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Tratado de Brest-Litovsk Anna Emilia Galli Burgwardt, 1º E La Paz de Brest-Litovsk fue un tratado de paz firmado el 3 de marzo de 1918 en la ciudad bielorrusa de Brest-Litovsk (entonces bajo soberanía rusa, actual Brest) entre el Imperio alemán, Bulgaria, el Imperio austrohúngaro, el Imperio otomano y la Rusia soviética. En el tratado, Rusia renunciaba a Finlandia, Polonia, Estonia, Livonia, Curlandia, Lituania, Ucrania y Besarabia, que a partir de entonces quedaron bajo el dominio y la explotación económica de los Imperios Centrales. Asimismo, entregó Ardahan, Kars y Batumi al Imperio otomano. Con este tratado, Alemania reforzó el frente occidental con efectivos orientales.1 La derrota alemana en la Primera Guerra Mundial anuló el tratado, y todas las pérdidas rusas habían sido recuperadas para 1940. Solamente Finlandia y Turquía, sucesora del Imperio otomano, conservaron los territorios recibidos en Brest-Litovsk El Tratado Brest-Litovsk El 3 de marzo de 1918, Trotsky, representando a la RSFS de Rusia, firmó el tratado de paz, compuesto por 14 artículos, en Brest-Litovsk. El Tratado puede ser condensado de la siguiente manera: Artículo 1: Se declara el fin de la guerra. Artículo 2: Los poderes firmantes suspenderán la propaganda contra el otro bando. Artículo 3: Rusia renuncia a cualquier reclamación sobre los territorios al oeste de la línea de influencia trazada previamente. El futuro estatus de dichos territorios será determinado por Alemania y Austria-Hungría. Artículo 4: Alemania continuará ocupando territorios al este de la línea de influencia trazada hasta que Rusia no desmovilice sus tropas. Batum, Kars y Ardahan serán despejados de tropas rusas y cedidas al Imperio otomano. Artículo 5: Rusia debe limpiar sus aguas de barcos de guerra de las otras naciones aliadas. Rusia debe limpiar las aguas del Mar Báltico y Mar Negro de sus minas, e indicar las rutas de navegación seguras. Artículo 6: Rusia debe suspender la lucha contra la República Popular Ucraniana. Rusia debe desocupar Estonia y Livonia, que serán ocupadas por policías alemanes. Rusia debe devolver a todos los habitantes de estas regiones que fueron deportados o arrestados. Rusia debe desocupar Finlandia y las islas Åland, incluyendo sus puertos. Si el hielo no permite que los barcos rusos dejen los puertos, debe dejarse una tripulación mínima en los mismos. Las islas Åland no deben volver a ser fortificadas. Artículo 7: Rusia debe reconocer que Persia y Afganistán son estados libres e independientes. Artículo 8: Los prisioneros de guerra de ambos bandos deberán ser liberados y devueltos a sus naciones de origen. Artículo 9: Ambos bandos renuncian a reclamar indemnizaciones de guerra.


El Tratado fue ratificado el 15 de marzo. Después de firmar el Tratado, Trotsky criticó al Reino Unido y a Alemania por llevar a cabo una lucha para la división del mundo, no una guerra defensiva. También declaró: “Estamos llevando a nuestro pueblo fuera de una guerra en anticipación a la inminente hora esperada, cuando los pueblos oprimidos de todas las naciones tomarán el destino en sus manos, de la misma manera que los trabajadores de Rusia han hecho... Estamos aquí para notificar al mundo nuestra intención de retirarnos de la guerra... Al mismo tiempo, declaramos que las condiciones propuestas por los gobiernos de Alemania y el Imperio austrohúngaro son fundamentalmente inconsistentes con los intereses de todos los pueblos. Los trabajadores de todas las naciones rechazan estas condiciones, incluyendo a los de Alemania y Austria-Hungría.” Asumiendo la responsabilidad por la humillante paz, Trotsky renunció a su cargo de Comisario de Relaciones Exteriores poco después.


