El Silencio Detras Del lente

El SILENCIO DETRÁS DEL LENTE EL SILENCIO DETRÁS DEL LENTE

Natalie Sarmiento Amalia Ricalde Alejandra Castañeda

EL SILENCIO DETRÁS DEL LENTE

Natalie Sarmiento Amalia Ricalde Alejandra Castañeda

La historia de Guaduas y Armero es tan rica y

prominente como la misma Colombia, Guaduas fue testigo de la conquista, la colonia y la independencia. Este pueblo fue reconocido en la época, por ser un paso obligatorio para las personas que se dirigían desde Santafé hasta la Costa Atlántica y viceversa. Por otra parte se encuentra Armero, una ciudad que hace parte del departamento del Tolima y donde hace 30 años, sus habitantes sufrieron una tragedia que continúa marcada en los recuerdos de muchas personas.

Hay grandes aspectos históricos, conmemorativos, culturales y representativos que están detrás de estos lugares y que merecen ser conocidos por nosotros. El objetivo de este viaje al principio fue académico, pero después de estar específicamente en Armero, la historia y la transformación de este lugar logró cambiar la imagen y el sentido de este trabajo; de esta manera queremos enseñar la tragedia de un pueblo desaparecido.

Guaduas es una de las grandes maravillas que posee Colombia en su gran extensión pero que aun así es poco conocida por los habitantes del país.

El primero de abril llegamos a Guaduas, un pueblo donde se respira y se percibe en cada rincón un ambiente colonial que es agradable para los turistas. Sin duda alguna el calor y la amabilidad de las personas fue algo que nos acogió desde el primer instante. Horas después nos dirigimos a Armero, catalogado como “desastre anunciado”.

INTRODUCCIÓN Allí el calor era sofocante y los insectos abundaban, pero la primera impresión que muchos tuvimos fue de desconcierto y tristeza, algunos por desconocer lo ocurrido y otros por ver de frente la magnitud de la tragedia. El instante en que ingresamos a lo que hace 30 años fue el hogar de miles de familias, un sentimiento de dolor invadió nuestros corazones y el silencio se apoderó de todos los que nos encontrábamos capturando las fotografías. Las casas llenas de malezas y lo poco que dejó la avalancha fueron muestras suficientes para conmover algunos corazones. Por nuestra mente pasaron imágenes de lo que un día fue Armero, nos imaginamos a los niños jugando, a las familias reunidas y a todos los habitantes que tuvo en algún momento esta tierra santa.

En Armero tuvimos la oportunidad de visitar lugares como el Hospital, el cual hoy en día es el hogar de cientos de murciélagos y abarca un olor fuerte y penetrante. La piedra asesina, como la bautizaron, es una muestra de la fuerza y magnitud de la avalancha, esta pesa alrededor de 300 toneladas.

Las anécdotas de los dos guías que nos acompañaron durante el recorrido lograron conmovernos y hacernos imaginar lo que se sintió en aquel lugar, pues los dos fueron sobrevivientes de la tragedia.

De regreso en Guaduas pudimos disfrutar de una presentación del grupo de danza de la Villa de Guaduas en el que nos mostraron cuatro bailes típicos como “El torbellino cundinamarqués”. Este espectáculo logró acercarnos más a la cultura de la región ya que además de los bailes, nos contaron acerca de la historia del lugar, de la vestimenta y de la comida típica.

En este trabajo también queremos resaltar el ambiente y las sensaciones que trasmiten cada zona que visitamos y el poder que tuvo cada uno de estos lugares para transportarnos en el tiempo. De la misma manera pretendemos enseñar con el registro fotográfico las dificultades que encontramos y el desafío que enfrentamos, saliendo de nuestra zona de confort.

En la caminata que se realizó al día siguiente pudimos vivir estas dificultades con mayor intensidad ya que desde la noche anterior la lluvia no cesaba.

