El punto de partida del trabajo es la consideración de la actividad cultural como ideología y con relación a la literatura en tanto condicionante sordo de un ciclo económico. Es una respuesta a la situación post-peronista, en donde las clases dominantes forman una conciencia antinacional y pro oligárquica.
La finalidad del libro es probar cómo esa generación fue instrumento del imperialismo, que se valió de ella para reforzar la conciencia falsa de lo propio y desarmar las fuerzas espirituales defensivas que luchan por la liberación nacional.