Comentario El origen de este tratado fue su creación para firmar la paz con los Imperios Centrales, en concreto con el Imperio Alemán, durante la Primera Guerra Mundial. Este tratado tenía como propósito la firma de la paz para que Rusia se mantuviera dentro de sus fronteras y sus revoluciones bolcheviques al igual que su expansión territorial no afectaran al resto de Europa. Tiene un alto valor histórico ya que es un tratado público y una fuente primaria, dado que se dictó durante la Primer Guerra Mundial. Como limitaciones del texto sobre el que se trabaja tenemos la única aportación de 9 artículos del documento total. Las circunstancias que provocaron la creación de este tratado fue la imparable expansión de Alemania hacia el territorio oriental. Al sufrir Rusia varias revoluciones, se veía en una postura vulnerable militarmente y políticamente. De esta manera, al no oponer resistencia al ejército alemán, éste avanzaba incansablemente hacia territorio ruso. Este tratado se firmó en Bielorrusa, que estaba bajo el mandato de Rusia. Los participantes en la firma del tratado fueron: el Imperio Otomano, el Imperio Alemán, la RSFS de Rusia, el reino de Bulgaria y el Imperio Austrohúngaro. Esta parte del tratado que analizamos consta de 9 artículos, una breve introducción y una cita de Trotsky tras la firma del tratado. Es un tratado en el que Rusia cede algunos de los territorios que se hallan bajo su mandato a cambio de que los imperios con los que firma no avancen hacia el territorio ruso y no les impliquen a ellos en la guerra. Mientras se firmaba la paz el Imperio Alemán reforzó su frente oriental, pero tras su derrota en la primera guerra mundial se anuló el tratado y se recuperaron todos los territorios hasta que el Ejército Rojo lo hiciera en la Gran Guerra Patriótica, hacia 1940, a excepción de Turquía y Finlandia. Como ideas principales del tratado podemos destacar la firma de la paz para acabar con la guerra con Rusia, asegurando así una paz y seguridad colectiva, aplicando unas condiciones hacia el país en cuestión. Los artículos 1 y 2 nos hablan del fin de la guerra y la aceptación del otro bando como vecino. Los artículos del 3 al 8 se centran en el tema de los territorios, pidiendo su liberación y repartiéndolos entre los imperios participantes en la firma del tratado. Pide la aceptación de los estados libres. De los artículos 6 al 8 nos habla más concretamente de la población que se ha mantenido prisionera durante la guerra pidiendo su liberación y la devolución a su estado de origen. El artículo 9 se refiere a cuestiones políticas, ya que nos habla de las indemnizaciones. El 3 de marzo de 1918, Trotsky, representando a la RSFS de Rusia firmó el tratado con sus respectivas condiciones. Este fue ratificado el 15 de marzo, dos semanas después de su firma en Berlín. El Tratado fue ratificado el 15 de marzo. Después de firmar el Tratado, Trotsky criticó al Reino Unido y a Alemania por llevar a cabo una lucha para la división del mundo, no una guerra defensiva. Declaración de Trotsky hacia Reino Unido y Alemania acusándoles de dividir el mundo: “Estamos llevando a nuestro pueblo fuera de una guerra en anticipación a la inminente hora esperada, cuando los pueblos oprimidos de todas las naciones tomarán el destino en sus manos, de la misma manera que los trabajadores de Rusia han hecho... Estamos aquí para notificar al mundo nuestra intención de retirarnos de la guerra... Al mismo tiempo, declaramos que las condiciones propuestas por los gobiernos de Alemania y el Imperio austrohúngaro son fundamentalmente inconsistentes con los intereses de todos los pueblos. Los trabajadores de todas las naciones rechazan estas condiciones, incluyendo a los de Alemania y Austria-Hungría.” Asumiendo la responsabilidad por la humillante paz, Trotsky renunció a su cargo de


