Bajo escaleras del Palacio del Congreso de la Nación Argentina Ezequiel Nahas, Javier Vitali Mayor y Mariana Stefanolo El objetivo de participar en estas jornadas es dejar constancia del trabajo realizado, del espacio, del contexto, para posibilitar futuros trabajos de arquitectos, investigadores, historiadores, museólogos, arqueólogos, restauradores, trabajadores del Palacio del Congreso de la Nación en general, y de todo aquel interesado. Frente a la necesidad de realizar estudios del conjunto estructural de la explanada, se accedió al sector bajo las escalinatas principales del Palacio del Congreso de la Nación, durante el mes de julio de 2018, realizando limpieza de escombros que resultaron en objetos de valor patrimonial cultural. Teniendo en cuenta que es un espacio de acceso limitado, tanto por el espacio reducido como por los devenires de una casa política, se tomó la decisión de tomar muestras de suelo, muros, y extraer todo el material posible en cuantos materiales pesados se tratara (baldosas, mármoles, 38
ya que de todas formas la limpieza se debía realizar). Se tomaron fotografías de todo el proceso; además se trabajó brevemente en la investigación de la construcción apelando a fuentes históricas como planos y fotografías. Se contó con la colaboración de 14 personas, en diferentes etapas del trabajo. En el espacio inmediatamente contiguo al Pasaje de Carruajes sobre Planta Baja (nivel vereda), se encuentran habitaciones originalmente planificadas para albergar al Servicio de Bomberos (según proyección original del arquitecto Vittorio Meano). Las ubicadas en los extremos que funcionan como base de las esculturas de la artista Lola Mora, son las que se conectan al sector en cuestión. El espacio al que se accedió está formado por una construcción de muros realizados con ladrillos macizos. Estos muros están colocados en forma paralela entre ellos, cada uno con una abertura abocinada con un arco escarzano. Durante las tareas de limpieza se observaron materiales
originales de la construcción del Palacio, como perfiles de hierro, ladrillos y soportes de madera. El sedimento en todo el sector se divide en compuestos orgánicos e inorgánicos. Se recuperaron más de 700 piezas de diferentes momentos históricos, entre ellas material óseo, fragmentos de pipa de caolín, vidrio (de bebidas, tintero, perfumero), mármol, metal, baldosas de gres cerámico (el personal especializado en “solados” pudo identificar uno de los diseños colocado en un pequeño espacio del Palacio). Algunos diseños cerámicos pertenecen a la fábrica Villeroy & Boch. Aún no tenemos certeza de los hechos que devinieron al colocar ese compuesto allí, de dónde proviene, fecha de su colocación, etc.; pero consideramos que un estudio más exhaustivo y abarcativo podría otorgar Información valiosa para la historia de la sociedad porteña, de la construcción del Palacio del Congreso, de la urbanización de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, de la construcción en general.