EL PENTAGRAMA VI ENERO 10

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EL ESPECTADOR

EL ESPECTADOR / MIERCOLES 10 DE ENERO 2018 / 15 ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

ElPentagrama N° 6

Partituras sobre lo divino y lo eterno

/ Tico Angulo

Mozart y Haydn: los dos clásicos del género sacro

La Kölner Akademie (coro, solistas y orquesta), bajo la dirección de Michael Alexander Willens, se presentará en la Capilla Santa Teresa del Charleston Santa Teresa el miércoles 10 de enero a las 7:00 p.m. y el jueves 11 de enero a las 4:00 p.m. ALEXANDER KLEIN*

Pocas expresiones artísticas han sobresalido tanto en la historia de la humanidad como aquellas que corresponden a la música religiosa. Es bien sabido, por ejemplo, que desde tiempos inmemorables una de las principales funciones de la música era comunicar a los seres humanos con los espíritus divinos, lo cual dio inicio a una larga tradición, todavía viva, de utilizar el arte como una herramienta eficiente para acercarnos al misticismo y a la eternidad del más allá. Durante la etapa de la historia musical europea que hoy llamamos clasicismo, esta importancia dada al acercamiento del ser humano con dios logró su máxima expresión a través de las figuras de Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791) y Joseph Haydn (1732-1809), dos compositores que junto a Beethoven fueron los principales exponentes del estilo clásico. Mozart, estudiante de Haydn, compuso al menos quince misas durante su corta vida, mientras que su maestro concluyó catorce, incluyendo la que fue su última gran obra: la Misa de los vientos de 1802. La composición de estas obras sacras no fue el resultado único de meros encargos hechos por miembros de la nobleza

de la época. Aun cuando Haydn se encontraba componiendo música de géneros seculares, el compositor solía iniciar cada uno de sus manuscritos con las palabras In nomine Domini (en nombre del Señor) para luego concluirlos, de manera solemne, con las palabras Laus Deo(alabado sea Dios). Si estas muestras de su devoción cristiana sorprenden por su intensidad, hay que agregar que el propio Haydn cargaba consigo un rosario que utilizaba como inspiración en aquellos momentos en que sus ideas musicales no le fluían. A partir de lo anterior, poco sorprende saber que dos de las obras más importantes de los últimos años de Haydn fueron escritas para el género sacro: el Te Deum nº 2 en do mayor y la misa Theresienmesse en si bemol mayor, ambas compuestas hacia 1799 por encargo de María Teresa, esposa del emperador Francisco II. De carácter alegre pero solemne, la primera de estas obras es una alabanza a Dios basada en un himno que se remonta al siglo IV, mientras que la segunda es una misa en el sentido estricto de la palabra, conformada por las seis secciones de la liturgia ordinaria. Como es común en la música sacra de Haydn, ambas obras se caracterizan por su desbordante alegría, lo cual llevó al propio compositor a confesar que, cuando de Dios se trataba, las

notas parecían caer espontáneamente en el pentagrama, como resultado inevitable del raudal de inspiración que le despertaba su fe. En la figura de Mozart, en cambio, encontramos la misma pasión religiosa pero con un toque mucho más dramático, producto de las circunstancias de la muerte prematura del compositor. Similar a Haydn, la fe religiosa acompañó a Mozart durante toda su vida, quien a la temprana edad de diez años ya había compuesto un breve Kyrie como prueba de su devoción a Dios. Al cumplir sus veinte años, Mozart dio prueba de la madurez de su fe al presentar su Misa en do mayor, cuya sección del Credo fue tan inusualmente larga y dramática que la obra hoy lleva el sobrenombre de Credo, como quien afirma su convicción por la existencia de un principio creador. Si bien es evidente que a través de esta misa Mozart anticipó a Beethoven en el dramatismo que le inyectó a la palabra Credo, no hay ninguna obra sacra de la época que equipare el tono lúgubre, resignado y trágico de la misa de réquiem, obra que Mozart dejó inconclusa por la llegada –en una oscura ironía– de su propia muerte. Escrita por encargo del conde Franz Von Walsegg, quien había pedido la obra para conmemorar la muerte de su esposa, la misa de réquiem es un reflejo

