Nยบ 1 ENERO-FEBRERO 2007
De nuevo, “El fogaril” Desde la Asociación Museo “Casa Paco” y la Fundación Vicente Turmo “Pallasón” de Graus, en queríu torná a editá esta revista que fá unos años van posá en marcha dos güenos grausinos: Luis Aguilar (Luisón de Fierro) y Baudilio Colomina (Baldirón del Rac). Bienveníus a esta nueva edición, donde tendrán cabida numerosos temas relativos a nuestro llugá. Desde su historia, hasta las costumbres y tradicións, la recuperación d’escritos de grausinos de fácil plluma, historias sobre los personajes populares qu’an fecho de Graus una gran villa, y tamé, nuevos textos en nuestra llengua, dánla a conocé y a entendé. Este chicot llibré se ferá bimensualmente y podrá sé recogíu en el Museo Casa Paco de forma gratuita. Esperán que sea de su agrado, Asociación “Museo Casa Paco”
DEPÓSITO LEGAL: HU.278/1.996 REEDICIÓN: MUSEO “CASA PACO”
Contán cuentos La lechera Y cuan ya s’en iba su tio, le va dí la moceta: “Compre-me una craba pa yo, que me’n iré a vendé la leche a Graus”. Y su tio la va í a comprá el día que se’n iba. Y como la moceta heba dicho en casa: “Me’n iré a vendé la leche a Graus”, van pensá su pare y su abuelo: “La de to las crabas podría í a vendé esta zagala; mos tocarían buenos dinés”. Y la moceta va dí entonces: “Y a yo qué me darán de llevá-la?-Como tiens una craba, te darém pa tú lo que saques un día de la semana” Y ella se va fé mui contenta, y en va í traen mucho tiempo, y con lo que le tocaba de cada semana, se va comprá un pañuelo de sarja y un apretadó, y va pensá ella: “Ora, ya tiengo prou ropa, y con lo que’n saque hoy de la leche, que’n faré? Me’n iré a Puicremá, que tienen muchas gallinas y me’n compraré una; le posaré veintitrés huegos y me sacará lo menos veinte pollos; las pollas, me las dixaré en casa pa que posen y me’n venderé los huegos; los pollos, me los venderé en Graus el día de la fiesta, que los pagan milló que en to’l año, y me guardaré los dinés hasta que me pueda comprá una vaca, y la vaca me parirá un novillo, y con lo que me’n saque del novillo, de los huegos y de los pollos de l’otro año que posaré tres o cuatro lloradas, yo me compraré un campo, y la vaca ñ’habrá paríu otro novillo, y los huegos y la leche que haiga vendíu, ya seré la más rica de toz estos llugás, y entonces ixe Ramonón de la Terrazuela que é tan presumíu, ya n me llamará Mariona, sino que me dirá: “Marieta, te quiés casá con yo?. Y yo le diré: “Ora viens con estas?. No, haber veníu antes,; ora, porque soi rica, me llamas Marieta, antes siempre me llamabas Mariona; yo me quiero casá mui a gusto, me’n quiero í el día de San Miguel a la feria, y pa ixo, me posaré ben maja, que aquel día acuden a Graus to los millós mozos que ñ’hai al rededó y me triaré al más guapo que veiga”. Y al dí esto, entrepuza en una pedra; se le cai el cantre y se le va fé a peazos y adiós ilusiones. Contau per Damaso Carrera a Jean Joseph Saroïhandy (1.867-1.932), l’año 1896 en Graus. Saroïhandy va sé el primer llingüista que va estudiá el charrá de Graus, entre atros llugás de la baixa Ribagorza. Dimpués va seguín estudián l’aragonés de las vals d’Anso, Echo, Chistau y Benás. Conchi Girón
Inolvidables grausinos: Paco Castillón Cuan empezo a escribí estas líneas se cumplen, exactamente, 24 años de la muerte de mi pare, Paco Castillón. No é fácil trazá un perfil d’alguien tan cercano y tan presente en la memoria sin caé en la llisonja gratuita, pero sí prou afalagadó. Ya sabez que va nacé en Casa Paco y eba fillo de Tomás Castillón Jarque, aquel que, sen alcalde de Graus, va espientá pa que se podese fé el monumento a Costa y el colegio del mismo nombre. La llocura de la Guerra Civil se lo’n va llevá por debán de forma oprobiosa. Paco Castillón va sé un excelente pastelero. Él concebiba