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En profundidad: El colegio La Asunción de Montilla

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ANTIGUOS ALUMNOS

ANTIGUOS ALUMNOS

Memoria 2019 - 2020 Nuestra identidad. En profundidad

En profundidad: LA ASUNCIÓN, MONTILLA

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“EL LEGADO DEL BEATO MARCELO SPÍNOLA EN PLENA CAMPIÑA SUR CORDOBESA”

En pleno centro histórico de Montilla encontramos el Colegio la Asunción, en la misma ubicación que tuvo la casa solariega de la familia Alvear. Fue Don Francisco de Alvear y Gómez de la Cortina, VI Conde de la Cortina, quién tras la muerte prematura de su hija Asunción de Alvear y Abaurrea, decide donar su casa a la Congregación de Esclavas del Divino Corazón, fundada por el Beato Marcelo Spínola, con el que tenía relación. De este modo, en el año 1953 se abre el colegio La Asunción en Montilla con la finalidad de dar una respuesta educativa a las mujeres de la provincia. Desde este momento, la familia Spínola lleva integrada en la sociedad montillana, educando a numerosas generaciones de niños, tanto de la localidad como de la propia comarca. Transmitiendo los valores fundamentales del Evangelio, siendo escuela Buena Noticia, abierta a todos sin distinción, creciendo como comunidad de fe y aprendizaje, que anuncia el amor personal de Jesucristo y educa según el estilo Spínola, “Desde la Pedagogía del Corazón”.

Memoria 2019 - 2020 Nuestra identidad. En profundidad

Ambiente familiar y atención a la diversidad

Somos un centro que imparte la enseñanza obligatoria, 3 clases de infantil, 6 de primaria, 4 de secundaria y 1 aula de apoyo a la integración. En la actualidad contamos con 295 alumnos y alumnas de entre 3 y 16 años. El ambiente en nuestro centro es familiar y cordial, atendiendo personalmente a las necesidades de cada uno de nuestros alumnos a través de diferentes proyectos o programas como: el Programa de Estimulación Temprana, el proyecto sobre las emociones y el bullying, por medio de la figura del tutor de acompañamiento, el programa de enriquecimiento curricular, y muchos más que hacen que nuestro colegio sea referente en metodología e innovación pedagógicas.

El grupo de educadores se capacita continuamente y se adapta a las situaciones que se presentan buscando lo mejor para el alumnado. Tiene una gran inquietud en que los alumnos y alumnas crezcan con el estilo Spínola, que se desarrollen de una manera integral con unos criterios éticos, equilibrio emocional, experiencia de fe cristiana, un proyecto de vida y compromiso que sean capaces de trabajar con otros, convivir entendiendo la diferencia como riqueza y comunicándose con distintos lenguajes (digital, artístico…) e idiomas. De este modo, se desarrollan iniciativas personales y de liderazgo, creciendo en un aprendizaje permanente y con un pensamiento crítico creativo.

Somos una escuela que da respuesta a las necesidades de las familias, complementando el currículo con actividades que potencian el gusto por las artes y el enriquecimiento personal.

Memoria 2019 - 2020 Nuestra identidad. En profundidad

Una pastoral para siglo XXI

Tenemos la gran suerte de contar con la presencia en nuestro centro de una comunidad de Esclavas del Divino Corazón que participa en todas las actividades del colegio, con la facilidad de que viven en el mismo edificio. La relación entre las religiosas y todos los componentes de la comunidad educativa es muy cercana y de mucha confianza, nos unimos siempre que es posible.

En nuestra comunidad educativa hay una gran inquietud Pastoral, vibramos en cada celebración o momento de encuentro entorno al Señor, María Inmaculada o los Fundadores, Marcelo y Celia. Agradecemos contar con un amplio movimiento Spínola, desde los más pequeños, acompañándolos en su crecimiento personal con la Escuela de Oración, pasando por los grupos de Fe, confirmación, grupo Spínola y Laicos. Todos los grupos se reúnen periódicamente y están muy comprometidos con las necesidades de nuestro mundo, empezando por las más cercanas.

Somos una gran familia Spínola y nuestra riqueza está en cada uno de los miembros que la componen.

Memoria 2019 - 2020 Nuestra identidad. En profundidad

Memoria 2019 - 2020

Nuestra identidad. La Fundación en cifras “ Tengo empeño en aprender a querer siempre lo que Dios quiera.”

Celia Méndez

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