Siervoletín Siervos del Divino Amor
Abril 2018
Año VI
No. 56
EDITORIAL
QUE EN CRISTO RESUCITADO TENGAMOS VIDA
Este mes de abril lo iniciamos con la celebración de nuestra Solemnidad más grande como católicos: la Pascua de Resurrección del Señor y como cada año después de la Semana Santa comienza el tiempo pascual en la liturgia de la Iglesia, tiempo que se prolonga por cincuenta días hasta la celebración de Pentecostés. Me he preguntado muchas veces ¿porqué a veces pasa como desapercibida esta alegría pascual para muchos de los que somos católicos bautizados? ¿porqué al paso de esta cincuentena pascual nos hacemos rutinarios en nuestras celebraciones eucarísticas y en general en la vida cotidiana?
Sin embargo, Jesús nace precisamente por todo lo Quizá sólo sea una apreciación personal de yamiseria que, por anterior, para transformar nuestra situación en supuesto la liturgia de la Iglesia nos propone el júbilo esperanza divina, para traernos su paz ante la como distintivo de este tiempo, lecturas de las misas convulsión y guerra en ellas mundo, nace nos hablan del Kerigma: Cristo muerto y Resucitado por nuestra salvación. Pero ¿qué tanto esto se refleja en nuestras vidas cotidianas? ¿Somos conscientes que este Misterio Pascual nos ha cambiado realmente la vida a toda la humanidad?, ¿no deberíamos vivir llenos de alegría porque nuestra salvación la ha conseguido Nuestro Señor con su Pasión, Muerte y Resurrección? ¿De verdad estamos convencidos que Cristo está vivo como predicaban los Apóstoles? Y, en consecuencia, ¿vivimos confiando en la Misericordia y Amor que nos da la certeza de Jesús vivo y pendiente de mi vida y salvación?
Sin embargo, Jesús nace precisamente por todo lo anterior, para transformar nuestra situación de miseria en esperanza divina, para traernos su paz ante la convulsión y guerra en el mundo, nace
Esta reflexión me lleva a ver la situación actual en nuestro mundo y los satisfactores que nos ofrece como respuesta a nuestra inquietudes y anhelos de felicidad, seguridad y paz. Y me doy cuenta de que ninguno llena las expectativas del corazón del hombre. Sólo podemos encontrar las respuestas a nuestras interrogantes en Cristo vivo, que quiere que en El tengamos verdadera Vida.
Por lo tanto, los invito a que este tiempo pascual lo vivamos intensamente, con confianza, con esperanza, sobre todo con mucho amor, sabiendo que El que dio la vida por mí, está vivo para que en El tengamos la verdadera plenitud de Vida. María Santísima, Madre de quien es la Vida misma, nos acoja en su regazo, junto a su Corazón Inmaculado para que ahí encontremos al autor de la verdadera Vida.
P. Francisco Javier Rebollo León sda.
NUESTRA ESPIRITUALIDAD Una vez más nos encontramos en una de las etapas más importantes de la Iglesia: El Tiempo de Pascua. Hemos vivido ya la Semana Santa, celebramos la Pasión de Nuestro Señor Jesucristo y su Triunfante Resurrección, motivo y razón de nuestra fe. ¿Qué es lo que espera Jesús de nosotros y qué tanta es nuestra disposición para aceptar Su Voluntad y cambiar para ser mejores hijos de Dios?
Veamos lo que Jesús nos dice a cada uno desde dentro de nuestros corazones:
“Cuánta necesidad tienen de reflexionar sobre estos días de ayuno, penitencia y, sobre todo, de caridad, comenzando con la propia vida de cada uno de ustedes, y así poder darme a los demás. Cuántos dicen que están ya ciertos de Mi y no me conocen y van por el mundo dando, no el testimonio Mio, sino de la falsedad, de la hipocresía de cada uno.
Yo les pido que en estos días estén ciertos de Mí, del Camino, de la Verdad y de la Vida que Yo Soy, no sea que estando cerca de la Fuente de la Vida mueran de sed. Pues recuerden que Yo Soy la Fuente de la Vida, y a eso Yo vine, para que la tengan en abundancia.
