Plan Basura Cero

La economía circular es un nuevo modelo de producción y consumo que garantiza un crecimiento sostenible en el tiempo. Con esta se promueve la optimización de recursos, la reducción en el consumo de materias primas y el aprovechamiento de los residuos; ya que se reciclan con el fin de darles una nueva vida, para convertirlos en nuevos productos.

El Plan de Acción Basura Cero, hacía una Economía Circular presentado por el Gobierno de la Ciudad de México en mayo del 2022, consiste en la implementación de mecanismos orientados a reducir la cantidad de residuos que llegan a los rellenos sanitarios, mediante la promoción de una cultura social enfocada en la separación de residuos y correcta disposición en estaciones de transferencia, buscando incrementar la cantidad de desechos que por sus características, y con una correcta separación pueden ser valorizables con el fin de retornarlos a las cadenas de producción.

La Ciudad de México maneja aproximadamente 13 mil toneladas diarias de re- siduos, por lo que, a través de generar cambios en nuestros hábitos de consumo, fomentar la instalación de plantas de reciclaje, incrementar la producción de composta y dignificar la labor de las personas trabajadoras de limpia, se logrará disminuir la generación de residuos y maximizar su aprovechamiento.

Para ello, se han ejecutado diversas acciones para fomentar la separación diferenciada, que se describen en el énfasis de la entrega calendarizada y separación diferenciada de residuos con la ciudadanía, a través de los medios oficiales de comunicación.

Además se entregan más de mil lonas in- formativas que acompañan las rutas de recolección designadas por las alcaldías, en compañía de sesiones de capacitación y reconocimiento sobre la importancia de la separación con las personas trabajadoras de limpia de las 16 Alcaldías; a través de mesas de trabajo en el Comité Técnico Operativo para el manejo de los residuos, que involucra a las alcaldías y a otras dependencias para establecer estrategias en común.

Se busca realizar visitas informativas a establecimientos comerciales para reforzar la separación diferenciada desde la fuente, con distribución de material de difusión en espacios públicos de las Alcaldías, en transportes públicos y en medios oficiales.

La separación y entrega diferenciada de los residuos favorece su aprovechamiento y valorización, lo que deriva en la disminución de residuos que son enviados a rellenos sanitarios. Para fortalecer dichas actividades. Para esto se estableció una estrategia para su correcta recolección mediante la entrega calendarizada de los residuos al servicio público de limpia, conforme a días de recaudación.

La prohibición de bolsas y productos de plástico de un solo uso está dirigida a generar una política ambiental enfocada a la producción y el consumo sustentable de los productos dúctiles. Se busca sustituir aquellas utilidades de corta vida útil diseñados para ser de un solo uso y que por sus características son rápidamente desechados como residuos, por unos más durables en el medio que pueden ser reutilizados o en su caso aprovechados. Los productos de corta vida útil que son fabricados por necesidad o por una función específica deben elaborarse con materiales que permitan su fácil reintegración al medio, incidiendo de este modo en la prevención y reducción de la contaminación generada por estos al convertirse en residuos.

Por lo anterior debemos de tener en cuenta que nuestro estilo de vida es insostenible. Esto se debe a que el volumen de basura que generamos en nuestro día a día debería hacernos conscientes de ello. Por eso, debemos tomar acciones que contribuyan a minimizar la generación de residuos debe ser uno de nuestros principales retos. De esta idea surge el movimiento ‘Zero Waste’, o ‘Residuo Cero’ basado en la regla de las cinco erres de rechazar, reutilizar, reducir, reciclar y ‘rot’ (compostar).

Según datos de Naciones Unidas, cada año generamos cerca de 11mil millones de toneladas de residuos en el mundo. Este volumen tan elevado provoca que su gestión cada vez sea más compleja y que gran parte de ellos tengan un impacto negativo en la naturaleza; que va desde la contaminación del agua y el suelo hasta la emisión de gases contaminantes derivados de la desintegración de la basura, que suponen un aproximado del 5% en las emisiones mundiales de gases https://basuracero.cdmx.gob.mx/ de efecto invernadero, que actualmente es uno de los principales causantes del calentamiento global.

Esta situación es una consecuencia de la cultura actual de ‘usar y tirar’ que impera en nuestra sociedad desde hace décadas. El ser humano es el principal responsable de la degradación ambiental, pero en su mano también está el actuar para mitigar y revertir esta situación. Y es que con pequeños gestos podemos minimizar la cantidad de basura que generamos en nuestro día a día.

