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Los odiadores en el deporte

Jugando desde el fondo - Artículos cortos de periodismo deportivo

Los odiadores en el deporte

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Domingo 03 de octubre de 2021 Pichincha Comunicaciones

Una de las mejores prácticas que vino de la mano con la creación de las redes sociales, es permitir expandir los mensajes de personas masivamente sin la necesidad de que estos expongan sus pensamientos en los medios de comunicación tradicionales. Podemos seguir en Twitter a intelectuales, científicos, investigadores y contagiarnos de sus ideas. Pero quienes producen contenido en redes sociales son la inmensa minoría, pues la gran masa se dedica a comentarlo, valorarlo o, por supuesto, criticarlo.

El psicólogo Carsten De Dreu, citado por Revista Semana, contó que cuanto la gente forma parte de un grupo, sea familiar, de trabajo o un equipo de fútbol, produce una sustancia llamada oxitocina que genera un sentimiento de exclusividad que “afecta las opiniones acerca de los demás afuera del grupo, pues en la medida en que un individuo cree en los miembros del suyo, exagera sus habilidades mentales porque siente por ellos lealtad”.

El mundo del deporte es un fiel reflejo de aquello, todo lo que nos repele es menospreciado o intimidado, solo que con las redes sociales este desprecio se ha potenciado y es un generador ininterrumpido de violencia. La eliminación de esta semana en semifinales de Copa Libertadores de América del Barcelona de Guayaquil derivó en un tedioso acoso que tenía más de violento que de gracioso. Futbolistas, periodistas, aficionados y un largo etcétera abrazados en un bullying que los degradó a todos a un mismo nivel: el de odiadores.

Me preocupa más el grupo de los periodistas, porque tienen un nivel de exposición alto y supuestamente una formación que

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les permite tener acceso a medios o plataformas informativas. Pedro Canelo, el prestigioso periodista deportivo de diario El Comercio de Perú, contó hace poco en una charla para el Centro de Desarrollo Editorial y de Contenidos de Lima, que una de las más grandes lecciones en periodismo la recogió de una entrevista al colega Juan Pablo Varsky de DirecTv. Varsky le dijo que para ser periodista deportivo debes practicar algún deporte, no para ganarlo ni convertirte en estrella, sino para sentir el esfuerzo, la alegría del juego, la satisfacción de conseguir una marca, un tiempo, un rédito; el periodista deportivo debe practicar un deporte para desarrollar una capacidad imprescindible en este oficio: la empatía.

Este “sentimiento de identificación con algo o alguien”, como lo define la Real Academia Española, combate a una de las peores formas de la profesión, que deriva en el periodista-juez, ese que sabe que “un director técnico no sirve” o que “aquel deportista debe retirarse”. La revista New Scientist explicó que un ser humano insulta en redes sociales para poner en juicio la capacidad mental de otros y afianzar la de su grupo. Los militantes de una idea o afición rompen con otras aislándose de otros puntos de vista, ensordeciendo opiniones que no nos gustan y aumentando la desinformación.

Quien no clasificó a semifinales, esta vez en los Juegos Olímpicos de Tokio, fue la nadadora ecuatoriana Anicka Delgado. Su tercera serie de los 100 metros de estilo libre la hizo en 55.56 segundos; para estar entre las 16 mejores necesitaba 53.87s. Sin embargo, Anicka batió su propio récord, el récord nacional juvenil y el récord nacional absoluto, es decir, es la nadadora más rápida en toda la historia del Ecuador y tiene apenas 19 años. ¿Vale la pena?, ¿se puede ponderar esta hazaña?, o ¿no sirve porque no ganó medalla de oro? Los expertos en nada que solo juzgan desde las redes sociales dictarán su sentencia, basada más en complejos que en argumentos.

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