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El bestiario De cuando la inmolación de un periodista puso en peligro la esperanza tunecina
El BEstiario
Santiago J. Santamaría
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LA INMOLACIÓN DE UN PERIODISTA, ABDERRAZAK ZORGUI, PUSO EN PELIGRO LA ESPERANZA TUNECINA DE LAS ‘PRIMAVERAS ÁRABES’
En el Magreb, “lugar por donde se pone el sol”, el Poniente, la parte más occidental del mundo árabe, y el más cercano a España y la Unión Europea, Túnez mantiene todavía abierta su transición democrática después de la ‘Revolución del Jazmín’ que dio comienzo en diciembre de 2010. La parte opuesta se denomina Máshrek o Levante. Tradicionalmente se ha llamado Magreb a la región de África del Norte que comprende los países de Marruecos, Túnez y Argelia, aunque más modernamente se incluye también a Mauritania y Libia. Extraño e interesante país el de Túnez, el cual visité en repetidas ocasiones como reportero en los ochenta del siglo XX. Crucial, a pesar de su tamaño limitado. Allí arrancaron las revueltas árabes de 2011 y allí se mantiene viva todavía la esperanza gracias a sus libertades, su democracia parlamentaria y su Estado de derecho como un auténtico islote en un océano de dictaduras, opresión y arbitrariedad. “He decidido hoy desatar una revolución… Estoy harto de las promesas incumplidas”, dijo Abderrazak Zorgui mirando a la cámara en un mensaje grabado en víspera de Navidad y que colgó enseguida en las redes sociales. Veinte minutos después, se inmoló. Zorgui, un joven periodista en situación precaria, murió a causa de las quemaduras mientras era atendido en el hospital. Con su trágica acción, pretendía emular a Mohamed Buazizi, el vendedor ambulante cuyo suicidio desencadenó la revolución. A pocos días del octavo aniversario de la huida del sátrapa Ben Alí, la conflictividad social se ha disparado en Túnez. La decisión de Zorgui, de 32 años, no respondía solo a la desesperación provocada por su situación personal, sino que tenía una motivación política enmarcada en el sufrimiento de toda una generación de jóvenes parados sin expectativas de futuro. “Hay gente que no tiene absolutamente nada. Hay regiones sin un duro. Hay gente que está muerta aunque estén vivos”, comenta en su vídeo, colgado en las redes sociales y ampliamente compartido. “Voy a protestar solo. Me voy a inmolar y si alguien llega a encontrar un trabajo gracias a mí, estaré encantado… Quizás el Estado va a reaccionar”, añade. Su suicidio tuvo lugar en la Plaza de los Mártires de la ciudad de Kasserine, capital de una de las provincias más pobres del país. Precisamente en una región colindante, Sidi Buzid, con una problemática social parecida, fue donde saltó la primera chispa revolucionaria en 2011. La muerte de Zorgui ha provocado una reacción de rabia entre los jóvenes en Kasserine, donde se han registrado enfrentamientos con la Policía durante los dos últimos días. Según fuentes policiales, una treintena de personas han sido detenidas. Si bien han sido de menor intensidad, también se han registrado disturbios en las zonas de Teburba y Jebeniana, donde un muchacho intentó inmolarse, pero lo evitaron los otros manifestantes. La enorme desigualdad entre las provincias costeras y las del interior del país fue uno de los detonantes de la revuelta contra el régimen de Ben Alí, cuya propagación a otros países de la región dio lugar a las llamadas “primaveras árabes”. A pesar del éxito de la transición a la democracia en Túnez, los habitantes de las zonas y barrios marginados se quejan de que nada ha cambiado para ellos después de la revolución. En lugares como Kasserine, la tasa de paro juvenil supera el 50%, duplicando la media nacional. La acción desesperada de Zorgui no es un caso aislado. En los seis primeros meses de 2018, se produjeron 281 suicidios o intentos de suicido, según la fundación FTDES. En la mayoría de casos, los autores eran hombres de entre 26 y 35 años y su motivación era de tipo económico o social. En los últimos ocho años, decenas de jóvenes han intentado emular a Buazizi quemándose a lo bonzo. “Este es un suicidio de protesta. Sin la atención o el apoyo del Gobierno, los partidos políticos o los sindicatos, muchos jóvenes se sienten completamente desamparados y consideran que su cuerpo es su único recurso para la protesta”, señala el sociólogo Abdesattar Sahbani, especializado en suicidios. El mes de enero suele ser el más “caliente” en Túnez. El año pasado, el Gobierno tuvo que recurrir al toque de queda para frenar una ola de protestas sociales que desembocó en disturbios nocturnos en diversas ciudades. Este año, se podría repetir la misma situación, quizás agravada, pues la temperatura social se ha recalentado durante las últimas semanas. A los diversos paros sectoriales de abogados, maestros y transportistas, se ha unido la convocatoria de una huelga general para el próximo 17 de enero por parte del todopoderoso sindicato UGTT. Si a las movilizaciones en la calle de los jóvenes desempleados se sumara el músculo organizativo de la central sindical, el Gobierno podría verse desbordado, abriendo una crisis política de consecuencias imprevisibles…
Todo es excepcional en la transición tunecina a
la democracia, iniciada el 14 de enero de 2011, tras el derrocamiento y huida del dictador Ben Ali, empujado por la imparable rebelión juvenil que estalló un 17 de diciembre de 2010, tras la muerte de Mohamed Buazizi, un vendedor de fruta de una localidad del Túnez interior, Sidi Bouazid, que se prendió fuego con gasolina después de que la Ppolicía le incautara la mercancía. Fue el arranque y el modelo de las primaveras árabes en aquel año sin parangón en que cayeron tres dictadores uno detrás de otro -Ben Ali, Mubarak y Gadafi- y ahora es el único país donde la revolución no ha retrocedido ni ha sido vencida por la contrarrevolución -como en Egipto- ni ha quedado destruido por la guerra civil -como en Libia, Yemen y Siria-. Nadie puede garantizar, sin embargo, que la excepcionalidad democrática tunecina esté perfectamente consolidada ni que su transición democrática se pueda dar por culminada. Ante todo, porque han sido escasos los efectos de la democracia en la vida cotidiana de los tunecinos. “No ha habido transición económica, ni democracia económica”, suelen decir los sindicalistas tunecinos. No basta con disfrutar de la libertad de expresión, el derecho de voto o la proliferación de opciones políticas. Extender un estado de bienestar que es ya de por sí muy débil, crear puestos de trabajo, reducir las desigualdades y mejorar la educación y los servicios de salud son condiciones indispensables para el asentamiento de la democracia. A esta construcción le faltan además dos piezas institucionales. De una parte, la polarización política entre islamistas y laicos y la fragmentación partidista -especialmente dentro del campo laico- han impedido hasta ahora la coronación del edificio constitucional con la elección de la corte suprema que haga de árbitro en los litigios que afectan a la interpretación de la carta magna. De la otra, tampoco se ha completado el reconocimiento de los derechos individuales consagrados por la Constitución a la mitad femenina de la población en lo que afecta a la herencia, una cuestión en la que una más que discutible tradición coránica atribuye a los hombres el derecho a heredar el doble de lo que tienen derecho a heredar las mujeres. Ambas cuestiones son cruciales para los tunecinos pero también para el conjunto del mundo árabe y musulmán. Que un país de mayoría islámica pueda terminar felizmente su edificio constitucional, democrático, laico y liberal, establece un precedente y es un estímulo para que otros países de la misma geografía y cultura lo intenten de nuevo, después de la frustrante experiencia de 2011, al igual como la igualdad tunecina en el derecho de herencia estimulará a que todas las mujeres de la geografía islámica, ahora desposeídas, lo reclamen y obtengan también algún día.