su profesión como un arte y yo me’n acordo de las rabietas de mi madre, Aurelia Mariñosa, pa que s’adaptase a un horario de trabajo normal. Su impenitente bohemia feba que traballase sólo cuan le bufaba la inspiración. Aún con tó, cuan teniba encargos de postín, eba un verdadero artista y un gran profesional. Él siempre diba que le hubiese gustáu sé escritó. Y mos va da fe d’ello dejanmos una ripa d’escritos en forma de diarios, cuadernos y papels sueltos, on contemplaba la realidá teñida d’un lirismo nostálgico. Va sé, amás, corresponsal de la “Nueva España” de Huesca muchos años (hoy Alto Aragón), envián peculiares crónicas sobre temas culturals ribagorzanos. Pero sobre tó, lo que más ilusión le feba eba prepará sus colaboracións anuals, en grausino, en su Llibré. Aún lo veigo en el obradó de Casa Paco tecleán en su Olivetti y dinme: - Anda, zagal, repasa esto, a vé que te paece. Y yo, cllaro, p’afalagalo le contestaba: - Prou ben, Frank, pos ya lo sabes. Y él, con su sonrisa picarona, asentiba satisfecho. Su devoción po la lectura, especialmente novelas policiacas y poesía, va contribuí a que fese, pese a no tení más que estudios elementales, con una notable cultura. Conoceba a sabelo las cosas de su Graus: tradicións, folklore, historia,… De su personalidá, abierta, tolerante y algo ácrata, me quedo por su pasión por la vida. Mi padre nunca va se viejo. A to le sacaba chugo: música, libros, tertulias, gastronomía y el maldito tabaco eban el norte de su vida.
Ñabría que recordá, tamé, su total disposición a colaborá en iniciativas culturals: - Paco, ¿verdá que mos escribirás unas albadas pa decorá la Bullanga? Necesitán un escrito pa’l cartel de la Mojiganga, sr. Castillón- le diban. Y él tan ufano de podeles aduyá. Paco Castillón (Frank pa los íntimos) fallecería a los 74 años víctima de su impenitente tabaquismo. Toz los años, pa la Fiesta, la noche de las Albadas, los grausinos lo recordán con ésta que yo mismo va escribí: Paco Castillón, grausino, te tenín en la memoria. Los fillos de Graus sabén, que Dios te tiene en la gloria. ¡Qué difícil é decribí la emoción que siento cuan la canto cada año en su memoria! Tomás Castillón
Deseos i pensamientos de Costa ¡Que m’enterren en las Forcas, en la peñeta de San Sebastián! En Graus, a 20 de enero de 1.911 Costa se miraba, d’en del balcón del despacho, el mazizo de las Forcas, deseán de pensamiento i tamé de su pallabra, querí sé enterráu en ixe sitio. Como si d’endallí podé beyé i contempllá, a los pies de su tumba, la conflluenzia de los ríos Ésera e Isábena. All’igual que la gran parte de las dos riberas i el triángulo de las tierras, d’ende la sierra Güel, anda el morrón d’Aguilá, i como final, como vértize, one se unen los dos ríos. Costa beyeba i s’imajinaba el monte del menzionáu triángulo de las tierras, dende Santaliestra, Besians, Perarruga, Torrobato, Torrodésera, La Pueblla Fantoba, Bellestá, Benabén, Torrlabá, El Solé parte de Güel, Llagüarres, Poziello, Capella, Graus, i algunos otros, como empapadas las tierras, dán riqueza i llenán las dispensas de tó ixa comarca. Así eba el pensamiento de Costa al contempllá el paso de ixos ríos d’end’allí, majestuosos, sin orgullo, contentos i sasti’echos de una misión conpllida, i fen la misma fayena tirán en t’adeban.
Vista de los ríos dende la peñeta las Forcas
Costa s’ancongojaba al bellelos pasá allegres i fen bulla, paezén que sólo teniban ganas de chugá i, pensaba i estaba en to lo azertáu, que en un día no mui llejano, l’agua sería el ben más preziau que tendría l’umanidá, y diba: “Cuan quieraz aprobechala, ya no nabrá remedio de tan escasa q’estará”. Por ixos motibos, y otros tamé prou fundamentáls, eba ellegíu como su última boluntá, sé enterráu en las Forcas, en la peñeta San Sebastián.
