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TRATAMIENTO NUTRICIONAL PARA SINDROME DE OVARIO POLIQUÍSTICO. Realizado por: Natalia de J. Medina García.
INTRODUCCIÒN. El síndrome de ovario poliquístico (SOP) es un trastorno endocrino metabólico
altamente prevalente y se considera en la actualidad una patología familiar. Su presencia debe sospecharse en cualquier adolescente o mujer en edad reproductiva con
hirsutismo
u
otras
manifestaciones
cutáneas
de
hiperandrogenismo,
irregularidades menstruales y obesidad. El síndrome de ovario poliquístico es un diagnóstico de exclusión y por lo tanto, debe diferenciarse de los cambios fisiológicos propios de la edad y de otros trastornos hiperandrogénicos que requieren de una terapia específica. El diagnóstico oportuno es importante ya que este síndrome se
asocia a riesgos reproductivos, oncológicos y metabólicos. Lo anterior implica que estas pacientes deben ser diagnosticadas y tratadas oportunamente, necesitan ser informadas y educadas sobre su patología y finalmente, ser controladas en forma prolongada. Independiente del motivo por el cual consulta la paciente, el tratamiento debe iniciarse siempre con la corrección de las alteraciones metabólicas. (P. Teresa Sir, 2016) Palabras clave: Síndrome de
ovario
poliquístico
hiperandrogenismo
oligo-ovulación,
obesidad,
diabetes.
ABSTRACT Polycystic ovary syndrome (PCOS) is a highly prevalent endocrine metabolic disorder and it is presently considered as a family pathology. Its presence should be suspected in any adolescent or woman in reproductive age with hirsutism or other skin manifestations of hyperandrogenism, menstrual irregularities and obesity. Polycystic ovary syndrome is an exclusion diagnosis and, therefore, should be distinguished from the physiological changes typical for the age and from other hyperandrogenic disorders requiring specific therapy. Early diagnosis is important since this syndrome is
associated with reproductive, oncologic and metabolic risks. The above implies that these patients should be timely diagnosed and treated, they need to be informed and educated about their pathology and, finally, followed up for a long term. Independent of the reason for patient consultation, the treatment should always begin with correction of the metabolic derangements. Keywords: Polycystic ovary syndrome, hyperandrogenism, oligo-ovulation, obesity, diabetes.
INTRODUCCIÒN: El síndrome de ovario poliquístico (SOP), también denominado hiperandrogenismo ovárico funcional o anovulación crónica hiperandrogénica, es una disfunción endocrino metabólica de alta prevalencia. Es la causa máss común de hiperandrogenismo con una incidencia de un 3% tanto en mujeres adolescentes como adultas. Se estima, que
está presente en el 75% de las mujeres hirsutas y en el 10% de las mujeres premenopaúsicas. En los últimos años se ha podido establecer, que este trastorno no sólo está limitado a la mujer en etapa reproductiva sino que puede manifestarse desde el período prepuberal y quizás antes. Su etiología es incierta y se manifiesta por síntomas y signos variados que afectan a cada mujer en forma particular. Entre ellos destacan
las
irregularidades
menstruales,
las
manifestaciones
cutáneas
del
hiperandrogenismo, la obesidad, la infertilidad, la resistencia insulínica (RI) y el aspecto
poliquístico de los ovarios en la ultrasonografía. Además, la mayoría de las mujeres con SOP (60-80%) presentan RI y una hiperinsulinemia compensatoria que puede presentarse en personas de peso corporal normal. La RI juega un papel preponderante en las consecuencias metabólicas a largo plazo del síndrome, entre las que cabe destacar la diabetes tipo 2, la enfermedad cardiovascular y el hígado graso no alcohólico. (P. Teresa Sir R. J., 2016)
DESARROLLO Síndrome de Ovarios Poliquísticos: Trastorno endocrino y metabólico heterogéneo, de probable origen genético, influido por factores ambientales como la nutrición y la actividad física.
Sus principales características son datos de hiperandrogenismo (Hirsutismo, acné) y trastornos menstruales. Se asocia con obesidad generalmente central, y anormalidades metabólicas como resistencia a la insulina. (Social, 2010)
FISIOPATOLOGÍA
En la compleja fisiopatologíaa del síndrome de ovario poliquístico, destacan al menos tres tipos de alteraciones interrelacionadas entre sí: una disfunción neuroendocrina (hipersecreción
de
LH),
un
trastorno
metabólico
(resistencia
insulínica
e
hiperinsulinemia) y una disfunción de la esteroidogénesis y de la foliculogénesis ovárica. Disfunción neuroendocrina Se caracteriza por un aumento de la secreción de LH y una secreción de FSH normal o disminuida. En estas pacientes se ha observado un aumento de la amplitud y frecuencia de los pulsos de LH, lo que reflejaría un aumento de los pulsos del factor liberador de gonadotrofinas (GnRH). No se han identificado alteraciones en neurotransmisores específicos que expliquen este trastorno y las evidencias actuales sugieren que se trataría probablemente de una disfunción hipotalámica secundaria a los niveles elevados de andrógenos e insulina. Disfunción metabólica Está representada principalmente por una RI periférica que se expresa por una hipersecreción de insulina. Esta a su vez, promueve una mayor secreción de andrógenos por el ovario y las suprarrenales; estimula la secreción de LH y además disminuye la síntesis hepática de la SHBG (globulina trasportadora de hormonas sexuales) con lo cual aumenta la fracción libre y actividad biológica de los andrógenos. De acuerdo a estudios de nuestro grupo, la hipersecreción de insulina se manifiesta desde la pubertad temprana y precede al hiperandrogenismo bioquímico. Además,
cabe hacer notar que la disfunción metabólica se asocia fundamentalmente a los fenotipos clásicos que cursan con hiperandrogenemia.
El mecanismo por el cual se genera una resistencia insulínica en el síndrome de ovario poliquístico no está claro. En estas pacientes se ha establecido, que no habría una alteración del receptor de insulina ni del número de ellos sino que de los eventos postreceptor en cualquier punto de la señalización insulínica. En el síndrome de ovario poliquístico semejante a lo descrito en la diabetes 2, la RI precede a la disminución de la tolerancia a la glucosa. No todas las pacientes con SOP y RI desarrollan una intolerancia a la glucosa y una diabetes tipo 2, por lo que se ha sugerido que en estos casos, debe coexistir una disfunciónn de la célula â-pancreática la cual podría ser condicionada por el mismo defecto que genera la resistencia insulínica o por otros factores. En la minoría de los casos (20-30 %), el SOP puede manifestarse sin resistencia insulínica, lo que se debería a que por ser una enfermedad multigénica compleja no siempre se heredan conjuntamente genes asociados a RI con genes asociados a la disfunciónn reproductivA. Disfunción de la esteroidogénesis ovárica/suprarrenal Es un pilar fundamental en este síndrome y se caracteriza por una alteración de la biosíntesis de los andrógenos, la cual tanto en el ovario como en la suprarrenal está determinada por la actividad de una enzima denominada citocromo P450c17. En pacientes con síndrome de ovario poliquístico la actividad de esta enzima está aumentada, lo que lleva a una mayor producción de andrógenos ováricos y adrenales. El aumento de los andrógenos intraováricos, alteran el desarrollo de los folículos y la ovulación. El hiperandrogenismo adrenal funcional está presente en alrededor del 50% de las mujeres con síndrome de ovario poliquístico, y se expresa por una elevación moderada de DHEAS. Se ha propuesto que la disfunción de esta enzima (P450c17) sería exclusiva del síndrome de ovario poliquístico pudiendo ser un evento primario o secundario al exceso de LH y/o insulina; la cual potenciaría esta disfunción. Además, cabe destacar que el tejido adiposo juega un papel preponderante en la fisiopatología del SOP ya que tiene una función esteroidogénica intrínseca y es un tejido blanco para los andrógenos.
Disfunción de la foliculogénesis Se ha podido establecer, mediante estudios ultrasonográficos y biopsias ováricas, que las pacientes con SOP presentan un pool de folículos en crecimiento 2 a 3 veces
superior que las mujeres sanas. La histología del síndrome de ovario poliquístico se caracteriza por un aumento de folículos preantrales y antrales pequeños y un mayor reclutamiento folicular. Esta situación se acompaña además de una detención del proceso de selección folicular, lo que explica la ausencia de ovulación. Por lo tanto, en el síndrome de ovario poliquístico habría mayor reclutamiento y una menor selección, lo que mantiene un aumento del pool de folículos en crecimiento productores de andrógenos. En los últimos años se ha propuesto que la Hormona Antimülleriana (AMH) podría ser utilizada como un marcador sérico de la reserva folicular. La AMH es una glicoproteína dimérica miembro de la superfamilia TGFâ, producida exclusivamente por las células de la granulosa en la mujer. Su concentración es independiente de las gonadotrofinas y por lo tanto refleja la reserva ovárica en cualquier momento de la vida de la mujer. Además, recientemente hemos podido establecer que las hijas de mujeres con síndrome de ovario poliquístico tienen niveles significativamente mayores de AMH desde la infancia temprana (2 a 3 meses de vida) hasta la peripubertad, lo que sugiere que estas niñas nacen con una masa de folículos aumentada, lo que podría constituir un eslabón para el desarrollo ulterior de SOP. (Del Castillo Tirado Francisco Javier, 2014)
ETIOPATOGENIA El síndrome de ovario poliquístico tiene una base genética y puede comprometer a otros miembros de la familia. Tanto las hijas como las hermanas así como los hijos y los hermanos del caso índice pueden manifestar algún rasgo fenotípico de este síndrome, que es considerado en la actualidad una enfermedad familiar multigénica compleja, que afecta ademáss al varón. Entre los factores ambientales destacan la obesidad y los eventos que ocurren en la vida intrauterina (hiperandrogenismo, diabetes gestacional y sobrepeso de la madre durante el embarazo). Por lo tanto, es de suma importancia el manejo adecuado de la embarazada, ya que estudios
epidemiológicos y clínicos sugieren una relación entre el ambiente prenatal y el riesgo de desarrollar enfermedades metabólicas durante la edad adulta.
COMORBILIDADES ASOCIADAS Uno de los mayores problemas asociados a este síndrome son los procesos asociados. Podemos dividirlos según su área de influencia: Salud reproductiva e infertilidad: las mujeres que padecen de síndrome de ovario poliquístico poseen un mayor riesgo de infertilidad y ciclos anovulatorios. En ausencia de anovulación el riesgo de infertilidad es dudoso. En algunas mujeres con sín- drome de ovario poliquístico con historia menstrual regulada pueden presentar episodios anovulatorios, en cuyo caso se puede realizar analítica serológica de progesterona a nivel de la mitad de cuerpo lúteo. Se recomienda de forma general realizar la historia menstrual de las mujeres buscando quedarse embarazadas. También deben descartarse otras causas que justifiquen la infertilidad. Se estima que hasta el 50% de estas mujeres pueden presentar infertilidad primaria y un 25% infertilidad secundaria, llegando la infertilidad global a oscilar entre el 25 y el 40% de las pacientes debidos a causa anovulatoria. Sin embargo, a pesar de los periodos anovulatorios, durante un estudio sobre la fecundidad realizado sobre mujeres suecas se comprobó́ que un 75% de las mujeres con Síndrome de Ovario Poliquístico eran capaces de concebir de forma espontánea. No podemos obviar otros factores acompañantes a este síndrome que pueden sucederse en pacientes afectas de SOP y que pueden ocasionar complica- ciones durante el embarazo (parto pretérmino, dia- betes gestacional y preeclampsia). Obesidad: el aumento de tejido graso, particularmente abdominal, está asociado a aumento de producción de andrógenos y mayor riesgo cardio- vascular, de forma que se recomienda desde la adolescencia cálculo del índice de masa corporal y me- dida de circunferencia de abdomen. Se estima una prevalencia de obesidad en este tipo de pacientes de entre el 30 a 60%, que puede estar debida a una dieta incorrecta. Existe un sesgo importante en estos pacientes, puesto que la obesidad en general y la obesidad abdominal en particular causa hiperandrogenismo y disminución plasmática
de la proteína fijadora de hormonas sexuales. Las mujeres con SOP y obesidad también muestran una menor respuesta reproductiva ante fármacos específicos. La
obesidad per se aumenta el riesgo de síndrome metabólico, diabetes, dislipemia y otros factores de riesgo car- diovascular. Diabetes Mellitus tipo 2 y Riesgo Vascular: se recomienda uso de test de sobrecarga oral de glu- cosa (medida a las dos horas tras el uso de dosis de carga de 75g de glucosa) para comprobar la posible intolerancia oral a glucosa o aparición de diabetes mellitus tipo 2 por el riesgo aumentado de estas complicaciones. En caso de no querer realizarse el test de sobrecarga oral de glucosa puede conside- rarse realizar una hemoglobina glicosilada (Hb1AC). Se recomienda cribado cada 3-5 años o antes en caso de obesidad abdominal, aumento de peso o síntomas cardinales de desarrollo de diabetes. (Andrea Facio-Lince García.1a, 2015)
DIAGNOSTICO CLÌNICO; El diagnóstico de Síndrome de Ovario Poliquístico condiciona per se un aumento de riesgo relativo de 5-10 veces de desarrollar diabetes mellitus tipo 2. En el estudio de Celik et al. Se realizó un seguimiento de 84 mujeres con SOP durante una media de 2,6 años, demostrando que las pacientes con glucemia basal alterada con SOP tenían una incidencia anual de 4,5% de pasar a Intolerancia Oral a Glucosa. Las mujeres que ya tenían Intolerancia Oral a Glucosa modificaron su estado en 33% a convertirse en diabetes mellitus tipo 2 en el mismo periodo del estudio, lo cual implica una incidencia anual del 10,4% en este grupo de pacientes. Depresión: en estas pacientes se recomienda identificar y tratar de forma adecuada los síntomas depresivos y de ansiedad. Las mujeres con SOP compradas con controles demostraban un mayor número de síntomas depresivos, sobre todo alteraciones de hábitos alimentarios. La prevalencia de ansiedad también se encuentra aumentada en este grupo de pacientes, mostrando un aumento clínico de sintomatología ansiosa, objetivable en las
escalas hospitalarias de ansiedad y depresión (HADS) respecto a la poblacióńn general, de ahí́ que el cribado de patologías psiquiátricas sea recomendable en este tipo de pacientes.
Manifestaciones cutáneas (Hirsutismo): se recomienda que un examen físico en estas pacientes incluya manifestaciones cutáneas de síndrome de ovario poliquístico, como son crecimiento de vello terminal, acné, alopecia, acantosis nigricans. La historia clínica debería incluir la edad de inicio de los mismos, evolución, tratamientos previos, cambios de peso y problemas cutáneos familiares.