El Residuo Cero es la traducción al español del conocido movimiento internacional ‘Zero Waste’. Este concepto engloba las actuaciones encaminadas a la reducción y reutilización de objetos y productos presentes en nuestra vida cotidiana para evitar que acaben impactando negativamente en la naturaleza. Esto se debe a que se basa en una regla conocida como las cinco erres, en donde se busca rechazar todo aquello que no necesitamos; este es uno de los pasos más importantes para adoptar esta forma de vida. Para cumplir con lo anterior es importante hacernos cuestiones como si realmente lo necesitamos o si podemos sustituirlo por algo que ya tengamos; Esto nos ayudará a determinar qué objetos o productos no son esenciales para https://oncenoticias.digital/tramites-y-servicios/en-que-consiste-el-plande-accion-basura-cero-que-se-aplica-en-cdmx/169485/ Lo anterior va de la mano con la reforma al Artículo 25 fracción XI Bis de la Ley de Residuos Sólidos del Distrito Federal publicada el 25 de junio de 2019, a partir de 2020, se prohíbe la comercialización, distribución y entrega al consumidor en los puntos de venta de bienes o servicios de bolsas de plástico, así como de productos plásticos de un solo uso, a partir del 1° de enero de 2021. cos de un solo uso compostables, ya que cuentan con autorización y registro para comercializar bolsas y productos plásticos de un solo uso en la CDMX.

Cuando reducimos lo que necesitamos, nos percatamos de que hay muchas cosas que utilizamos en nuestro día a día de las que podemos prescindir. Solo con reflexionar y adoptar un consumo más responsable bajo esta premisa ya estaremos aportando nuestro granito de arena en la protección de la naturaleza. De igual manera cuando reutilizamos se nos permite darle una segunda vida a los productos y materiales, también con el reciclaje podemos tener una alternativa para cuando no podemos reducir ni reutilizar. Por otra parte el Rot (o compostaje); es el proceso de descomposición natural de los residuos orgánicos. Esto puede servir como nutriente para cultivos. Ya que se trata de un abono limpio y respetuoso con el medio ambiente.

Bajo estos principios básicos se desarrolla esta filosofía que va más allá de reducir basura; ya que consiste en adoptar una forma de vida en la que el cuidado y protección de la naturaleza sea la principal prioridad. Además, y como parte de este movimiento, se busca concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de proteger y preservar la salud de los ecosistemas. Porque todas nuestras acciones tienen, en mayor o menor medida, un impacto en el medio ambiente y es nuestro deber actuar para que este sea el menor posible.

Como parte de la estrategia para la reducción en la generación de residuos en la Ciudad de México, el 1° de enero del 2022 entró en vigor la prohibición para comercializar, distribuir y entregar bolsas de plástico.

Por su parte la reforma realizada al Reglamento de la Ley de Residuos Sólidos del Distrito Federal indica las excepciones para el uso de productos plásticos de un solo uso. Para este movimiento las distintas alcaldías creen necesario asumir el reto que representa disminuir la entrega y consumo de este tipo de productos, por ello, se exhorta a la ciudadanía a ser partícipes del cambio, prefiriendo la utilización de bolsas y productos reutilizables, así como denunciar a los establecimientos que incumplan con la Ley y su Reglamento.

Las sanciones establecidas para quienes no cumplan con lo dispuesto en la Ley de Residuos Sólidos del Distrito Federal podrán ser objeto de amonestaciones, multas o arresto. Para prevenir lo anterior, existen en el mercado proveedores que cumplen con lo establecido en la Ley y los criterios para productos plásti-

Los únicos productos permitidos serán los que cumplan con la característica de compostabilidad y cuyos productores se encuentren registrados ante esta Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México que cuenten con su Plan de Manejo y la certificación de abono; En virtud de lo anterior es importante reiterar que actualmente ya se tiene registro y autorización de algunos productos plástico compostables en la Ciudad de México, por lo que, se le invita a consultar el Listado de Empresas Registradas.

El objetivo de la economía circular es, por tanto, aprovechar al máximo los recursos materiales de los que disponemos, alargando el ciclo de vida de los productos; por lo anterior el gobierno federal se encarga de realizar programas que contribuyan al cuidado ambiental .

La comercialización, distribución y entrega de bolsas de plástico de un solo uso como tenedores, cuchillos, cucharas, palitos mezcladores, platos, popotes o pajitas, bastoncillos para hisopos de algodón, globos y varillas para globos, vasos y sus tapas, charolas para transportar alimentos, aplicadores de tampones, fabricados total o parcialmente de plásticos, diseñados para su desecho después de un solo uso, excepto los que sean compostables. La comercialización, distribución y entrega de productos que contengan micro-plástico añadido intencionalmente; al igual que las cápsulas de café de un solo uso fabricadas con materiales plásticos de bajo potencial de aprovechamiento.

La implementación de las políticas públicas es un proceso que lleva tiempo y deben ser evaluadas constantemente. Por este motivo se ha iniciado un proceso gradual con los productos enlistados en la Ley de Residuos Sólidos. Por otro lado, cuando se entiende el espíritu de la prohibición que implica dejar de usar productos innecesarios para reducir el impacto ambiental, el propio consumidor puede transitar a mecanismos más sostenible de consumo, privilegiando el reúso sobre lo desechable.

Cuanto más se reutiliza cualquier producto, menor es el impacto ambiental que este genera. Cuando los consumidores no pueden evitar los plásticos desechables, deben mitigar su impacto ambiental reutilizándolos.