La igualdad entre hombres y mujeres ante la herencia es uno de los conflictos abiertos que polariza la sociedad
El ritmo de la transición tunecina entrará en 2019 en un punto de vértigo, en el que todo se jugará a cara o cruz. Habrá elecciones presidenciales por segunda vez desde la caída del dictador y también generales. Se preparan fuertes movilizaciones sociales. La calle sigue siendo de los jóvenes, pero quienes están en el poder todavía son los viejos: hay por tanto una transición generacional que pugna por fraguar con este ciclo electoral. Al actual presidente Beji Caid Essebsi, de 92 años, le tienta el ensueño de repetir. Rachid Ganouchi, de 77 años, líder y fundador del muy influyente partido islamista En-Nahda, que ya ha estado en el poder y ha sabido abandonarlo pacíficamente, también cuenta con admiradores que quisieran verle como presidente. Desde la revolución, han salido de Túnez hacia el exilio económico y profesional más de 100,000 jóvenes. Este drenaje de la excelencia tiene su contrapartida en otro drenaje, este muy peligroso, como es el de la delincuencia y el terrorismo, en el que Túnez también ha destacado. Las autoridades reconocen que 800 jóvenes tunecinos han regresado ya de Siria, donde han estado combatiendo al lado del ‘Estado Islámico’. Otra excepción tunecina, bien extraña siendo el país políticamente más avanzado de la región, es que haya sido el lugar de donde ha salido una mayor proporción de combatientes terroristas, entre 3,000 y 6,000 según distintas evaluaciones. El mayor riesgo para Túnez es geopolítico. Su geografía y su entorno le conducen a integrarse en las líneas de fractura y de conflicto árabes e islámicas, sometidas actualmente a una guerra fría entre un islam autoritario y trumpista, que representan Arabia Saudí, Emiratos y Egipto, y el islam iliberal pero democrático de Erdogan y los Hermanos Musulmanes, aliados ahora con Rusia e Irán. Las protestas populares suscitadas por la visita reciente a Túnez del príncipe sospechoso de asesinato Mohamed bin Salman, las únicas en todo el mundo árabe, expresaron muy bien la ex-
la calle tunecina contra el autoritarismo saudi.
La geopolítica árabe e islámica gravita sobre la política tunecina con mayor fuerza que la atracción de la Unión Europea
Para amortiguar el riesgo de verse engullido en el conflicto intraislámico, Túnez necesita de la Unión Europea. Los tunecinos, nueva excepción, han hecho una transición sin pista de aterrizaje. Su destino natural hubiera sido una geografía política árabe en la que hubieran triunfado las revoluciones democráticas, pero ha ocurrido exactamente lo contrario, y ahora el peligro que acecha es que sea engullido por la contrarrevolución en cualquiera de sus formas. Túnez se halla más cerca del núcleo duro de la Unión Europea que algunos de sus países miembros y, por supuesto, que muchos de los vecinos continentales con expectativas de incorporación. Y eso es así no tan solo por su sistema político, sino sobre todo por la vocación europeísta de sus dirigentes y de su población, incluyendo incluso buena parte del islamismo democrático. Esta pasada semana la senadora italiana, exministra de Exteriores y excomisaria europea Emma Bonino, ha encabezado una delegación del ECFR (European Council on Foreign Relations) que se ha entrevistado con todo el espectro de fuerzas políticas, sociales y sindicales, con el objetivo de promover mejores políticas europeas en relación a este vecino del sur del Mediterráneo en un momento tan delicado de su transición. Justo cuando la Unión Europea ha dejado de representar un atractivo para muchos, tal como ejemplifica el Brexit o el cambio de actitud de Turquía, los tunecinos siguen buscando en Europa la pista de aterrizaje que su entorno geopolítico no les da. Europa está muy pendiente de sí misma y acaso de Rusia, pero algo más de su atención debiera dedicarse al sur del Mediterráneo donde también se juega su futuro y cuenta además con su mejor aliado dentro del mundo árabe e islámico.
El turismo revive en Túnez y Egipto tras siete años de frustración; los dos países experimentan fuertes alzas en la llegada de extranjeros
“Ha sido un verano muy positivo. Los datos son excelentes y encaramos el futuro con optimismo”, afirma Adel Masry, presidente interino de la Cámara de Comercio de Egipto. Egipto recibió hasta junio pasado unos cinco millones de visitantes que gastaron 4,800 millones de dólares (4,130 millones de euros), un 77% más, según Reuters. Túnez fue visitado por siete millones de extranjeros y muchos hoteles de la costa han colgado el cartel de “completo” por primera vez. Después de tres años de ausencia, en las aceras de la céntrica avenida Bouguiba de Túnez vuelven a verse grupos de peatones de cabello rubio y ojos claros, siempre pegados a una cámara de fotos o a un palo de móvil con el que autorretratarse. Es una señal inequívoca del repunte del turismo en el país magrebí. Una tendencia parecida se ha producido en Egipto, país que ya registró el mayor incremento anual de turistas en 2017, según los datos de la Organización Mundial de Turismo. Para estas dos economías, esta actividad supone el 10% del PIB. Este éxito explica en parte el retroceso que ha experimentado este verano el sector turístico español. Entre los hoteles de los diversos países de la costa mediterránea existe una clara relación de vasos comunicantes: si unos ganan turistas, otros los pierden. En julio pasado llegaron a España 9.98 millones de visitantes extranjeros. Es más de lo que reciben Egipto y Túnez en todo el año, pero supone una caída del 4.9% con respecto a 2017, la mayor bajada desde abril de 2010.Mientras, Egipto vivió un 2017 de subidas en las visitas (se incrementaron un 55% sobre el año anterior) y los datos hasta junio son excelentes. Masry, en conversación telefónica, no tiene dudas sobre la razón de esta mejora tan notable. “La estabilidad es la razón. El país es más estable que en los últimos años”. En una reciente entrevista en el diario Daily News Egiypt, la ministra de Turismo, Rania Mashat, apuntaba otro motivo: el apoyo al sector por parte del Gobierno y el refuerzo de sus relaciones con otros países. Mashat se muestra confiada en que de que el sector podrá continuar en la senda del crecimiento gracias a un plan ministerial para mejorar la calidad de los servicios ofrecidos. Además, apuesta por el nuevo Museo Egipcio, cuya inauguración está prevista para 2020, como señuelo para atraer a nuevos turistas. Desde la Revolución de 2011, los esfuerzos del sector turístico de Egipto por recobrar sus registros de antaño se revelaron insuficientes. Tras unos meses de calma que insuflaban esperanzas entre los hoteleros, el país volvía a caer en la inestabilidad política, se producía un golpe de Estado o padecía un ataque terrorista que echaba al traste todo el trabajo hecho. Sin duda, el golpe más duro llegó en otoño del 2015, con el siniestro de avión civil ruso en el Sinaí en el que fallecieron los 225 pasajeros. El ‘Estado Islámico’ (ISIS, por sus siglas en inglés) lo reivindicó como un atentado. El año siguiente fue un auténtico annus horribilis para el sector turístico egipcio, que recibió solo 5.2 millones de turistas, un tercio de lo registrado en 2010. Los beneficios del sector aún se han elevado más, hasta cerca de un 40%, fruto de la brusca depreciación del dinar tunecino.
