La autoridad educativa anuncia la reubicación del centro escolar, pero niega que ésta se relacione con algún proyecto de privatización del inmueble con fines turísticos. La razón tiene que ver sobre todo con el severo deterioro de las instalaciones (en una privilegiada zona de playa de la mayor plusvalía y frente a una frenética expansión inmobiliaria que ha dejado en la vieja y nostálgica historia la actividad esencial del originario pueblo de pescadores, y los afanes gubernamentales de que la tecnificación del oficio de la captura contribuyese a mejorar la economía porteña, la industria pesquera local, y el abasto de la misma al mercado turístico cancunense). Eso por una parte. Pero el cambio de ubicación de la escuela se debe, también, dice la autoridad educativa, a la incompatibilidad de su domicilio con el de los lugares de procedencia de casi toda su comunidad estudiantil.