SIERVOLETÍN DE OCTUBRE 2020

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SIERVOS DEL

DIVINO AMOR

OCTUBRE 2020 Año

VIII

No. 86

Seminario de San José


EDITORIAL

Mes de octubre, mes del Rosario, de esta pequeña herramienta que nos dejo nuestra Madre Santísima para que la busquemos como busca el niño a su mamá cuando necesita algo, cuando busca el calor que sólo encontramos en el seno materno, cuando tenemos esa nostalgia del hogar. Para eso y para que recordemos, meditemos y hagamos vida la Buena Nueva que es su Hijo nuestro Señor Jesucristo.


Palabras inspiradas por Dios, la oración dominical el Padre nuestro que nos enseñó el mismo Jesús, el Ave María alabanza y súplica a la mujer que con su “FIAT” hizo posible nuestra redención. Y el Gloria que es el reconocimiento a nuestro Dios Uno y Trino.

Mes del Rosario que es rezado por el Papa, sacerdotes religiosas y fieles laicos con fe en la intercesión eficaz de María como en las bodas de Canaán y con el cual se han ganado batallas, alejado tormentas y consolado a los dolientes. Sin más los invito a orar con esta pequeña y al mismo tiempo, gran arma para estos tiempos difíciles. Dios es Amor P. Francisco Javier Rebollo León sda


LA VOZ DEL PAPA Dios llama a cada uno de nosotros "a trabajar para Él en su campo, que es el mundo, en su viña, que es la Iglesia y nos da como única recompensa su amor, la amistad de Jesús. Es distinto el actuar de Dios en nuestros corazones, cuando uno se engría viene Dios y nos ofrece lo mismo paz y amor. Es más, se ofrece a sí mismo, dándonos el misterio de su amor, el cielo, el jornal que reparte a cada uno de sus trabajadores. Esto, dice el papa tiene dos grandes vertientes, el llamado y la recompensa, que puede arrasarnos creciendo con gran bulle, llevándonos por caminos muy distintos a los que él pensaba. Están las personas que al oír que se tiene una recompensa, actúan como el hombre asalariado que no le interesa el fruto del amor con sus mismos compañeros, enfrascándose en su egoísmo. Aquí el Señor nos da parejo un denario. Podemos malgastarlo o compartirlo, eso depende de la libertad de los trabajadores. Cuando somos nosotros justos podemos ser como aquellos que trabajaron sin descanso y ahorraron para compartir sus fuerzas con los demás para que ganaran ese denario, y ayudándoles sacaron los frutos del campo que se esperaban. Podemos ser de los trabajadores que se fueron por otra vertiente del mal, lo cual los llevó a protestar, pero que, arrepentidos por la amonestación dulce, de su Señor cambian y obtienen así el mismo denario. Debemos de ser como los primeros trabajadores que actúan con misericordia como Dios.


Según el papa ese llamado de Dios de misericordia es repetitivo y suele invitarnos a actuar siempre con nuestros hermanos de la misma forma. El papa nos recuerda que Dios no se encierra en su mundo, sino que “sale” continuamente a la búsqueda de las personas, para que la ayuden a cooperar en su Reino de servicio. El papa nos remarca que Dios es el único que nos ofrece esas palabras de salvación como comunidad redimida, para que salgamos y cosechemos como aquellos justos que ayudaron a los otros para que ganaran aquel jornal, es decir, el cielo, e incluso trabajaron por los otros para que así viendo su ejemplo ellos también cooperen a esta gran obra de amor de Dios. Explica el santo padre que Dios es el gran obrero que da a cada uno el salario justo, el Reino de Dios, la bondad del Padre celestial. Esto implica de un compromiso de nosotros con Dios, dando lo máximo, para dar mucho en aquella viña, recibiendo así el mismo denario por un gran trabajo realizado. Pero no hay que enorgullecernos de lo echo sino decir como buenos trabajadores yo solo hice lo que tenía que hacer, y lo hice por el bien de mis hermanos (sea de familia, amigos, comunidad, sociedad, etc.). Cristo en aquel actuar dice el papa se nos adelanta con la gracia, yéndose más allá de la justicia, la misericordia. Termina diciendo el papa, que los que quieran recibir más, primero deben tener humildad, para así mismo ser primeros, recibiendo un jornal, el denario que les toca con gran alegría y amor. Que María nos ayude en aquella lección de humildad y amor para con todos los hermanos.


