Uno de los más antiguos senderos del distrito de Barranco es la calle Sucre.
Hacia finales del siglo XIX, empezaron a instalarse algunos pobladores que se dedicaban a la pesca y comercialización, ubicandose en la ladera de dicho acantilado, en rústicas viviendas de barros y caña, algunas de las cuales aún se mantiene.
Desde el 7 de enero de 1894 la Municipalidad de Barranco lo reconoce como un pasaje urbano, con posibilidades de edificación de residencias.