Universidad Autónoma de Santo Domingo Facultad de Ingeniería y Arquitectura
Escuela de Arquitectura
Ciudad Medieval Francisco Javier Camacho Caro 100527271 Maestro: Denis Cabrera Sección: 02 Urbanismo I
Modelo de la ciudad medieval La ciudades medievales fueron urbanísticas dadas en los siglos XI y XIII, en la edad media , por su desarrollo agrícola y comercial lograron grandes prosperidades en su economía y agrando su campo de comercio. El urbanismo en la ciudad medieval es heredero de roma, sustituyo lo que era el forum por la Iglesia como centro de la vida ciudadana. Una serie de transformaciones económicas y sociales irán alterando la estructura original de la ciudad. En la época visigoda, la mayoría de la población vivió en pequeños núcleos rurales y la ciudad más grande que era Toledo, la capital, era el centro del poder real. Las ciudades medieval nacen del producto de las diversas invasiones como la bárbaras, pueblos germanos, vikingos, húngaros, musulmanes, hasta el siglo X, promueven un proceso de ruralización de los espacios, de modo que se impone el feudalismo. Estas antiguas ciudades estaban formadas por una parte fortificada, y dentro de ella se encontraban los centros tanto políticos (foro) como religiosos (catedral o residencia episcopal).
La ciudad medieval cristiana El avance del cristianismo luego de la Reconquista desplazo la frontera hacia el sur, creando nuevas ciudades. Unas surgieron a partir de enclaves defensivos y otras de Iglesias o monasterios. A lo largo del camino de Santiago a partir del siglo XI, aparecen centros vinculados con la protección del peregrino. En los siglos XII- XIII los señores laicos y eclesiásticos fundan ciudades con la autorización concedida por los fueros reales. La ciudad medieval tiene una característica, con murallas que delimitan sus bordes. Dentro de sus confines se desarrollaba la vida económica, social, cultural y legal.
Modelo de la ciudad medieval la ciudad medieval
urbanismo medieval:
Este presenta un carácter variado en su configuración: unas ciudades conservan la herencia romana de las calles en cuadricula, otras tienen un trazado radial, o bien concéntrico o lineal.
Recintos amurallados Todas las ciudades medievales tenían murallas altas como parte de protección y defensa, con puertas específicas de entrada donde ello cobraban impuestos a las mercancías que ingresaban. Las murallas eran necesarias para protegerse de las contante invasiones que sufrió Europa desde antes de la caída del Imperio romano, tanto de los pueblos y como los de África y Medio Oriente, la ciudades eran:
Lugar cerrado La ciudad medieval constituía un espacio cerrado que, en casos de ataques, servía de refugio a los campesinos de los alrededores.
Espacios públicos y privados En la ciudad medieval no habían zonas continuas en las que los espacios públicos y privados se mezclan. El espacio público era común y se reparte a lo largo de la ciudad
Varios centros Existía un centro religioso, donde se ubicaba la catedral y el palacio episcopal; un centro cívico, donde está el palacio municipal; y uno o más centros comerciales, era donde se situaban las distintas asociaciones mercantiles. La persona con dinero, vivía en el centro de las ciudades, y la gente pobre en los suburbios.
Situadas cerca de caminos importantes Las ciudades medievales se repartían y situaban por lo general cerca de los caminos que constituían las vías importantes de tránsito; por ello era fácil para campesinos y mercaderes entrar y salir de ellas.
Modelo de la ciudad medieval Los gremios El hecho de que los artesanos se convirtiesen en comerciantes para vender los productos y mercancías que elaboraban hizo prosperar los gremios, o grupos de personas que compartían un mismo oficio (herreros, carpinteros, textileros, panaderos, zapateros, etc.). Cada gremio fijaba su normativa laboral y sus precios.
Modelo de la ciudad medieval Trazado irregular de las calles
no llevaban un modelo fijo, y los contornos de la ciudad se adaptaban a la geografía. El nacimiento de los barrios de artesanos , trajo calles estrechas y tortuosas, a diferencia de las calles principales dentro de la ciudad, que convergían en las plazas. Por otra parte, casi todas las casas que se construían tenían varias plantas y eran de madera, lo cual constituía un alto riesgo en caso de incendios. Las calles eran sucias, no tenían alcantarillado ni aceras y estaban poco empedradas, lo que generaba más suciedad. Si bien no había un modelo fijo, todas contenían más o menos los mismos elementos.
Murallas externas e internas La ciudad medieval estaba rodeada por altas murallas de piedra para protegerse. Tenían varias puertas que se cerraban de noche.
Iglesia Las iglesias tenían un puesto importante en el centro de las ciudades en el siglo XIII se comienzan a construir monasterios y conventos fuera de las murallas, que a su vez favorecerían el surgimiento de nuevos barrios. Constituye el centro religioso. El arte gótico se especializó en la construcción de iglesias, y la catedral es el edificio más emblemático de este estilo.
Modelo de la ciudad medieval Mercado
No solo las plazas sino también las calles principales formaban el mercado; pero, existían plazas donde se reunían varios gremios para ofrecer sus mercancías. Las plazas, así, constituían otro polo céntrico.
Viviendas Las viviendas se agrupaban en grandes manzanas; las casas eran estrechas y alineadas, con un gran espacio para sembrar hacia atrás. Las manzanas, entonces, tenían hacia el interior un enorme espacio que era utilizado para labores hortícolas, con un camino interno de servicio que discurría paralelo a las calles externas. Eran estrechas porque las vigas de madera no permitían espacios de mayores luces, y los muros de carga no podían estar muy separados unos de otros. En ellas transcurría la vida de los habitantes, y no importaba lo rica o pobre que fuese la familia, en la casa cohabitaban parientes y servidumbre con los dueños.
Universidades La creación de las universidades generó un nuevo foco de actividades a su alrededor (por ejemplo, la creación de libros de texto), lo que significó que el conocimiento ya no estaba solo en manos de los monjes.
Modelo de la ciudad medieval clasificación de la ciudades
En función de su forma urbana, se puede establecer una clasificación:
Ciudades de crecimiento orgánico Pueden surgir de asentamientos romanos (Londres, Barcelona...) o aldeas cerradas. Crecían espontáneamente respondiendo a un patrón orgánico e irregular, adaptándose al terreno.
Ciudades de nueva planta En la Europa medieval se fundaron multitud de ciudades planificadas por diferentes motivos. Bastidas: las bastidas son pequeños núcleos rurales en torno a grandes ciudades pensados para maximizar la explotación agrícola de un territorio. Se desarrollarán fundamentalmente en el sur de Francia (Conques, Monpazier...), fruto del acuerdo entre un señor feudal, que proporcionaba el territorio, y la corona de Francia, que proveía la población. El trazado del viario será reticular, adaptado al territorio, por lo que pocas veces será regular. Para promover su ocupación, los señores feudales ofrecen incentivos como la parcela edificable y la posibilidad exclusiva de mercadear en el interior y explotar los terrenos de cultivo. Ciudades de los Zähringen: otro tipo de ciudades planificadas, que crean los duques de Zähringer entre 1122 y 1218 en Suiza (Zúrich, Friburgo, Berna...), con carácter comercial. Se asientan sobre las rutas principales, en torno a un elemento principal que no será la plaza, sino la calle-mercado. Esta calle, de más de veinte metros de ancho, recorrerá la ciudad desde una puerta hasta la otra, creando el antecedente de la ciudad lineal del siglo XX. Ciudades alemanas en cruz: se retoma el método romano de trazar las ciudades con cardo y decumano, dotando al trazado en cruz del simbolismo de la cruz cristiana.