¿Qué no sabez one está la peñeta de San Sebastián? Miratos d’ende Graus ixe mazizo de las Forcas. A la metá de llargo i a la metá de alto, ñai una peñeta suelta i al láu, otra en forma de llabadera, que d’inpués d’unos meses al ubago, n’el inbierno, el día 20 de enero, el sol ampeza a tocale una rayadeta, u sea, cuan el día s’allarga una ora. Ixo se miraba Costa, l’último 20 de enero de 1.911, l’último gran día de su vida, pos desiaba, que tó la chen, cuan el día s’allarga, conprendese que toz tienen la ublligación de esbellugá. “Que se muevan la chen con bando, que la pereza se quede n’el cuarto uscuro, que s’arrincone tamé l’indiferenzia que sólo sirbe p’a fe entrepuzá al progreso i la llibertá”. “Fe las cosas con respeto i balentía. Que no se meta por debán al fanatismo. Yo, por esperienzia, ne salíu ben escarmentáu y escozíu to la vida”. “Este 20 d’enero de 1.911, me despido de pallabra, porque escribí ya no puedo. Tomazlo como ejempllo, no pierdaz los ánimos, que toz pensen que cada año ñai la upurtunidá, n’este día que s’allarga i cada año torna ampezá”. “Que los indecisos s’acorden, un que sólo seiga de pensamiento, pos el deseyo d’este grausino, que siempre estará con éstas tierras i en estos ríos, como s’istase presente en las Forcas … en la peñeta San Sebastián”.
Monumento a Joaquín Costa
Nota: Estos pensamientos fueron transmitidos a D. Vicente Cereza, que escuchando sus sabias palabras recibió su fruto. Cuatro de sus hijos fueron maestros de primera enseñanza, D. Vicente, D. Enrique, Dña. Mª Cruz y Dña. Resurrección. Luisón de Fierro
La Polka Eba allá p’o los años 1.876. Los tradizionáls danzes sólo eban el baile d’espadas i palitroques, al son de la gaita o dulzaina, con las bariantes que toz conozén. La cuaderna del medio llebaba ropa de mullé con sayas. Ixe atabío eba prou diferente cada año, anda que a primeros del s. XX, en 1.907, s’acopllan los cllásicos volantes a los que bailan de mullé, i trajes estilo cordobés p’a los ombres. To ixo feba un contraste un poco extraño, que dura sobre 30 años. Sobre l’año 1.876 sale el primer pobllema con la bestimenta. Un familiá del que teniba un café en la calle Benasque, intenta entroduzí un nuebo tipo de baile ya conozíu en la parte norte d’España, debíu a la inflluenzia que ban llegán d’Europa. Son las cintas, con las bariantes más u menos que ñai. Tenín astí, enprenzipio, los pobllemas. La mosica é de dos partes, una a tiempo de Polka, i cuan se cambia de movimiento, é a tiempo de Mazurca. Siempre é el mismo motibo mosical, sólo se cambia en el sentido de baile, pos ban asoziáus Polka i Mazurca. Segundes el pariente del zaragozano, aconsejaba bailasen en parrejas, u sea, zagala i zagal. La idea eba prou güena, asinas sería el danze más conplleto. Pero la partezipazión de zagalas ba-sé nula. Los que bailaban las espadas con sayas non quieren sabé cosa. Se-vá pensá en los crios de las escuelas, pero tampoco ñai acuerdo. Las fiestas y’astaban anzima, pos ya pensaban dixalo pa otra ocasión, ya que tol llugá estaba illusionáu con ixa nobedá. Pero como la casolidá siempre llega sin pensá, ixe año ñai en la cuaderna el medio cuatro zagals chobenastros, toz de Graus, apenas quinze años, metro i medio d’estatura, fllacas garras, lligeros i ben formados, cara llisa, mui apropiáu pa fé de damiselas al nuebo baile. Se ensaya con rapidez, el primer día la fiesta. La pllaza, retabláus i balcons rebutíus de chen. Toz queriban bé el baile nuebo. Anda Furtaperas estaba atento i nerbioso, pos las candeletas d’ixe día nunca ban se igualadas. La parte mosical ba-sé to a tiempo de Polka. Nunca s’an probáu a felo como diba ixe pariente del zaragozano, que dimpués de 130 años, se sigue tocán i bailán de la misma manera. P’al primer año, 1.876, como estreno i ensayo, se fá la prueba con las famosas trompas de Arén, qu’estaba de moda pa ixos menesteres. Ban vení dos u tres años más.