perfecto de los últimos suspiros de Mozart, cuyo manuscrito incompleto refleja el pulso moribundo de su compositor, y cuya oscura música refleja a la perfección el advenimiento inevitable de la muerte. La obra fue concluida por Franz Xaver Süssmayr, compositor que había asistido a Mozart en numerosas ocasiones. Para recibir el pago por la obra, sin embargo, Constanza Weber (esposa de Mozart) ocultó el hecho de que Süssmayr había trabajado en el manuscrito, lo que envolvió el réquiem en el aura de misterio que todavía hoy lo rodea. Resulta muy apropiado, entonces, que estas obras místicas que hablan de lo divino y lo eterno vayan a ser interpretadas en la enigmática capilla Santa Teresa del hotel Charleston Santa Teresa, cuyo entorno aristocrático corresponde con el aire de nobleza que se respiraba en los palacios y capillas de la Austria de Mozart y Haydn. Si a eso le agregamos los instrumentos de época de la renombrada Kölner Akademie de Alemania y la dirección de Michael Alexander Willens, será una gran experiencia en la que se escuchará una reconstrucción rigurosa de esos mensajes lejanos que nos legaron dos de los grandes maestros de la música clásica. *Profesor de cátedra de la Universidad de los Andes.


EL ESPECTADOR / MIERCOLES 10 DE ENERO 2018 ElPentagrama 16 / ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Agile: Estará en “Un recorrido entre Colombia y México”

las notas modernas de la música tradicional

/ Wilfredo Amaya

La propuesta conformado por Antonio Arnedo, Massimo Morganti, Zahira Noguera, Mario Criales y Elvis Díaz reúne los sonidos de la música colombiana en cuatro instrumentos: el arpa llanera, el cuatro, el contrabajo y el saxofón.

KAREN RODRÍGUEZ ROJAS

krodriguezr@elespectador.com @KarenRRodriguez

En 2014, el arpa de Elvis Díaz, la bandola de Juan Carlos Contreras, el contrabajo de Mario Criales y el clarinete del italiano Gabrielle Mirabassi viajaron por los sonidos de América y Europa durante su primera presentación en la Iglesia de Cristo Rey. Para entonces esta agrupación, creada por el Cartagena Festival Internacional de Música, fue reseñada en los principales periódicos por llevar la música tradicional colombiana a la modernidad. Fueron cientos los aplausos que obtuvieron sus integrantes. El público quedó absorto con el talento musical del colectivo y la forma en que cada instrumento estaba a la orden de lo que requería el espectáculo. Ninguno brilló más que el otro, juntos dejaron de ser un grupo experimental y se convirtieron en Ensamble Agile. Cuatro instrumentos, cuatro intérpretes En los últimos años, Gabrielle Mira-

bassi y Juan Carlos Contreras dejaron el cuarteto por proyectos personales. Sin embargo, el interés por llevar los sonidos tradicionales, en especial los de la región llanera, al resto del mundo impulsó a los organizadores del Festival a invitar a la cuatrista Zahira Nogueira y al saxofonista Antonio Arnedo a sumarse al colectivo. La recomposición del grupo se hizo en 2016 para asistir a un evento en Europa. “La música de Agile nace porque todos proponemos y participamos. Lo que hacemos es un proceso de adaptación de la música en la que interpretamos cosas de los Llanos, la costa Pacífica y la Caribe. Nuestro mayor reto ha sido la modulación de cada uno de los miembros del grupo. En mi caso he aprendido mucho de la perspectiva de mi espacio y de la música llanera”, dice Antonio Arnedo. Para lograr un ensamble perfecto entre el arpa llanera, el contrabajo, el cuatro y el saxofón, se reúnen dos veces a la semana durante tres horas para ensayar el repertorio que presentarán, en este caso, en el evento en Cartagena. “Estamos trabajando alrededor de lo que heredamos de Europa, de las formas, la música que llegó y que está pre-