Se debe mencionar que en las mujeres en estado de obesidad, mujeres con SOP y resistencia a la insulina se presenta acantosis nigricans. El SOP representa la principal causa de hirsutismo, aunque esta no se considera un factor predictivo del estado de disfunción ovárica. En líneas generales, el hirsutismo aparece en aproximadamente el 65-75% de los pacientes con SOP, resultando más frecuente en pacientes con obesidad abdominal. El acné también es frecuente en las mujeres con SOP, especialmente en la adolescencia con una pre- valencia entre el 14-25%. La alopecia androgenética es menos frecuente y aparece con posterioridad, pero permanece como una entidad con gran carga emocional, pero no tiene tanta relación con el SOP como el hirsutismo. Hígado graso: se sugiere pensar en la posibilidad de hígado graso en estos pacientes, pero no existen recomendaciones específicas de cribado en las pacientes con síndrome de ovario poliquístico. Se estima una prevalencia de entre el 15 al 60% de Hígado Graso No Alcohólico, según el sistema de objetivación usado para definir la entidad (aumento de AST u objetivación mediante ultrasonido). Sin embargo, no existen herramientas de screening para el Hígado Graso No Alcohólico, y el aumento de AST tiene una baja sensibilidad y especificidad para el diagnóstico de esta entidad clínica. Resto de manifestaciones: las pacientes con síndrome de ovario poliquístico comparten muchos de los factores de riesgo asociados con el desarrollo de cáncer endometrial, incluyendo obesidad, diabetes, aumento de sangrado uterino. En un
estudio de cohortes de 31 años de seguimiento se comprobó que existía un Riesgo Relativo de 3,5% de desarrollo de cáncer endometrial; no obstante, la evidencia actual es contradictoria e incompleta sobre la relación carcinoma de endometrio-SOP. Por
ello, no se recomienda medir el grosor endometrial en las mujeres con síndrome de ovario poliquístico, aunque sí consultar en caso de sangrado o manchado. Se recomienda en las mujeres con sobrepeso u obesidad el cribado de Síndrome de Apnea Obstructiva del sueño, en cuyo caso deberá́ ser referido a ámbito especializado para un correcto control de dicha entidad. Las mujeres con SOP igualan o exceden a los hombres. Incluso aunque se normalice el IMC, las pacientes con SOP presentan 30 veces más riesgo de alteraciones respiratorias con el sueño y 9 veces mayor probabilidad de somnolencia diurna. También presentan mayor riesgo de Síndrome de Apnea Hipoventilación (SAH) comparada con controles con un IMC parecido. (Dr. José Miguel Pérez Rojas, 2018)
TRATAMIENTO NUTRICIONAL; Alimentarse para tratar el síndrome de ovario poliquístico (SOP) no es muy diferente de lo que se aconseja a muchas personas que se alimenten para estar lo más saludables que les sea posible. Sabemos que las mejoras en los patrones de nutrición y alimentación pueden: • Reducir los niveles de insulina y andrógeno (hormona masculina) • Reducir muchos de los síntomas físicos del SOP • Causar que se produzca la ovulación • Mejorar su salud general y su estado de ánimo Consumir una dieta bien equilibrada: Es mejor ingerir una variedad de alimentos saludables que le dan a su cuerpo un balance de carbohidratos, proteína y grasa. CARBOHIDRATOS Los carbohidratos saludables incluyen granos enteros, frutas, verduras, legumbres (frijoles) y leche. Porciones moderadas de estos alimentos provocan ascensos suaves en la insulina después de ingerirlos, y esto ayuda a mantener estables los niveles de azúcar en la sangre. La fibra en la mayoría de estos alimentos retrasa el aumento de azúcar en la sangre. La proteína en la leche y otros productos lácteos retrasa el
aumento de azúcar en la sangre. Proteínas Las proteínas ayudan a que se curen nuestros cuerpos. PROTEINA
La proteína no queda convertida en glucosa, por lo que no eleva los niveles de insulina en la forma en que lo hacen los carbohidratos. Alimentos con proteínas saludables incluyen: • Carne magra y aves de corral • Pescado y otros mariscos • Huevos • Leche y otros productos lácteos con bajo contenido de grasa o leche descremada • Legumbres (frijoles) • Nueces • Soja Grasas Al igual que las proteínas, las grasas que ingerimos no se descomponen en glucosa. Sin embargo, las grasas pueden tener un efecto negativo en los niveles de insulina, de modo que es importante ingerir solamente cantidades moderadas de grasas. Necesitamos un poco de grasa en nuestra dieta para ayudar a que nuestros cuerpos absorban los nutrientes. Sin embargo, recuerde que las grasas tienen más del doble de calorías por gramo que los carbohidratos y las proteínas. Algunas fuentes saludables de grasas incluyen: • Los pescados grasos (atún, salmón, trucha y otros) • Suplementos de aceite de pescado • Nueces y semillas • Yemas de huevo • Aceites de canola y oliva • Aguacate Limite la cantidad que ingiere de este tipo de grasas no saludables: • Las grasas saturadas (en las fuentes alimenticias de origen animal) • Las grasas trans (en muchos alimentos fritos y procesados)
Junto con una dieta equilibrada, hacer ejercicio físico regular puede ayudar con muchos
de los asuntos y problemas de salud del SOP. Conseguir estar y mantenerse activa puede ayudarle a: • Mejorar la ovulación
• Mantener su peso • Mantener su nivel de colesterol y la presión arterial en un rango saludable Al aumentar su actividad física, su cuerpo también puede absorber más glucosa sin ayuda de la insulina. Esto significa que el páncreas no tendrá que producir tanta insulina. (MEDICINE, 2017)
CONCLUSION:
El SOP es una enfermedad endocrina con un compromiso caracterizado por una pérdida de la homeostasis de las hormonas sexuales. Sin embargo, en los últimos años se ha evidenciado el papel que dichas hormonas, principalmente los andrógenos, ejercen sobre la disregulación del metabolismo de otros órganos. Es así, como el hiperadrogenismo promueve un estado hiperinsulinémico, el cual se asocia con diabetes, dislipidemia, riesgo cardiovascular y síndrome metabólico, pero a su vez potencia la producción de andrógenos. Es entonces un círculo vicioso en el que se generan las condiciones necesarias para desarrollar y perpetuar alteraciones endocrinas diferentes a las reproductivas siendo la base para presentar eventos agudos y crónicos de otras enfermedades que van a empobrecer la salud y calidad de vida de las pacientes con SOP. Enfocarse únicamente en las alteraciones reproductivas del SOP es dejar pasar la oportunidad para modificar los factores predisponentes para el desarrollo de otras patologías, un abordaje integral es fundamental para mejorar la salud de las mujeres.
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ALIMENTACIÓN COMPLEMENTARIA DEL LACTANTE. Realizado por: QFB. Irma Monserrath Cortes Neri
RESUMEN La alimentación complementaria inicia cuando la leche materna ya no es suficiente para satisfacer las necesidades nutricionales del lactante, por lo que la nutrición en los primeros años de vida es fundamental para el desarrollo humano, algunas investigaciones relacionadas al tema dan a conocer que el periodo de lactancia a término, es la edad más importante debido al aporte nutrimental y a causa de esta carencia ocurren problemas de crecimiento y desarrollo por las deficiencias de ciertos micronutrientes y enfermedades comunes de la niñez especialmente en el caso de las poblaciones más vulnerables. La definición de la Organización Mundial de la Salud (2003), menciona que la alimentación complementaria es el acto de recibir alimentos sólidos o líquidos, distintos a la leche materna o fórmula lactea necesarios para el desarrollo y crecimiento del niño, como hacen mención Dewey y Brown (2003) es dificil revertir la falla de crecimiento despues de que el niño alcanza los 2 años de edad, ocurrida por la deficiencia de nutrientes que trae como consecuencia inmediata la desnutrición, de ahí la premura de conocer e identificar el momento adecuado del inicio de la
alimentación
complementaria junto con la lactancia materna, a los seis meses y hasta los dos años de vida ya que la lactancia, continua ofreciendo un aporte nutricional importante, los niños de 12 a 23 meses de edad, amamantados, que tienen una ingesta promedio de lactancia materna reciben un 35-45% del total de sus requerimientos a partir de está. (Brown, 2003) PALABRAS CLAVE: Alimentación complementaria, rechazo de alimentación, lactantes sanos, lactancia materna exclusiva. ABSTRACT
Complementary feeding begins when breast milk is no longer enough to meet the nutritional needs of the infant, so nutrition in the first years of life is essential for human development, some research related to the subject reveals that the period of Full-term breastfeeding is the most important age due to the nutritional contribution and due to this deficiency, growth and development problems occur due to deficiencies of certain micronutrients and common childhood diseases, especially in the case of the most vulnerable populations. The definition of the World Health Organization (2003) mentions that complementary feeding is the act of receiving solid or liquid food, other than breast milk or milk formula necessary for the development and growth of the child, as mentioned by Dewey and Brown is difficult to reverse the failure of growth after the child reaches 2 years of age, caused by nutrient deficiency that brings as an immediate consequence malnutrition, hence the rush to know and identify the appropriate time to start feeding. complementary together with breastfeeding, at six months and up to two years of life since breastfeeding continues to offer an important nutritional contribution, breastfed children from 12 to 23 months of age, who have an average intake of breastfeeding they receive 35-45% of their total requirements as of this. (Brown, 2003)
KEY WORDS: Complementary feeding, refusal to feed, healthy infants, exclusive breastfeeding. INTRODUCCIÓN
El aporte de nuevos alimentos a la dieta del lactante, se basa en el desarrollo neurológico al momento de iniciar la alimentación complementaria, durante este proceso el lactante irá perdiendo reflejos primarios y ganando capacidades necesarias para el consumo de alimentos no líquidos, como la leche materna o fórmulas lácteas, este tipo de alimentación debe iniciarse a partir de los 6 meses de vida, lo cual significa que los alimentos deben tener una consistencia adecuada y administrarse en cantidades apropiadas y con una frecuencia que permita cubrir las necesidades nutricionales del niño en crecimiento, sin abandonar la lactancia. Según Romero Velarde, Enrique y la Norma Oficial Mexicana bajo la disposición de la NOM-043-SSA2-
2012 se recomienda que las texturas de los alimentos se modifiquen gradualmente, de líquido a papillas, purés, machacado, picado fino y trocitos. Por lo que la Organización mundial de la salud (2003) sugiere aumentar la consistencia de los alimentos conforme el niño crece y especifica que a los seis meses los lactantes pueden comer papillas, purés, a los ocho meses alimentos que puedan comer con los dedos y a los doce meses el mismo tipo de alimentos que el resto de la familia. A lo que hace meción La Orden Izquierdo, Enrique, en su publicación los alimentos se
preparan en cada etapa, en base a las necesidades nutricionales del niño y administrarse en condiciones seguras, reduciendo el riesgo de contaminación por microorganismos patógenos, el alimento debe administrarse de forma apropiada, una adecuación de la alimentación complementaria depende no solo de la disponibilidad de alimentos variados en el hogar, sino también de las prácticas de alimentación de los cuidadores, este tipo de alimentación requiere cuidados y estimulación activa, en donde el cuidador responde a los signos de hambre que manifieste el niño y a la estimulación para que consuma alimentos. Si bien hace referencia el autor Flores-Huerta, Samuel (2006), es importante tener en cuenta que hay alimentos complementarios que tienen una mayor cantidad de sodio que la leche humana, es por esto que no se debe agregar sal a los alimentos del menor. Durante los 2 primeros años de vida, el aporte de fibra no debe de ser elevado ya que puede interferir con la absorción de otros micronutrientes, los alimentos que contienen gluten se introducen en la alimentación complementaria hasta el sexto mes, en caso de tener antecedentes familiares de enfermedad celiaca se recomienda postergar la introducción hasta los 9 meses o más. Forero T., Yibby (2018) Varios autores entre ellos Cuadros-Mendoza, CA., Dewey y Brown y
La Orden
Izquierdo, Enrique coinciden en la importancia del manejo de la alimentación complementaria a tiempo, para evitar deficiencias nutricionales en la niñez y posteriormente evitar rechazos a los alimentos.
