Rincones Carmen IbĂĄĂąez sandin
Rincones Son conocidos como enfoques metodológicos.
La organización de las clases por "rincones" es una propuesta metodológica que hace posible la participación activa de los niños/as en la construcción de sus conocimientos.
¿Qué son los rincones según Carmen Ibáñez? Los rincones son espacios organizados dentro del aula, que tienen que ser polivalentes y basados en el trabajo autónomo que el propio niño/a gestiona y organiza.”. Se realizan en espacios delimitados donde los niños/as desarrollan actividades lúdicas, realiza pequeñas investigaciones y establecen relaciones interactivas entre iguales y con los adultos. el trabajo o juego por rincones permite realizar actividades que permitirán conseguir objetivos a corto, medio o largo plazo, todo dependerá del tipo de juegos o actividades que en ellos se realicen
Objetivos generales Propiciar el desarrollo global del niño/a Facilitar la actividad mental, la planificación personal y la toma de iniciativas Posibilitar aprendizajes significativos Desarrollar su creatividad e investigación Realizar actividades y que el niño/a las perciba como útiles Facilitar la comunicación de pequeño grupo, entre compañeros e individual Potenciar el lenguaje oral y lógico en los niños/as, tanto en la comunicación como en la verbalización de la actividad
Construir y asumir su realidad personal
Potenciar el movimiento de los niños/as
Descubrir y utilizar equilibradamente sus posibilidades motrices, sensitivas y expresivas
Sentir una escuela viva y cercana
Cubrir sus necesidades de juego, actividad, egocentrismo, etc.
Expresar y comunicar con todas las formas de representación a su alcance Adquirir hábitos y normas de comportamiento en el grupo y de control de sus emociones, sentimientos
Organización de los rincones No existe una organización por rincones que se pueda considerar modélica o ideal, cada docente ha de buscar la más adecuada para las características de su grupo y sus condiciones materiales concretas.
Por tanto deben….. Adecuarse a nuestros planteamientos metodológicos a fin de favorecer y potenciar una metodología basada en estrategias de investigación Que permitan todo tipo de relaciones en estrategias de investigación Que ofrezca varias alternativas de trabajo (libre, guiada y acompañada) Que se cumplan una serie de normas discutidas y asumidas por todos
Debe tenerse en cuenta los intereses y motivaciones de los alumno a la hora de organizar estos espacios. Así, el trabajo por rincones requiere:
Preparar el espacio y el material de cada rincón Diseñar las actividades y las técnicas propias de los mismos Establecer normas básicas Orientar y ayudar a los niños/as en el desenvolvimiento autónomo Estimularles para que pasen por todos los rincones y sientan disfrute en los mismo
Formas de trabajar rincones Emplearse sólo en determinados momentos de la jornada escolar o durante la mayor parte del tiempo Tener un carácter más permanente o más transitorio Concederle una dimensión individual o grupal
Los rincones pueden ser
Fijos y permanentes (durante todo el curso) Variables (cambian según el centro de Interés a tratar)
¿Cómo podemos organizar los rincones?
La elección de un rincón u otro debe ir en función de la edad de nuestros alumnos y del espacio del que dispongamos. Los rincones deben permitir la observación, manipulación, exploración, juegos, etc. Conociendo que los rincones no son exactos, todos deben trabajar los diferentes ámbitos, y para ello la mayoria de los maestros de preescolar se basan en rincones centrados. - Rincón de la Lógica-Matemática - Rincón de las letras - Rincón de la Plástica - Rincón del Ordenador - Rincón de Música
Rincones más frecuentes en las aulas preescolares Rincón del Corcho: Este rincón se considera un rincón de movimiento, así que estará situado al final de la clase. En él podemos encontrar materiales diversos, como cojines para que los niños/as se sienten en ellos y materiales de construcción, coches e instrumentos musicales. En este espacio se realizará las RUTINAS correspondientes, como cantar la canción de buenos días, pasar lista, enseñar materiales… Además se contarán cuentos, se realizarán las dramatizaciones, se jugarán con las construcciones, coches… Rincón del juego simbólico: También de movimiento, así que lo ubicaremos al lado del anterior, es decir, al final de la clase y pegado a la ventana. Dispondrá de todo el material adecuado a la casita, como mesa de camilla, sillas, cuadros, florero, escobón, recogedor,… y a la cocinita, como son platos, cajas de ingredientes, hornilla, cacerolas, etc.