Esto dificultó la actividad pues debimos caminar por unos caminos estrechos y resbalosos, sin embargo valió la pena ya que al llegar al Salto de Versalles, una caída de agua de 40 metros, pudimos observar no solo un lugar que es cuna de cuentos y leyendas sino la magnitud de la naturaleza.

Debido a las lluvias la cascada era considerablemente más abundante que en un día normal y la lluvia no impidió que quedaramos fascinados por la grandeza de esta. Sacamos nuestras cámaras que aunque envueltas en plástico para evitar daños por el agua, fueron nuestras herramientas para capturar ese momento.

Exhaustos después de la caminata nos dirijimos al restaurante que abrió sus puertas para nosotros durante todo el viaje. Aquí nos ofrecieron algunos platos típicos entre los que se destacó el famoso “Chupado” o “fiambre”, una masa envuelta en hojas de plátano que llevaba plátano, pollo y yuca entre otros ingredientes que le brindaban un sabor especial.

Por último tuvimos un epacio en el que pudimos tomar fotos libremente y conocer más acerca de la Villa de Guaduas.

Guaduas: Pueblo Histórico y cultural.

Armero: Tierra Santa.

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Natalie Sarmiento

Una batalla perdida frente a la naturaleza, batalla que sin duda muchos quisieron dar

NATALIE SARMIENTO

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NATALIE SARMIENTO Las raíces de nuestra identidad

NATALIE SARMIENTO Lugar donde terminan las predicciones de Ancízar Rivera

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El camino hacia el recuerdo de memorias

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NATALIE SARMIENTO

EL reflejo de una realidad

NATALIE SARMIENTO

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Una seguridad nacional reflejada en una fachada

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NATALIE SARMIENTO

Tierra sagrada con una infinidad de recuerdos

NATALIE SARMIENTO

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El silencio del recuerdo aun comparte un mismo techo

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NATALIE SARMIENTO

Nuestra riqueza colombiana que aún carece de sentido de pertenencia

NATALIE SARMIENTO

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Alejandra Castañeda Las palomas, embellecen los parques de la comunidad, es normal ver a los niños y mayores alimentarlas y cuidarlas, un compromiso con la naturaleza.

ALEJANDRA CASTAÑEDA

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Las esculturas forman parte de la tradición cultural de la zona, muchas de estas obraS labradas artesanalmente integraran parte de alguna casa de los numerosos visitantes que pasan por el lugar, ya sean nacionales o extranjeros.

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ALEJANDRA CASTAÑEDA

Las nuevas generaciones, los que en el mañana serán el relevo y continuadores por una Colombia mejor, más unida y que asumirán nuevos retos en pos de lograr un desarrollo más sostenibles para sus comunidades.

ALEJANDRA CASTAÑEDA

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“La puerta de oro de Cundinamarca” es la tierra de una de las mujeres más importantes de nuestro país. Policarpa Salavarrieta, la heroína de Cundinamarca.

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ALEJANDRA CASTAÑEDA

En varios puntos de la comunidad encontramos obras maestras, dignas de ser coleccionadas, por su belleza, colorido y el terminado, una tradición familiar que se ha mantenido de generación en generación.

ALEJANDRA CASTAÑEDA

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El 13 de noviembre de 1985, la tranquila comunidad de Armero se vio enlutada por la erupción del ALEJANDRA volcán Nevado del Ruíz, que tras 70 años de inactividad dejo en ruinas el pueblo y arranco de un momento a otro, más de 20.000 vidas humanas, edificaciones en ruina que han sobrevivido al tiempo.

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CASTAÑEDA

Ruinas de las edificaciones de la comunidad de Armero, arrasadas por la segunda erupción más devastadora del siglo XX, La catástrofe abrió todos los telediarios internacionales y especialmente, la historia de la niña Omaira Sánchez, que dejó en shock a toda una sociedad que no se encontraba preparada para un desastre de tales magnitudes.

ALEJANDRA CASTAÑEDA

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ALEJANDRA CASTAÑEDA El paso del tiempo convirtió estas edificaciones en una especie de monumento y tierra santa de todas aquellas personas que se vieron sorprendidas por 4 ríos de lodo, tierra, escombros y restos volcánicos, que descendieron a gran velocidad por las laderas del volcán.

