Diario de observaciones

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Benemérita Escuela Normal “Manuel Ávila Camacho” Licenciatura en Educación Preescolar OBSERVACIÓN Y ANÁLISIS DE LA PRÁCTICA EDUCATIVA

Maestro: Margil de Jesús Romo Rivera

Diario de registro: Segunda jornada de Observación Alumna: Yunnuen Stephanie Tovar Hernández PRIMER SEMESTRE

Jardín de niños: Adolfo López Mateos Localidad: Zacatecas, Zac.


E

23/Noviembre

l regreso al jardín en el que habíamos estado anteriormente fue totalmente satisfactorio, pues, el ya conocer cómo llegar al mismo, las instalaciones, los maestros, etc. pudo facilitarnos en gran parte nuestra segunda jornada de observación.

Al llegar al jardín, la directora nos mandó directamente a los salones donde habíamos estado observando así que no hubo necesidad de un sorteo para repartir los salones como en la ocasión pasada. Pude observar que las maestras estaban colocando letreros y mesas con distintos materiales didácticos lo cual me causó una curiosidad muy grande al no saber de qué se trataba. Resultó ser que se iba a llevar a cabo una “Feria de las matemáticas” en el patio principal y que todos los niños participarían en ella sin distinción de grados. Fue por lo mismo que los honores a la bandera no se realizaron. Al dar comienzo a la Feria de las Matemáticas, la directora del jardín (Pascuala Arahda) dio una pequeña introducción de lo que se haría mencionando: “Los niños jugarán en esta Feria de las Matemáticas y aprenderán al mismo tiempo desarrollando así en el campo formativo del Pensamiento Matemático distintas competencias” “El sistema educativo debe homogeneizar y uniformar y para eso es necesario un discurso pedagógico homogéneo que defina tanto los mínimos culturales o sea el saber educativo legítimo, como los medios legítimos de inculcación.” (TENTI, EMILIO) Los niños se formaron por grupos y se repartieron en las estaciones que les correspondían a sus maestras, ellos exponían un gran interés en lo que estaban haciendo aunque hubo excepciones.


A mi salón nos tocó una ruleta en la cual debías lanzar bolas de papel mojado y el número en el que cayeran debías buscarlo en los que estaban en la mesa (para niños de 1ero y 2do grado) o debías formarlo con unas fichas que había en un recipiente (en el caso de los niños de 3ero). Al pasar 15 minutos fue necesaria la rotación para que les tocara a más niños en diferentes estaciones. La maestra me encargó atender la estación porque ella se iría a conducir a sus alumnos a las estaciones restantes, por lo que yo dirigí La Ruleta explicando a todos los niños que llegaban lo que debían hacer. Al principio me llegaron un poco de nervios por miedo a no saber cómo explicarles el juego, pero después de estarlo haciendo me relajé y encontré varias estrategias que me fueron muy útiles para llevar a cabo la actividad. Me di cuenta que fue tanto un reto como una introducción a lo que me enfrentaría en un futuro como docente lo cual me serviría para poder reaccionar ante lo que se me presentara, utilizar los materiales que tuviera sin necesidad de buscar otros y hacer lo posible por explicarme de una manera congruente y obtener buenos resultados. “Formarse es aprender a movilizarse, utilizar todos los recursos para la resolución de problemas. Lo que realmente forma es una actividad que se cumple en función de una meta. Apto para afrontar los problemas (Ferri, 1990).” Al terminar la Feria de las Matemáticas, procedimos a desayunar para posteriormente volver al salón para un dialogo entre todos acerca de lo que se hizo y después salir. 24/Noviembre

A

l igual que anteriormente, la llegada al jardín de niños fue alrededor de las 8:30 de la mañana y después de anotarnos en la dirección, nos fuimos directamente al salón que nos correspondía.


La maestra a cargo del grupo donde yo observaba (1ºA) llegó un poco tarde por lo cual varios niños ya estaban en el jardín, pero al llegar inmediatamente abrió el salón y los niños comenzaron a entrar. Al comenzar la clase, como todos los días, la maestra se dispuso a escribir la fecha preguntando a sus alumnos que día era, de qué mes y cual año era el que transcurría. Me sorprendió bastante ver que los niños, en su mayoría, sabían exactamente las respuestas correctas a lo que la maestra les cuestionaba, y aún más, cuando sabían cómo se decían los días y el mes en inglés, sin que la maestra los ayudara. Posteriormente, empezamos el tema que eran los deportes, ya que al día siguiente ellos irían a un circuito ciclista y esto les serviría como un conocimiento previo de lo que harían. El día en sí no fue muy productivo, pues los “entretuvo” coloreando una hoja con dibujos de deportistas y fue todo lo que hicieron, lo cual no me pareció correcto, pues trabajos de ese tipo, cómo leímos en una trabajo de Francesco Tonucci, no son nada fructíferos para la formación educativa de los alumnos, aunque al parecer, yo sabía eso por la lectura previa que hice pero la maestra a cargo del grupo no. ”Lograr que los docentes utilicen u método de trabajo basado en la investigación-acción será una herramienta eficaz para sortear estas dificultades y para echar a andar experiencias no solamente pertinentes y viables, sino también sustentadas teóricamente” 25/Noviembre


E

sta vez nos dirigimos directamente al parque “La Encantada” ya que los niños tendrían un evento deportivo donde concursarían por el triciclo mejor decorado y posteriormente harían un circuito con el mismo.