El ayuno sea, no ofenderme; la penitencia, el estar siempre conscientes de que polvo son y sin Mi nada son; la caridad, sea estar en esta Uniรณn del Amor, en darse a los demรกs como Yo me he dado por cada uno de ustedes.
Que estén ciertos de que esta vida es pasajera y que es para que, viviéndola unidos a Mí, sean dignos del Reino Eterno, no sea que esta Pascua sea la última que pasen en esta vida y la desperdicien pensando que podrán, para algunos, venir más...
…Sean sensatos, prudentes y verdaderos apóstoles llevándome a los demás, con su ejemplo, con sus palabras y con sus obras”.
Que Jesús nos ayude a ser sus testigos fieles de que Jesús ha tenido que padecer, morir y resucitar por nosotros y ahora nos pide que nuestro padecer, nuestro morir a nosotros cada día, y levantándonos de nuestros pecados resucitemos de la muerte de nuestros pecados que cometemos a diario con el arrepentimiento, y llenándonos de las obras de caridad sea siempre unidos a Él, y junto con María, podamos contribuir en su Plan de Salvación, mereciendo nosotros mismos gozar de su Reino cuando llegue nuestra hora.
Juan Bautista de La Salle vivió en un mundo totalmente diferente del nuestro. Era el primogénito de una familia acomodada que vivió en Francia hace 300 años. Juan Bautista de La Salle nació en Reims, recibió la tonsura a la edad de 11 años y fue nombrado canónigo de la Catedral de Reims a los 16. Cuando murieron sus padres tuvo que encargarse de la administración de los bienes de la familia. Pero, terminados sus estudios de teología, fue ordenado sacerdote el 9 de abril de 1678. Dos años más tarde, obtuvo el título de doctor en teología. En ese período de su vida, intentó comprometerse con un grupo de jóvenes rudos y poco instruidos, a fin de fundar escuelas para niños pobres.
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En aquella época, sólo algunas personas vivían con lujo, mientras la gran mayoría vivía en condiciones de extrema pobreza: los campesinos en las aldeas y los trabajadores miserables en las ciudades. Sólo un número reducido podía enviar a sus hijos a la escuela. La mayoría de los niños tenían pocas posibilidades de futuro. Conmovido por la situación de estos pobres que parecían "tan alejados de la salvación" en una u otra situación, tomó la decisión de poner todos sus talentos al servicio de esos niños, "a menudo abandonados a sí mismos y sin educación". Para ser más eficaz, abandonó su casa familiar y se fue a vivir con los maestros, renunció a su canonjía y su fortuna y a continuación, organizó la comunidad que hoy llamamos Hermanos de las Escuelas Cristianas.
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Su empresa se encontró con la oposición de las autoridades eclesiásticas que no deseaban la creación de una nueva forma de vida religiosa, una comunidad de laicos consagrados ocupándose de las escuelas "juntos y por asociación". Los estamentos educativos de aquel tiempo quedaron perturbados por sus métodos innovadores y su absoluto deseo de gratuidad para todos, totalmente indiferente al hecho de saber si los padres podían pagar o no. A pesar de todo, De La Salle y sus Hermanos lograron con éxito crear una red de escuelas de calidad, caracterizada por el uso de la lengua vernácula, los grupos de alumnos reunidos por niveles y resultados, la formación religiosa basada en temas originales, preparada por maestros con una vocación religiosa y misionera a la vez y por la implicación de los padres en la educación.
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Además, De La Salle fue innovador al proponer programas para la formación de maestros seglares, cursos dominicales para jóvenes trabajadores y una de las primeras instituciones para la reinserción de "delincuentes". Extenuado por una vida cargada de austeridades y trabajos, falleció en San Yon, cerca de Rouen, en 1719, sólo unas semanas antes de cumplir 68 años.