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Conocido por su gran patrimonio tra envuelto en arte, gastronomía,

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histórico, cultura y

Guaduas se encuentradiciones especiales.

ALEJANDRA CASTAÑEDA

La interacción necesaria con la naturaleza y el medio ambiente de la zona nos hizo reflexionar sobre la necesidad de cuidar el planeta, durante el recorrido nos sorprendió una lluvia pertinaz que aprovechamos para dejar grabada en la tierra nuestra huella.

ALEJANDRA CASTAÑEDA

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Amalia Ricalde En Armero no solo quedaron ruinas, también podemos encontrar objetos comunes de uso domestico como inodoros.

AMALIA RICALDE

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Algunas de las casas no quedaron totalmente cubiertas de lodo como otras, en estas se puede entrar, recorrerlas y reconocer lugares como el baño o la cocina.

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AMALIA RICALDE

A través de las ruinas podemos ver el crecimiento de la naturaleza.

AMALIA RICALDE

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Aquí la naturaleza y las construcciones del hombre volvieron a ser uno solo.

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AMALIA RICALDE

En Armero abundan las lápidas y memoriales de personas que murieron allí, la mayoría fueron puestas por sus seres queridos.

AMALIA RICALDE

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La mayoría de las lápidas son simbólicas ya que muchos de los cuerpos no fueron encontrados o fueron trasladados a cementeros.

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AMALIA RICALDE

”La Bogotana” era una gaseosa producida en Armero, la empresa contaba con 35 camiones repartidores y 90 empleados.

AMALIA RICALDE

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AMALIA RICALDE

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Victor Santos es un sobreviviente de la tragedia y trabaja como guía en Armero hace 12 años.

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AMALIA RICALDE

La magnitud del Salto de Versalles , ubicada a aproximadamente 20 minutos de Guaduas.

AMALIA RICALDE

EPÍLOGO Desde la época colonial Colombia se ha vis-

Nosotros como futuros periodistas, queremos crear una sensibilización y por medio de fotografías recuperar la memoria de este campo santo como un espacio de reflexión y concientización. De igual manera contemplando la historia de Guaduas, decidimos utilizar este libro como una fuente de información que sea útil Un claro ejemplo de esto fue el desastre de para educar comunidades y reconstruir Armero que pudo haberse evitado si no hubie- la historia colectiva de esta zona del país. se sido por la negligencia de la misma ciudad, quienes no atendieron a los llamados de emer- Haber hecho de nuestra aula de clases gencia para evacuar a los habitantes a tiempo. una ciudad colonial tan importante como Guaduas nos permitió relacionar lo aprenDespués de finalizado este viaje, como realizadoras dido en las clases de historia de Colombia consideramos pertinente resaltar las enseñanzas que y fotografía, tuvimos la oportunidad de renos dejó la actividad al permitirnos apreciar estos conocer sobretodo las caracteristicas de lugares que desconocíamos. De esta manera en- las ciudades coloniales y pusimos en práccontramos por medio de la historia y los vínculos tica nuestros conocimientos en fotografía. humanos una visión diferente de nuestro pasado. to inmersa en un mar de conflictos que durante años nos han debilitado como colombianos. Tal vez la ausencia de una identidad, la incertidumbre política, o el enfrentarnos unos contra otros nos han convertido en personas frías y limitadas a pensar únicamente en el bienestar propio.

Armero es un pueblo de historia y humanidad, envuelta en un duelo causado por la mencionada tragedia.

Realmente nosotras no imaginamos encontrarnos cara a cara con la huella dramatica de la catástrofe cruel producida por la fuerza de la naturaleza. Una cosa es conocer la historia por referencias y otra muy diferente es estar allí, palparlo y sentir las emociones que transmite la soledad de un inmenso sepulcro.

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ABRIL 2016 BOGOTÁ-COLOMBIA