Accésit Testimonio Histórico MARÍA, LA MADRE DE TODAS LAS HUELGAS Alejandro Martínez Rodríguez El maíz es el alimento de las gallinas y yo no soy un gallina, pensó cuando vio la plaza del pozo llena de maíz y le espetó a su compañero. ¡Hay que parar! ¿O qué somos pitas?. -¡Calla, oh!, Que paren otros, que nos van a moler a palos en el cuartel de Villablino. Hace días que las vagonetas salen pintadas con tiza: “O nos aumentan los salarios, o nos unimos a los asturianos”. Al norte de la cordillera cantábrica llevan casi un mes en huelga y en Laciana la situación se vive entre el miedo y la expectación, todos quieren parar, pero nadie quiere ser el primero. La noche del 4 al 5 de mayo de 1962 fue larga para los militantes comunistas del Pozo María. Una mezcla de miedo y emoción, a partes iguales, recorre su cuerpo. Una arriesgada acción con la que estaban a punto de hacer historia. Con esta preparamos la madre que la parió, dice Aníbal a Tomás y Belarmino mientras siembran cereal entre escombros y estériles. –14–