Dos brutales atentados de ISIS, uno en el Museo del Bardo y otro contra un hotel en una playa de Susa, dejaron 50 turistas muertos
En Túnez, el efecto de los vientos de la Primavera Árabe sobre el turismo no fueron tan dramáticos como en Egipto. En 2011, las llegadas de turistas se desplomaron, pero en los tres años siguientes no quedaron lejos de los 7,8 millones de visitantes registrados antes de la Revolución. La transición tunecina evolucionaba por unos derroteros más pacíficos y exitosos que la egipcia, algo que se reflejaba en la ocupación hotelera. Pero en 2015, llegó el peor mazazo. Dos brutales atentados, uno en el Museo del Bardo y otro contra un hotel en una playa de Susa, reivindicados ambos por el ISIS, dejaron largo reguero de sangre: más de 50 turistas muertos. El año siguiente, al menos 70 hoteles habían cerrado sus puertas. Desde entonces, las fuerzas de seguridad han reforzado notablemente sus capacidades, y la actividad terrorista ha quedado restringida en una remota zona montañosa cerca de la frontera con Argelia. En los últimos tres años, no ha habido ningún otro atentado en las zonas turísticas.
El sector pudo capear el temporal a base de reventar precios y la llegada masiva de turistas de Argelia. Ante la huida de los occidentales, los visitantes rusos salvaron la temporada. Aquel año fueron más de medio millón, casi triplicando la cifra del año anterior. Esto se debió a que Túnez reemplazó a Egipto, un destino tradicional para los touroperadores rusos, después de que se suspendieran los vuelos que conectaban Rusia y Egipto a raíz del atentado del Sinaí. Así pues, por fin, los empresarios hoteleros de ambos países encaran el futuro con optimismo. Y sus gobernantes respiran aliviados por el gran peso que esta actividad tiene para unas economías poco diversificadas. Ahora bien, no está claro que la recuperación se asiente sobre bases sólidas. ¿La mejora podría resistir un atentado contra intereses turísticos? “No creo, pero nadie está libre de ese peligro. También en París cayó el turismo tras los atentados. Es normal”, reflexiona un responsable del Ministerio de Turismo que prefiere guardar el anonimato.
La voz de la Primavera Árabe quiere volver a sonar en su tierra. Emel Mathlouthi se siente marginada en el Túnez posrevolucionario
Su nombre significa “esperanza” en árabe. Ese mismo sentimiento que Emel Mathlouthi (Túnez, 1982) supo transmitir a la juventud tunecina anhelante por reconquistar la libertad perdida bajo el régimen de Ben Ali. La canción ‘Kelmti Horra’ (Mi palabra es libre), interpretada de forma espontánea durante las protestas de la Revolución de los Jazmines en 2011, dio la vuelta al mundo convirtiéndola en “la voz de la Primavera Árabe”. Siete años después, las composiciones de la artista, principalmente en árabe y con influencias que van de la canción protesta al heavy metal pasando por el trip-hop, escapan a cualquier intento de clasificación. Mezcla de ritmos electrónicos y de instrumentos tradicionales tunecinos, la música de Mathlouthi es libre y su afán por experimentar y reinventarse es constante. Sus vibrantes letras se escuchan hoy en los escenarios de medio mundo, pero lamenta no tener más visibilidad en su país, donde solo ha actuado una vez en los últimos seis años. “Prefiero guardar una relación intacta con Túnez. A veces estoy enfadada y a veces no. Quedan muchas cosas por hacer”, explica Mathlouthi de paso en Madrid en el marco de una gira internacional. La artista de 35 años afincada en Nueva York vive en sus carnes el dicho de que nadie es profeta en su tierra. Siente que sus creaciones siguen sin ser aceptadas por las autoridades, pero se consuela con la admiración que le profesan muchos compatriotas: “Me respetan mucho y aunque me gustaría hacer giras y que pusieran mis canciones en la radio, saber que cuento con el apoyo de mi gente es fundamental”, confiesa la artista que dice llegar a los tunecinos a través de las redes sociales. El Ministerio de Cultura y la emisora pública Radio Túnez Canal Internacional (RTCI) aseguran que sus canciones suenan “con frecuencia” en RTCI e insisten en que Mathlouthi fue invitada en 2017 a uno de los festivales “más importantes” de la escena musical tunecina. Ambos alegan que la poca visibilidad de la cantante se debe sobre todo a su alejamiento geográfico. “Como no vive aquí”, explica Hatem Bourial, productor de RTCI, “no tiene un gran público y si no suena en otras radios es por razones editoriales, no políticas”.
Sin embargo, el pasado verano fue el clamor popular el que precisamente forzó a reponer el nombre de la cantautora en el cartel del Festival Internacional de la ciudad de Cartago, que previamente había cancelado su actuación. Entonces Mathlouthi, que llevaba cinco años sin cantar en Túnez, denunció públicamente el “boicot” y las “barreras invisibles” que le impedían conectar con su audiencia y se sintió traicionada por no recibir el reconocimiento de la nación que representó en la ceremonia de los premios Nobel de La Paz de 2015, cuando el galardón recayó en cuatro organizaciones de la sociedad civil tunecina. “Estoy harta de que se quiera hacer creer que boicoteo a Túnez y que actúo en todas partes salvo en mi país por elección propia. ¿Por qué siempre tienen que hacernos sentir que no somos bienvenidos en nuestro propio país? Seis años después de la revolución, las ideas tienen que poder tener derecho a nacer e inspirar a los demás. Pido justicia”, escribió en un comunicado publicado en Facebook.