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Juan Bautista de La Salle fue el primero que organizó centros de formación de maestros, escuelas de aprendizaje para delincuentes, escuelas técnicas, escuelas secundarias de idiomas modernos, artes y ciencias. Su obra se extendió rapidísimamente en Francia, y después de su muerte, por todo el mundo. En 1900, Juan Bautista de La Salle fue declarado Santo. En 1950, a causa de su vida y sus escritos inspirados, recibió el título de Santo Patrono de los que trabajan en el ámbito de la educación. Juan Bautista mostró cómo se debe enseñar y tratar a los jóvenes, cómo enfrentarse a las deficiencias y debilidades con compasión, cómo ayudar, curar y fortalecer. Hoy, las escuelas Lasallistas existen en 85 países del mundo.
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Seminarista Enrique Martin Martin
Nació el 25 de marzo de 1347, en la ciudad de Siena, Italia. Desde niña fue muy piadosa. Su madre quería que optara por el matrimonio, pero ella optó por una vida de religiosa en la orden terciaria de las dominicas. Vivió meditando la Pasión de Cristo a tal grado que Jesús le concedió tener sus llagas en sus manos. Le tocó una época de guerra y una época en la que el Papa Gregorio XI estaba refugiado en Avignon, Francia, mientras Roma estaba saqueada. Santa Catalina le ruega a Gregorio XI que regrese a Roma que es donde más se le necesita y donde Dios quiere que ahí viva y no por mundanos criterios. El Papa regresó a Roma el 17 enero de 1377.
También trabajó por la paz, hablando con los reyes y nobles, buscando la conversión de aquellos que no creían. El 29 de abril de 1380 muere a los 33 años diciendo:
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Roguemos al Señor para que sepamos descubrir al igual que Santa Catalina de Siena su voluntad y realizarla siempre con amor y diligencia, a no dejarnos llevar por intereses mundanos que se oponen a la voluntad de Dios que es la salvación de las almas, aunque nos cueste nuestra reputación, fama o nuestra vida; pues a Jesús no le importó eso cuando dio su vida por todos nosotros en la cruz. A pedir y trabajar siempre por la paz.
19 Seminarista Pablo Santoscoy Rebollo
El pasado 19 de marzo celebramos a nuestro Santo patrono del Seminario: Señor San José con la Eucaristía en la comunidad. Le pedimos que siga intercediendo para continuar con la construcción del seminario y para que Nuestro Señor nos mande vocaciones nacidas de su Corazón. 20
El padre Jesús Leonardo junto con el seminarista Juan Bosco y el joven Julio partieron para Tabasco y Chiapas del 16 al 22 de este mes para promover las vocaciones sacerdotales por aquellos lugares y entrevistar algunos jóvenes que tienen inquietud vocacional. Después de un arduo viaje y de pasar por muchos poblados regresaron con muy buenas noticias, pues son varios los jóvenes que quieren entrar a nuestro seminario. ¡Le damos gracias a Dios y a María Santísima! 21
El sábado 24 celebramos la misa de envío del grupo de jóvenes Siervos del Divino Amor: Luz de Dios, para la Pascua Juvenil que han organizado para la Semana Santa en la parroquia de San Pedrito Tlaquepaque. Fue muy emotiva la celebración ya que después de la misa cada uno presentó la vida de un santo con el que se han identificado espiritualmente y lo hicieron muy bien. Al otro día partieron para su misión.
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Este año nos dividimos el trabajo de Semana Santa de modo que los seminaristas Pablo y Francisco Javier Merlo fueron a Tasquillo Hidalgo para apoyar al párroco de ese lugar en la zona otomí, el seminarista Juan Bosco acompañado de Jonathan y de Gerardo fueron a León Guanajuato para ayudar al Fraile que nos pidió apoyo, el seminarista Enrique se fue con el grupo de jóvenes a San Pedrito y el Padre Leonardo y el Padre Francisco nos quedamos para ayudar a nuestro párroco Guillermo Uribe en el Perpetuo Socorro. Para la siguiente entrega podremos reseñar un poco las experiencias en todos los frentes. 23
Dios es siempre fiel en sus promesas y misericordioso en extremo; él se vale de Moisés para perdonar a su pueblo, pero también el patriarca deja guiarse por Dios, y le recuerda que él, es misericordia y que sin él no podemos hacer nada: con estas palabras expresa eso el Papa:
En sus palabras, en este “cara a cara”, se transluce la implicación del Profeta y su amor por el pueblo. Moisés no tiene miedo de decir la verdad, no “entra en el juego del soborno”, no cede ante la posibilidad “de vender su conciencia”. “Y esto le gusta a Dios”, porque “cuando Dios ve un alma, una persona que reza y reza y reza por algo, Él se conmueve”.