5 DE OCTUBRE SANTA FAUSTINA KOWALSKA Santa Faustina nace el 25 de agosto de 1905 en Polonia, en una aldea llamada Glogoviec. Bautizada dos días después de su nacimiento con el nombre de Elena Kowalska, y recibiendo la primera comunión a los 9 años. Desde los siete años llevaba una vida de oración, en varias ocasiones se despertaba en la noche y se ponía a orar. Desde temprana edad sintió el llamado de Dios a la vida religiosa, pero no la admiten debido a su corta edad, con apenas siete u ocho años. A los doce años sólo estudió tres años de educación primaria debido a la situación de su país, por la ocupación rusa en Polonia. Se dedicó las labores domesticas y a cuidar de sus hermanos pequeños, ya que eran ocho en total y ella era la tercera. A los quince años recibe la negativa de sus padres, lo mismo que a los dieciocho, decide entonces dejarse llevar por las vanidades que ofrecía el mundo. En una fiesta, mientras estaba bailando, vio a Jesús sufriendo y le dijo: “¿hasta cuándo me harás sufrir?”. Esto le llego hasta el alma y estando en oración con el Santísimo, Jesús le indicó: “Ve a Varsovia, ahí entrarás en un convento”. Ingresa en la Congregación de las Hermanas de Nuestra Señora de la Misericordia y a principios del año de 1926 ingresa al noviciado y termina su postulantado en abril de ese mismo año recibiendo el nombre de Sor Faustina. Sus hermanas de comunidad la describen como alguien agradable, piadosa, recogida, alegre, dispuesta a ayudar al prójimo. Llegó a desempeñar labores de cocina, jardinería y de portería.


Jesús le mostró su gran misericordia en 1931:” “Al anochecer, estando en mi celda, vi al Señor Jesús vestido con una túnica blanca. Tenía una mano levantada para bendecir y con la otra tocaba la túnica sobre el pecho. De la abertura de la túnica en el pecho, salían dos grandes rayos: uno rojo y otro pálido”. “Los dos rayos significan la Sangre y el Agua. El rayo pálido simboliza el Agua que justifica a las almas. El rayo rojo simboliza la Sangre que es la vida de las almas”. Le pidió Dios que mandara pintar una imagen de lo que había visto y la diera a conocer. También la devoción de la coronilla de la divina misericordia, por eso es llamada apóstol de la misericordia. Murió el 5 de octubre de 1938, con 33 años a causa de tuberculosis que atacó sus pulmones y sistema digestivo. Dios nos ayude a vivir realmente su misericordia y a tener misericordia con los demás para poder decirle a Nuestro Señor:” Jesús, en Ti confío”. Diácono: Pablo Santoscoy Rebollo.


10 DE OCTUBRE SAN DANIEL COMBONI OBISPO MISIONERO Y FUNDADOR

En Khartum, en Sudán, san Daniel Comboni, obispo, que fundó el Instituto para las Misiones en África (Misioneros Combonianos del Corazón de Jesús), y tras ser elegido obispo en ese continente, se entregó sin reservas y predicó el Evangelio por aquellas regiones, trabajando también por hacer respetar la dignidad humana. (†1881) Daniel Comboni: hijo de campesinos pobres, llegó a ser el primer Obispo de Africa Central y uno de los más grandes misioneros de la historia de la Iglesia. La vida de Comboni nos muestra que, cuando Dios interviene y encuentra una persona generosa y disponible, se realizan grandes cosas. •


Fechas más importantes — Daniel Comboni nace en Limone sul Garda (Brescia, Italia) el 15 de marzo de 1831. — Consagra su vida a Africa en 1849, realizando un proyecto que lo lleva a arriesgar la vida varias veces en las difíciles expediciones misioneras desde 1857, que es cuando va por primera vez a Africa. — El 31 de diciembre de 1854, año en que se proclama el dogma de la Inmaculada Concepción de María, es ordenado sacerdote por el Beato Juan Nepomuceno Tschiderer, Obispo de Trento. — En 1864 escribe un Plan fundado sobre la idea de « salvar Africa por medio de Africa », que demuestra la confianza que Comboni tiene en los africanos, pensando que serán ellos los protagonistas de su propia evangelización (Plan de 1864). — Fiel a su consigna « Africa o muerte », no obstante las dificultades sigue con su Plan fundando, en 1867, el Instituto de los Misioneros Combonianos.