DESARROLLO La nutrición adecuada durante la fase del término de la lactancia es fundamental para el desarrollo del potencial humano completo de cada niño y al que hace incapie FloresHuerta, Samuel (2006) es bien reconocido que el periodo entre el nacimiento y los dos años de edad es una “ventana de tiempo crítica” para la promoción del crecimiento, la salud y el desarrollo óptimo. Según hace mención Dewey y Brown es necesario que las madres adopten prácticas óptimas de lactancia materna y que las madres o personas encargadas de velar por los niños adopten técnicas adecuadas de alimentación complementaria, para asegurar el crecimiento y desarrollo apropiado de los lactantes y niños pequeños. Butte y colaboradores, así como Pardío-López y su grupo de investigación, describen las habilidades en la alimentación que los lactantes van adquiriendo al crecer y desarrollarse, cuando se sienta el bebé con ayuda, ya que puede comenzar a empujar alimentos hacia afuera de la boca, reflejo que desaparece gradualmente para poder tragar y deglutir alimentos, al comenzar a gatear, comienza a mover la lengua de lado a lado para moler el alimento, utiliza la quijada y la lengua para masticar, al caminar en forma independiente, la masticación y deglución están desarrolladas. Se han propuesto técnicas nuevas de alimentación complementaria lo cual se ha sometido a observacion en distintos países donde lo llevan a práctica en el Reino Unido, se analizaron las preferencias alimentarias a ciertos alimentos y la técnica de ablactación utilizadas detectandose que niños
alimentados por destete llevado por el bebé es donde
aprenden a regular mejor la ingestión de alimentos. Otra observación realizada en familias de Nueva Zelanda, examinaron las prácticas de alimentación con la técnica de destete llevada por el bebé y el método tradicional, en este estudio incluyeron a 199 madres, en su mayoría seguían introduciendo los alimentos en forma de purés, solo el 21% lo proporcionaba de manera que ellos lo pudieran tomar con los dedos. Con estos estudios observacionales se realizó una modificación al destete llevado por el bebé a un estudio piloto en el que se realizaron comparaciones del destete llevado por el bebé y el destete e introducción de alimentos sólidos, se consideró que este estudio comparativo es un enfoque de auto-alimentación propiciando el consumo de alimentos
ricos en hierro, energéticos y sin riesgo al atragantamiento, a lo que llevó que está ultima técnica fue aceptada y aplicada por los padres del estudio piloto. OBJETIVO GENERAL Asegurar la alimentación con leche materna humana exclusiva hasta los 6 meses de edad y una alimentación complementaria oportuna, adecuada y debidamente administrada hasta los 2 años de edad. OBJETIVO ESPECÍFICO Aportar energía y nutrientes que ya no se cubren con la leche materna, creando rutina y hábitos alimentarios. Contrubir al desarrollo fisiológico de las estructuras orofaríngeas y la masticación. METODOLOGÍA El enfoque de esta investigación es cualitativa, utilizando el método inductivo partiendo de hechos particulares, del inicio oportuno de la alimentación complementaria a lactantes en término, utilizando la técnica de revisión y análisis documental para detectar artículos y publicaciones relacionados con el tema de investigación. RESULTADOS El análisis realizado por Romero Velarde, Enrique y colaboradores (2016) del Hospital Infantil de México dieron a conocer los siguientes resultados respecto al estudio observacional llevado a cabo en el Reino Unido y Nueva Zelanda, mencionando la comparación del tipo de alimentacion complementaria del grupo alimentado con cuchara, este grupo de bebés manifestó un aumento significativo en el gusto por los carbohidratos siendo este el alimento preferido, asÍ mismo se detectó una mayor incidencia de bajo peso en el grupo de bebés sin cuchara y obesidad en el grupo de alimentos con cuchara. Debido a este tipo de investigaciones la Organización Mundial de la Salud (2020) elaboró un protocolo para adaptar las recomendaciones alimentarias que permite a los gestores de programas identificar las prácticas alimentarias locales, los problemas
frecuentes relacionados con la alimentación y los alimentos complementarios adecuados. Este protocolo propone la realización de estudios a domicilio para probar las recomendaciones propuestas mejorando la alimentación complementaria y ofreciendo cursos de orientación sobre alimentación del lactante, el niño pequeño y alimentación complementaria, así como en las directrices y el curso de formación de trabajadores sanitarios del primer nivel proporcionando a los trabajadores de la salud orientaciones y cursos sobre cómo apoyar la alimentación complementaria sana, formando parte del proceso de adaptación de la estrategia a la Atención Integrada a las Enfermedades Prevalentes de la Infancia (AIEPI). OMS (2021)
CONCLUSIÓN Las formas de alimentación tienen importantes repercusiones en la salud de los niños, llevar a cabo la práctica de alimentación complementaria durante los primeros 2 años de vida es un elemento determinante en la salud, el crecimiento y desarrollo del niño por lo que es importante tener en cuenta que los alimentos complementarios sólidos o líquidos distintos a la leche materna, no deben iniciarse antes de los 4 meses, pero no deben retrasarse más allá de los 6 meses por las implicaciones futuras, considero que es importante tener en cuenta la participación de la industria para la producción de alimentos infantiles procesados que son incorporados a la dieta de los niños, satisfaciendo sus necesidades nutrimentales y los que no contribuyan a este propósito sean descartados ya que pueden ser perjudiciales para la salud del niño sano. REFERENCIAS Cuadros-Mendoza, CA, Vichido-Luna, MA, Montijo-Barrios, E, Zárate-Mondragón, F, Cadena-León, JF, Cervantes-Bustamante, R, Toro-Monjáraz, E, & Ramírez-Mayans, JA. (2017). Actualidades en alimentación complementaria. Acta pediátrica de México, 38(3), 182-201. https://doi.org/10.18233/apm38no3pp182-2011390 Dewey y Brown.,Principios de orientación para la alimentación complementaria del niño amamantado. Organización Panamericana de la Salud, Washington, DC (2003). https://www.paho.org/spanish/ad/fch/nu/Guiding_Principles_CF.pdf
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de
http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S113976322016000100015&lng= es&tlng=es.
Norma Oficial Mexicana NOM-043-SSA2-2012, Servicios básicos de salud. Promoción y educación para la salud en materia alimentaria. Criterios para brindar orientación. CNDH.
Fecha
de
publicación:
22
de
enero
de
https://www.cndh.org.mx/DocTR/2016/JUR/A70/01/JUR-20170331-NOR37.pdf
Organización Mundial de la Salud., OMS. (2003) Organización Mundial de la salud, OMS, Alimentación complementaria. (2020) Organización Mundial de la salud, Alimentación complementaria. (2021)
2013.
Resultados https://www.who.int/nutrition/topics/complementary_feeding/es/
Romero-Velarde, Enrique, Villalpando-Carriónb, Salvador, Pérez-Lizaur, Ana Berta, Iracheta-Gerez, Ma. de la Luz, Gilberto Alonso-Rivera Carlos, López-Navarretef, Gloria Elena y colaboradores., Consenso para las prácticas de alimentación complementaria en lactantes sanos. Revista Boletin médico del Hospital Infantil de México., ISSN: 1651146.
2016
pág.
338-356.
Volumen:
73.
País
México
https://biblat.unam.mx/es/revista/boletin-medico-del-hospital-infantil-demexico/articulo/consenso-para-las-practicas-de-alimentacion-complementaria-enlactantes-sanos
DIETA KETO Y SUS IMPLICACIONES. Por: Claudia Guadalupe Ramírez Haro RESUMEN El sobrepeso, la obesidad y sus complicaciones asociadas son un problema de salud pública importante a nivel mundial que ha sufrido un aumento en la mayoría de las edades, regiones y grupos socioeconómicos; para ello existe una gran variedad de propuestas dieto terapéuticas entre las que se encuentran las dietas cetogénicas; término acuñado en los años 20 del pasado siglo. Los efectos benéficos y adversos de dicha dieta han generado polémica y no hay una conclusión contundente sobre su eficacia y eficiencia en el tratamiento de la obesidad. (Covarrubias Gutiérrez, 2013) Palabras clave: Sobrepeso, Obesidad, dieta cetogénica, salud. ABSTRACT Overweight, obesity and its associated complications are a major public health problem worldwide that has increased in most ages, regions and socioeconomic groups; For this there is a great variety of therapeutic diet proposals, among which are ketogenic diets; term coined in the 20s of the last century. The beneficial and adverse effects of this diet have generated controversy and there is no conclusive conclusion about its efficacy and efficiency in the treatment of obesity. (Covarrubias Gutiérrez, 2013) Keywords: Overweight, Obesity, ketogenic diet, health
INTRODUCCIÓN Desde 1975, la obesidad se ha triplicado en todo el mundo. En 2016, más de mil novecientos millones de adultos mayores de 18 años tenían sobrepeso, y, de ellos, alrededor de seiscientos cincuenta eran obesos. Asimismo, se estima que más de trescientos cuarenta millones de niños y adolescentes (de 5 a 19 años) tienen sobrepeso y obesidad. Esta es la batería de datos con la que, cual baño de realidad, se encuentra cualquiera que consulte la página que la Organización Mundial de la Salud (OMS) dedica a la obesidad. Por suerte, y a pesar de lo rotundas que son estas cifras, este organismo lanza un mensaje claro y esperanzador: la obesidad se puede prevenir. (Nieto, 2020) Actualmente son muchas las estrategias que la sociedad emplea con el propósito de lograr una pérdida de peso rápida y sostenida por lo que recurren a toda clase de productos, recetas y remedios tradicionales, romper con estas prácticas tradicionales ha sido todo un reto que han enfrentado los profesionales de la salud, en especial, los nutriólogos, ya que la población requiere entender que la salud no es un juego y que la pérdida de peso es un proceso gradual que requiere la atención de un especialista que brinde tratamientos personalizados basados en evidencia científica.
Kilos de más, quemar grasas, perder volumen, operación bikini… Son solos algunas de las ideas que a todos nos vienen a la cabeza al hablar del exceso de peso que es, sin duda, uno de los temas top en cualquier tertulia, sino en cuanto a la difusión de contenidos. Y ahí está el primer obstáculo con el que se encuentran las estrategias dirigidas a la prevención de la obesidad (definidamente como un claro problema de salud a nivel mundial): la desinformación producida paradójicamente, por el abrumador bombardeo de información y noticias (verdades o fakes). Por tanto, se ha popularizado mucho el uso de la dieta keto, también conocida como dieta cetógenica que se caracteriza por el consumo excesivo de alimentos ricos en grasas buenas y proteínas, generando en el cuerpo un estado metabólico particular, conocido como cetosis, que se caracteriza por el catabolismo de las grasas, en ausencia de hidratos de carbono, al llevarse a cabo este proceso, se generan unos compuestos denominados cuerpos cetónicos, los cuales descomponen las grasas en cadenas más cortas, generando acetoacetato que es usado como energía por el cerebro y otras partes del cuerpo. Lo anterior resulta benéfico si se lleva durante períodos de tiempo cortos y con la asesoría de un profesional de la salud, es una de las estrategias útiles para reducir el sobrepeso y la obesidad que tanto aquejan a la humanidad, debido a que se trata de la típica situación en la que se puede aplicar perfectamente aquello de que los árboles no dejan ver el bosque: la relación kilos-salud sigue estando mayoritariamente asociada por parte de la sociedad a una cuestión meramente estética, definida por unos cánones casi siempre irreales que cuentan, además, con el enorme poder difusor y amplificador de las redes sociales. Pero el problema es serio, mucho más serio, ya que el sobrepeso y la obesidad no solo están directamente implicados en la aparición de enfermedades cardiovasculares (primera causa de muerte en todo el mundo), sino que, además, está confirmada su relación directa en la aparición, de al menos, nueve tipos de cáncer (mama, útero, colon, riñón, vesícula biliar, páncreas, recto, esófago y ovario), según se recoge en el último informe elaborado por la Sociedad Española de Oncología Médica. (Nieto, 2020) El objetivo de este trabajo consiste en conocer más a fondo las ventajas que ofrece están opción dietética, tanto para adelgazar como para mejorar el estado de salud. Para ello, se analizan sus características, sus pros y sus contras, con el propósito de encontrar una conclusión que permita definir si son más los beneficios o perjuicios que aporta. DESARROLLO Problema de investigación: Conocer los beneficios y perjuicios de la dieta keto a través de una revisión bibliográfica. Preguntas de investigación:
1. ¿Cuáles son los beneficios y perjuicios de seguir un régimen alimenticio basado en la dieta cetogénica? 2. ¿Cómo funciona la dieta cetogénica en la pérdida de peso? Objetivos de la investigación: 1. Determinar los beneficios y perjuicios al seguir un régimen alimenticio basado en la dieta cetogénica. 2. Explicar cómo funciona la dieta cetogénica en la pérdida de peso. Metodología Análisis descriptivo. Se realizó una búsqueda de artículos sobre dietas cetogénicas en las bases de datos, Google académico, Redalyc, Cochrane, Pubmed y medline, utilizando las palabras clave dieta cetogénica, pérdida de peso, obesidad y sobrepeso, de la cual se obtuvieron un total de 18 artículos, mismos que se depuraron para su análisis. RESULTADOS BENEFICIOS Y PERJUICIOS Esta nueva versión más saludable de la dieta Dukan o la dieta Atkins, la dieta keto o cetogénica vuelve a estar en el punto de mira entre los expertos en nutrición para adelgazar de forma más rápida. La dieta keto o cetogénica se centra en la ingesta de más alimentos ricos en grasas buenas y proteínas (pescado azul, aguacate, aceite de coco y de oliva) con una restricción de la ingesta de hidratos de carbono (cereales, azúcar, e incluso de mucha cantidad de verduras y frutas) con el objetivo de generar el proceso de cetosis en sangre similar al ayuno. ¿En qué consiste esa cetosis? En que las reservas de grasa de tu cuerpo se convierten en cetonas que a su vez alimentan a los músculos y al cerebro frente a los carbohidratos. La dieta cetogénica o dieta keto aboga por la ingesta de alimentos ricos en grasas buenas del 60 por ciento al 75 por ciento (nueces, aceite de coco, aguacate, pescado azul...) combinada con ingredientes ricos en proteínas en un 15 o 30 por ciento y que los carbohidratos se limiten a hojas y verduras verdes sin exceder al 20 por ciento de las calorías ingeridas en cada comida. La evidencia científica confirma que una dieta keto puede ayudar en dietas de adelgazamiento en base a, principalmente, tres premisas:
El organismo tiene que recurrir a la grasa para producir energía. Pero el proceso de cetosis no es tan eficiente como cuando utiliza glucosa; necesitamos más ácidos grasos para obtener menos energía. El mayor gasto energético también contribuye a una mayor pérdida de peso.
Al limitar o eliminar los hidratos de carbono, estos no se acumulan, impidiendo por tanto que se concentren en forma de grasa. Una de las principales causas de obesidad o sobrepeso es precisamente el exceso de hidratos o azúcares en la dieta, consumiendo muchos más de los que el cuerpo necesita y que terminan acumulándose en forma de grasa. Aumenta la saciedad y disminuye el apetito. Según diversos estudios, una alimentación basada en los parámetros de la dieta cetogénica -grasas y proteínas- ayuda a controlar el hambre ya que contribuye a sentirnos más saciados durante más tiempo. (Ron, 2018)
VENTAJAS E INCONVENIENTES Aunque la experta en nutrición Susie Burrell (2015) asegura que "no existen evidencias de que la dieta keto dañe seriamente la salud", la dieta keto tiene sus pros y sus contras. Entre sus beneficios, se encuentra la reducción de los niveles de glucosa en sangre, mejorar dolencias como el hígado graso y la pérdida significativa de peso en menos tiempo. Sin embargo, el problema ocurre cuando la cetosis no se controla correctamente y las cetonas empiezan a dañar la masa muscular y a provocar otras alteraciones a nivel orgánico. "Seguir esta dieta puede provocar a corto plazo mareo y dolor de cabeza, ya que nuestro cerebro necesita energía en forma de glucosa para funcionar; mal olor de aliento, orina y sudor debido al exceso de cuerpos cetónicos eliminados por estas vías de excreción; y estreñimiento severo, por la carencia de fibra", apunta en contra de la misma, la nutricionista Andrea Marqués. (2020) Entre otros de sus inconvenientes es que puede desencadenar piedras en el riñón, aumentar los niveles de acidez en sangre, pérdida de masa muscular... así que conviene tomar tus precauciones consultando al nutriólogo y no seguir esta dieta a la ligera. Sin embargo, Julia Jiménez, nutricionista de Neolife, asegura que la dieta keto sí es eficaz para tratar dolencias como la epilepsia, el Alzhéimer e incluso el cáncer. "Las células dependen de la respiración celular como fuente de energía y durante periodos de privación de alimentos o en ausencia de glucosa, estas células también pueden recurrir a la cetosis como fuente de energía adicional. Las células malignas y tumorales no pueden servirse de la cetosis para obtener energía porque carecen de la capacidad de utilizar los cuerpos cetónicos y dependen en gran medida de la glucólisis para la producción de energía, incluso en estados elevados de oxígeno" asegura en defensa de la misma. Dicho de otro modo, porque la dieta keto logra este estado metabólico, bien por un aporte insuficiente de alimentos porque la cantidad de energía de la dieta es menor que la requerida, bien por una restricción de alimentos ricos en azúcares eliminando o restringiendo los carbohidratos y aumentando el consumo de alimentos ricos en
proteínas o en grasas. Así que es cierto que la dieta keto promete adelgazar, combatir el acné, mejorar la salud cardiovascular y hasta equilibrar los niveles hormonales... pero es imprescindible seguirla con la ayuda de un profesional. DESVENTAJAS En situaciones extremas de cetosis se puede producir cetoacidosis: los cuerpos cetónicos -ácidos- bajan el nivel de pH de la sangre, provocando que sea más ácida. Y esto afecta negativamente a los órganos, con consecuencias de diversa gravedad: mal aliento, dolores de cabeza, problemas de riñón, náuseas, mareos, calambres y debilidad muscular, incluso edema cerebral. La dieta keto no está recomendada para personas con enfermedades metabólicas, problemas de tiroides, riñón, hígado o páncreas, diabéticos o pacientes con TCAs. Asimismo, se desaconseja seguir esta alimentación a largo plazo, ya que es muy desequilibrada. Puesto que no es posible lograr adherencia, no sería una dieta adecuada para mantener el peso, y puede provocar efecto rebote. (Kost, 2019) DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN Finalmente, es importante recordar que no hay un plan de alimentación, régimen o dieta de adelgazamiento cien por ciento efectiva o universal, cada uno tiene sus pros y contras. Cada persona es un mundo y cada organismo funciona de manera distinta, de ahí la importancia de personalizar siempre los planes que se brindan a los pacientes, sin olvidar que la alimentación balanceada es la mejor opción, y sobre todo, es necesario recurrir a un especialista, cuyo consejo y asesoramiento es el punto de partida para la pérdida de peso. La práctica de actividad física y el seguimiento de una dieta cetogénica pueden suponer un doble efecto con mejores resultados en los procesos de pérdida de peso y mejora de la composición corporal y perfil lipídico.
