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Enrique Caballer de Gabriel, Majoral 2020

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Col·laboradors

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Enrique Caballer de Gabriel Majoral 2020

LA MAJORALIA D’ENGUANY

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MI SEMANA SANTA SAGUNTINA

Siempre le preguntan a uno, sobre todo el año de la fiesta, qué es para él la Semana Santa Saguntina. Podría extenderme llenando párrafos de recuerdos, de anécdotas y de sentimientos intentando plasmar lo que podría ser para mí esta solemne fiesta. En vez de hacerlo, os contaré mi experiencia:

Me di cuenta de qué era para mí la Semana Santa al intentar explicársela a algún amigo extranjero y emocionarme al entrar en cada detalle, mostrándole las imágenes de nuestros pasos, de nuestra indumentaria e incluso de la música que forma parte de la banda sonora de nuestras vidas.

“Me di cuenta de qué era para mí la Semana Santa al intentar explicársela a algún amigo extranjero y emocionarme al entrar en cada detalle”

Esa emoción que recorre todo el cuerpo al volver a tus experiencias de la infancia. De cuando ya desde pequeño, arropado por mi familia, me sentía orgulloso de acabar una procesión completa. De explicarle por qué nos reunimos cada año con el mismo grupo de amigos que forman la mayoralía y de cómo nuestros padres ya lo hacían. De la reunión del Domingo de Ramos que empieza a cargar ya de anécdotas lo que va a ser una semana muy completa. De cómo se da lugar en la Plaza Mayor el Encuentro Doloroso, que da comienzo a la semana de pasión; De la procesión del silencio, casi siempre respetado, bueno para reflexionar y encontrarse con uno mismo. De por qué visitamos los monumentos y de cómo esa misma madrugada el pueblo entero se moviliza para ver subir al Nazareno al Calvario.

De intentar explicarle la lógica de la subasta, con más empeño que éxito. De la procesión del Santo Entierro, endulzada con caramelos, dando paso al Sepulcro y a la imagen más preciada: La Vera Cruz. De la cantidad de reuniones, misas, comidas y cenas rodeados de familia y amigos. De que la fiesta, en mi caso viviendo fuera, me ha dado una razón ineludible de reunión con la mayoralía, de querer volver cada Semana Santa a Sagunto. Porque allá donde esté, forma parte de mí y yo de ella.

Esa misma emoción, que mezcla la alegría de volver con la tristeza de los actos que celebramos, la nostalgia de cuando éramos niños con el porvenir de nuestra fiesta y que nos da ganas de que se repita como siempre, pero cada año diferente. Todo esto es para mí la Semana Santa Saguntina.

A mis padres, a mi familia y a mi mujer.

Que este año único sea inolvidable.

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