Comisario de Relaciones Exteriores poco después. La RSFS conocida comúnmente como la Rusia Soviética, Rusia bolchevique o simplemente Rusia, fue la república más grande, más poblada y económicamente desarrollada de la antigua Unión Soviética. Fue dirigida por los bolcheviques, inmediatamente después de que el Gobierno Provisional Ruso, que dirigía la República rusa, fuera derrocado por la Revolución de Octubre. El gobierno no fue reconocido por los países vecinos durante cinco meses. Con la entrada de Rusia a la I Guerra Mundial, las condiciones de vida de gran parte de la población empeoraron drásticamente, generando las condiciones para nuevas revueltas que darían origen a la Revolución de febrero de 1917. Los bolcheviques, pese a ser una minoría política entre los partidos de la época, eran los únicos que defendían la salida de la guerra de manera intransigente. De esta manera se dio origen a la Revolución de Octubre de 1917, de inspiración bolchevique, y a la posterior toma del poder por parte de los soviets liderados por Lenin y Trotsyi, quienes crean el Partido Comunista donde fueron dados los primeros pasos para la formación de la URSS. Al final de la Primera Guerra Mundial, Bielorrusia fue invadida por los Imperios Centrales en dos ocasiones: en 1917 y en 1918. Trotsky creía en retrasar las negociaciones, esperando el ultimátum alemán, que sería rechazado. Este rechazo motivaría un levantamiento obrero en Alemania en contra de la guerra, pues Trotsky creía que los obreros alemanes rehusarían continuar una guerra sólo por ganancias territoriales en territorio ruso que no beneficiarían a las masas trabajadoras. En 1925 Trotsky escribiría: “Iniciamos las negociaciones de paz con la esperanza de que se alzasen los partidos obreros en Alemania y el Imperio austrohúngaro, así como en las naciones de la Triple Entente. Por este motivo fuimos obligados a retrasar las negociaciones lo más posible para que el obrero europeo tuviera tiempo para entender el principal objetivo de la Revolución soviética y, particularmente, su política de paz.” Trotsky rechazó las duras condiciones alemanas para la paz. Inmediatamente, los delegados alemanes le informaron que el armisticio finalizaría el 17 de febrero, respetando las condiciones de avisar al enemigo una semana antes y desde el día 18 las tropas germanas reiniciarían las hostilidades. Ante la inminente reapertura del frente ruso, Lenin indicó a Trotsky que el gobierno soviético había hecho suficiente para explicar a los obreros europeos la situación, y que era necesario firmar el tratado cuanto antes. Finalmente Trotsky quedó convencido de que el ejército del Imperio alemán era capaz de derrotar fácilmente al Ejército Rojo. En tanto las tropas germanas habían avanzado docenas de kilómetros a lo largo del frente y durante todo el día, sin hallar resistencia rusa, y ocupando casi sin lucha todos los territorios que pudieron abarcar. Esa misma noche el Comité Central Bolchevique reunido en San Petersburgo envió un telegrama a los alemanes aceptando las duras condiciones de paz. La respuesta alemana se demoró tres días, siendo recibida en San Petersburgo durante la noche del 20 de febrero. Como se esperaba, las condiciones para la paz propuestas por Alemania se habían endurecido al comprobarse que la Rusia bolchevique no podía ofrecer resistencia militar seria, pero aun así los miembros del Comité Bolchevique quedaron impactados por la severidad de las nuevas condiciones. Dos días después, el 22 de febrero, accedieron a firmar la paz. Informados de esta decisión, los alemanes aceptaron de nuevo cesar las hostilidades, pero sin retroceder sus tropas. El tratado quedó anulado tras la derrota alemana en la Primera Guerra Mundial, donde más tarde se recuperaron casi todos los territorios de Rusia perdidos durante este tratado. Los territorios se dividieron de la siguiente manera:


- El Imperio otomano recibía los distritos Batum, Kars y Ardahan. Dichos distritos habían sido administrados por el Imperio ruso desde el fin de la Guerra Ruso-Turca en 1878. - El Imperio Alemán recibía la administración de Polonia, la parte occidental de Bielorrusia, Curlandia y Lituania. Alemania ya había estado administrando Curlandia, Polonia y Lituania desde el comienzo de sus ofensivas en 1915. - Se declaró que Letonia (Livonia), Estonia y Finlandia (con las islas Åland) serían independientes. Esta independencia sería asegurada por Alemania y Austria-Hungría. - La República Popular Ucraniana fue reconocida por Rusia. Esta nación había sido proclamada en 1917 bajo auspicio alemán. La dependencia ucraniana de Alemania ya se había formalizado en un tratado el 9 de febrero de 1918. - En un segundo tratado firmado en Berlín el 27 de agosto del mismo año, se le sumó a Rusia el pago de una indemnización de guerra de 6 mil millones de marcos alemanes de la época a Alemania. De esta manera, el Imperio ruso perdía prácticamente el territorio donde vivía un tercio de su población de pre-guerra, un tercio de sus tierras cultivadas, y el 75% de sus zonas industriales.

Anna Emilia Galli Burgwardt, 1º E.


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