La joven tunecina, que floreció como intérprete en la adolescencia con un grupo de heavy metal en un circuito underground de pequeños festivales y teatros, conoce bien las limitaciones a las que se enfrentan los que quieren romper con las tradiciones. “No había estructuras para producir o apoyar el tipo de música que hacíamos, ya sea debido al tipo de letras o por salirnos del canon [de la música tradicional árabe]”, recuerda la intérprete que lamenta la persistencia de dificultades que aún encuentran muchos artistas tunecinos: “Muchos lo intentan, pero todo sigue siendo muy opaco y difícil. Quizá haya 10,000 Britney Spears, pero no podrían ir a ninguna parte”. Las trabas, sin embargo, no han conseguido frenar la carrera de una cantante que, bajo la influencia de Joan Baez, Elisa Serna o el egipcio Sheikh Imam, nunca ha temido romper esquemas. En Ensen (Humanos) (2017), su último álbum bendecido por la crítica internacional, Mathlouthi encontró en la electrónica la libertad creativa que siempre ha perseguido: “Este género te da posibilidades infinitas”, explica, “cómo un químico que estaría en un laboratorio buscando fórmulas para hacer algo que tenga una relevancia y sea diferente”. El disco, un auténtico ovni musical producido por Valgeir Sigurðsson (Bjork, Sigur Rós), mezcla sonidos grabados a partir de instrumentos tradicionales tunecinos como el bendir (percusión) o el laúd (guitarra) con los ritmos contundentes de los sintetizadores. La artista es consciente de que se ha alejado de un primer álbum, ‘Kelmti Horra’ (2012), concebido con un sentido de responsabilidad hacia su país. En las nuevas composiciones ha hecho de su canto a la libertad un tema más universal, tras viajar a países como Kurdistán, Irak, Irán o Egipto. “He conocido personas, audiencias y culturas muy diferentes que han contribuido a moldear mi arte y a abrir mi mensaje”, cuenta Mathlouthi que se define ante todo como una “militante de la empatía”. Un sentimientoque la ha llevado a abordar temas como la discriminación que sufre el colectivo LGBTI o el drama de los re fugiados e
incluso a participar en el valiente y premiado documental del director iraní Ayat Najafi, No land´s song (2014), en el que junto a otras cantantes intenta montar un concierto de mujeres en Teherán pese a la prohibición. En escena, la fascinación que ejerce la carismática intérprete sobre el público es palpable. La barrera del idioma desaparece abriendo paso a la pura emoción. Durante su actuación en el festival Ellas Crean, entre una audiencia hechizada por su suave y poderosa voz, más de una persona acabó derramando lágrimas ante una música que su creadora concibe como una “ascensión a los cielos”.
Túnez y los caballeros Jedi. Visita a los decorados tunecinos de ‘La guerra de las galaxias’, país que sirvió de plató para la saga de George Lucas
Existen pocos lugares tan melancólicos como los viejos decorados de cine; evocan el rayo de vida y de imaginación que un día los iluminó fugazmente. Dejados a su suerte, acaban, en el mejor de los casos, convertidos en extraños lugares de culto y peregrinación. Cuando George Lucas aterrizó por primera vez en este desierto de Túnez, ‘La guerra de las galaxias’ no era todavía una de las sagas más populares de la historia del cine, ni Darth Vader, el Lord Sith de La Fuerza, se había convertido en el arquetipo de antihéroe global. A mediados de los setenta, Lucas sólo era un cineasta relativamente joven, un cachorro que, junto a sus compañeros de viaje del nuevo Hollywood, había llegado a cambiar las reglas del juego con una película que fijó en el imaginario universal la imagen de dos encantadores y disparatados androides atravesando como vaqueros solitarios las dunas de arena. El equipo de dirección artística de la película encontró en Túnez la inspiración para crear la árida tierra de Tatooine, planeta arcaico y fronterizo, perdido en la galaxia, pobre y seco, cobijo de “moradores de las arenas”, chatarreros, traficantes, mercenarios, granjeros y ermitaños como Obi-Wan Kenobi. El nombre está directamente inspirado en la aldea tunecina de Tataouine, y algunas de las costumbres, arquitectura y paisajes del sur del país sirvieron de inspiración de la película; una prenda tan simbólica como la capa que cubre la cabeza y el cuerpo de los caballeros Jedi es la misma que todavía usan los campesinos que trabajan en los campos de la localidad de Matmata. La huella del planeta imaginario cruza de este a oeste la porción meridional de Túnez, donde el desierto se extiende por un 53% del territorio y solo vive un 3% de la población del país mediterráneo. Al este, cerca de Ong Jmel, casi en la frontera con Argelia y junto al gran oasis de Tozeur, justo en el lugar donde el desierto abre sus enormes fauces de arena amarilla y deja atrás kilómetros de desierto de piedra, permanecen casi intactos los decorados del rodaje de ‘La amenaza fantasma’ (1999) y ‘El ataque de los clones’ (2002), filmes con los que Lucas volvió al principio de la historia. La vista es impresionante para cualquiera. Si uno es fan de las películas, el efecto es directamente sobrecogedor. El pequeño Anakin Skywalker podría aparecer detrás de cualquier esquina de Mos Spa, como se conoce en la serie a este puerto del desierto. Despojada de los efectos digitales, con su aire de abandono, la postal es casi mejor. Se llega en cuatro por cuatro, después de dejar atrás lo que llaman cuello de dromedario, paraje donde se rodaron las escenas del accidente de avión de ‘El paciente inglés’ (1996). En medio de la nada, oculto entre un mar de arena, sobrevive el decorado abandonado. De las construcciones vacías ya no surgen los tipos fronterizos de otra galaxia, sino los desterrados de la nuestra. Son niños de la zona y sus zorritos del desierto, criaturas tan perfectas que parecen dibujos animados, encadenados a la mano. Un hombre ofrece su camello para hacerse fotos y un único y polvoriento puesto de souvenirs de la tierra ofrece rosas del desierto, minerales y dos disfraces que flotan como espantapájaros al viento. Parecen los fantasmas de Obi-Wan Kenobi y Darth Vader, capa, espada de luz y máscara que, al caer el sol, seguirán colgadas del mismo palo, ofreciendo una estampa perfecta para este lugar “de tribus indígenas y tramperos”, según dicta la película. Mabarouk es un conductor que trabaja en una de las 12 compañías que hay en las zona dedicadas a circular por las dunas. Llegar a este lugar requiere experiencia al volante. Las pistas invisibles del Sáhara, las continuas tormentas que lo cambian todo requieren destreza en la navegación. Para el turista, grumete novato, cruzar este paisaje es una aventura digna de la mejor montaña rusa. Los conductores suben y bajan las dunas mientras los gritos de los pasajeros provocan la risa. “Nadie debe asustarse, conocemos bien el desierto, solo he sentido miedo alguna vez en solitario,al caer la noche, encerrado en alguna pista. La mayoría llevamos años, hemos trabajado para el París-Dakar transportando a los equipos y nos hemos adentrado hasta muy lejos”. El decorado del desierto, con sus casitas a lo iglú, bebe de la arquitectura popular troglodita, cuyos hogarescueva inspiraron la casa de los tíos de Luke Skywalker. En Matmata Antigua, una de las casas en las que se rodó la primera película, hay hoy un hotel (Sidi Driss) que explota el fetichismo del mítico rodaje. Pese a lo descorazonador de sus toscos guiños a la película, mantiene el valor de ser el lugar exacto de algunos de los momentos inolvidables del filme. En la zona hay otras casas de trogloditas para visitar, son lugares mágicos, construidos bajo tierra en la montaña, que sin tecnología alguna logran un ambiente fresco y acogedor cuando las temperaturas son insoportables.