Referencias Covarrubias Gutiérrez, P. (2013). Dietas cetogénicas en el tratamiento del sobrepeso y la obesidad. Nutrición clínica y dietética hospitalaria. , 98-11.
Kost, C. (2019). Qué es la dieta keto, quién puede seguirla y 41 recetas que se adaptan a ella. . Directo al paladar, 3. Nieto, C. (2020). El plan de dieta keto intermitente. España: SIRIO. Ron, C. S. (03 de Mayo de 2018). TELVA. Obtenido de TELVA: https://www.telva.com/belleza/dietas/2017/10/30/59f739eee2704e20508b461f.html
Papel de la vitamina D en la actual pandemia COVID-19 Realizado por: Ana Rosa Yadira Resendez Rico Resumen La infección por el nuevo coronavirus (COVID-19) representa una grave amenaza para la salud a nivel mundial. Los grupos de riesgo más afectados particularmente son los pacientes geriátricos con y/o sin comorbilidades asociadas a una inflamación de bajo grado, por ejemplo, como se observa en el síndrome metabólico, la diabetes y la insuficiencia cardíaca. Estas condiciones se han visto relacionadas con la deficiencia de micronutrientes, como lo es la vitamina D. Conjuntamente una baja ingesta, la edad y asilamiento domiciliario contribuyen a esta privación de vitamina D. Por lo que, una suplementación de Vitamina D podría simbolizar un complemento preventivo y/o un coadyuvante en la terapia para la pandemia por COVID-19. Palabras clave: Deficiencia de vitamina D, Vitamina D, suplementos, COVID-19. Abstract The infection by the new coronavirus (COVID-19) represents a serious threat to health worldwide. The risk groups most particularly affected are geriatric patients with and / or without comorbidities associated with low-grade inflammation, for example, as seen in metabolic syndrome, diabetes, and heart failure. These conditions have been related to the deficiency of micronutrients, such as vitamin D. Together, a low intake, age, and home isolation contribute to this vitamin D deprivation. Therefore, a vitamin D supplementation could symbolize a supplement preventive and / or an adjunct in therapy for the COVID-19 pandemic. Key words: Vitamin D deficiency, Vitamin D, supplements, COVID-19. Introducción La vitamina D, es una vitamina liposoluble, y considerada además como prohormona a la cual se le atribuyen importantes funciones, a través de la homeostasis calcio-fosforo
(vía clásica), así como funciones en la regulación de secreción hormonal, respuesta inmune y regulación de la proliferación y diferenciación celular (vía no clásica). La vitamina D se obtiene fundamentalmente de su síntesis endógena en la piel a partir del 7-dehidrocolesterol, por acción de los rayos ultravioleta B (UVB) dando lugar al colecalciferol (Vitamina D3). La ingesta exógena se obtiene de la dieta en alimentos de origen animal en forma de colecalciferol y de origen vegetal en forma de ergocalciferol (Vitamina D2). Al ser una sustancia liposoluble requiere de la presencia de sales biliares para su absorción (se absorbe el 80%) en el yeyuno y parcialmente en duodeno. Independientemente si la vitamina se obtiene por vía endógena o exógena, para ejercer sus funciones metabólicas necesita de dos hidroxilaciones. La primera en el hígado por la enzima 25-hidroxilasa (CYP2R1 O CYP27A1), para convertirse en 25 (OH)-D o calcidiol misma que pasa al torrente sanguíneo unida a la proteína trasportadora llega al riñón. En el túbulo renal proximal se hidroliza mediante la 1α- hidroxilasa (CYP27B1), dando lugar a la vitamina activa: 1,25 (OH)2 vitamina D o calcitriol, que es el metabolito biológicamente activo. También en el riñón se produce la 24,25 (OH) 2 Vitamina D por la acción de la 24-hidroxilasa, esta vitamina es mucho menos activa. Después de realizar su función biológica se metaboliza en hígado y se elimina por vía biliar sufriendo un ciclo enteropático.3 Se han atribuido un gran número de efectos de la vitamina D en diferentes tejidos y en diversos procesos fisiológicos a través de acciones no genómicas (rápidas) que se reflejan en el grupo de actividades clásicas (en hueso, riñón e intestino) y genómicas o lentas que se relacionan con la
actividad antitumoral (colon, próstata, mama,
leucemias, carcinoma de células escamosas), reparación del DNA, control de la apoptosis, estrés oxidativo, inmunomodulación y adhesión celular. Su mecanismo de acción se lleva a cabo a través del receptor de Vitamina D (VDR). Papel inmune de la vitamina D Su papel relevante es la modulación de la respuesta inmune, contribuyendo a la autoregulación y mejorando la respuesta inmune innata contra microorganismos. Al encontrarse el VDR presente en varias células del sistema inmune, la unión de la
1,25(OH) Vitamina D3 al receptor induce: mejoría de la fagocitosis, disminución de la expresión del complejo principal de histocompatibilidad clase II en las células dendríticas; disminución de la expresión y respuesta a moléculas co-estimuladoras que regulan su maduración y migración, bloqueando su diferenciación final; inducción a la madurez de la célula natural killer (NK) y de células TCD4+CD25+FOXP3+ (célula T reguladora) capaces de mediar la tolerancia inmune y, por consecuencia, disminuye el desarrollo de trastornos autoinmunes; disminución de la diferenciación y proliferación de linfocitos B a células plasmáticas y apoptosis de las mismas. Respecto a su acción sobre las citocinas inflamatorias, disminuye la producción de las tipo proinflamatorias: IL-17A, IL-17F, IL-22, IL-23, IL-12, IL-2, IL-6, TNF-α y de interferón ɤ (IFN ɤ); al mismo tiempo que incrementa la producción de las citocinas antiinflamatorias: IL-10 y factor de crecimiento transformante beta (TGF-Β)3. Niveles de vitamina D El Instituto de la Salud de Estados Unidos estableció como deficiencia los niveles inferiores a 20 ng/ml de 25 OH-D, pero se consideran insuficientes los niveles entre 20 y 30 ng/ml y deseables los niveles mayores de 30 ng/ml principalmente para sus acciones relacionadas con el metabolismo mineral y óseo. Se sugieren niveles >40-50 ng/ml como óptimos, para las acciones no clásicas de la vitamina. D8. Los niveles bajos de vitamina D se han asociado con un aumento en citocinas inflamatorias y un riesgo significativamente mayor de neumonía e infecciones virales del tracto respiratorio superior. Además según el autor Weir et. al.(2020) la deficiencia de vitamina D se asocia con un aumento de episodios trombóticos, que se observan con frecuencia en COVID-19 .
Además se ha demostrado que la deficiencia de
vitamina D es un factor asociado de forma independiente al aumento del riesgo de enfermedades
virales
respiratorias
agudas
en
la
mayoría
de
los
estudios
observacionales. Los niveles de 25 OH-D mayores de 38 ng/ml en adultos se asociaron con una disminución estadísticamente significativa del riesgo de desarrollar infecciones respiratorias agudas en otoño e invierno comparados con aquellos con niveles menores de 38 ng/ml 8. Por lo que el riesgo de deficiencia de vitamina D aumenta cuando hay poca o nula exposición a la radiación UVB como lo es en
altas latitudes, climas
rigurosos, en las estaciones de otoño e invierno, baja exposición por razones sociales, religiosas o indicación médica, en las ciudades con contaminación ambiental y elevada edificación, y, por supuesto, por falta de exposición a la luz solar/aire libre por estar en confinamiento en los hogares, como sucede en esta pandemia y su cuarentena asociada. Debido a la correlación positiva entre la radiación UVB de la luz solar y los niveles saludables de vitamina D en el cuerpo, y la correlación positiva informada entre la deficiencia de vitamina D y las tasas de mortalidad por COVID-19 el autor Whittemore, et. al. (2020;48) Realizó un estudio donde encontró que el 16% de la variación en las tasas de mortalidad se atribuye a la latitud de los países, un ejemplo citado por el autor comparando Irlanda y Singapur, cuyo tamaño de población era similar (4,9 millones frente a 5,3 millones, respectivamente), total el número de casos fue similar (23.135 vs 23.822, respectivamente).Sin embargo, el número de muertes en Irlanda fue de 297 / millón en comparación con 4 / millón en Singapur. A pesar de un número similar de casos, Irlanda tuvo 74 veces más muertes que Singapur. Una correlación tan alta para un factor tan crudo como la latitud es sorprendente, pero creíble considerando otras investigaciones que muestran correlaciones significativas entre la exposición a la luz solar y los cánceres. Por otro lado, en un estudio con 202 pacientes con diagnóstico de COVID-19, los autores Alipio et. al. (2020) reportó que el 26,4% manifestó un cuadro severo, con distrés respiratorio e hipoxia, y el 22,6%, un cuadro crítico con insuficiencia respiratoria que requirió internación en terapia intensiva. De los pacientes con síntomas severos, el 28,8% tenían niveles de insuficiencia (20-30 ng/ml) y el 40,3% tenían niveles de deficiencia de vitamina D(30 ng/ml). En este mismo estudio mostraron que las probabilidades de tener un resultado clínico leve por COVID19 en lugar de una evolución severa o crítica aumentaron aproximadamente 7,94. Al analizar la mortalidad ajustada por edad, sexo y presencia de comorbilidades, aquellos pacientes con insuficiencia y deficiencia de vitamina D tuvieron 7 y 20 veces mayor riesgo de mortalidad, respectivamente. También la hipovitaminosis se ha ligado a mayor
prevalencia
respiratorias,
de
enfermedades
enfermedades
virales),
infecciosas
(tuberculosis,
cardiovasculares,
enfermedades
autoinmunes
(artritis
reumatoide, esclerosis múltiple), hipertensión, algunos cánceres, diabetes, e incluso al aumento de la mortalidad. . Es interesante destacar que la mayoría de estas patologías
de riesgo presentan mayor prevalencia en sujetos con deficiencia de vitamina D particularmente en los pacientes diabéticos y con obesidad, quienes se han relacionado con una mayor mortalidad en COVID-198. Asimismo un grupo especial de riesgo son los adultos mayores, cuya capacidad de síntesis de Vitamina D es 60-70% menor que la de una persona joven. Vitamina D frente a COVID 19 Debido al mecanismo de acción de COVID-19, puede llevar a una respuesta excesiva de inflamación y a la alteración de la respuesta inmune causantes del espectro de manifestaciones clínicas. Uno de los mecanismos implicados es que la vitamina D favorece la indemnidad del epitelio respiratorio, ya que mantiene las uniones estrechas, gap y de adherencia del epitelio respiratorio. La acción destructiva de los virus sobre ellas puede llevar a la alteración del tejido y, por lo tanto, a la progresión de la infección viral y sobreinfección por otros microorganismos, como las bacterias 8. La vitamina D además previene el fenotipo profibrótico de células pulmonares inducido por TGF-11. Asimismo, estimula la inmunidad innata induciendo la diferenciación de monocitos a macrófagos y mejorando su capacidad fagocítala y quimiotáctica, regulando la producción de péptidos antimicrobianos que permiten modular la respuesta inmune reforzando la función de las células epiteliales pulmonares mejorando su función en infecciones respiratorias como COVID-19. Conjuntamente favorece la homeostasis de la oxidación y reducción celular (REDOX), mantenido la función mitocondrial normal e inhibiendo las vías de estrés oxidativo. Estas acciones favorecen la respuesta antiviral y disminuyen los procesos inflamatorios al suprimir las citoquinas inflamatorias tales como TNF-Α, IL1-Β, IL-6, IL-8 y expresión de TLR2/4. Estas citoquinas junto al INF-y son las responsables de la tormenta de citoquinas que desencadena COVID-19 alterando el epitelio pulmonar. Por otra parte la 1,25(OH)2D puede inducir autofagia en monocitos. COVID-19 bloquea este proceso al inducir la síntesis de la proteína quinasa 2 asociada a la fase s (skp2), favoreciendo su acelerada replicación e infectividad. Diversos estudios experimentales mostraron que la vitamina D puede inhibir a la proteína skp2, lo que permitiría recuperar el mecanismo de autofagia reduciendo la replicación viral y, por lo tanto, la carga viral y sus potentes efectos inflamatorios 8.