Así nos lo contaba nuestro abuelo, que fue bailador ese año, siguiendo con los otros amigos cuatro años más. A la mencionada cuaderna se le puso el sobre nombre de la cuaderna de San Vicente. Vicente Aguilar: Casa Moréns. Vicente Aventín: Casa Viroleta. Vicente Aguilar: Casa Fierro. Silverio Bescós: Casa Bastero.
Nuestro abuelo nos lo contó muchas veces, sintiendo en su interior una gran satisfacción, como un deber cumplido. Polka: Danza bohemia polaca difundida en el siglo XIX. De compás binario y movimiento rápido, se asocia con modalidad de Mazurca que tiene un compás ternario de 3/4 y 3/8. Muy popular en su conjunto con el sobrenombre Polka-Mazurca. Se quedan como tradicionales adaptándose en motivos folclóricos en buena parte de Europa. Según el motivo de la danza, se entrelazan y se alternan como Mazurca-Galop, según nacionalidades, respetando siempre el tema musical de la misma melodía en sus respectivos motivos. Luisón de Fierro
Enchugaldríu A Santos Pa este chuego s’utilizan cromos u cajas de mistos. Se fá una marca de forma horizontal en una paré a aproximadamente un metro d’altura. Pegáu ta la paré se posa un cromo y se deja caé calculán que sea sobre los otros cromos tiráus anteriormente. La finalidá d’este chuego é conseguí, en cada tirada, que los cromos o las cajas de mistos monten sobre los qu’están depositáus n’el suelo, y así, quedase en posesión d’ellos. Pa la realización del mismo no existe un límite n’el número de chugadós. ¿Ton acordaz de cuan chugaban a Santos en la paré de Casa Capucho de la pllaza? Éste é un güen recuerdo pa toz los que ahora teniz 50 ó 60 años.
Cocinán con “El fogaril” Chiretas
Cosas qu’emplleaz: -tripa de cordero -arroz -falda de cordero -carne magra -panceta -sal, pimenta, ajo, perejil y mioja de pan -si queriz, pimentón dulce u colorante Primero se corta la tripa del cordero que se bá a utilizá pa luego rellenala. Se cortan las carnes (carne magra, panceta y falda de cordero), las cuales se sazonan con sal y pimenta. De forma opcional puede ponese pimentón u colorante dependén del coló que se quiera. Dinpués, le ponén a to ésto la mioja de pan, el ajo y el perejil, qu’antes en troceáu. Dependén del número de chiretas que se quieran fé, se calcula un puñáu d’arroz por cada una d’ellas, y se rechiran toz los ingredientes. Luego, estendén los piazos de tripa, los rellenán de la masa y los cusín. Una vez cusidas se fán cocé, pa que puedan comese recién hervidas u rebozadas.
Entre un rezo y una albada… San Vicente, q’cuán a Graus sen veniba, -demostrán así querimosmos va dixá como prenda aq’llo q’ más queriba. Cuán saliba’predicá, de Graus feba Villa i Corte venínsene a descansá. I tantas pruebas va dá, de querílo de verdá, q’vá dixá complacíu la Imagen del Santo Cristo pó séle lo más queríu. Desde entonces, a llovíu i també a féi serenera; unos años sá cogíu i otros sán tocáu la pera. I en tó tiempo, San Vicente a tóz ayuda y consóla; a los buenos i a los malos las penas les acotóla. I recordán de zagáls, cuán el cielo se nubliaba vé’n el esconxuradó, q’está encima la Capilla i pareceba un miradó, portián velas encendidas a los llabradós rezá, i entre ixopo i oracións están yá relampaguián; cuán la tormenta bramaba i pó San Pedro asomaba subí aprisa el Santo Cristo pá parála i esfurriála; i nunca sá pedragaba. I como una letanía, así lo dín a porfía: si tiéns ganas de pllorá, al Santo Cristo a pará.