Las terribles huellas de las balas de Kaláshnikov siguen intactas en muchas vitrinas de El Bardo, museo de colecciones de mosaicos romanos
A veces, las postales están para dejarse llevar: un té de menta con almendras o piñones en la terraza blanca y azul del viejo café de Sidi Bou Saïd que un día inspiró al pintor suizo Paul Klee o una puesta de sol mirando las dunas del desierto que cautivaron a otro creador de una galaxia muy lejana, el director de cine George Lucas. Pero Túnez va más allá de sus arquetipos. También es un paseo en silencio por los restos de Cartago o un revolcón de historia en la arena del magnífico coliseo del Djem. Un país pequeño (casi 12 millones de habitantes), productor de aceite de oliva y de dátiles, regado de la belleza del pasado, pero también cubierto de los desechos de plástico y contrabandistas de carburante del presente, tipos que flanquean
con sus palmeras, burros y cabras, y mediterráneo, con sus buganvillas, sol y playa, como las de su perla turística, Hammamet. Un exotismo a la vuelta de la esquina, pero hoy olvidado. El país ha sufrido dos terribles atentados contra el turismo. El primero, en el Museo Nacional del Bardo; el segundo, en un hotel español en la playa de Susa. Ambos golpes se han notado en una nación cuya industria turística lleva, desde la primavera árabe, en retroceso. Túnez, que presume de la variedad y originalidad de su oferta para los viajeros, lucha ahora por recuperar la capacidad de seducción. A esto puede ayudar el Nobel de la Paz concedido al Cuarteto Tunecino, como se denomina a las cuatro organizaciones civiles (sindicatos, patronal, grupos de Derechos Humanos y el colectivo de abogados) que facilitaron en 2013 una salida dialogada a la transición tunecina iniciada tras la primavera árabe, en 2011. Si quiere sentirse como un gladiador romano viaje al Djem. Gracias a la conservación de su anfiteatro, el mayor de África y el cuarto más grande del mundo, se puede palpar la historia sangrienta de Roma. La omnipresencia del coliseo en una ciudad de casas bajas ofrece, además de una estampa majestuosa, una idea bastante cercana al uso que un día se dio a estas edificaciones. Su foso, al que se puede acceder para pasear por las galerías que fueron la última morada de los que iban a morir dan una idea exacta de cómo se organizaban los gladiadores y los leones (¡hasta se puede sentir el miedo y la muerte que albergan sus muros!). Por cierto, la película ‘Gladiator’ no se rodó en este coliseo, como aseguran algunas guías, pero Nike sí lo alquiló para rodar un anuncio con estrellas del fútbol que sus habitantes todavía recuerdan. Kairouán, la cuarta ciudad santa del islam tiene 78 mezquitas. Una de ellas, la Gran Mezquita, se cuenta entre las más amplias de África. Pero su pequeña joya es el mausoleo del Barbero, construido para albergar los restos del santo Abou Dhama, compañero de Mahoma que recibía el apodo de “portador de tres pelos” porque siempre llevaba encima tres pelos de la barba del Profeta. El antiguo cementerio de Kairouán (que hechiza por la belleza de sus lápidas minimalistas y blancas) y su medina (con sus auténticos cafés y barberías) forman parte de esta ciudad cuyos dulces de sésamo y dátil son los más famosos del país. Las terribles huellas de las balas de Kaláshnikov que dejó un atentado yihadista siguen intactas en muchas vitrinas del imprescindible museo de El Bardo, que posee una de las colecciones de mosaicos romanos más espectaculares del mundo, entre ellas la Gioconda del género: Virgilio y sus musas. También fascinante es el que representa a Ulises atado al mástil de su barco para no sucumbir a los cantos de las sirenas. La variedad, grandiosidad y belleza de los conjuntos que posee El Bardo dan fe del esplendor de las casas de los romanos, que en Túnez se enriquecieron con el comercio. Sidi Bou Saïd, cercana a la capital, es conocida por sus casas blancas y azules, sus vistas y su Café des Nattes, espectacular local que mantiene el sabor de un esplendor que se respira en las mesas, las alfombras, los artesonados de madera y los recortes de viejos periódicos que adornan sus paredes junto a las fotos de Albert Camus, Simone de Beauvoir, Sartre y Paul Klee, pintor que, según cuentan, descubrió aquí ni más ni menos que el color, en el legendario viaje que hicieron en 1914 él y sus amigos también artistas August Macke y Louis Moilliet. La atmósfera bohemia ha cautivado la imaginación de generaciones de amantes del jazz…
El 17 de diciembre de 2010, Mohamed Bouazizi, vendedor ambulante tunecino, se prendió fuego frente a la oficina del gobernador, abatido por no poder ganarse la vida y mantener a su familia. Su protesta retumbó por todo el mundo árabe, haciendo estallar manifestaciones en contra de la mala gestión económica y la autocracia política. En Túnez, las manifestaciones populares llevaron a la retirada del presidente Zine El Abidine Ben Ali tras 23 años de mandato; sin embargo, en otros países aún reina la inestabilidad y continúa la lucha por la libertad. Mohamed Bouazizi era un vendedor ambulante de 26 años originario del pueblo de Sidi Salah. Su padre murió cuando él tenía tres años y le educaron junto a sus seis hermanos y hermanas en una pequeña habitación en su pueblo natal. Abandonó su educación a principios de su adolescencia para poder mantener a su familia, pero siempre soñó con poder terminar el instituto. Ayudó a su madre, a su tío y a sus hermanos pequeños, pagó la carrera de una de sus hermanas ganando unos 140 dólares al mes vendiendo productos en la calle en la ciudad cercana de Sidi Bouzid. Según su familia, también solicitó unirse al ejército, pero le rechazaron. Los amigos de Bouazizi cuentan que era un chico amable y sociable que, a pesar de su difícil situación, siempre estaba dispuesto a ayudar a los demás, “daba verduras y frutas gratis a las familias pobres”. Sin embargo, durante años, los agentes de policía le acosaron y a menudo confiscaban sus productos. En diciembre de 2010, Bouazizi debía unos 200 dólares cuando fue abordado por la Policía, supuestamente por no contar con el permiso necesario para vender sus productos; más tarde, el líder de la oficina estatal de empleo de Sidi Bouzid declaró que no se necesita ningún permiso para vender en la calle en Túnez. Fue humillado públicamente por una agente de Policía, identificada después como Faida Hamdy, que, al parecer, le abofeteó la cara, le escupió, confiscó su balanza electrónica y lo empujó sobre el carro con el que vendía sus productos. Después, Bouazizi se dirigió a la oficina del gobernador para exigir que le devolvieran su balanza; su petición fue denegada y el gobernador llegó incluso a negarse a reunirse con él, a pesar de que Bouazizi le dijera “si no me ves, me quemo”. Fue rechazado y, menos de una hora después de producirse el altercado, regresaba a la oficina del gobernador y, en medio de la calle abarrotada de gente, gritó “¿cómo pretendéis que me gane la vida?” antes de empaparse en gasolina y prenderse fuego. Aunque la gente intentó ayudar a Bouazizi, ya
había sufrido quemaduras en el 90% de su cuerpo cuando finalmente lograron apagar las llamas. Fue desplazado inmediatamente a un hospital local antes de ser trasladado a una instalación más grande en Sfax, a unos 110 kilómetros de distancia. Las noticias de su situación se extendieron, tanto, que hasta el presidente tunecino, Zine El Abidine Ben Ali, llegó a visitar a Bouazizi en el hospital y, según la madre del joven, prometió enviar a su hijo a Francia para que recibiera un tratamiento; este traslado nunca se realizó. Bouazizi permaneció en estado de coma hasta su muerte el 4 de enero de 2011, 18 días después. Unas 5,000 personas acudieron a su funeral, alabándolo como un mártir y prometiendo vengar su muerte.