sente en nuestras tradiciones. Para mí, Colombia es un país que ha recibido una influencia muy fuerte de los sonidos del norte y el sur, por esto hay razones para entender la gran diversidad que tiene. No es una cosa de color, sonido o producción, sino que simplemente profundizamos desde nuestros lenguajes en el país que percibimos”. El trabajo realizado por Antonio Arnedo, Zahira Nogueira, Mario Criales y Elvis Díaz es una exploración constante con el hoy y el ayer. Es encontrar esa manera de darle una interpretación contemporánea a canciones populares, por esto su repertorio está compuesto por piezas originales de Juan Carlos Contreras, Arnedo, Criales y una obra de Lucho Bermúdez. “La música no es estática. La música es moldeada por las comunidades, las culturas y los países. Esa conexión hace que, a pesar de tener fuertes raíces, pueda ser interpretada de una forma más moderna”. Regreso al Festival de Música de Cartagena Cada uno de los integrantes de cuarteto han participado en el Festival en ediciones anteriores como solistas o

han hecho parte de convocatoria de jóvenes talentos. Aunque este año vuelven como parte del ensamble, en el escenario cada uno tiene un espacio para demostrar sus habilidades con el instrumento. Ellos reúnen experiencia, creatividad y sobre todo agilidad, eso es el cuarteto Agile. En la Plaza de San Pedro Claver, el sábado 6 de enero, presentaron Zumba flamenco, La chiva y Pajarillo fase cuatro, como parte del concierto Divertimento n.º 1. Título que rememora esas serenatas que se interpretaban al aire libre o en los momentos de ocio, y en lo que incluso se creaban obras maestras como las Bagatelas opus 33 de Beethoven. Este miércoles 10 de enero, en el Centro de Convenciones Cartagena de Indias, estarán los integrantes de Agile en el mismo escenario con el Quinteto de Alientos de la Ciudad de Mexico, en el concierto Un recorrido entre Colombia y México. En este interpretarán: Zumba flamenco y Pajarillo fase cuatro, de Juan Carlos Contreras; Andanzas, La chiva, El viaje y El puente, de Antonio Arnedo; Visiones, de Mario Criales, y Espíritu colombiano, de Lucho Bermúdez.


/ 17 ElPentagrama ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ EL ESPECTADOR / MIERCOLES 10 DE ENERO 2018

Giovanni Bietti: “Mi propósito es que salgan escuchando a Haydn”