Aditivo a estas funciones modula la actividad de la inmunidad adaptativa. La 1,25(OH)2D tiene efecto sobre diferentes poblaciones de linfocitos T de forma directa o indirecta o ambas favoreciendo la proliferación de T helper 2(TH2) y células regulatorias T(TREG) e inhibe la de T helper 1(TH1) y T helper 17(TH17) reduciendo la producción de citoquinas y quimioquinas proinflamatorias y favoreciendo la expresión de citoquinas antiinflamatorias. Estas acciones disminuirían los procesos inflamatorios y el riesgo de la “tormenta de citoquinas”, que contribuyen al empeoramiento y complicaciones de las infecciones virales respiratorias. Asimismo la 1,25(OH)2D puede actuar sobre las células B, disminuyendo su proliferación, producción de anticuerpos y diferenciación a células plasmáticas, por modificación de su fenotipo 6. Finalmente participa en la regulación del Sistema Renina-Angiotensina-Aldosterona (SRAA). Un homólogo de la enzima convertidora de (ECA), denominado ECA 2, presenta una gran especificidad para generar angiotensina 1, 9 (ang 1,9) a partir de la Ang I y angiotensina 1, 7 (ang 1,7) a partir de la Ang II. La ECA2 se encuentra en tejidos tales como los vasos sanguíneos, riñón, intestino y células pulmonares. COVID-19 se une a los receptores ECA 2 de la célula pulmonar, se internaliza e induce disminución de los niveles intracelulares de esta enzima, con el consiguiente aumento de Ang II y activación local del SRAA, ambos productores del aumento de los procesos de vasoconstricción, inflamación, estrés oxidativo y fibrosis del tejido pulmonar, causantes finales de los cuadros respiratorios graves por COVID-19. La vitamina D aumenta los niveles de ECA2, disminuyendo los niveles de Ang I y Ang II y llevando a mayor síntesis de Ang 1,9 y Ang 1,7, que contrarresta los efectos dañinos a nivel pulmonar. Otro punto es que la vitamina D inhibe el gen de la renina, con lo cual la vitamina D no solo actuaría compensando la acción del virus sino también beneficiaría a la población hipertensa de riesgo8. Suplementación con vitamina D La indicación de la suplementación de Vitamina D, se basa en sus acciones antivirales, antiinflamatorias y de protección pulmonar. Por lo que la vitamina D podría ser un complemento preventivo y/o coadyuvante terapéutico para disminuir el daño causado por COVID-19. Existe una deficiencia de vitamina D en poblaciones de riesgo para
COVID 19 como es en la diabetes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, obesidad. Asimismo, existe una alta incidencia de deficiencia de vitamina D en adultos mayores, grupo de riesgo para formas severas, críticas y de mayor mortalidad por covid-198. Por lo que autores como Grant et. al. (2020; 12), sugieren ciertas líneas para la suplementación con vitamina D en esta pandemia de COVID-19, ya que establecen como objetivo alcanzar niveles de 25-OH-D entre 40-60 ng/ml. Para ello proponen dosis de vitamina D de 2.000- 5.000 UI/día. En aquellos pacientes con deficiencia de vitamina D sugieren administrar una dosis de carga quincenal o semanal, totalizando 100.000-200.000 UI/en 8 semanas (equivalente a 1.800-3.600/día) e incluso 10.000 UI/día por un mes y luego 5.000 UI/día de mantenimiento, basados en los esquemas de diferentes trabajos. Por su parte, Wimalawansa et. al (2019;8) sugiere alcanzar niveles de 25 OH-D >30ng/ml, preferentemente >40ng/ml, y propone que la suplementación con vitamina D sea acompañada de niveles adecuados de otros nutrientes como zinc, selenio y antioxidantes. En el grupo de sujetos que han tenido contacto con enfermos o aquellos que presentan algunos síntomas como fiebre, sugiere utilizar una dosis de carga de 200.000- 300.000UI de vitamina D acompañada de los micronutrientes nombrados para reforzar el sistema inmunológico. A la semana puede repetirse dicha dosis para llenar los depósitos de vitamina D. En la población general en época de pandemia por COVID-19, la sugerencia es tener niveles de 25OH-D óptimos cercanos a 40 ng/ml. Para ello se puede indicar el esquema sugerido en las guías de la Federación Argentina de Sociedades de Endocrinología sobre hipovitaminosis D. Si los niveles son inferiores, se indica una dosis de carga de 100.000UI cada 15/30 días, semanal de 50.000UI o diaria de 2000-5000UI durante 2-3 meses. Es importante controlar los niveles de 25OH-D alcanzados a los 3-4 meses de comenzar la suplementación. La dosis posterior de mantenimiento oscila entre 800-2000ui/día, 50.000 UI mensual o 100.000 UI cada 1-3 meses, dependiendo de lo que indiquen los análisis durante el seguimiento. Dicha dosis de mantenimiento se indica también para aquellos con niveles adecuados basalmente. Como medida preventiva en pacientes con diagnóstico de COVID-19, en aquellos con síntomas leves y en sus contactos estrechos, se indicaría un esquema de carga de vitamina D lo más temprano posible, para alcanzar rápidamente niveles óptimos con el objetivo de reducir el riesgo y la
severidad de COVID-19. En la población con COVID-19 con criterio de internación, se indicarían dosis mayores. Se propone que con dicho plan alcanzarían niveles adecuados de 25OH-D para una respuesta óptima de su sistema inmunológico dentro de los 3-5 días de la administración, lo que podría contribuir a una evolución con menos complicaciones y una recuperación más rápida. El personal que trabaja en el área de salud debería recibir también la suplementación como una medida para prevenir la infección y su propagación, según el artículo publicado en mayo sobre actualidades de osteología (Seijo et al; 2020). Por otra parte según Weir et. al. (2020) reconocen que el suplemento diario habitual solo debe tomarse bajo supervisión médica. La eficacia de suplementos de vitamina D en la prevención de infecciones tracto respiratorio agudo se ha demostrado mejor con la ingesta crónica de dosis bajas, en lugar de la administración en bolo de dosis grandes. Esto debido a que se ha presenciado el fallo de una dosis única enteral para mejorar los resultados de los pacientes con deficiencia de vitamina D ingresado en la unidad de cuidados intensivos (UCI) con neumonía, sepsis, shock, o insuficiencia respiratoria, en relación con los pacientes de la UCI que recibieron placebo, por lo que apoya una suplementación con vitamina D 8. Sin embargo, autores como Alexander et. al (2020;12) solo
recomiendan la
intervención nutricional ambulatoria temprana en pacientes expuestos al SARS-COV-2 o sujetos de alto riesgo, preferiblemente antes de un tratamiento específico y de apoyo debido a que las deficiencias clínicas o subclínicas de micronutrientes, como las deficiencias de zinc, selenio y vitamina D, que ocurren con frecuencia en los grupos de edad avanzada, contribuyen a las enfermedades relacionadas con la edad como la diabetes, la hipertensión y las enfermedades coronarias. Estas enfermedades, se caracterizan por signos de bajo grado de inflamación, que también puede resultar del envejecimiento. Por su parte, autores como McKenna MJ, et. al. (2020;113) recomiendan una serie de sugerencias de dependiendo si las personas consumen alimentos ricos en vitamina D o no. En adultos mayores frágiles (> 70 años) recomiendan un suplemento 10 µg a 20 µg/día. Mientras que en los adultos sanos que están confinados en casa se sugieren suplemento 10 µg de vitamina D. Finalmente en los adultos que pueden estar al aire libre un suplemento de 5 µg a 10 µg de vitamina D.
Discusión Se sabe que las deficiencias clínicas y subclínicas de micronutrientes, comunes en los adultos mayores, contribuyen a la disminución de la función inmunitaria y a las enfermedades relacionadas con la edad, lo que implica que el manejo nutricional es fundamental para reducir el riesgo de infección grave. En pacientes mayores, se ha considerado una deficiencia grave de vitamina D como un predictor independiente de neumonía adquirida en la comunidad, que también se asocia con aumento del riesgo de ingreso a la UCI asociado con una mayor mortalidad, según el autor Alexander et al. (2020;12) quien además reporta que los niveles subóptimos de vitamina D, particularmente al final de la temporada de invierno en sujetos sanos, por lo que personas con acceso limitado a la luz solar y los ancianos con capacidad de síntesis reducida, pueden tener deficiencia de vitamina D. Lo anterior refuerza la importancia de un mantenimiento estable de vitamina D sobretodo en temporada invernal o de poca exposición solar en la población en general y de riesgo. Además los datos experimentales sobre células in vitro han demostrado efectos beneficiosos de la vitamina D en cuanto a mecanismos patogénicos de las infecciones virales respiratorias. Este mismo autor además resalta que el tratamiento con vitamina D reduce la replicación de otros virus como el virus respiratorio sincitial (RSV) y rinovirus (RV) ,esto debido a que el tratamiento con 1,25 (OH) -D mejoró la respuesta inmunitaria antiviral respiratoria inducida por infecciones estas infecciones, dando lugar a la propuesta de que el tratamiento a base de dosis óptimas de vitamina D, podría ser favorecida no solo en esta pandemia causada por COVID 19, sino también por infecciones causadas por otros virus. Por su parte Chakhtoura et. al. (2020:109) en su artículo fortalece que la suplementación con vitamina D reduce el riesgo de infecciones respiratorias agudas, incluidas las virales, en un 12% en todos los participantes estudiados (11,000). Este efecto se observó con dosis diarias o semanales (en un 19%), pero no con dosis en bolo, y fue más pronunciado en pacientes con niveles séricos de 25 (oh)D inferiores a 50 nmol / l (20 ng / ml). Por el contrario, una declaración emitida recientemente en conjunto por la American Society For Bone And Mineral Research (ASBMR), American Association Of Clinical Endocrinologists (AACE), Endocrine Society, European Calcified Tissue Society (ECTS), National
Osteoporosis Foundation (NOF), y la International Osteoporosis Foundation (IOF), concluyó que si bien los estudios observacionales ( epidemiológicos) publicados sugiere la asociación entre deficiencia de vitamina D y una tasa mayor de COVID-19, pero esto no implica causalidad y puede relacionarse con otros factores como edad, salud general, etnia, etc. Sin embargo, reconocen que la vitamina D puede tener un rol en mejorar la respuesta inmune como ha sido demostrado en investigaciones previas y, por lo tanto, se justifica la investigación adicional sobre la suplementación de vitamina D(Seijo et. al .; 2020). Conclusión La vitamina D posee propiedades antivirales, antiinflamatorias y de protección pulmonar a través de la vía no clásica de su metabolismo, demostrando que podría desempeñar un papel en mejorar la respuesta inmune. A pesar del
papel de la
suplementación con vitamina D en pacientes con COVID-19, para mejorar la resistencia a la enfermedad o como terapia adyuvante, se necesitan más estudios de evaluación de los niveles de vitamina D en las poblaciones de riesgo previo al contagio, durante la enfermedad y sus complicaciones, para enriquecer las propuestas del rol de la vitamina D durante los contagios masivos de esta pandemia, ya que hipovitaminosis D se asocia con mayor prevalencia de las enfermedades que son de riesgo para COVID-19. Es fundamental que estas medidas de suplementación de vitamina D incluyan también al personal de la salud y los contactos cercanos de COVID-19. Si bien carecemos de evidencia suficiente que justifique suplementar esta vitamina D en la prevención y/o tratamiento de la infección por COVID-19, resulta cada vez más factible que esta hipótesis es válida. Asimismo, las circunstancias emergentes actuales de pandemia por COVID-19 requieren conductas terapéuticas de base científico, mientras se declara un tratamiento efectivo o bien, mientras que
se realiza una
cobertura global de las nuevas vacunas propuestas por diferentes laboratorios. Referencias
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La fisiología y la bioquímica en la digestión Realizado por: Carolina Ramírez Pérez
RESUMEN: La nutrición en los seres humanos se logra a través de la digestión física y química, misma que consiste en procesar los alimentos que consumimos para aprovechar sus componentes. El presente artículo abordará los pasos que se realizan durante la digestión y cuál es la función de la fisiología y la bioquímica para realizar esta tarea, desde que los alimentos entran a nuestra boca y hasta que son expulsados del cuerpo.
PALABRAS CLAVE: Nutrición, digestión, digestión física, digestión bioquímica, alimentación.
ABSTRACT: Nutrition in humans is achieved through physical and chemical digestion, which consists of processing the food we consume to take advantage of its components. This article will address the steps that are carried out during digestion and what is the role of physiology and biochemistry to perform this task, from when food enters our mouth until it is expelled from the body.
KEYWORDS:
Nutrition,
digestion,
physical
digestion,
biochemical
digestion,
nourishment.
INTRODUCCIÓN
La nutrición en los seres humanos se logra a través de los alimentos que consumimos, estos deben estar en relación con las necesidades dietéticas del organismo y varían de persona a persona, de acuerdo a su actividad física, estilo de vida, o condiciones de salud. Es crucial el llevar una dieta equilibrada y completa, combinada con el ejercicio físico regular, para tener una buena salud ya que, tal como menciona la World Health
Organization (2020) “una mala nutrición puede reducir la inmunidad, aumentar la vulnerabilidad a las enfermedades, alterar el desarrollo físico y mental, y reducir la productividad”. Del proceso mediante el cual se logra la nutrición, solamente tenemos el control de seleccionar los alimentos e ingerirlos, ya que después de esto nuestro cuerpo realiza un complejo procedimiento de pasos de manera inocente. Una vez que los alimentos están dentro del cuerpo se realiza la digestión, un intrincado entramado de pasos tanto físicos como químicos, que al final dan como resultado la nutrición que el cuerpo requiere y puede aprovechar los recursos que consumimos. El presente artículo pretende seguir explicar qué pasos se realizan en la digestión, desde que los alimentos entran a nuestra boca y hasta que son expulsados del cuerpo, ya que este proceso es mediante el cual el cuerpo puede aprovechar los recursos que necesita para su correcto funcionamiento.
DESARROLLO
La digestión es el proceso por el cual un alimento es transformado, en el aparato digestivo, en una sustancia que el organismo asimila para su beneficio. La función del aparato digestivo es digerir, o procesar, y absorber los alimentos y sus compuestos para su aprovechamiento, para luego excretar los residuos a manera de desecho. El aparato digestivo lleva acabo cuatro actividades unitarias principales, estas son: el procesamiento oral para reducir el tamaño de las porciones de alimento; el procesamiento gástrico para iniciar la degradación bioquímica mediante las enzimas; el procesamiento del intestino delgado para descomponer las macromoléculas y absorber nutrientes; y la fermentación y la eliminación a través del colon. Este
aparato
comprende
el
tracto
gastrointestinal
y
otros
órganos
complementarios que contribuyen al proceso. El tracto gastrointestinal está constituido por la cavidad bucal, faringe, esófago, estómago, intestino delgado e intestino grueso. Los órganos complementarios son los dientes, la lengua y los órganos glandulares como la glándula salival, el hígado, la vesícula biliar y el páncreas.