Voz profética, anuncia a toda la Iglesia, sobre todo en Europa, que ha llegado la hora de evangelizar a los pueblos de Africa. No teme presentarse, como simple sacerdote que es, a los Obispos del Concilio Vaticano I, pidiéndoles que cada Iglesia local se comprometa en la conversión de Africa (Postulatum, 1870). — Demostrando un valor fuera de lo común, Comboni consigue que también las religiosas participen directamente en la misión de Africa Central, siendo el primero en tomar tal iniciativa. En 1872, funda un Instituto de religiosas dedicadas exclusivamente a la misión: las Hermanas Misioneras Combonianas. — Gasta todas sus energías por los africanos y lucha con tesón para que sea abolida la esclavitud.


En 1877, es consagrado Obispo nombrado Vicario Apostólico de Africa Central. — Muere en Jartum, Sudán, abatido por las fatigas y cruces, en la noche del 10 de octubre de 1881. — El 26 de marzo de 1994, se reconoce la heroicidad de sus virtudes. — El 6 de abril de 1995, se reconoce el milagro realizado por su intercesión en una muchacha afrobrasileña, la joven María José de Oliveira Paixão. — El 17 de marzo de 1996, es beatificado por el Papa Juan Pablo II en la Basílica de San Pedro de Roma. — El 20 de diciembre 2002, se reconoce el segundo milagro realizado por su intercesión en une madre musulmana del Sudan, Lubna Abdel Aziz. — El 5 de octubre de 2003, es canonizado por el Papa Juan Pablo II en la Basílica de San Pedro de Roma.


22 DE OCTUBRE SAN JUAN PABLO II San Juan Pablo II es considerado de los grandes santos magno, o grande. Su nombre completo: Karol Józef Wojtyla, nació en Wadowice, Polonia, el 18 de mayo de 1920. A los nueve años recibe la primera comunión y a los dieciocho la confirmación. Se matriculo en la Universidad de Jagellònica en Cracovia, pero cerraron las Universidad por la ocupación de las fuerzas nazis. Estudio teatro y trabajo de 1940 a 1944 en una cantera y después en una fábrica química Solvay. En 1942 siente ese llamado de Dios para que fuera sacerdote, por lo cual empezó a estudiar de forma clandestina en el Seminario mayor de Cracovia, esto por la situación del país. .

Se ordenó sacerdote el 1 de noviembre de 1946 y el 4 de julio de 1948 lo nombra el Papa Pio XII como Obispo Auxiliar de Cracovia. El 16 de octubre de 1978 fue elegido Papa con el nombre de Juan Pablo II. En su pontificado de casi 27 años escribió muchísimas cosas: 14 Encíclicas, 15 Exhortaciones apostólicas, 11 Constituciones apostólicas y 45 Cartas apostólicas. Cruzando el umbral de la esperanza; Don y misterio: en el quincuagésimo aniversario de mi sacerdocio ; Tríptico romano, meditaciones en forma de poesía (marzo de 2003); ¡Levantaos! ¡vamos! y Memoria e identidad. Realizó muchísimos viajes a varias partes del mundo, recorrió 1.247,613 kilómetros, siendo el equivalente a darle 36 vueltas al planeta tierra.


Un hombre de profunda devoción a Jesús Eucaristía, con quien pasaba muchas horas de adoración, a pesar de las bastantes tareas que tenía que realizar a diario. Totalmente mariano, de hecho en su pontificado escogió como lema que se consagraba todo a María el “Totus tuus , es decir Todo tuyo o soy todo tuyo María” . Promovió el rezo del Santo Rosario, nombrando los misterios de la luz para meditar más en los misterios de Cristo por medio de la Santísima Virgen María. Sufrió un atentado el 13 de mayo de 1981, donde lo salvó la mano protectora de Santa María, en su advocación de Nuestra Señora de Fátima y perdonó al culpable. Murió en el sábado dos de abril del 2005, en el Palacio Vaticano. Varias multitudes procedentes de varias partes lo proclamaron santo súbito. La vivencia de ese lema de: “no tengan miedo” que dijo Jesucristo y que él hizo vida, es lo que lo llevó a hacer todo por amor a Cristo y a los demás, a pesar de las dificultades que llegó a padecer. Su pedido de “remar mar adentro” y de fidelidad “México siempre fiel a Dios “es lo que nos debe de mover en los momentos complicados de nuestra vida. Siempre mostraba una alegría y un trato muy especial para con todos. Este es uno de los grandes santos de nuestros tiempos que estoy seguro de que muchos de nosotros contamos con esta dicha de conocerlo de una u otra forma. Donde quiera que iba se sentía esa mirada de amor y la presencia de Dios. Que seamos también mensajeros del amor divino, que lo llevemos a los demás, esa esperanza, consuelo, aliento, alegría que tanta falta hace en nuestros tiempos. Llevar la presencia de Dios a los demás, que crezcamos en amor a Nuestra Madre del cielo y nos consagremos a Jesús por medio de María. San Juan Pablo II… ruega por nosotros.