Si tiéns tamé una’llegría, yacude allí a compartíla. Si las penas son del alma, -entre una rezo i una albadaseguro q’ te las calma. No sén sabe de neguno, q’en un momento apuráu, -siempre que no sea un tunonol aiga solucionáu. I si le pides dinés, no te tiéns q’molestá: no e banquero ni burgués. I en tocante a las mullés, agarradas al Mantillo pllorán pensán en el mes q’a examináse el fillo. Cuán el rogá las apura lo fán pensán en la filla, i espiazan el corazón pedín no les salga furra. Pero no está tó perdíu en lo tocante a la fé, resumíu en esta coplia q’no se puede perdé. “Como quiés contimparár un charquín, con una fuente. Sale el sol, se seca el charco y la fuente premanece”. E la jota de Retana q’ cantaba el Orfeón, -de ixo ya fá muchos añoscon entrega y devoción, i eba como una campana resonán en tó Aragón. Eba pa Graus ixa fuente, -i pensán q’ sigue sénun venero permanente. Maceta de albahaca fina Q’ ni en verano ni invierno se chela ni se sucarra, plantél de gracia divina.
Graus, la Villa del apóstol, le rinde su devoción i en la bendita Capilla le ofrenda su corazón. (Tiempos de la “Cardellina”, de las fuertes emocións, de ñedos de’ngolondrina, de albadas y tradicións). Habliá en Graus, del Santo Cristo i San Vicente Ferré, é, como dí q’ sa visto a Dios por un foradé. A cuantos fillos de Graus, -sin preguntáles don vienen de la Nora’Riazuelo han concedíu lo q’ quieren. Entre un rezo i una Albada le pedín a San Vicente mos guarde la Villa amada.
Francisco Castillón Texto del Llibré de 1.977
Grausinos de ayer: “Juanón” Evan otros, ninos, aquellos. Tiempos en que aun correban los carruajes, que llamaban diligencias, tiráus por caballos de sangre. En uno de ixos trastes, que fevan el servicio de Graus-Barbastro, veniba un antepasáu de casa Rancapinos que feva años no eva estáu en Graus. Al llegá al Puente de Abaixio y vé la Virgen de la Peña con las sillueta de la Peña del Morral (que paece que tenise instinto maternal al acogemos a toz y tenimos reuníus y ven abeníus en un regazo de pedra), se le va desfreixolá el corazón por la emoción de torná a vé lo suyo, y la pena mezcllada de allegría e feban baixiá las llágrimas po la cara sin sabé como fé pa paralas. En la Posada Ducay (hoy Hotel López), paraba el coche. De allí també saliba la tartana con el correo, viajeros y algún que otro viajante a tirá la milorcha, que llegaba hasta Campo y que feva muchos años la conduciva Andresón, siempre con el cuartelero pegáu al morro, y que cuan se enfadaba pegaba unas aventadas que espantaba a la chen, y arremeteba lo mismo que un cocho cuan le estiran la coda; llevaba un gorro de pells de conejo que cuan se lo zampaba hasta la fogueta y desde el pescante de la tartana feba chillá el llátigo espabilán a la reata, llamán a las vestias por su nombre y dan gritos al aire teniba toda la facha impresionante de un viejo cosaco. En la puerta de dicha Posada Ducay va desmontá el misache y dispués de saludá algunos de los conocíus va llegá a casa y cenán se va enterá que no feban fiesta ixie año. Una vez acabada y mascán la última crosta sen va í al Café Matosí, que estaba en un rincón de la pllaza (hoy tintorería de Mariñosa), y allí se va alcontrá con los allegáus que dispués de abrazásele van expllicá el motivo porque no sen feban: eva síu un mal año; seva cheláu tó, no ñabeba almendras, el trigo no eba llevantáu cabeza y la gran sequera se lo eva lleváu tó. Pero aquel mozo llevaba muchas horas de vuelo, mascan corruscos de pan de muchos fornos, y así les vá contestá: Vengo de tierras llejanas, farto de sacreficios, y el mundo manseñáu que a ixias desgracias naturals eñay que sobrevevillas, eñay que superase, y a mal tiempo manta nueva. Y pegán un puñetazo en la mesa va echá mano a la faixia, sacán una doblleta de oro de 20 pezetas de la bolsa de cuero en on guardaba los dinés, le vá dí a Mingué: Vés a Caserras y trae los gaiteros … A los dos días, al atardecé, se sentiban los trabucazos en el Puente de Abaixio, entraban los de Caserras, LA FIESTA ESTABA EN MARCHA. Tonón de Baldomera. Texto del Llibré de 1.968
