MARTES 25 DE AGOSTO
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RSE
¿CÓMO CONSEGUIR EL PRIMER EMPLEO EN SÓLO 7 MINUTOS? El primer contacto con el mundo laboral siempre es difícil. Sin embargo, en la actualidad existen nuevas modalidades de conocer talentos. Las speed dating laborales son un fenómeno que crece en la región con una ecuación en la que podría pensarse que todos ganan. DIEGO GONZÁLEZ
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nnovación es un término del que se habla mucho en la actualidad que puede aplicarse en todas las áreas de los negocios y los recursos humanos no son la excepción. Es claro que las búsquedas tradicionales perdieron espacio dando lugar a nuevas formas de reclutamiento sea por portales de internet, redes sociales y incluso un invento criollo que lleva las speed dating al plano laboral, es decir en lugar de un encuentro entre solteros y solteras en este caso participan alumnos de universidades prontos a finalizar sus estudios y empresas de primera línea que buscan mostrarse como marcas empleadoras. La dinámica es sencilla, una universidad selecciona a siete talentos, siete grandes empresas participan y durante 7 minutos se desarrollan mini entrevistas laborales donde unos se mostrarán y otros verán si esos recursos les interesan. Se medirán todo el tiempo. La charla que parece corta se desarrolla hasta que una chichara marca el fin del tiempo para que los jóvenes se despidan de sus posibles empleadores y vuelvan a presentarse con otros. Ámbito Biz participó de esta actividad que desarrolló Bumeran en la UADE. “La idea de la dinámica es que sea entretenido y salirse del formato tradicional”, resume Eduardo Méndez Director Comercial de Bumeran. “Es muy intenso, terminan muy cansados pero entretenidos”, acota. Las empresas que participan advierten que no buscan ocupar un puesto específico, “tenemos posiciones abiertas todo el año”, es una frase que se repite. Lo interesante para ellos es conocer el nuevo material que ingresará al mercado. “Venimos
porque creemos que es una instancia innovadora que nos permite acercarnos a las universidades y también que los chicos nos conozcan”, explica Ornela Bonomi, jefa de Empleos de Techint. Agustina Muriago, analista de Empleos de Banco Galicia, comenta que “la expectativa principal, es ser más visibles para los estudiantes y poder reunir a los mejores candidatos”. “Logramos un pantallazo general de los perfiles y después en caso que nos interesen los convocamos”, amplia. Romper el hielo es el primer obstáculo, los reclutadores, uno o dos por mesa, se los nota tranquilos, a los estudiantes, en este caso cinco varones y dos mujeres, se los percibe tensos y ansiosos por venderse, cada uno tiene su táctica, algunos gesticulan demasiado, algunos parecen parcos, las chicas son más desenvueltas, pero el final del proceso no está cerca, este es un primer paso. El tiempo es corto pero útil para los analistas quienes tienen sus mé-
GANAR, GANAR FEDERICO ZÁRATE Director, coordinador del IARSE.
s fundamental que las empresas puedan construir y fortalecer vínculos con el sector universitario; pensando no solamente en el reclutamiento y selección de futuros profesionales, sino también en aportes de conocimiento, experiencia, formación. Estas dinámicas pueden sumar a la generación de espacios innovadores, que busquen fortalecer esa relación con el objetivo de que estudiantes y empresas puedan tener la posibilidad de realizar entrevistas que brinden información valiosa acerca de lo que ambas partes podrían ofrecerse mutuamente, siempre pensan-
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do con una lógica “ganar-ganar”. Los futuros profesionales que comienzan a incorporarse al mercado laboral eligen con mucho cuidado y, cada vez más, a dónde quieren trabajar. Se sabe que las expectativas de las nuevas generaciones ya no son las tradicionales; por señalar algunas: gestiones sustentables de los negocios, flexibilidad horaria, políticas de conciliación vida laboral y vida familiar, rápidas posibilidades de desarrollo y otros beneficios que exceden lo monetario. Por su parte, las empresas quieren convertirse en “marcas empleadoras” reconocidas por ser buenos lugares para trabajar; y necesitan jóvenes formados, con valores que puedan ser compatibles con sus culturas organizacionales.
todos, la enviada de Telefe explicó que comienza indagando sobre cuáles son sus expectativas, porque eligieron la carrera y la universidad. Otra dinámica que se pudo observar, en una mesa había tarjetas con fotos de diferentes situaciones de trabajo: en el campo, en una planta, en una oficina “en función de eso vas entendiendo lo que busca la persona”, detalla otra reclutadora. Los chicos pasaron un proceso selección que realizó a universidad, pero a su vez indagaron sobre cuáles serían las empresas presentes. “Hoy los chicos van creando su propia carrera, buscan primero la empresa para ver si ahí van a tener su desarrollo profesional”, comenta Florencia Peluso de Relaciones Institucionales de la UADE, ella estuvo en el proceso de selección que en este caso eran de Comercio Internacional, Finanzas, Contabilidad, Abogacía, Administración de Empresas y dos ingenierías: Industrial y en Alimentos. Cerca del final se los nota más relajados, incluso hay muestras de histrionismo en algunos, siempre interrumpido por la chicharra que marca el final. Desenvuelto, Juan Manuel de 26 años estudiante de Finanzas, explica: “Una entrevista laboral siempre tiene una impronta de temor, pero fue bastante amena relajada”. En los pasillos los siete están eufóricos porque pasaron por una nueva prueba, cada uno hablaba de cual empresa le gustó más y otros no entendían el por qué de las fotos en la mesa “¿En medio de tubos yo? Ni me veo”, comenta risueña una de las chicas. El BAT (Bumeran Academic Tour) es un invento argentino que comenzó hace tres años y se replicó en Venezuela, Chile, México, Ecuador, Panamá y Perú. “Es un evento funciona para cualquier país”, cierra Méndez de Bumeran. Según explicaron desde la consultora la tasa de contratación promedio es de dos postulantes por BAT. De las empresas que asistieron algunas ya tienen contratados por este sistema. Al finalizar los empleadores hacen una puesta en común, valoran la capacidad de los talentos y en este caso un ingeniero en Alimentos fue el más disputado. Al menos tres empresas aseveraron que lo llamarían. A diferencia del speed danting, en este caso no se llevan teléfonos para una nueva cita, pero sí contactos y experiencia para futuras reuniones, como el ingeniero en Alimentos que ya está en proceso de selección formal para una multinacional.