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Argumenta el Papa: Para Dios esa es la oración de intercesión: Se necesita paciencia en la oración de intercesión. Nosotros no podemos prometer a alguien que rezaremos por él y después terminar la cosa con un Padrenuestro y un Avemaría e irnos. No.
El papa nos invita a hacer perseverantes en la oración para poder alcanzar lo que queramos, pero claro siempre viendo por las necesidades de nuestros prójimos; Dios quiere que seamos generosos con todos, en especial con los necesitados. Eso muchas veces no los remarca el Papa.
Moisés no entra en la “lógica del soborno”, él está con el pueblo y lucha por el pueblo. Las Sagradas Escrituras están llenas de ejemplos de “constancia”, de la capacidad de “ir adelante con paciencia”: la cananea, el ciego en la salida de Jericó…
Lo que más necesitamos es seguir estos sencillos pasos que nos recomienda el Papa:
“Para la oración de intercesión se necesitan dos cosas: , es decir, parresia, coraje, y paciencia. Si yo quiero que el Señor escuche algo que le pido, debo ir, e ir, e ir, llamar a la puerta, y llamo al corazón de Dios, y llamo desde acá… ¡Porque mi corazón está implicado con esto! Pero si mi corazón no se implica con esa necesidad, con esa persona por la que debo rezar, ni siquiera será capaz de tener valor y paciencia”.
Por último, el Papa Francisco indicó que:
El Papa nos pide mucha cautela en la oración, nos pide que recemos como un niño ante su padre, con esa confianza de sabernos que somos sus hijos, y de que en verdad nos oye y nos ama tanto. Que Jesús nos ayude a seguir caminando en esa oración de intercesión que él mismo nos ayuda a hacer.
Seminarista Francisco Javier Merlo Rodríguez
Y, “poquito a poquito”, pero seguimos con la construcción de nuestro Seminario San José de los Siervos del Divino Amor, Gracias a Dios y a la generosa ayuda de todos nuestros amigos y bienhechores. En esta ocasión recurrimos a nuestra Espiritualidad de los Siervos del Divino Amor. “Este Seminario es un semillero de sacerdotes santos y para tener sacerdotes santos se necesitan seminaristas santos, que sean guerreros para la salvación de las almas”.
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Así pues, todos los que contribuyan para esta obra del Corazón de Jesús contribuirán para su salvación y la de muchos. Porque los deseos del Corazón de Jesús son, que sean muchos los que, con sus oraciones, sacrificios y con su buena voluntad ayudando a seguir adelante a este Su seminario, será recompensado el cien por ciento, nada será en balde, sino para darle Gloria y salvación de las almas” Basado en el escrito de Nuestra Espiritualidad de día 15 de diciembre de 2007, 1:30 p.m.
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Que no nos quedemos admirando lo que va de la construcciรณn en el seminario que es la cimentaciรณn, sino que cada uno sea capaz de proponerse ayudar de poco en poco y periรณdicamente siendo constantes veremos terminado nuestro seminario.
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Estoy a sus ordenes atentamente P. Jesús Leonardo sda.
SANTANDER Jesús Leonardo Rebollo León 60550481196 014320605504811963 5579 0700 2382 0924 Gracias por sus oraciones y su apoyo material y económico.
32 Padre Jesús Leonardo Rebollo León
Ahora es el momento de que Tú Señor, en esta piedra, como le dijiste a Pedro que, sobre esta piedra fundabas tu Iglesia, con este recuerdo de la Verdad que eres Tú, te pedimos que tu bendición haga prosperar esta tu Obra, para que este lugar sea para darte gloria. Que el Corazón de María y Sr. San José nos ayuden a perseverar. Y así este lugar sea semillero de vocaciones santas, de que su deseo sea el Tuyo y su anhelo como el Tuyo, las almas sean su único deseo para darte gloria a Ti, Señor. Amén.
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