El evento inició y el maestro encargado del salón de 2ºC mencionó: “[…] Esta actividad favorecerá el campo formativo Desarrollo físico y social, pues promoverá en ellos la convivencia a partir del deporte tanto con sus compañeros como con sus padres.” Aproximadamente a las 10:00 a.m. empezó la activación física donde participaron padres y madres de familia en conjunto con sus hijos. Después, los maestros encargados del evento organizaron unos juegos con los papás y sus hijos y viceversa lo cual me pareció realmente productivo, pues los niños al estar jugando con sus maestros y sus padres, denotaban felicidad al instante, y ver que sus papás estaban con ellos apoyándolos a mi pensar los hizo sentir queridos e importantes. “¿Qué felicidad más grande puede darse que la de pasar días entre los niños?” (TENTI, EMILIO) A pesar de que los padres de familia no sabían cómo se jugaban las actividades que los docentes habían propuesto, demostraron un interés real por participar y una voluntad muy satisfactoria disponiéndose así a realizar las actividades, dando como resultado exitoso ante todos los juegos que hicieron. Al terminar el circuito les otorgaron medallas a todos los niños para que no hubiera distinción de quién llegó primero y quién al último, y terminó el evento. Agradecieron la asistencia de todos los padres de familia y alumnos para así despedirlos.


25/noviembre Este día fue realmente significativo para mí…

C

omo los días anteriores, la llegada fue alrededor de las 8:35 a.m. aunque para las 8:55 a.m. tan sólo habían llegado 4 niños al salón.

Se dio inicio a la activación física a las 9:05 a.m. y ahí fue donde llegaron los otros 16 alumnos dando así una asistencia total de 20 niños. Al estar haciendo los ejercicios sentí una gran satisfacción, pues, noté que muchos de ellos me tomaban como ejemplo para hacer las actividades, a diferencia de otros días, lo cual me hizo sentir una autoridad y no una simple observadora. Al momento de estar en clase, la maestra los puso en rueda a comentar acerca de las fotos sobre su familia que había encargado de tarea que por cierto únicamente llevaron 9 alumnos. La maestra les llamó la atención sobre su irresponsabilidad en cuanto a su tarea y más aún la de sus padres. Al estar comentando yo con ella sobre la intervención de los padres de familia en el aula me sorprendió muchísimo su respuesta, pues al parecer a ellos les encanta aportar un beneficio económico para las actividades, gastan mucho dinero en cuanto a los vestuarios para las actividades sociales que organiza la institución, pero para lo académico su interés es muy decadente. Relacionándolo con lo acontecido el día anterior pude notar que era cierto lo que la maestra me planteaba. Después de la explicación de cuántos integrantes tenía cada uno en su familia, incluyendo así el pensamiento matemático en la actividad, la maestra se dispuso a pegarles su foto en una hoja de fomi y me designó


a mí para estarles colocando constantemente pegamento en partes de su hoja para que ellos pusieran pedazos de fomi recortado a las orillas. Al estarlo haciendo noté que los niños tenían ya un nivel de confianza conmigo muy notorio, pues todos me hablaban diciendo “Maestra Fanny” lo cual me hizo sentir, personalmente, muy bonito y feliz. Me adentré un poco a lo que podría ser mi trayectoria docente en el jardín de niños obteniendo una pre visualización de ello muy satisfactoria. A mitad de la actividad, dimos pausa para dirigirnos al salón de computación

para

su

media

hora

de

actividades

digitales

y

electrónicas. La maestra los puso a hacer una actividad la cual yo pensé

no

sabría

realizar

la

mayoría

pues

eran

ejercicios

de

razonamiento que los adultos realizan, y me sorprendió ver que si podían hacerlo, batallando un poco, pero la mayoría lo hizo en un lapso de tiempo muy rápido, aumentando así la dificultad del ejercicio. Al terminar esa actividad, la maestra les puso una que habían realizado en mi primera jornada de observación, donde ellos cada vez se hacían más diestros para la realización de la misma, aunque esta ocasión el resultado no fue lo que esperaba. Hacían totalmente lo contrario a lo que

se

debía,

aunque

ya

hubieran

hecho

esas

actividades

anteriormente, y se pudo notar que no sabían ni que estaban haciendo, dando así un tiempo muerto y perdido. La maestra al ver el mal resultado de esta última actividad tuvo una decepción un tanto notoria e hizo comentarios de que debía cambiar su manera de explicar las actividades y la atención que le daba sólo a unos cuantos transformarla en una atención constante pero para todos. “Existen muchas razones por las cuales los maestros debemos perfeccionarnos continuamente. El éxito de nuestros alumnos y la calidad de la educación que impartimos dan un significado profundo al ser docente.”(FIERRO, CECILIA, et. al.))AÑO


Después del receso nos dirigimos al salón de música, donde tendrían clase de coro para la pastorela que estaba próxima a ocurrir. Pude percatar que a pesar de todo lo que hacía la maestra de música para que ellos aprendieran un simple pedazo de la canción que les tocaba, y también del apoyo de la maestra encargada del grupo, sus estrategias no fueron fructíferas y tampoco dieron resultados exitosos para lo esperado durante esa clase, por lo que los niños estaban distraídos, cantaban pero sin saber siquiera que decían y no aprendieron nada de la canción. Al terminar la jornada de clases, me dispuse a entrevistar brevemente a la

maestra

encargada

de

mi

grupo,

obteniendo

respuestas

relacionadas a su planificación previa de las clases, su interacción con los padres y madres de familia, sus opiniones en cuanto a las acciones de sus alumnos entre otras cosas. Finalmente, nos despedimos de la directora y los maestros del plantel y nos fuimos.


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