Tan sólo horas después de la autoinmolación de Bouazizi estallaron las protestas en Sidi Bouzid. A pesar de los intentos de la Policía de dispersar las manifestaciones, continuaron durante dos semanas hasta su muerte, tras la cual se extendieron a lo largo del país. La frustración pública que llevaban silenciadas mucho tiempo salieron a la superficie y los manifestantes exigieron un mejor gobierno, bienestar y un cambio de régimen. El 14 de enero de 2011, el presidente y su familia huyeron del país, poniendo fin a los 23 años de mandato de Ben Ali y allanando el camino para la celebración de elecciones y la llegada de un nuevo Gobierno. Tan pronto como la situación cambió en Túnez, las manifestaciones se extendieron por toda la región, aunque siguiendo trayectorias claramente diferentes. Empezando por Egipto, la gente se echó a las calles en todo el país, con lemas como “Pan, Libertad e Igualdad Social”. Tras 18 días de manifestaciones públicas y represión violenta, el presidente egipcio, Hosni Mubarak, renunció al cargo y el ejército suspendió la constitución y el parlamento, prometiendo que el país sería testigo de las primeras elecciones democráticas de su historia. El año siguiente, el doctor Mohamed Morsi, de los Hermanos Musulmanes, fue elegido presidente por una mayoría substancial. Pero este aparente triunfo duró poco; un golpe de Estado militar expulsó al presidente Morsi en 2013 y el general Abdel Fattah Al-Sisi ordenó la masacre de cientos de manifestantes que expresaban su apoyo a los Hermanos. En Libia, las manifestaciones de todo el país fueron recibidas con violencia, lo que llevó a los manifestantes a armarse para protegerse y después a formar grupos militantes, marcando el comienzo de una guerra civil. En marzo de 2011, una coalición de la OTAN intervino en Libia para tratar de poner fin al conflicto. Aunque la muerte del antiguo jefe de Estado, Muammar Ghaddafi, en octubre puso un fin oficial a la revolución, el país se sumió en el caos, ya que surgieron Gobiernos rivales en el este y el oeste, además de los atentados de los militantes del Daesh. A día de hoy, Libia lucha por unificar a sus numerosas facciones y grupos, y se siguen produciendo ataques violentos en el país.En Yemen las manifestaciones también estallaron en 2011; decenas de miles de personas protestaron contra el gobierno del presidente Ali Abullah Saleh. Tras la dimisión de Saleh, se celebraron unas elecciones en 2012 que ganó el único candidato, Abdrabbuh Mansur Hadi. Sin embargo, el influyente grupo hutí del norte boicoteó las elecciones, sentando las bases de la guerra civil que empezaría unos tres años después. El conflicto de Yemen se ha convertido en la peor crisis humanitaria del planeta. En Siria, las protestas pacíficas en 2011 pidiendo reformas y cambios fueron recibidas con una violencia sin precedentes por parte del gobierno del presidente Bashar Al-Assad, y la revolución se convirtió rápidamente en una guerra civil. Las fuerzas iraníes y la milicia libanesa de Hezbolá entraron en el conflicto apoyando al régimen de Assad. Aunque en los primeros años los grupos de la oposición se hicieron con gran parte del país, la llegada del Daesh complicó la situación, ya que se formó una coalición internacional que realizó una operación contra los militantes en Siria e Irak. En 2015, Rusia entró en el conflicto en el bando del gobierno sirio, recuperando franjas de territorio de la oposición. Hasta la fecha, unas 500,000 personas han sido asesinadas y hay millones de desplazados.En Bahréin, las fuerzas del gobierno pusieron fin a meses enteros de protestas en una represión que dejó más de 80 muertos y miles de detenidos. En otros países de la región se produjeron manifestaciones a menor escala, obligando a sus gobiernos a hacer cambios políticos y así apaciguar a los manifestantes, pero lejos del cambio de sistema que exigían. Unos ocho años después, el pueblo del mundo árabe se enfrenta básicamente a los mismos problemas contra los que se levantó al principio, siendo rampantes la dificultad económica y la supresión política. Incluso en Túnez, el hogar de la revolución, el Gobierno ha tenido difícil el superar la división política; el gabinete se reorganiza regularmente con la constante lista de ministros que renuncian o son despedidos. A pesar de todo, Mohammed Bouazizi se ha convertido en un símbolo de esperanza y fuerza para las gentes de la región. El recuerdo de su sacrificio vive en sus intentos por lograr un cambio a mejor.
“La Primavera Árabe termina, pero la revolución continúa con su rabia y sus infinitas transformaciones”, escribió el asesinado Jamal Khashoggi
Cuando el joven tunecino Mohamed Bouazizi se prendió fuego en protesta contra las autoridades municipales que le confiscaron en Sidi Bouzid el carro de fruta con el que trabajaba en 2010, no sabía que estaba haciendo estallar las revoluciones de la Primavera Árabe, que derrocaron a varios regímenes, quemaron varios países y cuyo viento aún sopla en la región. Desde ese día, hace tanto tiempo, han pasado muchas cosas, se han derrocado regímenes y otros han cambiado, se han fragmentado países, se han desplazado pueblos enteros, y las esperanzas de los millones que se echaron a las calles para exigir libertad, dignidad y democracia... Sin embargo, la Primavera Árabe no sólo trajo vientos de cambio, sino también vientos contrarios que se han convertido en contrarrevoluciones que han provocado destrucción, golpes de Estado y devastación en muchos países. Estas contrarrevoluciones tenían una cosa principal en común: la alianza saudí-emiratí, sensible a cualquier evolución hacia la democracia en la región. Dedicó dinero, arma y medios de comunicación para acabar con cualquier esperanza de liberación de los regímenes opresores y tiranos que gobernaban y todavía gobiernan sus naciones con puño de hierro.
por los Municipios
OTHÓN P. BLANCO
Cabildo de OPB entrega predio al ISSSTE para cubrir la deuda por cuotas de sus trabajadores
El Cabildo de Othón P. Blanco aprobó la entrega de un predio municipal al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE) para la instalación del Hospital General, como forma de pago por la deuda de más de 40 millones de pesos que tiene por las cuotas de los trabajadores.
De acuerdo con la exposición de motivos de la alcaldesa Yensunni Idalia Martínez Hernández, el ISSSTE les solicitó la donación de un predio para la construcción de una clínica.
Ante el adeudo que tiene el Ayuntamiento por 42 millones 397 mil 404 pesos al ISSSTE por diversos conceptos —entre ellos el seguro de retiro, cesantía y vejez, Fovissste, entre otros— se sentaron las bases para generar un acuerdo y hacer los pagos correspondientes.