LUISA PIÑEROS*

@radiandoando

El grupo lleva 21 años de historia artística

El espíritu de Mozart encarnado en un trío

/ Cortesía

Pocos en el ámbito de la música clásica han tenido el privilegio de tocar en las más reconocidas salas de conciertos del mundo, lugares a los que sin duda muchos aspiran a llegar. El Wiener Mozart Trio es uno de esos colectivos afortunados. Dentro de su hoja de ruta están: Konzerthaus (Viena), Shangai Concert Hall, Beinjun Concert Hall (China), Sala Verdi (Milán), Wigmore Hall (Londres), Concertgebouw (Róterdam), y Palacio de Luxemburgo (París), entre muchos otros escenarios de relevancia. La lista es extensa y la buena noticia para Colombia es que sus integrantes están en el Cartagena XII Festival Internacional de Música, con tres presentaciones en las que el público podrá apreciar por qué son tan aclamados y reconocidos en el ámbito de la música de cámara. Según María Isabel Quintero, violonchelista, realizadora y productora de Señal Clásica en Radio Nacional de Colombia: “La música de cámara es aquella que en el ámbito de la música clásica está compuesta para conjuntos instrumentales reducidos en número, diferentes a una orquesta sinfónica, considerando como 16 el número máximo. Existe una gran variedad de formatos, duetos de todo tipo de instrumentos, tríos de cuerdas (violín, viola y chelo), tríos con piano, cuartetos , quintetos y sextetos de cuerdas, quintetos de maderas y bronces, octetos, nonatos y orquestas de cámara, considerados dentro de esta importante categorización, aspecto que le da una relevancia primordial como parte esencial de la música académica. Puede decirse que la música de cámara es a la música sinfónica como el cuento es a la novela, en términos de literatura, de manera que su riqueza es, literalmente, infinita, y así mismo los repertorios destinados a lo largo de los siglos”. Con esta acertada e ilustrada explicación, podemos empezar a entender la base sobre la que trabaja desde hace 26 años el Wiener Mozart Trio, una agrupación de altísimo reconocimiento en el mundo por el gran nivel y capacidad de interpretación tanto individual como colectiva de sus tres integrantes, quienes curiosamente no están amarrados por un contrato con otras orquestas ni conjuntos de cámara, más bien se dedican única y exclusivamente a girar, grabar y tocar con este ensamble. Los medios y especialistas en estas músicas los han catalogado como unos músicos capaces de transmitir grandes obras universales con una fuerte dosis de expresividad y libertad, sin perder el espíritu que por siglos que se ha mantenido vigente a través de las partituras. Al respecto María Isabel Quintero agrega: “Creado en 1991, el Wie-

ner Mozart Trio, integrado por Irina Auner (piano), Daniel Auner (violín) y Diethard Auner (chelo), se ha dedicado en exclusiva al ejercicio profesional dentro del ámbito de la música de cámara y de manera especial, el colectivo, les han permitido a sus integrantes elevar su nivel a unos estándares solo posibles precisamente dentro de la música de cámara. Muestra de ello son las constantes presentaciones por los escenarios más prestigiosos de Europa, Asia y América”. Los asistentes al Cartagena XII Festival Internacional de Música podrán vivir una experiencia única por el repertorio y la fidelidad que poseen para evocar, mantener vigente y respetar las obras de del compositor austríaco y cuyo apellido fue tomado por los tres músicos para abrigar su propuesta artística. Cabe agregar que Wolfgang Amadeus Mozart

(1756-1791) escribió obras para el formato de trío con piano, y algunas de esas piezas las interpretará el Wiener Mozart Trio en el marco del festival. Respecto al autor austriaco, uno de los grandes exponentes del estilo al que está dedicada la presente edición del evento, Quintero opina: “En pocas palabras, la obra de Mozart representa el esplendor del clasicismo, al cual aportó con su genialidad toda la riqueza del dramatismo propio de su lenguaje. Así que puedo concluir que la mayor cualidad del trío es la pureza en el sonido y la fidelidad en la interpretación típicamente mozartiana”. El Wiener Mozart Trio está en Cartagena para ahondar en las formas del estilo clásico y para comprobar los alcances de su formato instrumental. *Periodista musical.

“Fui forzado a ser original”, esa fue una frase que dijo Haydn en alguna oportunidad cuando ya estaba en una edad mayor, y Giovanni Bietti fue el encargado de recordarla durante su última conferencia. En “Escuchando a Hayden” nos contó cómo el crecimiento artístico del compositor fue diferente al de todos los demás, ya que fue empleado a una corta edad por una familia de la nobleza, lo que obligó a encerrarse dentro de un mundo muy limitado. Haydn ofrecía su música para el entretenimiento de la corte. Esta necesidad de crear constantemente le dio una ventaja frente a otros compositores. Debía buscar su propio camino y la manera de sentirse bien y hacer sentir bien a quien tenía la oportunidad de escucharlo. Haydn logró crearse a sí mismo en el ámbito musical. Sin una estructura predeterminada, se dio el lujo de romper con lo cotidiano y hacer cosas nuevas que pudieran satisfacer al público. De manera sencilla, con ejemplos y demostraciones, Bietti mostró cómo Haydn, dentro de su propio mundo y su propia música, se convirtió en uno de los autores más subvalorados del siglo XVIII y XIX porque, más que un compositor, Haydn fue uno de los encargados de crear el lenguaje musical, haciendo que los instrumentos hablaran por ellos mismos y lograran tener un humor característico dentro de sus obras, otorgándoles un poder expresivo similar al que tiene la música vocal. En palabras de Bietti, “la música de Haydn logra hacer sonreír, logra hacer disfrutar la vida, aun cuando falleció hace más de 200 años, y eso lo hace más maravilloso; y es lo que necesitamos el día de hoy, una música que nos entretenga y nos haga pensar, que nos eleve el espíritu”.