Personajes ribagorzanos Fray Diego Cera Nació en Graus el 26 de julio de 1.762, hijo de Joaquín Cera y Francisca Badía. Murió en Manila en el año 1.832. Por la falta de documentación en los archivos municipales y parroquiales, poco se sabe de él hasta su profesión en el Convento Agustino Recoleto de Barcelona en el año 1.787. Cuando llegó a la ciudad era ya un consumado organista, hasta que aproximadamente en el año 1.870, marchó rumbo a Filipinas. El periplo fue largo, pues los misioneros partieron del puerto de Cádiz en la fragata “El Águila” a principios de diciembre de ese año, por lo que pasaron las fechas navideñas en pleno Atlántico, hasta que llegaron a Acapulco para coger un nuevo galeón que zarpó hacia Manila. Llegaron a la ciudad filipina el 5 de junio de 1.792. Una vez allí, fue misionero en Malacabat, párroco en La Piñas, Capellán del Real Colegio de Santa Ponciana y Prior vocal de Taytay. Se dedicó a la recuperación y saneamiento de edificios, pues a él se debe la erección de la casa parroquial, además de los caminos reales y puentes de piedra. También se dedicó plenamente a su gestión pastoral y a diversos temas religiosos. Construyó un piano forte que fue enviado a la Reina de España, la cual, correspondió enviando al agustino un copón y un juego de vinajeras de oro, además de una campana. Iglesia de Las Piñas (Manila-Filipinas)
Ese piano forte debió ser un instrumento sensacional, pues añadió un buen número de nuevos registros. Fue llamado para restaurar el órgano de la Catedral de Manila, con lo que demostró ser un verdadero perito de la materia, y más tarde dotó a la Iglesia de Las Piñas de un pequeño instrumento ya desaparecido.
Pero su obra cumbre fue la construcción del famoso órgano cuyos tubos metálicos sustituyó por cañas de bambú, y que se encuentra en el Convento Recoleto Intramuros de Manila, llamado de San Nicolás. Para la realización del famoso órgano, que aún subsiste, comenzó por ir recogiendo cuidadosamente las cañas en 1.816 y soterrarlas para una curación durante un año. Una vez preparadas las talló y con ellas obtuvo los sonidos característicos de las notas musicales para posteriormente colocarlos en la armadura del instrumento. A lo largo de estos siglos, el órgano fue objeto de numerosas variaciones y restauraciones. En el año 1.863 se reparó por un terremoto, y años más tarde cayeron sobre él parte de la techumbre del edificio con la consecuencia de una nueva reparación. En 1.924 se le dotó de un mecanismo eléctrico, y durante la II Guerra Mundial fue respetado e incluso reconstruido por la administración japonesa. Más tarde, el embajador alemán en ese país solicitó la reparación y tras lograr una subvención intentó ser enviado a Alemania, pero no fue permitido por los filipinos. Su última restauración se realizó en 1.973, cuando piezas del instrumento fueron enviadas a Japón y Alemania. Temiendo las variaciones climáticas con el país europeo, que podían ser perjudiciales para la madera, se construyó una cámara climatizada que permitió su viaje. El órgano de Mosen Cañas, como también se le denominó allí a Diego Cera, movió voluntades en distintas partes del mundo, y ha sido objeto de emisiones filatélicas, lo que ha permitido que el nombre de Graus diera la vuelta a nuestro globo. Toda esta información se consultó de los ensayos realizados por la escritora Helen Sanson y por el Doctor Salamero Reymundo, de cuyos trabajos se entresacan los principales datos de esta breve biografía.
Así charrán en Graus a cullecas.Montarse en la espalda cogiéndose con los brazos a galé.Beber sin tocar el pico del porrón a morro.Beber chupando a rastróns.Arrastrarse ababol.Amapola abán.Delante abadejo.Bacalao abaix.Abajo abaldeá.Tocar las campanas abaldiá.Columpiar abando.Todos juntos abatallá.Sacudir el fruto del árbol con pértiga abeita.Veterinario abellarol.Abejorro abelleta.Abeja abentá.Limpiar el grano abllá.Hablar abocáu.1.Estar agachado.2.Cuando el vino empieza a agriarse abolligoná.Amontonar acanzillá.Hacer el surco con la azada acaramull.Con mesura acarriá.Acarrear acochá.Agachar achuntá.Juntar, unir achupí.Mojar adebán.Adelante adomá.Domar adubí.Que cunde afaixigá.Amontonar fajos afalagá.Hacer caricias afogá.Ahogar agarráu.Tacaño agarramachóns.Coger algo con esfuerzo agazapá.Agazapar agro.Agrio