De ahí que el municipio propuso entregar en dación de pago el predio ubicado en la calle Palermo, de la Colonia Magistral, en Chetumal, para la edificación del hospital y de esta forma cubrir la deuda que existe, además de beneficiar a la población de la capital quintanarroense.
Sin embargo, pese a que el predio está valuado en 43 millones 747 mil pesos y con una superficie de 23 mil 486 metros cuadrados, sólo se estarían cubriendo 23 millones 500 mil pesos, es decir, alrededor del 52 por ciento del total del adeudo que prevalece, de acuerdo al documento de acuerdo.
COZUMEL
Por prepotente, le añaden excremento de utilería al hotdog de un regidor
El Cabildo de Othón P. Blanco aprobó la entreUn vendedor de baguets, perteneciente a un grupo llamado “Comida a domicilio Cozumel”, envío un pedido muy especial al regidor municipal Bruno Díaz Solís.
El vendedor recibió una orden de comida de este personaje y aprovechó para recordarle su prepotencia, pues acompañó su baguet con excremento.
De acuerdo con los medios de este Municipio, es bien sabido la forma prepotente en la que el síndico se conduce con la ciudadanía.
Sin embargo, de acuerdo a la misma publicación, el excremento es de utilería.
D IARIO DEL CRIMEN
12/03/22
Asaltan academia de bai-
le.- Una familia pudo recuperar su vehículo con el que delincuentes huyeron tras asaltar una academia de baile ubicada en la Supermanzana 26 de Cancún. De acuerdo con información preliminar, dos delincuentes se llevaron un auto compacto con lujo de violencia afueras de un centro de zumba, así como algunas pertenencias de los que estaban en el lugar. Agentes periciales realizaron diligencias para levantamiento de indicios dentro del auto compacto pero al parecer no encontraron nada de relevancia, por lo que la familia abordó el carro y se lo llevó pese a la negativa de los ministeriales. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Ejecutan a canadiense.-
La ejecución de un hombre originario de Canadá se registró en la avenida Xcalacoco con el bulevar, en Playa del Carmen. Podría estar ligada a una disputa por la venta de droga al interior de Playacar. El extranjero fue asesinado en presencia de su hija menor de edad, quien resultó herida. Tras el homicidio se reportó la detención de dos sujetos como los probables responsables, cuando intentaban huir en la avenida Universidades. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Asesinado frente a par-
que.- Un joven de entre 20 y 25 años de edad, fue ejecutado frente a un parque de la Región 259, en la calle Palma Paraíso, en el Fraccionamiento Las Palmas de Cancún. De acuerdo con algunos testigos, el hoy occiso se acercó hablar con los ocupantes de un Nissan Tsuru de color blanco, que previamente ya había dado varias vueltas por la zona, y en eso aparecieron dos individuos en una motocicleta. Los motociclistas se acercaron, sacaron un arma y le dieron directo a la cabeza a su víctima. De inmediato todos huyeron del lugar quedando el cuerpo tendido sobre la banqueta. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Encuentran a un ejecuta-
do.- Un cuerpo sin vida de una persona, con varios impactos de arma de fuego, fue hallado en el camino que se dirige a la Laguna Manatí, a unos 800 metros del Arco Vial, en Cancún. El cuerpo de la víctima fue hallado tirado boca abajo, a un costado de una cerca perimetral. Al lugar llegaron policías quienes cercaron la zona, seguidos de los servicios periciales de la Fiscalía General del Estado, quienes comenzaron a peinar la zona en búsqueda de evidencias. Con esta, ya son tres las personas asesinadas y halladas en esta zona. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Balean vivienda de agen-
te.- A manera de intimidación, individuos detonaron armas de fuego contra la fachada de una vivienda, presuntamente de un oficial de Tránsito de Cancún. El ataque ocurrió en una casa de la Supermanzana 215, del Fraccionamiento la Guadalupana, donde individuos que se desplazaban en una motocicleta realizaron varias ráfagas de disparos. Según se averiguó cuando menos más de 40 disparos se hicieron. La mayoría de los disparos hicieron blanco sobre un portón metálico de la entrada del domicilio. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Hallan cabeza humana.-
Una cabeza humana dentro de una hielera fue encontrada en la colonia Nueva Creación de Playa del Carmen, a unos metros de una caseta de la Policía Municipal. De acuerdo con información preliminar, elementos de la Policía Municipal atendieron un reporte al 911 de un objeto sospechoso en la calle Othón P. blanco con Av. Misión del Carmen. Al acudir, localizaron una hielera que contenía una cabeza humana. El área fue acordonada y autoridades de investigación realizan los trabajos correspondientes para recabar las primeras evidencias del caso.
13/03/22
Balean a trabajador de
bar.- Un empleado del bar “Acuario” fue herido de bala en la pierna por un sicario, dentro del centro nocturno ubicado en la avenida 40, entre las calles 2 bis y 4 de Playa del Carmen. El agresor ingresó caminando, disparó contra su víctima y huyó a pie, sin ser detenido. Al lugar llegaron agentes de la Policía Municipal, así como paramédicos de una empresa particular, que se llevaron el herido al Hospital General. El bar quedó cerrado, con cinta policiaca, en espera de que la Fiscalía General del Estado haga sus investigaciones. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Rescatan a dos secuestra-
das.- Tres hombres fueron detenidos después de protagonizar un choque, por presuntamente tener a dos mujeres privadas de su libertad, en el Fraccionamien-
IARIO DEL CRIMEN
to Puerto Maya de Puerto Aventuras, Municipio de Solidaridad. Autoridades policiacas fueron notificadas de un choque entre una camioneta tipo estaquita y un automóvil. Varias patrullas de la Policía Municipal se trasladaron a la cerrada Tiburón Blanco, hacia donde habían huido estas personas, ingresando en una casa para rescatar a estas mujeres y detener a sus presuntos victimarios. Al parecer, ellas habían estado en una fiesta desde anoche, pero los sujetos se negaban a dejarlas ir; esto solo se supo cuando uno salió de la casa, presuntamente para comprar alcohol y víveres, pero acabó chocando. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Asesinan a médico.- Un médico fue maniatado y después asesinado de múltiples puñaladas, al interior de su departamento en la Supermanzana 24 de Cancún. El hermano de la víctima llegó al domicilio, en la calle Punta Nichel Ha con Punta Allen y descubrió a la víctima amarrada y sangrando, por lo que llamó al 911. Arturo M.F., de 32 años de edad, yacía inerte en el piso, con las manos atadas detrás de la espalda con un cable negro, con el rostro golpeado y con puñaladas en el cuello, hombros, axila, espalda, nuca y pecho. Cerca del cadáver fue hallado un cuchillo de cocina con mango de madera, el arma homicida. Se desconoce el móvil de este homicidio. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Ejecutado en Villas
Otoch.- Un hombre fue asesinado a balazos cuando estaba en un parque de Cancún. De acuerdo con información preliminar, la víctima caminaba cerca del parque ubicado en la manzana 107, del Fraccionamiento Villas Otoch Paraíso, de la Región 259. Se indicó que dos hombres en una motocicleta lo sorprendieron y le dispararon en repetidas ocasiones. El hombre quedó tirado sobre la banqueta donde paramédicos de una empresa privada lo declararon muerto. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Reportan a joven desapa-
