Forbes, tiene a sus 23 años una fortuna estimada en 1500 millones de dólares, amasada desde que en 2004 le regalara al mundo la red social más popular de la Internet. Para los expertos en tecnología web, Facebook no es más que un sitio gratuito de redes sociales abierto a cualquier persona que tenga una cuenta de correo electrónico. Para el usuario común, en cambio, Facebook puede ser un mundo de posibilidades de conectarse desde el rincón más modesto e inapreciable del planeta, con cualquier otra persona que comparta o no las mismas aficiones, intereses y ganas de compartir su tiempo en la red. En poco tiempo, Facebook ha pasado a ser parte del día a día de muchas personas, lo cual es innegable. Si bien no existen investigaciones a gran escala sobre los tipos de usuario de esta red social, se sabe por algunos estudios focalizados en Estados Unidos que entre los usuarios promedio de Facebook se encuentran estudiantes universitarios y adultos trabajadores. En suma, la irrupción de Facebook ha marcado un antes y un después en la manera de utilizar e interactuar en las redes sociales de Internet, cuyas implicancias debemos dejar en manos de los expertos, en este caso, los cultores de la llamada ciberantropología. A nosotros, en tanto, como usuarios de Facebook, nos queda sólo aprovechar lo que estas redes sociales tienen para facilitarnos la vida.