/ Tico Angulo

El Wiener Mozart Trio, integrado por Irina Auner (piano), Daniel Auner (violín) y Diethard Auner (chelo), se caracteriza por la pureza en el sonido y la fidelidad en la interpretación típicamente mozartiana.


EL ESPECTADOR / MIERCOLES 10 DE ENERO 2018 ElPentagrama 18 / ~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

Prográmese hoy en el Festival periodista Juan Carlos Garay y se llevará a cabo en la Universidad de Cartagena, Sede San Agustín, con trasmisión en vivo por Udecetevé. Un concierto para violín y

piano es la propuesta que les ofrecen los músicos Antje Weithass (violín) y Thomas Hoppe (piano) a los asistentes al Cartagena XII Festival Internacional de Música. La presentación se

realizará en la Capilla Charleston Santa Teresa a las 11:00 a.m.; y en este mismo espacio, pero a las 7:00 p.m., estará la Kölner Akademie, acompañada de solistas y coro, todos bajo

la dirección del maestro Michael Alexander Willens. Pero para el evento también es importante resaltar la música tradicional latinoamericana. Por eso, el

/ Cortesía

La programación de hoy comienza muy temprano, a las 9:40 a.m., con un conversatorio acerca de la difusión de la música en la radio. La actividad será moderada por el escritor y

En Cartagena el grupo estrenará una obra del colombiano Víctor Agudelo

La música instrumental con alma mexicana El Quinteto de Alientos de la Ciudad de México se ha destacado por mostrar las composiciones tradicionales de su país en otras latitudes y por emplear en su propuesta artística algunos ritmos de los lugares que visitan durante sus giras. KAREN JULIETE ROJAS GAITÁN

karenjuliete.rojasg@gmail.com @karekma

Los cinco artistas instrumentales se han encargado de promover y difundir los sonidos mexicanos en muchos países. Se trata del Quinteto de Alientos de la Ciudad de México, que desde 1994 comenzó a promocionar las interpretaciones de su nación de origen. Sus integrantes son Asako Arai en la flauta, Joseph Shalita en el oboe, Fernando Domínguez en el clarinete, Wendy Holdaway en el fagot y Paul Miller en el corno.

EL PENTAGRAMA Periódico oficial del Cartagena Festival Internacional de Música

Desde la época de su creación, sus integrantes se han comprometido con los artistas instrumentales de las nuevas generaciones. “Para nosotros está en primer lugar la labor de educar dando clases a los futuros músicos o compositores. Incluso hacer concursos para que los compositores comenzaran a escribir piezas para nosotros, esto con el fin de darnos a conocer, porque por lo menos en México no ha sido muy común agrupaciones como esta”, dijo Wendy Holdaway, fagotista del quinteto, quien es originaria de los Estados Unidos y su interés se ha orientado a la difusión de la música contemporánea de autores mexicanos. Para estos artistas es un reto enseñar a las nuevas generaciones, por eso dan

clases de instrumentos, música de cámara, composición en México y en las ciudades que visiten. En el caso de los compositores, lo que buscan es que ellos entiendan cómo es escribir para los instrumentos y para el quinteto. La persistencia de estos cinco artistas se vio recompensada en 1994, 1997 y 1999, cuando les otorgaron becas del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de México para que interpretaran y grabaran a los principales compositores latinoamericanos. En ese mismo periodo les dieron la beca del Fideicomiso México/EE.UU. con la que pudieron incluir repertorio de canciones de artistas norteamericanos. Estos cinco músicos no solo se dedican a interpretar composiciones mexicanas, sino que también incluyen obras