recida.- La joven Zein Ahmed Hani Mohamed Dakrouri, originaria de Egipto, de 26 años de edad, desapareció en Tulum. Su caso se suma al de Mirela Stefanía Stanciu de 28 años, de origen rumano, quien también desapareció en la Riviera Maya. La visitante egipcia dejó de tener comunicación con sus familiares el pasado 4 de marzo. De ninguna de las dos extranjeras se sabe su paradero, la Fiscalía General del Estado activó la alerta Alba. La joven egipcia es de tez morena clara, complexión media cabello castaño, ojos café oscuros y una estatura de 1.65 metros y 70 kilogramos. Como seña particular tiene un tatuaje de Ying Yang en la espalda. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
14/03/22
Ejecutan a vendedor de
flores.- Un vendedor ambulante de flores fue asesinado cuando salía del bar “Xtabay Plus”, ubicado en la Región 219 de Cancún. La víctima fue interceptada por dos sujetos, afuera de este bar, en la avenida Chac Mool con Leona Vicario, quienes le dispararon en la cara a quemarropa, matándolo de manera instantánea. Al lugar llegaron agentes de la Policía Quintana Roo, aunque para entonces los homicidas ya se habían fugado. Paramédicos de una empresa particular confirmaron el deceso del vendedor ambulante. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Asesinato en Aldea Tu-
lum.- La Policía Tulum activó un intenso operativo de búsqueda para capturar a los responsables de un ataque armado en contra de una persona en las inmediaciones de Aldea Tulum. La agresión armada dejó un hombre muerto y dos mujeres de 31 y 21 años de edad, lesionadas por rozaduras de arma de fuego. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
15/03/22
Hallan a dos descuartiza-
dos.- Dos personas fueron asesinadas, desmembradas y abandonadas en tres bolsas negras de basura, en la colonia El Pedregal de Playa del Carmen. Un peatón caminaba en la calle 52 norte, cuando vio varias bolsas sobre una sábana, por lo que se asomó y vio que se trataba de restos humanos. En un primer momento se pensó que se trataba de un cadáver, pero al inspeccionar las bolsas los peritos, confirmaron que se trataban de dos cadáveres. Elementos de la Policía Ministerial también arribaron para iniciar sus investigaciones en torno a este homicidio. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Muerto frente a kínder.-
Durante el regreso a clases presenciales se reportó un ataque ar-
D IARIO DEL CRIMEN
mado frente a una escuela primaria y kínder en la Región 237 de Cancún. El hombre fue alcanzado por otro sujeto, quien le disparó. En la escena hallaron al sujeto herido por presuntos impactos de bala, quien se encontraba frente a la escuela primaria y a un costado del jardín de niños. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
16/03/22
Disparan contra bar.- Dos hombres y una mujer resultaron heridas tras un ataque a balazos perpetrado en el interior del bar “Olimpo” de Playa del Carmen. El ataque en el establecimiento referido, ubicado sobre la avenida Juárez, entre las calles 65 y 70 de la colonia Ejido. Paramédicos acudieron al lugar minutos después para trasladar a los heridos al Hospital General. En tanto, elementos de la Policía Municipal y Guardia Nacional resguardaron la zona, mientras se realizaba un operativo para dar con los responsables. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Acribillan a mujer.- El cuerpo de una mujer con por lo menos dos disparos, fue encontrado tirado en una calle de un fraccionamiento de Cancún. Vecinos de la Región 107, Fraccionamiento Paraíso Maya, reportaron el hallazgo al número de emergencias. Según la información preliminar, la mujer tenía un disparo en la cabeza y en la frente, y aparentemente en la espalda. Estaba tirada en la calle Puerto Bravo, llevaba vestido rojo y la encontraron boca abajo en medio de un charco de sangre. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
17/03/22
Asaltan consultorio.- Un doctor y dos pacientes fueron atados de manos y encerrados en una habitación, por delincuentes que entraron a asaltar un consultorio dental, en la colonia Centro de Chetumal. Los asaltantes ingresaron a la clínica, ubicada en la avenida Juárez con Plutarco Elías Calles, y a punta de pistola amenazaron al doctor y a las personas que estaban en el lugar, a las que sometieron y amarraron, para luego llevarse dinero, celulares, computadoras y otros objetos de valor. Los delincuentes cargaron estos objetos en el automóvil de este dentista, que también hurtaron. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Balean a limpiaparabri-
sas.- Un limpiaparabrisas fue herido con un disparo en una pierna, cuando estaba en el cruce de la avenida Lak’in con Miguel Hidalgo, en Cancún. Tras escuchar el disparo, vio que sangraba de una pierna por lo que acudió a un consultorio médico cercano, pero al tratarse de una herida de bala se dio aviso al 911. Paramédicos de la Cruz Roja llegaron al lugar y después de brindarle los primeros auxilios, lo trasladaron al Hospital General. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Arrojan cadáver frente a
escuela.- Con las manos atadas en la espalda, fue encontrado el cuerpo de un hombre ejecutado frente a la escuela primaria ‘Sentimientos de la Nación’ de la Región 259, en Villas Otoch Paraíso, en Cancún. De acuerdo con información preliminar, el hallazgo se realizó cuando aún no había amanecido. Las clases en esa escuela suspendidas. El cadáver fue hallado alrededor de las 05:40 horas por habitantes de la zona quienes dieron aviso al 911,. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Encuentran a ‘embolsa-
dos’.- Por segundo día consecutivo se reportó el hallazgo de restos humanos “embolsados” y tirados en la calle 55, casi esquina avenida Andrés Quintana Roo, en la colonia El Pedregal, en Playa del Carmen. Personal de Servicios Periciales de la Fiscalía General del Estado se encargó del procedimiento de investigación y análisis del lugar así como del levantamiento de la bolsa para su traslado al Servicio Médico Forense. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
18/03/22
Hallan narcofosa.- Autoridades de la Fiscalía General del Estado, auxiliados por la Guardia Nacional, hallaron varios cuerpos ocultos junto a un camino de terracería a espaldas del Fraccionamiento Paraíso Maya, en Cancún, en donde fue capturada una célula criminal dedicada al plagio de narcomenudistas. Fueron 11 personas las que fueron detenidas en un domicilio de la Supermanzana 107, en donde tenían privadas de su libertad a tres personas. Al parecer, estas personas ya dieron la ubicación de dónde habrían enterrado a varias de sus víctimas. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.
Ataque en Villas Otoch
Paraíso.- Un muerto y dos heridos fue el saldo de un ataque armado perpetrado afuera de una casa ubicada en el Fraccionamiento Villas Otoch Paraíso, en Cancún. El ataque fue reportado por vecinos de la calle Paseos Laureles, quienes ayudaron a trasladar a dos de los tres hombres, quienes terminaron tendidos sobre la jardinera exterior del domicilio. En tanto, en el lugar quedó un tercer hombre del cual nada se pudo hacer, pues al llegar los cuerpos de emergencia confirmaron que ya no contaba con signos vitales. Al lugar acudieron peritos del Estado. Redacción. Por Esto! de Quintana Roo.