Un estudio niega la relación entre los nitratos y la contaminación del Mar Menor

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La Fundación Ingenio, a través del Observatorio Permanente del Mar Menor, asegura que los análisis que han llevado a cabo niegan la relación entre los nitratos y la mancha blanca que apareció el pasado mes de mayo en el Mar Menor.

“Los datos y no las suposiciones confirman la nula relación entre el nitrato y la ‘mancha blanca’ detectada por imágenes de satélite”, han recalcado desde la Fundación.

Tanto la Fundación Ingenio como el colectivo Agro-Ingenieros por el Mar Menor han pedido “mayor rigor científico” a los organismos públicos a la hora de expresar opiniones a medios. “Su único objetivo es demonizar al sector, y lo hacen de forma sistemática y sin acreditar científicamente unas acusaciones que ponen en juego el medio de vida de miles de familias”, han reprochado. tarios, con un mayor impacto en las sustancias que tienen un perfil toxicológico más desfavorable.

La media de los valores tomados el 25 de mayo, un día después de las lluvias intensas del Campo de Cartagena que dejaron cifras de entre 28 y 53 litros/m2, arrojan un valor medio de nitratos de 0,8 micromoles por litro de agua. El valor considerado como bueno por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) es de 6,45 micromoles/litro.

Por su parte, González prefirió señalar los problemas a los que se tendrán que enfrentar los agricultores debido a este cambio de normativa, explicando que “ahora tendrán que recurrir a métodos como la desinfección por solarización o biofumigación, con lo cual tienen que reducir sus ciclos de cultivo en más de un mes. Todo ello combinado con el uso de patrones y variedades resistentes”.

Seguridad alimentaria

El secretario general de la Consejería aseguró que la nueva normativa da preferencia al uso de las alternativas biológicas, culturales y tecnológicas frente al uso de las químicas, “lo cual no es posible para muchos de los problemas fitosanitarios que se producen en los cultivos”.

“También es importante transmitir al consumidor que los productos fitosanitarios que utilizan nuestros agricultores antes de su comercialización y uso han tenido que superar una evaluación europea, y después nacional, por distintos grupos de científicos independientes, que aseguran que las condiciones de uso son seguras y que su impacto es mínimo para la salud de las personas, incluidos los grupos vulnerables, y para el medio ambiente”, concluyó.