Diácono: Pablo Santoscoy Rebollo


15 DE OCTUBRE SANTA TERESA DE JESÚS (DE ÁVILA) DOCTORA DE LA IGLESIA, RELIGIOSA, FUNDADORA Reformadora del Carmelo, Madre de las Carmelitas Descalzas y de los Carmelitas Descalzos; "mater spiritualium" (título debajo de su estatua en la basílica vaticana); patrona de los escritores católicos y Doctora de la Iglesia (1970): La primera mujer, que junto a Santa Catalina de Sena recibe este título. Nació en Ávila, España, el 28 de marzo de 1515.

Su nombre, Teresa de Cepeda y Ahumada, hija de Alonso Sánchez de Cepeda y Beatriz Dávila Ahumada. En su casa eran 12 hijos. Tres del primer matrimonio de Don Alonso y nueve del segundo, entre estos últimos, Teresa. Escribe en su autobiografía: "Por la gracia de Dios, todos mis hermanos y medios hermanos se asemejaban en la virtud a mis buenos padres, menos yo". De niños, ella y Rodrigo, su hermano, eran muy aficionados a leer vidas de santos, y se emocionaron al saber que los que ofrecen su vida por amor a Cristo reciben un gran premio en el cielo. Así que dispusieron se irse a tierras de mahometanos a declararse amigos de Jesús y así ser martirizados para conseguir un buen puesto en el cielo. Afortunadamente, por el camino se encontraron con un tío suyo que los regresó a su hogar. Entonces dispusieron se construir una celda en el solar de la casa e irse a rezar allá de vez en cuando, sin que nadie los molestara ni los distrajese.


Teresa tenía un gran encanto personal, una simpatía impresionante, una alegría contagiosa, y una especie de instinto innato de agradecimiento que la llevaba a corresponder a todas las amabilidades. Con esto se ganaba la estima de todos los que la rodeaban. Empezar a tratar con ella y empezar a sentir una inmensa simpatía hacia su persona, eran una misma cosa.

En aquellos tiempos había en los conventos de España la dañosa costumbre de que las religiosas gastaban mucho tiempo en la sala recibiendo visitas y charlando en la sala con las muchas personas que iban a gozar de su conversación. Y esto le quitaba el fervor en la oración y no las dejaba concentrarse en la meditación y se llegó a convencer de que ella no podía dedicarse a tener verdadera oración con Dios porque era muy disipada. Y que debía dejar de orar tanto.


En aquella época del 1500 las comunidades religiosas habían decaído de su antiguo fervor. Las comunidades eran demasiado numerosas lo cual ayudaba mucho a la relajación. Por ejemplo el convento de las carmelitas de Ávila tenía 140 religiosas. Santa Teresa exclamaba: "La experiencia me ha demostrado lo que es una casa llena de mujeres. Dios me libre de semejante calamidad". Un día una sobrina de la santa le dijo: "Lo mejor sería fundar una comunidad en que cada casa tuviera pocas hermanas". Santa Teresa consideró esta idea como venida del cielo y se propuso fundar un nuevo convento, con pocas hermanas pero bien fervorosas. Ella llevaba ya 25 años en el convento. Una viuda rica le ofreció una pequeña casa para ello. San Pedro de Alcántara, San Luis Beltrán y el obispo de la ciudad apoyaron la idea. El Provincial de los Carmelitas concedió el permiso.


Se ganó para su causa a San Juan de la Cruz, y con él fundó los Carmelitas descalzos. Las carmelitas descalzas son ahora 14,000 en 835 conventos en el mundo. Y los carmelitas descalzos son 3,800 en 490 conventos.

