El Caracol de la escuela
Una ma帽ana de viento y lluvia, Caracol asom贸 su cabecita y vio una gran seta muy roja, y muy redonda...
Corrió a refugiarse debajo de ella. ¡Zas! Una enorme gota cayó, golpeando uno de sus cuernos que escondió rápidamente. Cuando recobró su visión, el arcoíris inundaba el jardín.
Entre los pétalos caídos de las flores, apareció una pequeña hormiga. Estaba asustada y tenía frío. Caracol le ofreció un rincón dentro de su concha.
- "Hormiga, ven conmigo... en mi casa hay hueco para ti"
La hormiga se quedó dormida. Había sido un día muy duro. Se despertó, salió de la concha y vio a una ardilla saltando de árbol en árbol recogiendo bellotas y otros frutos secos.
De repente, apareció un hombrecillo pequeño, estaba enfadado, iba diciendo: - "No me gusta el otoño, empieza a hacer frío, llueve y se caen las hojas de los árboles ¡Grrr! Habrá que ponerse los pololos rojos y ese horrible jersey a rayas... ¡Grrr!"
Se giró malhumorado y, en ese mismo momento, vio que estaba acompañado. Clavó sus ojos en Hormiga y Caracol... -"¿Has pensado en lo bueno que nos trae esta estación?”, le dijo Caracol - "Castañas, nueces, avellanas ¡Mmm! Se me hace la boca a agua“ pensó en alto Hormiga.
La cara del gnomo empezó a cambiar y una sonrisa la inundó. Se imaginó disfrutando de esos manjares, pensó en las grandes setas que brotarían en el bosque y que le servirían de refugio en los días de lluvia, en los charcos que podría saltar y en los bonitos colores de las hojas. Comenzó a tararear una canción y se alejó soñando con los ojos abiertos, sin darse cuenta de que era feliz, tanto que olvidó despedirse de Hormiga y Caracol. Al llegar al final del jardín, el señor Gnomo volvió su cabeza…
-Eh -Amigos, ¡Feliz Otoño!
Y continu贸 su camino hasta desaparecer en el horizonte Y color铆n colorado, este cuento se ha acabado ;)