Hay dos maneras en las que funciona el aparato digestivo: primero, procesamiento mecánico, dentro del cual se lleva a cabo la desintegración de los alimentos, al igual que la excreción de los desechos; y en segundo lugar el proceso químico/bioquímico, que tiene que ver con la absorción de alimentos y la secreción de ácidos y enzimas para su aprovechamiento
La digestión y la fisiología
El proceso físico es descrito por Ogobuiro, Gonzales, y Tuma en Physiology, Gastrointestinal (2020), en donde se dice que la digestión comienza en la cavidad bucal, lugar en el que se llevan a cabo cuatro procesos básicos: análisis sensorial del material alimenticio antes de ingerirlo; el procesamiento mecánico a través de la acción de los dientes, la lengua y las superficies palatinas; la lubricación mediante la mezcla de material alimenticio con secreción de glándulas salivales; y la digestión limitada de carbohidratos y lípidos. El interior de la cavidad bucal está revestida por células epiteliales escamosas queratinizadas y no queratinizadas, que ayudan a la disolución de los alimentos; sin embargo, estas células no son por absorber las moléculas o nutrientes que los alimentos contenga, sino para una primera degradación del producto. Esto ya que la función principal de la lengua, los dientes y las paredes mucosas de la boca tiene como finalidad el iniciar el procesamiento mecánico de comprensión, a lo que se le conoce como masticar, lo que prepara la ingesta para ser tragada. Los dientes también ayudan en el proceso, ya que ellos realizan la descomposición mecánica de los materiales alimenticios y a la par de este proceso también se inicia el proceso bioquímico, ya que se satura de secreciones salivales y enzimas a los alimentos para su posterior aprovechamiento. Después de la boca, el proceso de digestión fisiológico es que los alimentos pasan a la faringe, misma que es un pasaje del material alimenticio al esófago. La principal función que se realiza en el esófago es conducir a los alimentos al estómago mediante contracción de su músculo longitudinal y circular, proceso al que se le denomina como peristalsis.
El movimiento muscular de la peristalsis es completamente involuntario, pues los músculos esqueléticos que se encuentran en la faringe y la parte superior del esófago están todos bajo el control del reflejo de deglución. El siguiente proceso se lleva a cabo en el estómago. En él se realiza una doble función, pues se puede almacenarse temporalmente el material alimenticio para después descomponerse de forma mecánica y química por la acción de los ácidos y enzimas que hay en este órgano. En cuanto a la descomposición mecánica de los alimentos en el estómago, ésta se realiza por su constitución muscular, ya que cuenta con tres capas de músculos: la capa oblicua interna, la capa circular media y la capa longitudinal externa. La contracción y relajación de estas capas musculares activan la mezcla del producto, generando así una degradación física. Cuando termina el proceso de degradación en el estómago, el producto de la ingesta alimentaria es transportado al intestino delgado. Éste está segmentado en tres partes: el duodeno, el yeyuno y el íleon. El duodeno es quien recibe el producto del estómago, así como el material digestivo del páncreas y del hígado. En el yeyuno es donde se produce la mayor parte de la digestión y absorción bioquímicas. El íleon también tiene función de digestión y absorción pues en esta sección está la válvula ileocecal, un esfínter que controla el flujo de material desde el íleon al ciego del intestino grueso. Cuando el producto alimenticio ya se ha procesado y se han absorbido los nutrientes, resta una parte que ya no es posible que sea absorbida y pasa al intestino grueso. En este punto ya se le denomina heces, pues ya no hay material para que se pueda aprovechar. El intestino grueso mide aproximadamente 180cm de largo y está formado por el ciego, el colon ascendente, el colon transverso, el colon descendente y el colon sigmoide. Mediante el movimiento peristáltico del intestino grueso se mueven las heces hacia el recto. En el recto, hay receptores de estiramiento que señalan el comienzo del proceso de defecación, que comprende la relajación refleja del músculo liso del esfínter anal interno y una relajación consciente del músculo esquelético del esfínter anal externo. En este punto termina el proceso digestivo.
La digestión bioquímica
En la boca comienza el proceso de degradación bioquímica, tal como se menciona en Fat digestion by lingual lipase: mechanism of lipolysis in the stomach and upper small intestine (1989), la lipasa lingual tiene un pH amplio y descompone los lípidos (principalmente los triglicéridos Dentro de la cavidad bucal, hay tres pares de glándulas salivales: 1) son las glándulas salivales parótidas que están ubicadas por debajo del arco cigomático y posterolateral a la mandíbula, y éstas producen secreciones serosas que contienen una gran cantidad de amilasa salival, que descompone los complejos de carbohidratos. 2) Las glándulas salivales sublinguales, éstas están ubicadas en la parte baja de la boca y son las que producen una secreción mucosa que sirve como amortiguador y lubricante. 3) Las glándulas salivales submandibulares, ubicadas también en la parte baja de la boca dentro del surco mandibular, cuya función es secretar unas enzimas llamadas mucinas y amilasa salival. En el estómago es donde sucede un proceso de descomposición bioquímica como tal, ya que el material del alimento en este órgano es impregnado por las secreciones de las glándulas gástricas, que se producen principalmente en las células parietales, las células principales, las células G, las células foveolares y las células mucosas. Estas secreciones generan acidez en el estómago, lo que destruye la mayoría de los microorganismos ingeridos con los alimentos, además de que desnaturaliza las proteínas y descompone las paredes celulares de los alimentos. Aunque en este órgano comienza la absorción como tal de los macronutrientes que se obtienen del proceso digestivo, no es donde se absorben la mayoría de estos. Una vez que se termina el proceso en el estómago, el movimiento impulsa a los alimentos al intestino delgado, ya que en él se lleva a cabo el 90% de la absorción de las propiedades del alimento. El intestino delgado está recubierto con una mucosa que tiene vellosidades y cada vellosidad tiene microvellosidades para la absorción óptima de los nutrientes. Algunas de estas redes de vellosidades transportan los nutrientes
absorbidos a la circulación portal hepática y otras, llamados lacteales, ayudan en el transporte de quilomicrones a la circulación venosa. Dentro del intestino delgado, los órganos digestivos complementarios, como el hígado y el páncreas, liberan secreciones digestivas. El hígado produce bilis, ésta emulsiona varios tipos de lípidos para una digestión correcta. Mientras que el páncreas tiene glándulas exocrinas que son esenciales para el proceso de digestión de los alimentos, ya que producen múltiples precursores de enzimas y enzimas como los tripsinógeno, quimotripsinógeno y procarboxipeptidasa que continúan con el proceso de la digestión. Una vez terminado el proceso en el intestino delgado, se pasa al intestino grueso. En esta parte del aparato digestivo se absorbe agua y electrolitos, pero también descompone el material alimenticio no digerido. Además hay ciertos nutrientes, como la vitamina K, que se producen y absorben en el intestino grueso. Una vez terminado este proceso, ya no se involucra un trabajo bioquímico, sino que solo es un proceso fisiológico para la expulsión de los desechos que quedan del producto alimenticio ingerido.
DISCUSIÓN Y CONCLUSIÓN
La digestión física y bioquímica es crucial para la vida humana ya que de ella pende la absorción de los nutrientes que son necesarios para que los organismos sobrevivan y se desarrollen de manera completa. Es una tarea que muchas veces se da por sentado, ya que no es un proceso que se realiza de forma consiente más allá de lo que implica consumir alimentos y masticarlos, pero es importante apelar y estar atentos de su correcto funcionamiento, ya que el que se dé algún problema al realizar esta función puede tener consecuencias importantes para la salud. Al interior de nuestro cuerpo se lleva a cabo una compleja tarea de degradación y absorción de lo que los nutrimentos que los alimentos contienen dentro de sí, si bien es importante atender a las necesidades que tiene nuestro cuerpo de acuerdo al estilo de vida que se lleve, también es impronta prestar atención a lo que pasa una vez que
consumimos los alimentos, pues a través de este proceso se puede o no lograr un óptimo desarrollo corporal y conservar salud.
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Dieta mediterránea Realizado por: Karen Alejandra Medrano Ortíz
RESUMEN: La dieta mediterránea ha sido empleada en personas para controlar la presión arterial, cuidar su corazón, bajar el colesterol o perder peso. Además de disfrutar de una deliciosa comida, también puede incluir una copa de vino con su comida. Las dietas más saludables se centran en alimentarse mayormente con frutas y verduras, vigilando el consumo de grasas. Esta dieta hace eso, pero va varios pasos más allá, ya que consta para enseñarle cómo cocinar las comidas en ciertos tamaños de porciones para que no solo reduzca su riesgo de enfermedades cardiovasculares al reducir su LDL, sino que se ponga en la mejor forma de su vida.
PALABRAS CLAVE: dieta, diabetes mellitus, colesterol, prevención.
ABSTRACT: The Mediterranean diet has been used in people to control blood pressure, take care of their heart, lower cholesterol, or lose weight. Besides enjoying a delicious meal, you can also include a glass of wine with your meal. The healthiest diets focus on eating mostly fruits and vegetables, watching your fat intake. This diet does that, but goes several steps further, as it consists of teaching you how to cook meals in certain serving sizes so that you not only reduce your risk of cardiovascular disease by lowering your LDL, but also put you in the best shape of his life.
KEYWORDS: diet, diabetes mellitus, cholesterol, prevention.
INTRODUCCIÓN
Una Investigación documental busca, disminuir la incidencia de la Diabetes Mellitus (DM), usando como tratamiento la dieta mediterránea, para ello en el presente trabajo se estudia la definición de diabetes mellitus, los tipos básicos de DM, cómo se realiza el diagnóstico de DM, cómo se puede prevenir, la escala Findrisc, las recomendaciones nutricionales para la prevención de DM. El concepto y origen de la dieta mediterránea, características y estudios que comprueban la prevención de DM con esta dieta.
DESARROLLO
Los estudios han demostrado que la dieta también puede reducir el riesgo de desarrollar otras enfermedades como el Alzheimer y algunos cánceres. El funcionamiento de la dieta es sencillo. Usted se concentra en desarrollar la parte principal de su plan de alimentación en torno a los alimentos vegetales, que son principalmente vegetales, frutas y cereales integrales. Se le anima a comer cosas como legumbres y también puede comer frutos secos en esta dieta. La dieta guía a los usuarios a cambiar las grasas que son malas para su corazón y su peso por otras que promueven la salud y pueden prolongar su vida. Eso significa usar aceites saludables como el aceite de oliva virgen extra en lugar de cocinar con mantequilla. En esta dieta, tendrá que reducir el consumo de carnes rojas. La carne roja no es tan buena para su corazón y al reemplazar parte del consumo de eso con cosas como aves o pescado, comerá más saludablemente. Lo que a muchas personas les gusta de este plan de alimentación es que se permite beber vino tinto, que es bueno para el corazón. Eso significa que si tiene semanas ocupadas, cocine algunas comidas el fin de semana para tenerlas listas cuando tenga demasiada hambre o sea demasiado tarde para cocinar. Prepare lo suficiente de cada comida para las sobras del almuerzo del día siguiente.
PREVENCIÓN DE DIABETES MELLITUS Ensayos clínicos han demostrado que, si se actúa para modificar el estilo de vida de personas clasificadas con alto riesgo, se puede detener o retrasar la aparición de diabetes (PINILLA Y BARRERA, 2018).
Los factores relacionados con el estilo de vida pueden modificarse con el objetivo de mejorar la salud de las personas y disminuir las posibilidades de desarrollar diabetes. Estas intervenciones pueden disminuir hasta en 31% la presentación de casos de diabetes mellitus 2 (INSP, 2020).
ESCALA FINDRISC Es un instrumento de cribaje diseñado para valorar el riesgo individual de desarrollar DM en el plazo de 10 años. Las principales variables que se valoran son: edad, IMC, perímetro de cintura, hipertensión arterial con tratamiento farmacológico y antecedentes personales de glucemia elevada.
RECOMENDACIONES NUTRICIONALES PARA LA PREVENCIÓN DE DIABETES
Mayor consumo de alimentos saludables (frutas y verduras) y de baja densidad energética.
Aumentar ácidos grasos monoinsaturados entre 12 y 20% de las calorías totales.
El aporte de proteína 1gramo por cada kilogramo al día para personas con DM y sin nefropatía.
Privilegiar la ingesta de carbohidratos a partir de frutas y verduras, leguminosas, granos enteros y productos lácteos.
Consumir pescados ricos en omega 3, nueces y semillas.
Alimentación alta en fibra.
Actividad física.
Levantarse algunos minutos después de un periodo prolongado de estar sentado.
Acudir periódicamente al médico para realizarse pruebas de glucosa en sangre.
Disminuir comidas rápidas con alto contenido energético.
Controlar el tamaño de las porciones y limitar el consumo de bebidas azucaradas.
Disminución de peso en personas obesas (reducción de ácidos grasos saturados <7% y ácidos grasos trans <1%).
Reducir el sodio a menos de 2300 mg/d, en caso de hipertensión la restricción es menor.
LA DIETA MEDITERRÁNEA Una menor mortalidad por enfermedad, una mayor expectativa de vida y menor incidencia de enfermedades crónicas en los países mediterráneos. Un estudio caracterizó la dieta por: una baja ingesta de carnes rojas, lo cual lleva a un alto consumo de frutas, verduras, legumbres, aceite de oliva, frutos secos y pescados (URQUIAGA ET AL, 2017).
RELACIÓN ENTRE LA DIETA MEDITERRÁNEA Y LA PREVENCIÓN DE DIABETES MELLITUS
Ambas dietas promueven un consumo de alimentos saludables como frutas, verduras y de bajo contenido energético.
Alto consumo de Ácidos grasos monoinsaturados.
Alto consumo de fibra.
Consumo de proteína animal moderado, privilegiando el consumo de pescados y aves.
Consumo de carbohidratos, frutas, verduras, leguminosas, granos enteros y productos lácteos.
Reducción de alimentos con alto contenido energético.
Limitan el consumo de bebidas azucaradas.
Reducción de ácidos grasos saturados y trans. (SALAS, 2014)
CONCLUSIÓN La diabetes es una enfermedad crónico degenerativa que deteriora la salud de las personas y un cambio de estilo de vida puede retrasar el consumo crónico de medicamentos y mejorar la perspectiva de vida para la población. La dieta mediterránea propone un consumo de alimentos variados y en moderación especialmente en las comidas, ayudando a prevenir la enfermedad o retrasar los efectos de ella.