Santa Teresa murió el 4 de octubre de 1582 y la enterraron al día siguiente, el 15 de octubre. ¿Por qué esto? Porque en ese día empezó a regir el cambio del calendario, cuando el Papa añadió 10 días al almanaque para corregir un error de cálculo en el mismo que llevaba arrastrándose ya por años.


El Rosario hoy más que nunca. Ya nos encontramos en octubre de un año muy importante para nuestra salvación, donde la pandemia nos ha cambiado la vida y ha sido una oportunidad para que revisemos nuestro interior al tratar de estar más en casa con los nuestros. En la Semana Santa todo diferente a otros años, al igual que otras festividades religiosas y civiles, pues es tiempo de voltear hacia Dios, pues no le hemos dado el lugar que le corresponde, que María Santísima nos ayude a buscar a Dios por ser Quien es Él, y que no nos ha dejado ni nos dejará, lo único que busca Él es que nos perdonemos de corazón unos a otros, y así amarnos. Octubre es para que estando juntos recemos El Rosario, ya que es considerado como el rezo por excelencia a María, nuestra Madre. El mismo Jesucristo, al estar padeciendo en la cruz nos dejó a María como nuestra Madre en la persona del apóstol Juan: “¡He ahí tu madre! Y desde aquella hora el discípulo la recibió en su propia casa” Juan (19,27). Y, como madre, es protectora. ¿A quién más le podemos pedir ayuda que a nuestra propia madre? Más aún sabiendo que es nuestra madre llena de amor. Sabemos que todas las gracias las recibimos de Dios, pero Ella, como intercesora es quien nos puede conseguir de ÉL todo lo que más nos convenga para nuestra salvación.


Es Jesús mismo quien nos habla de la importancia de pedir todo por medio de su Madre, a quien ama tanto y no le niega nada de lo que le pidamos, siendo para nuestro bien, veamos un poco de Nuestra Espiritualidad: Deseo que Améis a Mi Madre. María Mi Madre, en verdad les digo, por ella alcanzaréis todo aquello que sea para vuestra salvación. Deseo fue y es de Mi ardiente Corazón que améis a Mi Madre porque Yo les digo: la amé y la amo desde la eternidad y el que la alabe y ensalce, a Mí me ama, y llena de gozo, dándome gloria. 10 de junio de 1983. Sagrado Corazón de Jesús. Siervos del Divino Amor. Démosle gloria a Dios, en el nombre de Jesucristo alabando y bendiciendo a María con el rezo del Santo Rosario, sabiendo que es de total agrado a Dios mismo y de su Hijo Jesucristo.


Nuestro Seminario sigue en construcción. Gracias a Dios ha seguido la construcción y poco a poco últimamente se han logrado tener ya dos escaleras que van a lo que sería la azotea del seminario, y se han podido terminar dos cuartos más y un baño en esta etapa de obra negra, pero lo que si necesitamos con gran necesidad para poder terminar la parte que nos falta del segundo piso son vigas de acero, ayúdanos a pedirle a Dios Nuestro Señor que se puedan conseguir esas vigas, del segundo piso de este seminario San José de los Siervos del Divino Amor. Sabemos que las vigas, como muchos otros materiales de construcción han subido mucho de precio y, sobre todo en esta época de crisis que vivimos tal vez no nos sea posible participar siquiera con el costo de una, pero con nuestras aportaciones ya sean pequeñas o grandes lograremos ver terminado el seminario para vocaciones que esta llamando Nuestro Señor para ser sacerdotes santos. María Santísima sea la que nos ayude a promover este seminario uniéndonos al rezo del rosario, pues ella puede mover nuestros corazones a que ayuden a esta Obra que ha nacido del Corazón de Su Hijo.


Para tus donativos tenemos esta cuenta bancaria: BANCO: SANTANDER Jesús Leonardo Rebollo León Cuenta: 60550481196 CLABE BANCARIA PARA TRANSFERENCIAS: 014320605504811963 Depósitos en OXXO: 5579 0700 9014 3192


Oración para pedir por la construcción del Seminario de San José de los Siervos del Divino Amor. “


San Juan Pablo II

Faustina Kowalska

Daniel Comboni

MĂŠxico

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Teresa de Ă vila

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Antigua Carretera a Chapala No. 8005 A, Col. Insurgentes Sur, El Salto, Jalisco. C.P. 45690 Tel: (33) 36-89-02-35 MAIL: sda@siervosdeldivinoamor.com WEB: www.siervosdeldivinoamor.com


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