• Rincón de plástica: Pegado a la ventana, normalmente, para que reciba la máxima claridad posible. Se considera un rincón entre movimiento y reposo. Dispondrá de todos los materiales que pueden usarse para la realización de obras plásticas, como pueden ser, distintos tipos de papel, tijeras, pinceles, cepillos de dientes, pinturas, plastilinas, etc., en definitiva toda herramienta, soporte y materiales de entorno con los que podamos expresarnos creativamente. • Rincón lógico: Se considera como un rincón más tranquilo. Este espacio, contará con todos los materiales que inicien y potencien las nociones lógicas. • Rincón de las letras: Considerado rincón de reposo, tranquilo, se colocará separado de los de movimiento continuo como son juego simbólico y corcho.
• Rincón del ordenador: Encontramos allí un ordenador, con su torre, ratón e impresora correspondiente Rincón de la naturaleza: En este rincón, encontraremos materiales de naturaleza. Nos ayudará a cuidar nuestro entorno, conocerlo y mantenerlo vivo. • Rincón de la pizarra: Este rincón se encontrará donde esté la pizarra. En él los niños/as podrán escribir en ella, algo que a todos les gusta y les llama mucho la atención.
Evaluación de los rincones Es más importante que el resultado final, es el proceso que sigue el niño/a. La mejor técnica para evaluar los rincones, es la observación directa y sistemática por parte del maestro/a, mientras los alumnos/as están en los diferentes rincones. Nuestro papel en la observación es fundamenta, pues con ella se guía y se sustenta todo el proceso de aprendizaje. Es la educadora debe ayudar a avanzar en su desarrollo, a construir sus propios aprendizajes y a participar e intervenir en la mejora del aula. Estar consientes de qué vamos a evaluar y por qué y hasta qué punto se están consiguiendo los objetivos propuestos. Todas estas observaciones pueden ser anotadas en diarios de clases, registros anecdotarios etc.
En primer lugar: el funcionamiento de la clase, aspectos generales como la organización espacial (si los rincones son adecuados, su distribución,…), la idoneidad para la actividad o juego que se realiza, el uso de los materiales y el equilibrio de estos en cada rincón, tipos de materiales, adecuación a las edades, etc., la actuación de la persona adulta, la planificación, su intervención en el juego, etc. En segundo lugar: el proceso de aprendizaje-desarrollo de cada alumno/a: la interacción, el juego, el grado de autonomía, el apego, la autoestima. Se debe anotar si el niño participa de forma activa, si comienza la actividad por iniciativa propia, si juega solo o con compañeros, si es capaz de mantener la atención durante todo el espacio de tiempo del que dispone, si demuestra placer al realizar la actividad, etc.
También es importante evaluar por separado…
Qué procesos cognitivos se generan en los niños/as, que conductas se desarrollan en cada rincón, qué tipo de relaciones tienen lugar, el tipo de material, etc. Para poder ver, después de un determinado periodo, si los alumnos/as han consolidado los diferentes contenidos y si el rincón ha funcionado adecuadamente, hay que realizar alguna actividad de evaluación que nos indique cuáles son los resultados.
Es necesario partir de una reflexión
Sobre qué pretendemos conseguir con los rincones y ver esta organización metodológica como una mejora de nuestra práctica docente, poniendo así en práctica una estrategia de reflexión- acción.
Gracias a esta forma de organizar el espacio, los niños/as actúan de forma más activa, interactúan más con todos los compañeros, se integran en el aula de forma más rápida y comprometida. A través de los rincones los alumnos/as se sienten protagonistas de sus propios aprendizajes y son capaces de adquirir autonomía, valores fundamentales para la vida, en definitiva, ayuda a que los niños/as se sientan felices en el colegio y tengan ganas de seguir aprendiendo.