REFERENCIAS Build, P. (2016). La alimentación en la persona con diabetes: la dieta mediterránea. Diabetes Práctica. http://www.diabetespractica.com/files/1481274581.04_buil_s7-4.pdf Federación Méxicana de Diabetes, A.C. (2018, 23 abril). Principales causas de mortalidad en México [Infografía]. fmdiabetes.org. http://fmdiabetes.org/principalescausas-mortalidad-mexico-2/ INSP. (2020, 26 agosto). DIABETES EN MÉXICO. Instituto Nacional de Salud Pública. https://www.insp.mx/avisos/3652-diabetes-en-mexico.html Inzucchi, S. E. (2015, 1 enero). Management of Hyperglycemia in Type 2 Diabetes, 2015: A Patient-Centered Approach: Update to a Position Statement of the American Diabetes Association and the European Association for the Study of Diabetes. Diabetes Care. https://care.diabetesjournals.org/content/38/1/140 Lindström, J., & Tuomilehto, J. (2015, junio). Escala de Findrisc [Gráfico]. fundacionastrazeneca.
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VITAMINA D Y SU RELACIÓN CON EL COVID-19 Realizado por:NALLELY ALEJANDRA HERRERA MAGALLANES
RESUMEN
La infección por COVID-19 se asocia a mayor número de complicaciones, internación y mortalidad principalmente en pacientes con edad mayor, sujetos con enfermedades
previas
cardiorrespiratorias,
hipertensos
y
diabéticos.
Es
interesante destacar que estas patologías de riesgo presentan mayor prevalencia en sujetos con deficiencia de Vitamina D. La suplementación con Vitamina D, podría llegar a reducir la incidencia, severidad y riesgo de muerte en la actual pandemia por COVID- 19, como medida complementaria mientras se desarrollan otras medicaciones específicas. Este estudio tiene como objetivo dar a conocer la relación que tiene la vitamina D y el COVID-19, así como el efecto positivo que provoca el consumo de dicha vitamina.
PALABRAS CLAVES: vitamina D, COVID-19, deficiencia de vitamina D, SARSCoV-2, tratamiento nutricional.
ABSTRACT
COVID-19 infection is associated with a higher number of complications, hospitalization, and mortality, mainly in older patients, subjects with previous cardiorespiratory diseases, hypertensive patients, and diabetics. It is interesting to note that these risk pathologies have a higher prevalence in subjects with Vitamin D deficiency. Vitamin D supplementation could reduce the incidence, severity and risk of death in the current COVID-19 pandemic, as a complementary measure while other specific medications are developed. This study aims to publicize the
relationship between vitamin D and COVID-19. as well as the positive effect caused by the consumption of said vitamin.
KEYWORDS: vitamin D, COVID-19, vitamin D deficiency, SARS-CoV-2, nutritional treatment.
INTRODUCCIÓN
Como bien sabemos la vitamina D es fundamental para los huesos en todas las etapas de la vida desde el desarrollo fetal hasta la tercera edad. La podemos obtener de tres maneras: a través de la piel, de la dieta y de suplementos. El cuerpo forma la vitamina D naturalmente después de la exposición al sol.
La hipovitaminosis D se ha asociado a mayor prevalencia de enfermedades infecciosas (tuberculosis, enfermedades respiratorias, enfermedades virales), cardiovasculares, autoinmunes (como artritis reumatoidea, esclerosis múltiple), algunos cánceres, diabetes, e incluso a aumento de la mortalidad. El riesgo de deficiencia de vitamina D aumenta cuando hay poca o nula exposición a la radiación UV; altas latitudes, climas rigurosos, en las estaciones de otoño e invierno, por razones sociales o religiosas, en las ciudades con contaminación ambiental y elevada edificación, y por supuesto por falta de exposición a la luz solar/aire libre por estar recluidos en los hogares. (Oliveri, 2020)
La pandemia actual de COVID-19, comenzó a fines del 2019 en Wuhan, Hubei, China. La infección por COVID-19 se asocia a mayor número de complicaciones, internación y mortalidad principalmente en pacientes con edad mayor, sujetos con enfermedades
previas
cardiorrespiratorias,
hipertensos
y
diabéticos.
Es
interesante destacar que estas patologías de riesgo presentan mayor prevalencia en sujetos con deficiencia de Vitamina D. (Oliveri, 2020)
Se ha demostrado que la deficiencia de Vitamina D es un factor independiente asociado al aumento del riesgo de enfermedades virales respiratorias agudas en la mayoría de los estudios observacionales. Los niveles de 25OHD mayores de 38ng/ml en adultos se asociaron con una disminución significativa del riesgo de
desarrollar infecciones respiratorias agudas en otoño e invierno comparado con aquellos con niveles menores a 38ng/ml. (Oliveri, 2020)
DESARROLLO Los coronavirus pertenecen a una gran familia de virus (Coronaviridae) que infectan aves y varios mamíferos, incluidos camélidos, murciélagos, ratas, ratones, perros,
gatos
y
seres
humanos.
Recientemente,
un
coronavirus
antes
desconocido, denominado SARSCoV- 2, fue descubierto en diciembre de 2019 en Wuhan, provincia de Hubei, China, y es el agente causal de la epidemia de neumonía atípica actual (COVID-2019; CoronaVirus Disease 2019).
En relación con las manifestaciones clínicas producidas por este virus, los signos y los síntomas generales pueden incluir fiebre, tos, cansancio, pérdida del sentido del gusto o del olfato. Entre los síntomas leves a moderados se incluyen también la falta de aire o dificultad para respirar, dolores en los músculos, escalofríos, dolor de garganta, goteo de la nariz, dolor de cabeza, dolor en el pecho. Los casos más graves desarrollan neumonía grave, síndrome de dificultad respiratoria aguda, sepsis y shock séptico, que pueden conducir a la muerte.
La infección por COVID-19 se asocia a mayor número de complicaciones, internación y mortalidad, principalmente en pacientes añosos, sujetos con enfermedades
previas
cardiorrespiratorias,
hipertensos,
inmunosuprimidos,
pacientes con insuficiencia renal, obesos y diabéticos. (Seijo & Oliveri, 2020).
Es interesante destacar que la mayoría de estas patologías de riesgo presentan mayor prevalencia en sujetos con deficiencia de Vitamina D por lo que es necesario seguir realizando investigaciones y así poder dar prioridad a éste tipo de pacientes.
En la actualidad, la pandemia causada por el virus SARS-CoV-2 ha generado miles de muertes a nivel mundial y ha afectado a más de 4 millones de personas. El nombre atribuido a la familia de los coronavirus se debe al aspecto que tienen las proyecciones en la superficie, conformadas por glucoproteínas que semejan a una
corona solar. Estos virus mutan y se recombinan con frecuencia. En conjunto con los rinovirus, son los agentes casuales más frecuentes de infecciones del tracto respiratorio alto que pueden ser manifestadas como enfermedad pulmonar grave que progresa a síndrome de dificultad respiratoria del adulto. El virus SARS-CoV-2 puede sobrevivir durante un largo tiempo fuera del cuerpo humano; su potencial de viabilidad en condiciones normales a temperatura ambiente va desde dos horas en aluminio y papel, hasta nueve días en plástico. A temperaturas de 30 a 40°C los tiempos de supervivencia son menores, mientras que a 4°C pueden persistir hasta por 28 días. (Rodríguez, A. et al, 2020)
De acuerdo con Rivera y colaboradores (2020), el síndrome respiratorio severo o grave causado por el nuevo coronavirus (SARS-CoV-2) es una enfermedad de gran auge en la actualidad, que se ha propagado vertiginosamente a lo largo de los 5 continentes, siendo Norteamérica y algunos países europeos como Italia, España y Francia los más afectados por esta pandemia. En la actualidad, no se cuenta con una estrategia de prevención o tratamiento que logre mitigar de forma contundente las cifras de infectados y muertos a nivel mundial; sin embargo, se están estudiando alternativas que podrían impactar de forma positiva en el curso de la enfermedad. (Rivera et al., 2020).
Según la Organización Mundial de la Salud (2020), los síntomas más habituales de la COVID-19 son la fiebre, la tos seca y el cansancio. Otros síntomas menos frecuentes que afectan a algunos pacientes son los dolores y molestias, la congestión nasal, el dolor de cabeza, la conjuntivitis, el dolor de garganta, la diarrea, la pérdida del gusto o el olfato y las erupciones cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies. Estos síntomas suelen ser leves y comienzan gradualmente. Algunas de las personas infectadas solo presentan síntomas levísimos.
La mayoría de las personas (alrededor del 80%) se recuperan de la enfermedad sin necesidad de tratamiento hospitalario. Alrededor de 1 de cada 5 personas quecontraen la COVID‑19 acaba presentando un cuadro grave y experimenta dificultades para respirar. Las personas mayores y las que padecen afecciones médicas previas como hipertensión arterial, problemas cardiacos o pulmonares, diabetes o cáncer tienen más probabilidades de presentar cuadros graves. Sin embargo, cualquier persona puede contraer la COVID‑19 y caer gravemente enferma. Las personas de cualquier edad que tengan fiebre o tos y además respiren con dificultad, sientan dolor u opresión en el pecho o tengan dificultades para hablar o moverse deben solicitar atención médica inmediatamente. Si es posible, se recomienda llamar primero al profesional sanitario o centro médico para que estos remitan al paciente al establecimiento sanitario adecuado. (Organización Mundial de la Salud, 2020) Existen múltiples mecanismos por los cuales la vitamina D podría potenciar el sistema inmunológico y reducir la gravedad de infecciones del tracto respiratorio. Los tres mecanismos más conocidos son:
1) la vitamina D mantiene las uniones celulares estrechas 2) elimina los virus envueltos mediante la inducción de LL-37 y defensinas 3) reduce la producción de citoquinas proinflamatorias. De esta manera modera la respuesta inmunitaria responsable de neumonías graves.
Se entiende que el SARS-CoV-2 daña a las células epiteliales del pulmón y propicia el desarrollo de neumonía mediante una mayor producción de cito- quinas de tipo Th1, como el factor de necrosis tumoral alfa (TNF-α) y el interferón γ (IFNγ), provocando una tormenta de citoquinas; por lo que la vitamina D puede reducir la producción de Th1. Diversos estudios han relacionado el SARS-CoV-2 con la
deficiencia de la vitamina D, pues se estima que ésta tiene un impacto importante en el eje ACE2/ Ang(1-7)/MasR, mejorando la expresión de ACE2, con lo cual en estudios en animales se ha asociado como factor protector tras infecciones pulmonares. (Rodríguez, et al., 2020) La vitamina D tiene propiedades inmunomoduladoras, que incluyen la regulación negativa de las citocinas proinflamatorias, y se ha demostrado que atenúa la lesión pulmonar aguda inducida por lipopolisacáridos en ratones al bloquear los efectos sobre la vía de señalización de angiopoyetina y sobre la vía de renina-angiotensina; y aunque el efecto protector de la vitamina D contra COVID-19 pueda estar relacionado con la supresión de la respuesta de citoquinas y la reducción de la gravedad/riesgo de síndrome de dificultad respiratoria aguda, también hay evidencia de un metaanálisis de que la ingesta oral regular de vitamina D2 / D3 (en dosis hasta 2000 UI/d sin bolo adicional), es segura y protege contra la infección aguda del tracto respiratorio, especialmente en sujetos con deficiencia de la vitamina. (Camacho, 2020 ).
METODOLOGÍA Problema De Investigación
La acción antiinfecciosa e inmunomoduladora de la vitamina D que ejerce y su efecto sobre el sistema renina angiotensina, estimulando la enzima convertidora de angiotensina 2 (que es el receptor virus del SARS-CoV), permiten sospechar, actualmente, que con niveles elevados podría ser más difícil, o menos grave, la infección por COVID-19. Por sus acciones antivirales, antiinflamatorias y de protección pulmonar, la vitamina D podría ser un complemento preventivo y/o terapéutico para disminuir el daño causado por COVID-19. Su efecto positivo de la suplementación de ésta vitamina es considerada conveniente para prevenir enfermedades en sujetos con déficit, pero en medio de la grave pandemia 2020 administrarla, aún sin tener un dosaje previo en las poblaciones de mayor riesgo, podría disminuir esta enfermedad. (Mansur, 2020)
Preguntas de investigación
¿Cuál es la relación que existe entre la vitamina D y el COVID-19?
¿Existe un efecto positivo por el consumo de vitamina D y el COVID-19?
Objetivo de la investigación
Describir a través de una descripción bibliográfica si existe una relación entre el consumo de vitamina D y el COVID-19.
Diseño del estudio
Se llevó a cabo una investigación bibliográfica en base de datos como Google Académico y PubMed donde se recopiló información de varios artículos para recabar información relevante e importante sobre el tema del consumo de la vitamina D y el COVID-19, así como su efecto positivo de ésta vitamina.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN
La pandemia por coronavirus 19 (COVID-19) ha representado una amenaza mundial, y con la falta de una terapia y vacunación efectivas, su profilaxis y tratamiento se ha centrado en la utilización de productos existentes, este es el caso de la vitamina D, dado que según la evidencia posee efectos antivirales que pueden interferir directamente con la replicación viral.
Tal como lo refiere Camacho (2020), según investigaciones recientes, la vitamina D podría prevenir la infección y muerte por COVID-19, dado que, en poblaciones con bajos niveles de la vitamina, se ha observado mayor vulnerabilidad a infección y muerte por el virus. Estos resultados coinciden con estudios previos que sugieren que niveles adecuados de vitamina D, pueden reducir el riesgo de infecciones respiratorias como la gripe y la tuberculosis, así como el asma infantil. Además, existen datos experimentales que muestran que la vitamina D es importante para regular y suprimir la respuesta inflamatoria de las citocinas de las células epiteliales respiratorias y los macrófagos a diversos patógenos, incluidos los virus respiratorios.
En otro estudio realizado Daneshkhah A. y colaboradores (2020) por en el cual tenían como objetivo investigar si la infección por COVID-19 severa, está relacionada con la deficiencia de vitamina D, tomaron datos de admisión diaria, recuperación y fallecidos por COVID-19 de varios países (Alemania, Corea del Sur (Corea del Sur), China (Hubei), Suiza, Irán, Reino Unido, EE. UU., Francia, España, Italia); y dado que no tuvieron disponibles los datos sobre el nivel de vitamina D, utilizaron los vínculos previamente establecidos entre la vitamina, la PCR y COVID-19 severo; y encontraron un 17.3% de riesgo de casos graves de COVID-19, entre pacientes con deficiencia severa de la vitamina; y de 14.6% para pacientes con niveles normales; por lo que concluyen que la vitamina D puede reducir la gravedad de COVID-19 al suprimir la tormenta de citoquinas en estos pacientes.
