en un asilo de ancianos de bilbao, vivía un vasco que decía no tener nada en la vida...
Fíjese nada más, que no tengo nada, sólo mis recuerdos...
Este hombre alguna vez fue famoso. fue el héroe de muchos, jugó al futbol. le llamaban bala roja...
fue un niño sin carencias, malo para los estudios, vivo para patear la pelota...
ya me quiero ir a jugar...
Joven Guillermo, ponga atención...
A los 16 años dejó los estudios...
Y se volvió futbolista...
Anduvo jugando aquí y por allá hasta que fue a dar a san mamés...
al ser extremo izquierdo, formó parte de una mítica delantera del athletic de bilbao...
Su gran velocidad y su poderoso disparo de derecha, cuando atacaba en diagonal, fueron muy temidos...
formó parte de la legendaria furia roja de 1934 y, por supuesto, defendió los colores de la selección vasca…
hasta que empezó la guerra en españa...
para ese entonces, la selección vasca viajó a américa para apoyar la causa. él no hizo el viaje. a diferencia de la mayoría, era pàrtidario de franco...
Cuando terminó la guerra, tuvo grandes momentos con el valencia...
y también, su gusto por la buena vida y las parrandas, le marcaron el paso...
Bebía por las noches, jugaba por las mañanas...
este hombre es el mejor extremo izquierdo del futbol español…
y todos le aplaudían, dicen que jugaba como hoy lo hace cristiano ronaldo...
Pero volvamos a bilbao, es el año 1965. la bala roja lo perdió todo: su familia, su dinero, su fama...
Me lo bebí todo, lo gasté todo y ahora hago el ridículo...
aquella tarde salió a dar un paseo y volvió a encontrarse con la pelota… moriría poco tiempo después, el 23 de agosto de 1966...