Se trabajo con el estilo de la vanguardia Dadá* junto al contenido de la Revista Deportiva El Gráfico.
*El movimiento dadaísta se desarrolló espontáneamente como un movimiento literario después de que el poeta Hugo Ball abriera el Cabaret Voltaire en Suiza, lugar de encuentro para artistas (poetas, pintores y músicos jóvenes independientes). Este lugar que fue la cuna del movimiento Dadá, sería cerrado por las autoridades pocos meses después de su apertura. El que guiaba el movimiento era un joven húngaro, Tristán Tzara (1896-1963). Quien exploró la poesía fonética, la del absurdo y la fortuita. Escribió un torrente de manifiestos y contribuyó en todas las publicaciones y eventos dadaístas más importantes. Con su reacción contra el mundo que se había vuelto loco, el dadaísmo afirmaba ser el anti-arte que poseía un fuerte elemento destructivo y negativo.