Según Rodríguez et al. (2020) en el estudio realizado a pacientes con diagnóstico de COVID-19, cuyo objetivo era investigar si la deficiencia de vitamina D es un factor de riesgo de mortalidad en pacientes con COVID-19, encontraron mayor prevalencia de pacientes masculinos hospitalizados por COVID-19 que femeninos. Estos resultados concuerdan con lo reportado en otros países, por ejemplo, FeiZhou y su grupo de investigación en China, en marzo de 2020, mostraron que 62% de los pacientes hospitalizados eran de género masculino. En este estudio se encontró que los pacientes que requirieron hospitalización por COVID-19 tienen en promedio niveles deficientes de vitamina D, sólo 4.1% tenía niveles óptimos de
ésta vitamina. A la vez los pacientes con COVID-19 que requieren hospitalización tienen deficiencia de vitamina D, y niveles de bajo de 8 ng/mL es un factor de riesgo para mortalidad por COVID-19, por lo que se deben tomar acciones que mejoren los niveles de vitamina D como la suplementación de vitamina D en este grupo de pacientes. En una revisión narrativa realizado por Grant et al (2020) sobre la evidencia de como la suplementación con vitamina D podría prevenir y tratar las infecciones por influenza, COVID-19 y neumonía; encontraron que, la vitamina tiene diferentes mecanismos de acción; primero, las concentraciones elevadas de la vitamina reducen el riesgo de enfermedades crónicas, como el cáncer, enfermedades cardiovasculares, infecciones crónicas del tracto respiratorio, diabetes e hipertensión; pacientes que tienen un riesgo significativamente mayor de muerte por infecciones respiratorias en comparación con las personas sanas; y segundo, la vitamina D puede reducir el riesgo de infecciones respiratorias a través de tres mecanismos: manteniendo las uniones estrechas, matando los virus envueltos mediante la inducción de catelicidinas y defensinas, y reduciendo la producción de citocinas proinflamatorias por el sistema inmune innato, disminuyendo así el riesgo de tormenta de citocinas que provoca neumonía. Por lo cual, concluyeron que elevar las concentraciones séricas de la vitamina D a través de su suplementación, podría reducir la incidencia, gravedad y riesgo de muerte por influenza, neumonía y COVID-19. (Grant, et al., 2020).
Finalmente, en una revisión rápida de la literatura no encontraron evidencia clínica sobre la vitamina D y su deficiencia, relacionada con COVID-19, sin embargo, se observó evidencia de que la suplementación diaria de vitamina D durante semanas o meses, puede prevenir otras infecciones respiratorias agudas, particularmente en personas con una deficiencia de la misma; aunque la evidencia tiene limitaciones, como la heterogeneidad en las poblaciones de estudio, intervenciones y definiciones de infecciones respiratorias; y recomiendan que toda la población debería tomar suplementos de vitamina D para prevenir su
deficiencia, independientemente de cualquier posible vínculo con la infección respiratoria. (CEMB, 2020)
CONCLUSIÓN
En el momento en que nos encontramos de pandemia por COVID-19, es importante llevar a cabo investigaciones que puedan establecer la relación directa y no circunstancial de la gravedad de esta infección con los niveles de vitamina D y la dosis específica para lograr los efectos inmunomoduladores en infección por SARS-CoV- 2. No se encuentra evidencia clínica de que los suplementos de vitamina D sean beneficiosos para prevenir o tratar COVID-19 (CEMB, 2020). Se necesitan aún más pruebas de ensayos aleatorios para determinar si hay efectos, antes de recomendar suplementos de vitamina D para tratar o prevenir la infección por COVID-19.
Existe alguna evidencia de que la vitamina D puede tener un papel en la prevención de otras infecciones respiratorias, particularmente para personas con un nivel de vitamina D bajo o muy bajo. Esta vitamina posee propiedades antivirales, antiinflamatorias y de protección pulmonar, demostrando que podría desempeñar un papel en mejorar la respuesta inmune. La hipovitaminosis D se asocia con mayor prevalencia de las enfermedades que son de riesgo para COVID-19: diabetes, hipertensión, obesidad, enfermedades cardiovasculares, y presenta alta incidencia en el grupo de riesgo de adultos mayores.
Se necesitan ensayos adicionales en los que se pruebe un régimen de dosificación diferente (nivel de dosis e intervalos) antes de aplicarlo a nivel de la población (Organización Mundial de la Salud, 2020). Además, en los ensayos se debe hacer un seguimiento de los participantes el tiempo suficiente para comprender si la vitamina D sigue siendo efectiva una vez que el estado de vitamina D es óptimo, ya que una vez
que se corrige la deficiencia de vitamina D, es posible que la administración de más suplementos de vitamina D no aporte beneficios adicionales.
Actualmente, se están realizando otros ensayos aleatorizados controlados en que se evalúan los efectos de la vitamina D sobre el riesgo de infección aguda de las vías respiratorias, que podrían ayudar a aclarar aún más las dudas existentes sobre este tema. (Organización Mundial de la Salud, 2020).
BIBLIOGRAFÍA
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CEMB. (07 de 02 de 2020). Vitamina D: una revisión rápida de la evidencia para el tratamiento o la prevención en COVID-19. Obtenido de
https://www.cebm.net/covid-19/vitamin-d-a-rapid-review-of-the-evidence-fortreatment-or-prevention-in-covid-19/
Daneshkhah, A., Agrawal, V., Eshein, A., Subramanian, H., Roy, H. K., & Backman, V. (2020). El posible papel de la vitamina D en la supresión de la tormenta de citocinas y la mortalidad asociada en pacientes con COVID-19. Medrxiv, 1-23.
Grant, W. B., Lahore, H., McDonnell, S. L., Baggerly, C. A., French, C. B., Aliano, J. L., & Bhattoa, H. P. (2020). La suplementación con vitamina D podría prevenir y tratar las infecciones por influenza, coronavirus y neumonía. Nutrients .
Mansur, J. L. (2020). Vitamina D, sus Acciones “No Clásicas” y su Utilidad en la Pandemia del COVID-19. Rev Nefrol Dial Traspl, 330-40.
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Rodríguez, A., Montelongo, E., Martínez-Cuazit, A., Puente, A., & Reyes, R. (2020). La deficiencia de vitamina D es un factor de riesgo de mortalidad en pacientes con COVID-19. Sanid Milit Mex, Vol. 74.
Seijo, M., & Oliveri, B. (2020). IMPORTANCIA DE LA VITAMINA D EN LA ÉPOCA DE COVID-19. Actualizaciones en osteología , Vol. 2.
Consumo de Omega 3 en enfermedades cardiovasculares
reduciendo
el
riesgo
de
muerte
asociada a este tipo de patología. Palabras Clave
Realizado: Perla Krystell Ortiz Pacheco
Enfermedades Cardiovasculares,
Publicado: Universidad Autónoma de Durango Campus Zacatecas
ácidos grasos, Omega 3.
Abstract
Fecha: 12 de Febrero de 2021 Cardiovascular diseases (CVD) are
Resumen
the
leading
cause
of
death
in
Las enfermedades cardiovasculares
developed
(ECV) constituyen la principal causa
incidence continues to rise.
de
Various experimental, epidemiological
muerte
en
los
países
countries
and
desarrollados y su incidencia sigue en
and intervention studies have
aumento.
demonstrated
Diversos
estudios
experimentales,
demostrado
beneficiosos
los
efectos
cardiovasculares
del
consumo de ácidos grasos omega-3
docosahexaenoico (DHA)], los cuales
of
the
[eicosapentaenoic acids (EPA) and docosahexaenoic acids (DHA)], which have been attributed to their antithrombotic,
antiarrhythmic and anti-inflammatory effects.
han sido atribuidos a sus antiateroscleróticos,
antitrombóticos,
effects
antiatherosclerotic,
[ácidos eicosapentaenoico (EPA) y
efectos
beneficial
consumption of omega-3 fatty acids
epidemiológicos y de intervención han
cardiovascular
the
their
antiarrítmicos
y
The consumption of polyunsaturated fatty acids is related to a decrease in the risk of cardiovascular diseases,
antiinflamatorios.
reducing the risk of death associated El
consumo
de
ácidos
grasos
poliinsaturados se relaciona con una disminución enfermedades
del
riesgo
de
cardiovasculares,
with this type of pathology. Keywords
Cardiovascular diseases, fatty acids, Omega 3.
Abreviaturas.
salmón y la caballa. Otros ácidos
ALA: Ácido alfa-linolénico.
grasos
DHA: Ácido docosahexaenoico.
encuentran en los vegetales de hoja
EPA: Ácido eicosapentaenoico.
verde, aceite de semillas de linaza,
omega-3
importantes
se
nuez, semillas de chía y ciertos aceites vegetales.
Introducción
Según
De acuerdo a (INEGI, 2018) las
la
(OMS,
enfermedades
enfermedades cardiovasculares son
2021)
Las
cardiovasculares
son un conjunto de trastornos del
la principal causa de mortalidad en
corazón
México.
y
de
los
vasos
sanguíneos. Se clasifican en: Existen factores de riesgo asociados a
enfermedades
como
el
cardiovasculares,
colesterol
homocisteína
y
los
total,
la
triglicéridos
elevados, hipertensión, diabetes y niveles reducidos de colesterol HDL. Dichos factores son influenciables por la dieta. En base a lo escrito con (Medline, 2016) los ácidos grasos Omega-3 son
el
cuerpo
obtiene
de
como
ácidos
los
debe
obtener
de
enfermedad vascular periférica insuficiencia cardíaca cardiopatía reumática cardiopatía congénita miocardiopatías
suplementos dietéticos impactan los
niveles
de
colesterol,
triglicéridos y la presión arterial.
los
También que los ácidos grasos
alimentos, tales como pescado de agua fría, incluyendo el atún, el
(apoplejía)
omega-3 de los alimentos y los
producirlos por sí solo, de tal manera que
enfermedad cerebrovascular
observado que los ácidos grasos
grasos
esenciales porque el cuerpo no puede
miocardio)
diferentes investigaciones se ha
los
alimentos. Omega-3 y omega-6 son conocidos
cardiopatía coronaria (infarto de
De acuerdo con (AHRQ, 2017) en
una forma de grasa poliinsaturada que
hipertensión arterial (presión alta)
omega-3 influyen en los problemas cardiovascularesprolongados,
como el riesgo de ataque al
carne
corazón,
insuficiencia
particularmente la de rumiantes, y los
derrame
cerebral,
cardiaca,
muerte
por
de
productos
origen
animal,
lácteos
también
enfermedad del corazón y muerte
proporcionan ALA. Sin embargo, las
por cualquier causa.
técnicas
agrícolas
originado Desarrollo
valor energético, forman parte de los fosfolípidos de las membranas las
descenso
han
en
el
contenido de ácidos grasos n-3 de la
Los ácidos grasos, aparte de su
de
un
modernas
células
del
organismo,
ejerciendo una influencia sobre la composición de la membrana celular
carne
(especialmente
ternera)
debido
cordero
al
uso
y
casi
generalizado de concentrados de cereales ricos en ácidos grasos n-6 para alimentar al ganado. (Nutricion Hospitalaria, 2015)
determinando, en mayor o menor grado, la estructura y funcionalidad de la célula. Dicha funcionalidad abarca
aspectos
como
fluidez
y
permeabilidad, peroxidación lipídica.
Fuentes de ácidos grasos n-3 Entre los aceites vegetales, el aceite de linaza es considerado como la fuente más rica de ALA (57% de los ácidos grasos totales). La semilla de colza, la soja, el germen de trigo y las nueces contienen entre un 7% y un 13%
de
ALA.
Algunos
autores
consideran a las verduras como una buena fuente de ALA (por ejemplo, espinaca,
lechuga),
aunque
su
contenido graso es bastante bajo. La
Fuente: (Nutricion Hospitalaria, 2015)
Los
ácidos
grasos
omega-3
se
encuentran en algunos alimentos y también se pueden conseguir como suplemento
alimenticio.
Algunos
productos alimenticios (como leche, huevos, margarina, yogur y jugos)
están enriquecidos con ácidos grasos
obscuro y grasoso, tal como el
omega-3.
salmón, el atún, el arenque, la trucha, las sardinas o la caballa,
Los diferentes tipos de ácidos grasos omega-3 se clasifican de la siguiente manera:
por lo menos dos veces a la semana.
Los
ácidos
grasos
omega-3 también se encuentran
Aceite de pescado (EPA, DPA y DHA): EPA, DPA y DHA son tipos
disponibles
en
suplementos
dietéticos. (NAMS, sf)
de ácidos grasos omega-3 que se
Los
encuentran en pescados grasos
reducir la mortalidad cardiaca y
(como
en concreto la muerte súbita
salmón,
trucha,
atún,
beneficios
asociados
a
caballa [macarela] y sardinas), en
están
algunos tipos de mariscos y en
incorporación de EPA y DHA en
algas. Los suplementos dietéticos
los fosfolípidos de la membrana
de aceite de pescado pueden
de los cardiomiocitos. (Nutricion
contener uno solo de estos tipos
Hospitalaria, 2013)
relacionados
con
la
de grasa (como el DHA) o una
combinación de varios.
Se recomienda el consumo de
ALA: Este otro tipo de ácido graso
pescado dos veces por semana,
omega-3 se encuentra en las
equivalente aproximadamente a
nueces, las semillas de soya, el
400 a 500 mg de omegas-3s al
queso de soya (tofu), la linaza y
día. Los pacientes con una
algunos aceites (como los de
enfermedad
canola, soya y linaza). El ALA
consumir un aproximado diario de
viene también como suplemento
1 gramo.
dietético
en
pastillas.
(AHRQ,
2017)
La
Asociación
Cardiaca
cardiaca
deben
También
se
debe
precaución
con
el
tener
consumo,
aunque los omegas-3 parece ser
Americana recomienda que los
seguros en la mayoría de los
adultosconsumanpescado
adultos en dosis bajas a
moderadas.
Sin
suplementos pescado
embargo,
de
aceite
pueden
Los pescados grasos, ricos en ácidos
de
grasos poliinsaturados, además de excelente
fuente
gastrointestinal y las dosis altas
minerales,
se
pueden interactuar con algunos
alimento de referencia en las dietas
medicamentos,
cardiosaludables.
diluyentes
de
causar
los dolor
incluyendo la
sangre
arterial
alta.
Evite
el
consumo excesivo de omega-3s de origen marino, ya que dosis altas deben de ser tomadas solo bajo supervisión médica. (NAMS, sf) Se
debe
algunos
tomar peces
en
cuenta
pueden
que estar
contaminados con mercurio y otros químicos.
Comer
pescado
contaminado puede ser riesgoso para la salud para niños pequeños y mujeres embarazadas. Conclusión El
consumo
de
ácidos
grasos
poliinsaturados se relaciona con una disminución
del
enfermedades reduciendo
el
riesgo
de
cardiovasculares, riesgo
de
muerte
asociada a este tipo de patología.
proteínas
presentan
y
como
y
medicamentos utilizados para la presión
de
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