Proyecto Ensamble Agile y el Quinteto de Alientos de la Ciudad de México se presentarán en el Centro de Convenciones de Cartagena a las 7:00 p.m.

de naciones como Brasil, Costa Rica, Perú, Cuba y Uruguay. Dentro de su repertorio, también hay clásicos de Beethoven, Gunther Schuller, Claude-Paul Taffanel, entre otros. Su música lleva al público a vivir un momento de calma y emoción al escuchar la mezcla de sonidos coordinados entre la flauta, el oboe, el clarinete, el fagot y el corno. “Hacemos colaboraciones con los compositores de Estados Unidos, Costa Rica y así lo hemos hecho en varios países. De esta manera estamos alimentando lo nuestro con ritmos distintos. Mostrar lo que hacemos en otros lugares del mundo no ha sido nada difícil, simplemente es una rica conversación y colaboración con compositores que tienen otra manera de ver la música, entonces tenemos hoy en día un repertorio muy amplio y música de todo el mundo”, explicó Holdaway. En 2013, el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes de México en el proyecto México en Escena, le concedió al quinteto recursos para dar cursos, seminarios, proyectos de investigación musical, grabaciones, así como giras internacionales. Su talento ha trascendido y en los últimos años han llegado a los jóvenes de varios centros de formación artística de Estados Unidos como Universidades de Texas Tech, Texas; Carnegie Mellon, Pittsburgh; Brigham Young University, Utah; Weber State University, Utah; Conservatorio de Perpignan, France; Rice University, Texas; University of Maryland, Maryland; Catholic University, Washington DC y Arizona State University. El propósito de estos cinco músicos instrumentales ha ido más allá de los escenarios, ya que a lo largo de su carrera se han comprometido con los jóvenes que quieren ser artistas, para ello dan talleres de composición y clases magistrales en las escuelas profesionales de música de México. El quinteto ha recibido reconocimientos de la crítica al participar en eventos musicales importantes como el Festival Internacional Cervantino, el Foro Internacional de Música Nueva y el Festival Internacional Franco Donatoni. Esta agrupación tiene cuatro álbumes: Sueños de una América, Visiones panamericanas, Imágenes latinoamericanas y Nueva música mexicana. Es la primera vez que el Quinteto de Alientos de la Ciudad de México participará en el Cartagena Festival Internacional de Música, en el que ofrecerán conciertos y charlas. “Fue perfecta la invitación al Festival, porque vamos a estar tocando obras de los artistas latinoamericanos más reconocidos del mundo y haremos el estreno de una canción del compositor colombiano Víctor Agudelo. Estamos muy felices de poder tocar en Colombia en este gran evento”, aseguró Holdaway.

PRESIDENTA: Julia Salvi DIRECTOR GENERAL: Antonio Miscenà EDITOR GENERAL: Juan Carlos Piedrahíta FOTOGRAFÍA: Wilfredo Amaya, COLABORADORES EL PENTAGRAMA: Tico Angulo, Sebastián Delgado SOCIOS PRINCIPALES: Postobón, RCN Radio, RCN Televisión Luisa Rendón Muñoz, Federico Díaz-Granados, SOCIOS: Cine Colombia, El Espectador DISEÑO: William BotÍa Suárez Paula Casas Mogollón FUNDADORA DE EL PENTAGRAMA: Paula Ojeda Palacio DIRECTORA DE EL PENTAGRAMA: María Camila Castellanos http://www.cartagenamusicfestival.com


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